Su Amante

cap.11

Ya eran las seis esperaba a que llegara Dylan, después de que se fuera me cambiaría, quería darle la sorpresa.

El entró a la habitación y me saludó con un casto beso en los labios se deshizo de su ropa y se metió a la ducha, al salir se fue al closet y se cambio yo fingía leer un libro.

- vas a salir -, le dije y el asintió con la cabeza,

- llegaré tarde no me esperes -, me dijo sin darme explicaciones, me beso en la frente y se fue.
Me acerque a la ventana para reafirmar que así fuera.

Rápidamente me vestí y maquille, era un maquillaje de noche, mi cabello había quedado suelto para la facilidad de ponerme la mascara, el vestido era color vino, de mangas largas y largo y tallado dejado al descubierto mi espalda, mis tacones eran medianos no muy altos para no cansarme.

Ya estaba lista y mi abuela llegó, lo más curioso es que también mis primos irían con sus esposas a la fiesta, eso es raro de ellos.

- te vez hermosa mi niña, dejaras a Dylan asombrado -, dijo mi abuela.

Al llegar a la mansión de los Richardson sentí mis nervios recorrer, al entrar acompañada de mi abuela llamamos la atención de algunas personas pero no podían saber "quienes eramos"

- es hora de buscar al príncipe -, me dijo mi abuela y yo reí - iré con algunas conocidas -, me informó y se fue, recorrí todo el salón con la mirada en busca de Dylan y lo había encontrado en la entrada, apenas había llegado y mi corazón dió un vuelco al ver la tipa colgada de su brazo, era rubia y se podían ver sus ojos azules, no tenía que pensar mucho para atinarle quien era, ví un camarero y lo detuve, agarré una copa de champán y lo bebí de golpe.

La fiesta empezó y lo único que podía hacer era seguirlo, se veía muy cariñoso con ella y de lejos podía escuchar:

"Hacen una bonita pareja, Tiene una hermosa esposa, bla,bla,bla..."

Si supieran que la esposa está aquí escuchando lo que dicen, ya llevaba rato siguiéndolos hasta que fui por un trago y cuando volteé ya no los había visto, recorrí todo el salón hasta que los ví en el balcón más solitario que había, mis lágrimas se agolparon al verlos besarse como si su vida pendiera de ello, llevé mi mano a mi pecho y quise salir de ahí,

- amiga -, escuché la voz de Tira, yo la ví y la abracé, dejé regar algunas lágrimas, - vámonos de aquí -, me dijo y yo asenti, todo esto me dolía.

Nos reunimos con los demás y un hombre hablaba, no puse mucha atención hasta que todo el mundo se quitó la máscara y tuve que hacerlo, me despedí de Tira quien me veía con lástima, me dirigí hacia mi abuela,

- ¿cariño estas bien? -, me preguntó,

- si abuela, me tengo que ir a casa, me robaré tu chofer por un momento -, le dije y ella asintió, salí del lugar un poco afectada, y esperé a que el chofer llegara,

- ¡Emma! -, lo escuché, era Dylan yo volteé a verlo y mi vista se nubló por las lágrimas, el chofer llegó y abrió la puerta, el se acercó a mi pero yo me subí rápido al auto y le pedí al chofer que acelerara, y así lo hizo,

- por favor acelere más -, le pedí y así lo hizo.
Al llegar le ordene a que regresara por mi abuela y bajé del auto, me fuí directo a mi habitación y me quité el vestido, busqué en mis cajones y ví la lencería que mis amigas me habían regalado el día de mi despedida de soltera, elegí uno de color rojo y me lo puse, lo combine con unos tacones negros y esperé a que llegara Dylan, sabía que me seguiría, y esta noche sabré si le doy el placer que Juliane le da, si ella es una perra ¿porque yo no?...

La puerta se abrió y ví a Dylan, me levanté de la cama y me acerque a el, cerré la puerta y lo aprisione entre la pared y yo, mi respiración era acelerada y le besé, un beso salvaje que el no se negó, lo empuje para que se sentara en la cama y no permití que se acostara, me inque frente a el y dasabroche su cinturón y bajé su cremallera,

- Emma que haces -, dijo el confundido. Saqué su miembro que estaba erecto y lo tomé con mis manos,

- si quieres que sea como una perra como Juliane lo aré -, le dije.

El hiba a articular una palabra pero no pudo, por que introduje su miembro a mi boca,

- Emma -, gimió mi nombre.

Yo subía y bajaba mi cabeza haciendo movimientos como el hacia con mi feminidad, absorbía, mordía y chupaba su miembro muy erecto, podía escucharlo gemir, eso es lo que le gustaba, lo que disfrutaba con Juliane. No me di cuenta de que resbalaban lágrimas por mis mejillas, estaba llorando en pleno acto sexual, yo seguía con mi trabajo,

- Emma detente, me voy a correr - me dijo y yo no le hice caso, - Emma detente -, volvió a decirme y yo seguí aun más rápido, hasta que escuché como gemía y pude sentir el líquido correr por mi boca, me sentía mal, muy mal, me solté a llorar como una pequeña sin consuelo, - Emma -, intentó abrazarme pero yo me separé de el rápido y me puse de pie,

- eso es lo que querías Dylan, que sea una perra que te haga el mejor sexo oral como de seguro Juliane te lo hace -, le dije en sollozos, el se levantó y se puso los pantalones, se acercó a mí y quiso volver a abrazarme pero yo nada más le tomé de los hombros, - todo el mundo piensa que Juliane es tu esposa y no yo -, le dije,

- Emma yo te amo, tu eres mi mujer no ella ni nadie más, soy un es tupido por llevarla -, dijo, yo solloce más,

- Dylan yo te amo -, dije en medio de mil lágrimas, me veía muy mal,

- yo también te amo Emma -,

- quiero... -, cerré los ojos con fuerza ante nas próximas palabras que hiba a decir, - quiero el divorcio -, le dije, el se puso pálido y empezó a temblar,

- Emma no, no por favor, Emma yo te amo, por favor no me dejes -, me dijo apunto de lágrimas, ya no le creía seguía con Juliane y eso me derrotaba, lo empuje y me fuí a encerrar al baño...