20. Discursos

1.4K 91 1
                                    

—Buenas noches, espero y se estén divirtiendo. Bueno, primero que nada quiero decir que Kylie no me cae bien.—Hablo sonriendo, estaba en el pequeño foro y tenía el micrófono en su mano derecha y en la izquierda una copa de champán. Unos murmuraron cosas y Morgan me miró molesto y dispuesto a pararse. Yo negué con la cabeza, tengo curiosidad de saber qué dirá.—Debo decir que me encanta que tenga un carácter fuerte, me recuerda a mi a su edad. Cuando conocí a Kylie no me simpatizo y discutimos en medio de un desayuno familiar. Mi querido hermano estaba tan enojado y molesto, cosa que me sorprendía ya que nunca había defendido a una chica, no enfrente de mi. Me refiero a que me dio una paliza, prácticamente rompió mi nariz y corrió tras ella. Supe ahí, que él realmente la quería. Que estaba enamorado de ella. Él nunca me había golpeado de esa manera y nunca lo había visto tan molesto. Pero aún así, estoy feliz por los dos. Espero y duren demasiado tiempo juntos y por favor, no me hagan tío tan rápido. ¡Un brindis por los novios!—Todos rieron y bebieron de su copa. Morgan se sonrojo y negó con la cabeza divirtiéndose.

—Bueno, ¿qué debo decir?

—Ni yo lo sé.—Soltó una carcajada. La madre de Morgan subió al foro y tomo el micrófono entre sus manos.

—Mi bebe se casó hoy, el que no quería. ¿Sabes? De pequeño siempre hablabas sobre qué cuando tuvieras esposa la querrías mucho, que la cuidarías y le comprarías una casa con piscina, ya que te encantaban las piscinas. Decías que querías algo bonito como lo mío y papá. Y mírate, te estás casando ahora. Y estoy feliz, de que sea una mujer fuerte y que sepa lo que quiere. Ella te hará sentar cabeza y como te dije Kylie, te enamoraste de el. Es un chico dulce cuando lo conoces mejor, aunque sea algo ignorante te atrapa con su encanto. Estoy tan feliz por ustedes y contenta porque mi bebe ya creció, todo un hombre.—Sonrió y limpio un par de lagrimas.

—¡Te amo!—Grito Morgan sonriente y su mamá le mando un beso desde su mesa. James corrió y tomo el micrófono, le chiflo a un mesero y tomo una copa.

—He llegado tarde, el hermano de la novia llego tarde.—Soltó una risita nerviosa, me sentí algo triste.
¿Qué cosa lo retuvo el día que se casaba su hermanita?

»Primero, no estés triste, Kylie. Mamá me mostrará la grabación y ya sabes, lo recordara y veremos la cinta a diario.—No pude evitar reírme, mi madre era así. Los días que no teníamos nada que hacer y estábamos juntos hablaba de recuerdos y luego decía:

—Será mejor ver las cintas.

Sonreía feliz y volvía con una caja, recuerdos de ella, James y yo, casi siempre.

—Hoy se casa mi querida hermana. ¡Soy mayor que tú! Y ya te has casado, con el.—Hizo un gesto, yo sonreí.—Siempre voy a odiar a tus novios y ahora a tu esposo. Espero y él te respete, te cuide y te proteja porque si no, bueno.—Sonrió malicioso viendo a Morgan.—Tengo amigos.—Los hermanos Harries dejaron salir un chiflido y gritaron junto a mis demás amigos.—Te amo, Kylie. Espero y aprendan a complementarse el uno con el otro. Y lamento no haber preparado un discurso, pero ya di mi amenaza.—Se encogió de hombros y todos rieron.—Felicidades y no lo tomes tan personal, O'Conner.—Sonrió y bebió toda su copa.

—Tus amigos me intimidan.—Murmuró y yo comencé a reír. Amigos como Emily, Nicole y entre otros amigos míos dieron discursos graciosos, Kendall también lo hizo, hablándome sobre el carácter de Morgan y sus defectos, pero de una forma dulce y con cariño. Mi padre paso y suspiro. Todo esto era gracias a él y no lo culpo, él siempre estuvo para mí. Me ayudo en trabajos y me enseñó a dibujar un arco iris y unicornios. Me enseñó a inflar globos, a jugar futbol americano y a nadar como perrito, a hacer brownis medios crudos y entre otras cosas, él era mi héroe, siempre hemos sido tan unidos. Así que, yo le debía esto o al menos, sentía que se lo debía ya que ha hecho tanto por mí y por la familia.

One Year Where stories live. Discover now