Nuestra historia de amor (Grindeldore)

Capitulo 5

Albus y Gellert estaban en el bosque, habían ido a caminar un rato, y como siempre, estaban hablando y riéndose.

Gellert trataba de hablarle a Albus de las Reliquias de la muerte, pero cada vez que intentaba decírselo, se le olvidaba al ver su sonrisa, se quedaba hipnotizado cuando Albus sonreía, jamás le pasó algo parecido, Albus tenía algo que a Gellert le fascinaba y no era el único que pensaba así del otro, desde hace algunos días, Albus había comenzado a ver a Gellert de otra forma, nunca había visto a algún amigo así, sus amigos solo eran eso; amigos.

Pero Gellert era diferente, era especial, no era solo un amigo, Albus sentía que Gellert era mucho más que eso, tal vez... ¿un mejor amigo?, puede ser, pero algo no le cuadraba, en Hogwarts el tenía un mejor amigo y no sintió algo parecido con él.

"¿Y si me estoy enamorando de Gellert?" Pensó Albus
"¿Y si me estoy enamorando de Albus?"
Pensó Gellert
"No, no puede ser posible, bueno en teoría si" pensó Albus
"No, claro que no, Albus solo es un muy buen amigo" se dijo Gellert, aunque realmente no lo creía por completo

-Hey! Gellert!

La voz de Albus hizo que Gellert saliera de sus pensamientos, lo miró, Albus se rio y se acercó un poco a Gellert quien se puso nervioso y se sonrojó.

-Q-que p-pasa?

Pregunto Gellert aún nervioso

-Yo mmm... quería hablar contigo sobre algo... hace unos días... he sentido algo raro... cuando estoy contigo...

Dijo Albus con un poco de nervios.

-¿Algo raro? ¿A que te refieres, Al?

Pregunto Gellert algo confundido, acaso Albus sentía lo mismo que él?

-Me refiero a que... a qué... tu...

Albus no pudo más con la curiosidad, y besó a Gellert, quien se quedó congelado, no sabía que hacer, era su primer beso, ¡Con un chico!

Pero no se sintió mal, solo se confundió un poco sobre lo que sentía por Albus, pero ese beso fue genial, podría ser porque era su primer beso, pero no, realmente se había sentido fantástico, sentía algo en su corazón, algo que lo ponía muy feliz, además de que sentía mariposas en el estómago, no quería que ese sentimiento se terminara, sabía que en algún momento terminaría, porque no podían estar así para siempre ¿por que no se podían quedar así? Se preguntó Gellert, pero si no podían, al menos aprovechar el momento.

Gellert le siguió al beso, Albus puso sus manos en la cintura de él rubio, quien se acercó más a Albus, se quedaron así unos segundos, luego se separaron por falta de aire, se miraron unos momentos, sonrieron y se abrazaron.

-Te quiero, Gellert

Le dijo Albus a el chico en sus brazos.

-Yo también te quiero Albus

Le contestó Gellert.

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