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Literalmente me tomó casi tres semanas para tomar las llaves del coche que me dio de vuelta  Michael para usarlas.

No sé por qué estuve tan asustada de usarlas, y no fue a causa de que mis padres lo supieran, lo sabía, porque a estas alturas debía preocuparme por lo que pensaran de mí. Era raro que mis padres estuvieran en casa cuando yo también estaba allí, así que no era como si ellos lograran descubrir si estaba usando mi coche o no.

Simplemente no quería ir por mi propia cuenta a la escuela. Seguí yendo a la parada del autobús, ya que por alguna razón pensé que si seguía intentándolo las cosas podrían cambiar y todo volvería a la normalidad con Ashton y Michael. Pero nada cambió, sin embargo, supongo que por parte fue culpa mía por no intentar más para hacer que en realidad las cosas cambiaran.

Así que después de 14 días en la escuela mientras Michael y Ashton me ignoraban en las mañanas y las incómodas conversaciones con Ashton en las tardes, decidí que debía rendirme y empezar a manejar mi choche para así ir a la escuela. Y algo me decía que no iban a notar que me había ido de todos modos. 

Honestamente, conduciendo hacia la escuela no fue tan divertido como pensé que sería. En realidad fue aburrido, porque fui completamente sola y hubiera preferido ir con Ashton a mi lado, charlando como cuando solíamos tomar juntos el autobús. Se sentía normal sentarse junto a él en el autobús y escucharlo hablar y hablar sobre sus bandas favoritas, eso me haría sentirme molesta con sus cambios severos de tema pero él me besaría para tratar de hacer las paces conmigo.

Eso era lo que me hacía sentir bien, no conducir sola hasta la escuela con la radio apagada ya que cada una de las canciones me hacía recordar a Ashton.

“¿Cómo estuvo el autobús?” Fui interrumpida de mis pensamientos gracias a una voz familiar detrás de mí, y no tuve que voltear a ver quién era para saber.

“Conduje hasta aquí.” Suspiré y luego Luke se situó delante de mí para sí poder hablar cara a cara.

“¿Condujiste?” Preguntó él, mirándome lo más sorprendido que pudo lograr estar.

“Me devolvieron mis llaves otra vez.” Respondí, encogiéndome de hombros. No estuve segura si quería explicarle a Luke como verdaderamente tuve mis llaves de vuelta, porque estuve completamente segura que él no lo entendería como yo lo hice.

“¿Tus padres quebraron?” cuestionó. Se apoyó en mi casillero otra vez, esperando a que terminara de guardar mis cosas allí antes de que nos dirigiéramos hacia el suyo. Esto se había convertido en algo bastante habitual para nosotros, ahora que Brooke no estaba aquí para acompañar a Luke y Calum consiguió una nueva novia, además, no estuve siempre con Ashton. Esa fue una de las cosas que en realidad me hizo sentir normal.

“No.” Sacudí mi cabeza. “Michael me las entregó.”

“¿Michael?, ¿cómo se las arregló para hacer eso?” Se burló Luke, pasando sus dedos por su cabello. 

“Fue tipo, como, se coló en cuanto no había nadie en casa y las buscó.” Dije lentamente, ya que supe que Luke pensaría que todo esto fue absolutamente loco.

“¿Se coló a tu casa?, ¿y buscó entre las cosas de tus padres?, ¿le has dicho a alguien sobre esto?” Luke continuó interrogándome mientras terminaba de guardar los libros que me quedaban en mi maleta, cerrando de golpe mi casillero detrás de mí.

“No. ¿Por qué tendría que contárselo a alguien? Así es Michael.” Reí, siguiendo a Luke por el pasillo hacia su casillero. 

“¿Espeluznante?” Sugirió él, observándome tras su hombro.

7:15 Ashton IrwinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora