Entre la vida y la muerte.

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Colgué el teléfono, esa siempre era mi reacción.

-Para donde va? Me pregunto Ángela.

-Recibí una llamada de mamá, parece que las cosas no andan bien, ahora mismo voy a verlo al hospital.

-Ahh tu papá? Empeoro?

-No sé, después hablamos de eso, adiós.

Salí en en auto deportivo que solía usar papá.

Mientras iba en camino recordaba aquellos momentos en los cuales éramos padre e hija, lo amaba como a nadie, él había sido siempre mi súper héroe, recuerdo que todo cambio cuando tuve razón de ser y entendí que papá nunca estaba en casa, siempre llegaba en las noches muy cansado y se acostaba a dormir, entonces empece a pensar que no tenía una familia y que no le importaba, eso a mis 14 años, ahora con 16 y con mi papá a punto de morir me pongo a pensar que tal vez la familia fue una de las cosas que él tuvo que sacrificar por su trabajo, cosa que finalmente hacia por nosotras, nunca me había detenido a pensar que él no permanecía en casa pero que ese el precio que debía pagar por la buena vida que nos daba, aunque preferiría mil veces vivir sin nada pero con él, aunque sería demasiado mal agradecida al no agradecer su sacrificio.

-El señor Clowson?

-Si, es mi padre.

-Ah claro, él esta en la habitación número trece.

Camine por todo el pasillo del hospital, escuchaba gritos, llantos, risas, pero ninguno de esos sonido provenía de la voz de mi madre.

Cuando entré en la habitación estaban ambos dormidos, fue ahí cuando pude observar lo maravillosos que eran, se veían tan cansados de trabajar, con arrugas, en su rostro se notaba el esfuerzo que a diario hacían, cosa que yo había pasado por alto en los últimos dos años.

-Hija!!!

Mamá me saludo mientras abría apenas un ojito.

-Hola má. ¿Qué pasa?

-En una hora tu papá será operado, si las cosas salen mal no lo vamos a ver nunca más.

De nuevo en shock.

El doctor nos saco de la habitación advirtiendo que debían empezar el proceso de limpieza en la habitación para luego trasladar a mi padre a la habitación de cirugías de alto riesgo, la cual contaba con lo suficiente por su algo "salía mal"

Me dormí entre los brazos de lo madre, cuando desperté pude ver como secaba sus lágrimas muy disimuladamente, nunca le había gustado demostrar que era débil, pero yo la conocía lo suficientemente bien c lo para saberlo.

-Marcaron varias veces a tu teléfono, pero no quise despertarte.

-Ah, ya miro quien es.

Era Kenny, la última vez que hablamos había sido amistoso, pero no odiar olvidar el daño que me había hecho en la escuela.

-Hola

-Hola Kenny, vi tus llamadas perdidas.

-Ahh, quería hablar, como estas?

-No muy bien, tu que onda?

-Bien de hecho voy de intercambio desde mañana para Texas y necesito algún lugar donde quedarme.

-Mmm Texas? Suena algo no apropiado ahora un intercambio escolar.

-De hecho a mi me suena muy bien, sabes de algún lugar que sea bueno? No conozco mucho Texas.

-Pues... No creo, no conozco mucho, si quieres cuando llegues llámame, y te acompaño a buscar algún lugar.

-Me parece bien, nos vemos mañana entonces?

-Si, cuenta conmigo. Le respondí.

No me gustaba mucho pasar tiempo con Kenny, pero cualquier cosa que me hiciera olvidar de la realidad por un rato, valía la pena.

Ya habían entrado a mi padre a la habitación, la cirugía tardaría aproximadamente entre 1 y 2 horas, depende de la reacción de mi padre.

Mamá estaba destrozada, podía ver a través de sus ojos azules algo de miedo, desesperación, cobardía y amor, mucho amor.

Ella era callada, siempre se reservaba todo lo que sentía, sólo quería hacerse la fuerte, yo por dejarle el papel de "fuerte" y no cuestionar duchara de preocupación, le di un fuerte abrazo.

-Todo estará bien. Le dije.

-¿Cómo lo sabes? Pregunto.

-No lo sé, simplemente confió.

Ella se quedo callada, tiro un suspiro al aire y se sentó.

Pasaron dos largas horas y no teníamos noticias, Kenny me había llamado un par de veces, algo raro tenía ese chico.

-La cirugía fue exitosa, estamos a la espera de que reaccione, entre en sí, ya debería estar consciente, si sigue así tomaremos medidas drásticas.

Nos comunico el médico.

-Pero... Despertara verdad? Pregunto mamá.

-Debería...

-Es decir que... ? Pregunto.

-Es mejor que entren, tienen media hora, si no se despierta en ese tiempo dudo que lo haga.

Se marchó.

¿Quéééé? Mi padre estaba apunto de morir y él seguía así de tranquilo?, claro, no era su padre.

Mamá siguió al medico, luego volvió a decirme que nos dividiésemos el tiempo, cada una tendría quince minutos.

Ella entro primero.

Ni idea que le diría, pero salió peor de como había entrado.

-Tu turno. Dijo entre una voz chillona.

Entre en silencio.

La habitación era grande, él estaba sujetado por muchos cables, en la cabeza, en el pecho, en todos lados.

Nunca lo había visto así, tan débil, tan acabado, tan... ¡Sin vida!

-Pa, perdón por no valorar tus esfuerzos, perdón por ser egoísta y no ver más allá de las cosas, perdón por nunca agradecerte todo lo que has hecho por mi, perdón por todo.

Cuando tenía 9 años recuerdo bien que te disfrazaste de súper héroe, aunque para mi aún sigues con el disfraz puesto, y un súper héroe nunca muere ¡NUNCA MUERE PAPÁ, RECUÉRDALO!

Fue inevitable no llorar.

Por minutos llore tendida en su pecho, él ni siquiera se movía.

Luego le dije "Te amo y te amare por siempre".

Pude sentir como movió un poco su mano izquierda, esto me dio la certeza de que me estaba escuchando.

-Perdón señorita, debe salir ya, vamos a ver que podemos hacer por él.

-Agache la cabeza y salí del lugar.

¿Y si papá moría? Y si nunca más lo volvería a ver? Entonces nunca sabrá lo importante que había sido para mi, nunca podré abrazarlo, ya no lo veré mas, era raro, durante los meses viviendo sola jamás lo había extrañado, jamás su presencia me había importado, pero ahora estaba aquí entre la vida y la muerte, y yo? Yo no podía hacer nada.

POSDATA:

Quería decirles que este capítulo me toco el corazón, mi padre murió en agosto, tenía poca comunicación con él, es por eso que en este capítulo me identifique con Ariana.

Quería que lo supieran.

16 añosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora