Anastasia después de haber sido víctima de los abusos y maltratos por parte de su padrastro y madre es abandonada en un orfanato de Seattle. Orfanato donde sus benefactores son los Grey.
Siento como mi corazón se rompe en mil pedazos, al escuchar que Christian, y esa mala mujer están juntos, las lágrimas no tardan en salir. Duele tanto.
- Mi niña...¿Que ocurre?¿Por que lloras?- Pregunta Phoebe, demasiado preocupada.
- No...es...nada...vámonos por favor- quiero salir de aquí, siento que estoy asfixiandome...necesito aire
- No...hasta que me digas porqué lloras- niego con la cabeza.
Debo salir ahora antes que mi padre o Christian, se den cuenta que he oído su conversación.
-¡Ana!- Grita Phoebe, cuando salgo corriendo.
En el jardín, me permito llorar libremente. ¿Por que tiene que estar con ella? ¿La ama?¿Por que me besó?¿Pretende jugar conmigo y mis sentimientos? Estoy llena de pregunta que mi cabeza pareciera estallar...es humillante saber que esa mujer es la dueña de su corazón.
- Dime que te sucede...por favor- susurra Phoebe, llegando a mi lado
- No es...nada.
- No me mientas, por nada no se llora.
- Estoy...sensible por mi cumpleaños...eso es todo- digo entre sollozos.
- No te creo... dime lo que te sucede, si no voy donde Ray...
- No vayas con el...te lo diré.
- Te escucho- miro hacia la piscina y trato de calmarme...ella es la única en la que puedo confiar.
- Escuché decir a Christian...que está con esa mujer...con Elena- recordar lo que escuché, hacen que mi pecho duelan, se me llenan los ojos de lagrimas que empiezo a llorar nuevamente.
- Anastasia...¿Estás enamorada de tu primo?- Mas que una pregunta es una afirmación de Phoebe, está atónita. No le respondo porque aunque lo niegue ella sabrá que estoy mintiendo.- Mi niña- dice y me abraza tan maternal como siempre.
- Lo amo- le confieso- pero...el ama a esa...Elena-
- Tranquila princesa- susurra acariciando mi cabello.
He llorado por largos minutos en los brazos de Phoebe, ella solo se dedicó abrazarme y darme beso en la cabeza, no hizo ningún comentario lo cual agradezco.
- ¿Mejor?- Pregunta cuando ya me he calmado un poco. Asiento.
- Vamos al spa...te relajas, y me cuentas todo ¿Vale?- Asiento.
- ¡Ana!- Me llama mi amigo José, cuando estoy entrando al auto. El viene corriendo hacia mi
- Jose...¿Vienes con nosotras?
- No...solo quiero desearte feliz cumpleaños- me abrazo
- Gracias amigo-
- Toma- me entrega una cajita color azul.
- No debiste molestarte - le doy una sonrisa
- Lo hago con mucho gusto...eres mi mejor amiga.
Abro la cajita y encuentro un brazalete.
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