Erick, Potter y Josh estaban en la cocina.
Josh tenía la cara contraída.
-Se supone que tú eres mi amigo, Josh… ¿Por qué no me dijiste donde estaba ella? –Reclamó Erick.
-Porque ella también es mi amiga, ¿Qué se suponía que debía hacer, Erick? ¿Debía delatarla? No podía, tú mejor que nadie sabes lo importante que es la confianza… ¿Cuántas veces me has pedido que te guarde un secreto? –Espetó Josh –¿Crees que es justo ser un fiel amigo para ti y que sea diferente con ella? No me respondas, solo piénsalo. Entiendo que estés molesto, se que ella te importa, pero trata de entenderme también. Simplemente no podía decir nada.
Erick lo miró largamente.
-Voy a ver donde está Irish. –Dijo Erick antes de salir de la cocina.
Josh y Potter se quedaron solos en la cocina.
-Josh, necesito preguntarte algo
-Dime, chocolatito, pregunta lo que quieras –Dijo con un deje de tristeza y molestia
-Se que estás triste y molesto, lo puedo notar en tu voz, siempre hablas como si estuvieras a punto de reírte de algo muy gracioso, pero no hoy. –Comenzó diciendo Potter –Entiendo que estés triste y molesto porque no te entienden, porque creen que debiste decir algo, pero tu no crees que hayas hecho mal… -Hizo una pausa y miró fijamente a Josh –Yo no quiero reclamarte nada, pero… Pudiste haberme dicho, ¿Sabes? Me viste preocupada, viste como me quedé sin uñas, sabes que yo no hubiese dicho nada, pero me hubieses dejado más tranquila al decirme. No es un reclamo, solo quiero que sepas que puedes confiar en mi, puedes decirme lo que sea…
Josh la miró serio, Potter bajó la mirada.
Josh se acercó a ella, le tomó la cara entre sus manos y cuando Potts le devolvió la mirada la besó, era un beso lento, suave, dulce. Potts subió sus brazos al cuello de Josh y se entregó al beso tomándolo suavemente del cabello.
Josh se separó un poco, rompiendo el beso por unos instantes para susurrar con los labios aún rosando los de ella
-Potts hermosa, ¿quieres ser mi novia?
-Sí –Respondió Potts con un suspiro y sonrió contra sus labios
Al escucharla Josh la pegó contra la pared, pegó su cuerpo al de ella y la volvió a besar, ella lo rodeó con los brazos por el cuello y masajeaba su cuero cabelludo con los dedos y las uñas.
«Es perfecta, simplemente perfecta» Pensaba Josh mientras la besaba
Entre besos se escuchaban los suspiros de Potts y los ronroneos de Josh.
En ese momento todo dejó de existir, solo estaban ellos dos y lo perfecto que se sentía ese beso, lo suave que era ella y lo dulce que era él. Nada más.
Irish que regresaba del baño a la cocina no pudo evitar escuchar la conversación entre Josh y Potts… Sonrió y se dirigió a la terraza, ni borracha entraría en esa cocina por la próxima media hora
Salió a la terraza y allí estaban Dharma y Alex besándose
-Gatita –Murmuraba Alex
-Cavernícola –Susurraba Dharma
-¡Dios! ¿Que tenía ese vino? ¡Ew! –Exclamó Irish entrando en el departamento nuevamente.
Reía a carcajadas por lo que le había tocado ver esa noche a su regreso.
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Somos las Bookwhores
रोमांसIrish Thomas-Zimmerman es una lectora compulsiva, suele enamorarse perdidamente de los personajes de los libros que lee. Un día conoce un grupo de mujeres, un grupo en el que cae casi por casualidad, aunque ella piensa que todo es obra del destino...
