A veces lo que pensamos es la realidad, solo es una mentira. Cuando creemos es una ilusión, en realidad lo estas viviendo; llegan veces que uno piensa ya lo sabe todo cuando en realidad no sabemos nada. Yo no sabía que mi papá era un machista, mi mamá una monja y yo una huérfana; que aquella escuela en la que estudiaba en realidad era maldita, y que todo aquel que conocía en realidad no existía. Puede decirse que todo el tiempo estuve sola porque nadie de carne y hueso me acompañaba; y no, porque había espíritus los cuales me rodeaban.