Como saben Glee no me pertenece (si asi lo fuera la temporada quinta y sexta hubieran sido muy diferentes)... Dejen sus comentarios
4. El partido
Los días y las semanas iban pasando y poco a poco se iba acercando el esperado partido de fútbol del instituto que este año celebrará un torneo de equipos mixtos. Como todos los años, los padres se acercaban a ver jugar a sus hijos, los estudiantes a ver a las animadoras y las alumnas a ver a los jugadores. Esa misma mañana, sábado 24 de octubre, en la casa de los Fabray se respiraba nerviosismo y mucho estrés.
-¿Has cogido la cámara de fotos?-preguntó Judy a su marido-¿Y la de vídeo?
-Tengo las dos, no te preocupes-respondió el señor Fabray-
Quinn bajó las escaleras de su habitación que daban al salón mientras intentaba poner en orden su uniforme.
-Mamá ¿has visto mi chamarra del equipo?-preguntó la joven-
-Si, está en la cocina-respondió la aludida-
Brittany entró al salón con la chamarra de Quinn en la mano.
-Toma-dijo entregándosela a su propietaria- Y ten más cuidado con tus cosas.
-Para que si te tengo a ti-respondió con una sonrisa-
-Quinn no empieces-intervino Judy- Hoy es un día muy importante y no quiero que salga nada mal.
Todos los años había partidos de fútbol entre los distintos institutos de Limas. Las perfectas, a excepción de Marley, junto con Sam, Jessie y algunos chicos más, representaban a su instituto. Ese era uno de los principales motivos por los que, las perfectas y el grupito de Sam, se llevaban mal ya que siempre competían por ver si el equipo femenil avanzaba más que el varonil y eso provocaba rivalidad entre los jugadores de ambos equipos, pero en este torneo deberían jugar juntos. Este curso habían nombrado a Quinn capitana del equipo, cosa que molestó mucho a Sam ya que esperaba ser él y eso provocó que, durante esas dos últimas semanas, la cosa estuviera en el filo de la navaja.
-Papá, que no se te olvide que tenemos que ir a recoger antes a un amigo-informo Quinn-
-¿Qué amigo?-preguntó Judy curiosa-
-Finn-contestó Quinn- Es parte del equipo de basquetbol junto con otros chicos.
-¿Y es buen chico?-se interesó la señora Fabray-
-El mejor-intervino Brittany sarcástica-
-No le hagas caso-dijo Quinn fulminando con la mirada a su prima- Es todo un caballero, pero no te preocupes mamá, aún no tengo novio, si es lo que querías saber.
-Voy a por una cosa y podemos irnos-dijo Quinn volviendo a subir las escaleras en dirección a su habitación-
El teléfono sonó y Brittany, que era la que estaba más cerca, lo cogió.
(La letra que está en cursiva es la de la otra persona que está al otro lado del teléfono)
-Casa de los Fabray ¿Quién es?-preguntó Brittany-
-Rubia, pásame a Quinn-contestó Santana-
-Santana, que placer me da volver a oírte-dijo sarcástica Brittany-
-No tanto como el que será verme estoy segura-respondió la morena-Pásame a Quinn.
-Ahora mismo no puede ponerse ¿quieres algo a parte de un cerebro?-preguntó la rubia ya comenzando a enfadarse-
-Bueno, supongo que serás capaz de darle el recado así que...-comenzó Santana-
-Mira Santana, o me lo dices ya o te cuelgo y sabes que soy capaz-amenazó Brittany-
-Que a Finn al final se va con Puck-informó Santana-Y dile que venga con la moto, que después tenemos que irnos a celebrar la victoria.
-¿Tan seguro estas de que van a ganar?-preguntó Brittany-
-Aunque Sam y los otros estén en el equipo, mientras que estemos nosotras ganaremos seguro-respondió Santana-
-Ya-dijo la rubia no muy convencida-
-Bueno, dile eso a Q-recordó la latina-
-Vale, ahora se lo digo-contestó Brittany-¿Algo más?
-Que yo recuerde no-contestó Santana-Nos vemos en el partido, adiós.
-Adiós-contestó Brittany para luego colgar el teléfono-
-¿Quién era?-preguntó Quinn que acababa de bajar de su habitación-
-Santana-respondió- Finn se ha ido con Puck al partido y por cierto, Satanás ha insistido en que vayas con moto al partido.
-¿Por qué?-preguntó Quinn extrañada-
-Para luego irse y celebra la supuesta victoria-explicó Brittany-
-Vamos chicos, que vamos a llegar tarde-avisó Russell-
-Papá, que al final me voy yo con la moto-informó Quinn-
-Como quieras pero,¿y tu amigo?-preguntó el señor Fabray-
-Ya la llevan-explicó su hija-
Los Fabray y Brittany se montaron en el coche y Quinn en su moto, para luego encaminarse todos al partido aunque por caminos distintos.
////
Rachel caminaba en dirección al partido donde había quedado en encontrarse con sus amigos. En un principio la iba a llevar su padre con el coche nuevo que se había comprado una semana atrás, pero le había salido una emergencia en el hospital y había tenido que dejar sola a su hija.
Rachel estaba tan sumergida en sus pensamientos que no se percató del coche que se acercaba a ella. En él iban montado cuatro chicos de unos dieciocho años, guapos y bien arreglados. Sin ninguna duda, debían ser niños de papá.
-Hola guapa-saludo el copiloto -¿Te llevamos a alguna parte?
-No gracias-contestó Rachel sin dejar de caminar-
El coche avanzaba a la vez que ella y esta ya comenzaba a ponerse nerviosa.
-Por qué no te vienes un rato con nosotros, seguro que te lo pasaras bien-animó el joven que iba tras el copiloto-
-Muchas gracias pero no-respondió la morena acelerando el paso.
Pero los chicos no se conformaron con esa respuesta, pararon el coche para luego bajar de él.
-Que piernas más bonitas tienes-dijo el conductor del coche-
-¿Qué quieren?-preguntó Rachel con los ojos llorosos-
-¿Nosotros?, nada-respondió el cuarto chico-
Quinn, que acababa de tomar esa dirección, al ver lo que ocurría se acercó curiosa. Pero al ver que era Rachel paró la moto y bajó de ella para acercarse al grupo.
-¿Hay algún problema?-preguntó-
Los cuatro chicos se giraron a la rubia, ya que les había pillado por sorpresa, y sonrieron.
-Nada que te incumba-respondió el conductor-
-Me incumbe más de lo que crees-contradijo acercándose a Rachel-
La joven le miró sorprendida y agradecida por su intervención.
-Quinn-murmuró-
La rubia se giró hacia ella y con un semblante serio la agarró del brazo.
-¿Te están molestando?-preguntó-
Rachel dudo unos instantes, pero luego asintió. Quinn fue soltando poco a poco el brazo de la morena pero ella agarró la mano de esta rápidamente ya que se sentía más segura.
-Si vuelven a molestarla, y yo me entero, les destrozaré el coche ¿queda claro?-amenazó Quinn-
Los cuatro chicos se miraron entre ellos sorprendidos y burlándose mientras Quinn les fulminaba con la mirada.
-Mira guapa-comenzó uno de ellos-no se quien eres ni me importa, pero no te pongas celosa también te invitamos a unirte a nosotros con tu amiga.
-En sus sueños-agregó Quinn burlándose-
Los cuatro amigos comenzaban a enfadarse y eso se mostraba en sus rostros que ahora expresaban furia. Pero Quinn no era una cobarde y no se iba a dejar intimidar. Sin embargo Rachel estaba preocupada y cada vez agarraba la mano de Quinn con más fuerza.
-Quinn, por favor, vámonos-pidió Rachel- Te lo pido por favor.
La rubia miró atentamente a los cuatro chicos y luego suspiró.
-De acuerdo-accedió-Vamos, te llevaré en la moto.
Las dos montaron en la moto y se dirigieron al estadio donde ya les esperaban sus respectivos amigos.
////
Brittany iba en busca de sus amigos mientras los señores Fabray reservaban sitio en las gradas. Los días en los que había partido, los cursos inferiores organizaron un mercadillo con fines benéficos llenos de dulces, palomitas y todo alimento perfecto para ver un partido. Brittany se dirigía al puesto de dulces, que era el tenderete favorito de Artie, y donde había quedado con sus amigos.
-Después de todos los dulces que te metes en el cuerpo, no se como no engordas-comentó Kurt-
-Misterios de la vida-contestó Artie pidiendo otra manzana de caramelo-
-A mi me gusta más lo salado-dijo Mike comiendo las palomitas que anteriormente había comprado-
-Ya sabes Tina, hay que ponerte más sal-intervino Brittany que acababa de llegar-
-Ja, ja-rió Tina sarcástica- Que ingeniosa.
-Gracias-contestó Brittany con una sonrisa- Por cierto, ¿las palomitas no eran para el partido?
-Mayormente-contestó Mike-
-Tranquilos, he comprado más-dijo Kurt sacando tres bolsas más-
-Mi salvación-dijo Mike abrazando a Kurt-
-¿Habéis visto a Rachel?-preguntó Brittany extrañada- El partido está apunto de comenzar.
////
Quinn y Rachel caminaban en dirección al estadio. Habían dejado la moto en la calle anterior ya que sabía que no encontrarían sitio más cerca. Durante el trayecto no habían cruzado palabra y ese silencio comenzaba a hacerse incómodo.
-Yo...-comenzó Rachel- Gracias.
-No tiene importancia-contestó Quinn-
-Para mí sí que la tiene-dijo la morena agradecida-
Habían llegado a las puertas del estadio. Ahora sus caminos se separaban. La rubia debía ir a los vestuarios y la morena a las gradas, en busca de sus amigos. Quinn, sin nisiquiera despedirse, comenzó a andar hacia los vestuarios, pero Rachel la llamó y ella se giró para ver qué quería la morena.
-Suerte en el partido-dijo-
Quinn asintió con la cabeza y le dedicó una bonita sonrisa para luego volver a seguir con su camino y ella hizo lo mismo. Busco a sus amigos pero cuando ya pensaba que no los encontraría una voz la llamó.
-¡Rachel!-gritó Brittany acercándose a ella-¿Dónde estabas?
-Es una historia muy larga-contestó la morena-Luego te la cuento.
-Como quieras-dijo Brittany aunque tenía gran curiosidad-
-¿Dónde ibas?-preguntó su amiga-
-Te estaba buscando cuando Judy me ha encontrado a mí-comenzó a explicar la rubia-Y me ha encargado de que lleve estas botellas de agua a Quinn y a las chicas.
-¿Te acompaño?-ofreció Rachel-
-Vale-accedió-Vamos a los vestuarios.
////
Quinn entró al vestuario en el que ya se encontraban todos los jugadores cambiados y con la ropa del equipo ya puesta.
-Perdón por el retraso-se disculpó Quinn nada más entrar-
-No te preocupes-dijo Mercedes acercándose a su amiga- Aún quedan diez minutos para salir.
Quinn entró al vestidor privado a cambiarse mientras el resto del equipo hablaba o, en el caso de Jessie y Santana, discutían.
-Me tendré que esforzar para compensar tus malas jugadas-contestó Santana-
-¿Malas jugadas?-repitió Jessie- Si siempre se gana el partido gracias a nosotros.
-Ya claro-dijo sarcástica Santana- Si quieres lo comprobamos.
-¿una apuesta?-preguntó Mercedes-
-Exacto-asintió Santana- Quien meta más goles gana ¿se atreven?
-Vais a perder-intervino Dave- Nuestro grupo es mejor
-Pero qué dices-contradijo Quinn- Más les gustaría.
-Quinn, acéptalo-comenzó Sam-Somos mejores
-Sigue soñando-dijo Brittany que acababa de entrar al vestuario-
-¿Qué haces aquí?-preguntó Quinn-
-Estoy completamente seguro, de que mi nena ha venido para darme un beso de buena suerte-dijo Sam acercándose más a la chica-
-Por qué necesitas la cabeza para jugar, sino te la habría estampado contra la pared-dijo la rubia apartándose de Sam-
Todos los jugadores soltaron una pequeña risita, menos las perfectas y el grupo de Sam, las primeras porque estaban muy concentradas en no matar a sus enemigos y el segundo grupo porque eran amigos de Sam.
-Hemos venido a traerles unas botellas de agua con glucosa para que no les de una bajada de azúcar después del partido-explicó Rachel tal como unos minutos antes había hecho Brittany con ella-
-Gracias-dijo Quinn cogiendo las botellas-
-Bueno, nos vamos ya-comenzó Rachel- Suerte de nuevo.
-Vaya, vaya, vaya. Pero mirar a quien tenemos aquí-dijo Finn entrando al vestuario seguido de sus tres amigos-
-Ustedes-dijo Brittany para luego suspirar resignada- Ahora sí que nos vamos.
Finn apartó a Rachel de un empujón y se acercó a Quinn para luego besarla apasionadamente.
-Creo que voy a vomitar-dijo Brittany fingiendo que tenía nauseas-
-¿Qué haces aquí?-preguntó Jake-
-Ya ves, dando un paseo por el vestuario-respondió Brittany de mala gana-
Finn indicó a sus amigos que se acercaran a él y tras unos segundos de reunión llegaron a una conclusión.
-Brittany y Rachel ¿se llaman así no?-preguntó Finn para luego las dos chicas asentir- Hemos decidido invitarlos a la fiesta que celebró el sábado próximo en mi casa- A las ocho en mi casa-informó Finn-A y por cierto, traer a su amiga que las acompaña a todos los sitios.
-Y supongo que ha Kurt, Artie y Mike ¿También?-preguntó Rachel-
-¿quienes?-preguntó Puck desconcertado-
- Nuestros tres amigos-aclaró Brittany-
-De acuerdo-accedió Finn- Nosotros ya nos vamos
-Suerte-dijeron los cuatro para luego abandonar el vestuario-
Brittany y Rachel se miraron entre ellas para luego suspirar resignadas. Jessie se acercó a Rachel y la agarró de la cintura para luego girarla hacia él.
-Preferiría que fueses tu la que se pusiera esas falditas de animadora y moveras tus caderas-le susurro en el oído-
-Pues no vivirás lo suficiente para verlo-contestó la morena separándose de él-
-Lástima-dijo Jessie-
Desde el plantón que le había dado Rachel el primer día de clase, se había empeñado en conquistarla por todos los medios posibles, claro que la chica lo rehuía. Jessie estaba convencido de que algún día la tendría en su lista de ligues aunque no todo el mundo estaba tan seguro ya que la morena tenía carácter y no se dejaba conquistar por una cara bonita como la del rubio.
-Vámonos Britt-dijo Rachel agarrando el brazo de su amiga-Que no quiero que me lleven a la cárcel por matar a este.
Las dos chicas abandonaron el vestuario y los jugadores continuaron preparándose para el esperado partido.