Bad Girl | FreenBecky

25

Pov Becky

— Esta vez fuiste tu quien lo arruino...— sentí la mirada de decepción de Richie, lo había buscado para que me ayudara. — Becky, como tú hermano te pido que así como Freen dejó de luchar por su relación, lo hagas tu también, ya elegiste con quien quedarte. ——

— Pero la amo...—

—Ella también te ama, pero déjala ser feliz con alguien más. — Asentí y mi hermano se acercó dándome un fuerte abrazo, — es lo mejor...—

Al pasar de los días veía a Freen de lejos convivir con todos su compañeros, había dejado de asistir a mi oficina y no iba a las clases de gastronomía las cuales se colaba solo para verme. No quería mentir, ella me hacía falta, era una parte que me completaba y me hacía feliz, pero ya no estaba junto a mi, también habia notado que el anillo que compartíamos había desaparecido, ella ya no lo tenía.

—¿Crees que me acepte? Freen es tan hermosa ¿puedes creer que alguien como ella esté soltera? Yo jamas me atrevería a dejarla ir, aunque me obligarán. — Sostuve con fuerza mis libros y camine lejos de ese grupo de chicas.

A lo lejos pude ver a Freen, quien hablaba con una joven mujer, esta misma estaba bastante cerca de ella, acariciaba su mejilla y jure que iba a besarlas, haciéndome enojar.

—¡No te atrevas a besar sus mejillas!— di un fuerte grito llamando la atención, pero rápidamente me escondí sin haber sido vista. Entre a mi oficina cuidadosamente.

Lo que más me gustaba de Freen eran sus mejillas, era capaz de pasar horas besandolas y nunca me cansaría, me molestaba ver que alguien más podría ocupar mi lugar.. no quería que eso suceda, después de ese incidente no volví a ver a Freen por mucho tiempo, pregunté por ella pero ni siquiera sus profesores lo sabían.

Mis días en la cafetería también estaban mal, Charlotte se entero de lo que sucedió al principio se vio enojada pero luego entendió y me dio su apoyo. Pero antes de irse me dijo algo que me dejó pensando.

— Entinedo como se debe de sentir y como su madre la obliga a casarse con ese patán, pero señorita Becky, usted ya es una adulta que maneja su propia cafetería, entonces ¿por qué no pudo manejar la situación y terminó lastimando a la señorita Freen?  Se que dirá que son cosas diferentes, pero mirelo de mi lado, pudo haber manejado mejor la decisión y solo lo hizo ver que amaba Heng, no a la señorita Freen. —

Llegue a mi pequeño departamento, recostandome en mi cama ¿vivir una vida infeliz con alguien a quien odiaba? No estaba en mis planes pero para mi mala suerte, me di cuenta de los tantos errores que cometí cuando después de tantos años nos volvimos a encontrar, recordé como fue la primera vez que Freen y yo nos conocimos, si bien es cierto que su belleza me cautivo y tenía algo que me atraía a ella aunque no quisiera, fui yo quien me enamore primero pero Freen se había enamorado más fuerte. Le reclame por haberme mentido para luego hacer lo mismo con ella, nuestros papeles se habían invertido, pero había una diferencia, una de nosotras se había rendido haciendo que todo empezara a destruirse cerrando las oportunidades de volver a intentarlo.

—Un minuto..— me levante bruscamente corriendo hacia el sótano, rápidamente empecé a buscar entre mis cosas. — donde esta, donde está — empecé a tirar todas las cosas al suelo, hasta que al fin lo encontré.

El peluche que Freen me había dado.

(....)

Busque unas tijeras y empecé a cortar cuidadosamente el centro del peluche, al terminar adentro de al no había algodón, sino una carta. La tomé y la abrí.

— Becky, si estas leyendo esto es que las cosas entre nosotras estan yendo mal o simplemente sentiste curiosidad — Solté un pequeña risa, tal vez anteriormente pude cortarlo por curiosidad. — no me molesta, de ambas formas funciona pero para ello necesito que recuerdes solo una cosa, nuestro amor puede pasar por muchos obstáculos pero siempre habrá un final, una salida, y en todas ellas estaré esperandote. Tenía planeado pedirte matrimonio en nuestra salida a la playa ¡por favor no me rechaces! Sino este regalo no tendría sentido — arrugue un poco la carta, yo la había rechazado. — necesito que vayas a esta dirección, ahí estaré tu verdadero regalo. Mucha suerte mi amor.—

Sin dudarlo tome las llaves del carro y me subi al auto, empecé a conducir con rapidez, Esa dirección era la misma donde Freen me había pedido ser su novia antes.

Cuando llegue el lugar estaba vacío, más bien parecía abandonado, una señora apareció al instante acercándose con una sonrisa.

— Con que tu debes de ser Becky..— me miró de arriba hacia abajo. — tu esposa te preparo muchas cosas, así que es mejor que pases. — Asentí dudando un poco, el camino era oscuro y empecé a desconfiar de ella. — ¿Cómo estuvo su salida a la playa? La propuesta de matrimonio al atardecer tuvo que ser bastante hermosa, me hubiera gustado verlo—

—Yo... la rechace, me negué a casarme con ella — la señora volteo a verme rápidamente, sin poder creer lo que había escuchado. — dije que no me sentía preparada pero fue mentira... si que—

—Para de hablar, ahora entiende porque estas aqui — levando su mano en seña que parara — conozco a la señorita Freen desde hace cinco años, siempre me hablo de una mujer que la había enamorado, pero por sus errores la había perdido, nunca perdió la esperanza de que la volvería a ver, es por eso que cada año venía a este lugar, lo compro y lo decoro a su manera. — sus palabras me habían hecho sentir mal. — Después de que termines de ver lo que hay dentro, puedes decir que hacer. — la señora señaló una puerta, donde entré.

Encendí las luces y lo primero que vi fue varias fotos. Empecé viendo a mi izquierda, las fotos eran de nosotras cuando nos habíamos conocido las que supuse que sus amigas habían tomado, sonreí al ver una donde Freen se negaba a soltarme porque tenía que regresar a clases, una donde nos había hecho novias, otra donde había sido nuestra primera noche juntas luego una donde tuvimos la primera cita de ambas, me había tomado una fotografía sin percatarme. BonBon empezó hacerse presente, el estaba en el medio de las dos, habían palabras escribas abajo de la foto.

—Mamá y papá —  sin darme cuenta empecé a llorar, habían muchas más fotografías de nosotras y de cada momento que íbamos pasando, aunque no me percatara Freen guardaba cada detalle, ella había cambiado.

—Becky — escuche su voz en la habitación, empecé a buscarla desesperadamente para darme cuenta que era un video. — es muy romántico ¿no? Lo siento, no suelo ser así, pero quiero darte cada cada regalo, aun tengo muchísimos más, solo esperalos, no sé lo que este pasando ahora, pero tal vez es una pelea absurda de ambas, te lo digo todos los días pero igual siempre recuerda lo, te amaré más que nada en este mundo y aunque no me elijas a mi yo lo entenderé y te dejare ir sin ningún remordimiento, no quiero amarrarte a una vida infeliz así que si es mejor busquemos nuestras felicidad por separadas. — enseño unas llaves a la cámara. — cuando nos casemos, te llevare a nuestra nueva casa, donde empezaremos nuestra vida y nuestra familia ¡incluso podemos tener otro perrito! Mi amor, no te preocupes por lo que nuestra relación afronta, nos amamos y lo haremos por mucho más tiempo, nos conocimos gracias al destino y hemos hecho mucho para llegar a unirnos — el video finalizó con una última frase.

Por supuesto que me quedaré contigo. Sin importar lo que suceda. Por siempre y para siempre.

— A un no termina— Sali corriendo hacia mi auto, la señora se quedo sorprendida. —¿¡A donde cree que va?!

—¡Iré por a por mi futura esposa!—

— ¡Ah! ¡¡Mucha suerte!¡ ¡Que no sea tarde para ti!—

Arranque el auto y conduje a la casa de mi madre donde estaba ella y Heng.

—Becky hija mía, me alegra verte — pase de largo caminando hacia el certificado de matrimonio. — ¿Qué haces? — el tono de voz de mi madre cambió.

Antes que se acercara lo empecé a romper en varios pedazos sin importarme los golpes que me daba mientras lo hacía.

—No me casaré con él — señale a Heng que también se encontraba enojado, mi madre rápidamente me lanzó una botella de alcohol pero por dicha pude esquivarla. — Amo a Freen y es a la mujer con la que quiero estar toda mi vida, al principio me sentía presionada por ti y poco a poco fui obedeciedote a lo que decías pero eso acabó, por todas las cosas que has hecho no debes de ser llamada madre. Me iré de casa y viviré a mi manera, puedes quedarte con tu asqueroso dinero, y tú, — señale a Heng el cual saque ambos dedos, me miro ofendido — Vete al diablo, mejor, váyanse los dos al diablo. — iba a irme pero escuche varias risas a mis espaldas.

— Ya sabía que estabas viéndote con esa mocosa problematica, ¿hace cuantos días no la vez? Me deshice de ella, con ese dinero sucio se puede hacer lo que sea, incluso matarla.—