Clemencia Benett está condenada a sufrir desde su nacimiento, marcada por la desgracia, llena de ira y desesperación, bañada en un manto de inocencia. No se esperaba la llegada de ese ángel que desató el infierno con solo clavarle la mirada. Mauricio Pavaratti era todo, menos celestial. Cuando alzó el mentón y clavó sus ojos en aquel joven de cabello largo y belleza inhumana, sintió como su corazón se detuvo por un instante, algo se rompió dentro de ella, como una copa estrellándose contra el suelo. El mal habita dentro de ella, escondido entre lo más recóndito de su mente esperando a ser liberado. Es un parásito, una garrapata que se aferra a la carne esperando a poseer otro cuerpo del cual embriagarse. El caos ya estaba suelto y el pasado regresó para destrozar todo a su paso. •todos los derechos reservados (Ya no es un creepypasta)