Yes Daddy

By Lover_Alle

690K 43.9K 24.8K

Paula por fin tiene su vida en orden, no es la vida perfecta pero tiene claro a dónde quiere llegar y jamás s... More

𝓢𝓘𝓝𝓞𝓟𝓢𝓘𝓢
CAPÍTULO 1
CAPÍTULO 2
CAPÍTULO 3
CAPÍTULO 4
CAPÍTULO 6
CAPÍTULO 7
CAPÍTULO 8
CAPÍTULO 9
CAPÍTULO 10
CAPÍTULO 11
CAPÍTULO 12
CAPÍTULO 13
CAPÍTULO 14
CAPÍTULO 15
CAPÍTULO 16
CAPÍTULO 17
CAPÍTULO 18
CAPÍTULO 19
CAPÍTULO 20
CAPÍTULO 21
CAPÍTULO 22
CAPÍTULO 23
CAPÍTULO 24
CAPÍTULO 25
CAPÍTULO 26
CAPÍTULO 27
📍 PREGUNTA SERÍA📍
CAPÍTULO 28
CAPÍTULO 29
CAPÍTULO 30
EPÍLOGO
💥INVITACIÓN 💥
EXTRA l
ANUNCIO E INVITACIÓN
EXTRA II
NOTÍCIA IMPORTANTE

CAPÍTULO 5

27K 1.8K 1.4K
By Lover_Alle


Al llegar al muelle tras un relativo corto tiempo me sorprende ver un barco tan lujoso y grande, es simplemente perfecto y difícil de explicar el lujo que se aprecia solo desde afuera, definitivamente mi imaginación es demasiado escasa e ilimitada como para creer que el yate de Enzo fuera tan genial, creí que sería mucho mas pequeño y sencillo. Con la ayuda del antes nombrado bajamos del auto y caminamos por el camino de madera que nos guia a dónde se encuentra el jate subo a la embarcación y wow es simplemente hermoso desde dentro, como todo lo relacionado con él, el lujo resalta mires a donde mires.

-Esto es maravilloso Enzo -comento sincera mientras continuo admirando con deleite cada detalle de la estancia y cada rincón que miro me enamora más que el anterior, es admirable lo bonito que es todo.

-Me alegra que te guste pequeña -responde con una sonrisa, mientras me toma con suavidad de la cintura, a decir verdad me gusta ese apodo.

-No me gusta, ¡Me encanta! -confieso alegre, es que a cualquier persona que entre aquí y este en todos sus sentidos le encantaría.

-Deja que te lo muestre por dentro -propone, mientras me guía a lo que parece el interior.

-Un momento... ¿Quién lo manejará? -cuestiono con mucha curiosidad, ya que por mucho que he mirado parece no haber mas nadie que nosotros dos aquí y me intriga saber quien va a guiarlo.

-Yo -se señala con sus manos -quién más -responde con su mentón en alto, en muestra de orgullo al saber pilotar esta embarcación.

Río ante su tono, me tiende su mano y yo sin dudarlo la tomo para juntos entrar al interior del yate. Si por fuera me gusto, por dentro me enamoró, es hermoso pero en letras mayúsculas, hay una pequeña cocina, en la misma estancia una cómoda sala con hermosos sillones de color blanco que combinado con el marrón roble de los muebles de allí le dan un fino toque de elegancia, luego unas puertas corredizas de vidrio opaco que llevan a un pequeño pasillo que da a dos puertas una es del baño y la otra dirige a una acogedora habitación con una amplia cama, también hay un armario no muy grande pero tampoco pequeño, en la alcoba hay una puerta que conecta directamente con el baño. Es precioso por dentro, se podría navegar por días con una máxima comodidad.

-Vamos a ponerlo en marcha -propone mientras nos dirigimos al camarote, me da un poco de miedo que el vaya a navegar, no es que no le tenga confianza pero no sé que tan bueno sea en esta labor y por mucho que lo piense no me parece una buena idea morir ahogada, a pesar de que es una de las muertes más rápida según dicen.

Sin embargo me sorprendo cuando él con gran habilidad pone el barco en marcha con mucha facilidad, sus movimientos son exactos y parece que se mueve en cámara lenta mientras sus músculos se tensan tras cada movimiento, nos adentramos en el océano tras unos minutos de silencio y yo solo soy capaz de disfrutar de la deliciosa brisa que emerge del mar, considero que el olor al mar es una de las mejores cosas del universo, simplemente me encanta mucho mas que a cualquier persona promedio, es mas me atrevería a decir que es uno de mis olores favoritos, el segundo ya que el primero es el aroma de un libro recién comprado. Ahora estamos anclados muy alejados del muelle, de la playa e incluso de la ciudad.

Estoy solo con la malla puesta y Enzo solo se encuentra con su traje de baño masculino ya que por el calor hace rato se quitó la camisa, el preparó el almuerzo hace ya una hora quizá, hizo una pasta deliciosa que de inmediato comimos ambos estábamos muy hambrientos, ahora nos encontramos en la parte delantera del yate mas específicamente en la proa, estamos tomando sol mientras disfrutamos de la vista y el silencio que solo se ve interrumpido por el suave sonido de las olas que chocan y mesen el yate, me siento muy relajada ya olvidaba lo que era estar aunque sea un día sin preocuparme por mi vida o mi rutina.

-¿Pau te colocaste protector solar? -cuestiona de repente.

-No lo olvide -respondo de inmediato restando importancia al asunto.

-Se nota estás quedando demasiado roja -advierte, miro mi piel y tiene razón, mientras se levanta de su lugar y se encamina al interior de la embarcación, pasados unos pocos minutos vuelve con un pote de protector solar que de inmediato me tiende.

Al tenerlo en mis manos comienzo a esparcir el líquido por mi piel para protegerla del intenso sol de la tarde.

-Peque -llama mi atención y es ahí cuando noto que me esta mirando con máxima atención, estaba tan distraída antes que no me había percatado de su intensamirada posada sobre mí.

-Dime -le respondo poniéndome de costado y quedando de frente a él para mirarlo directamente a los ojos.

-Estas hermosa, la verdad es que ese bikini te queda de infarto -suelta de repente dejándome fuera de juego por unos instantes.

Siento como el calor sube a mis mejillas como de costumbre y tras unos segundos o tal vez minuto de silencio respondo; -Gracias, tú también estás muy guapo, la verdad es que el agua celeste hace un hermoso contraste con el verde de tus ojos -confieso con absoluta sinceridad.

-Gracias mi pequeña -él se muerde el labio inferior, suspira y aparta su mirada de la mía, se queda mirando el agua en completo silencio.

En ese momento lo observo muy detenidamente, su cuerpo está muy bien trabajado y las venas en sus brazos uff son perfectas dan ganas de recorrerlas con las uñas, bajando por su torso tiene una rosa tatuada en el lado derecho de su costilla, es simplemente hermosa, delicada y casi imperceptible, pero ahí esta. En ese momento y sin siquiera pensarlo me subo a horcajadas sobre él de un salto inocente, para examinar detenidamente el tatuaje, ¿Cómo es que no lo había visto antes? El sorprendido por mi acción me sujeta delicadamente de la cintura pero no me dice nada solo me observa con una sonrisa, toco con mis dedos la tinta grabada de forma permanente en su piel.

A los pocos segundos de mi exploración y cuando ya estoy a punto de soltar un montón de preguntas sobre su tatuaje, siento algo duro justo debajo de mí eso sin dudas causa una nueva y totalmente extraña sensación en todo mis ser. Siento como rápidamente todo mi cuerpo se estremece, de inmediato noto como él aprieta mas su agarre en mi cintura y como su respiración se acelera. Ya no lo dudo ni por un segundo y lo beso, lo beso como jamás me había atrevido a besar a nadie, tener eso duro debajo de mí me hace querer que me toqué, quiero que estemos toda la vida así.

Enzo en un rápido movimiento me apoya en el piso quedando encima de mí. Nos continuamos besando por un prolongado rato, como ya es costumbre ese acto trae consecuencias en mis bragas, aunque está ves parece diferente y parece mucho más intenso.

Él me mira a los ojos y separa nuestros labios por unos segundos -¿Me permites? -dice mirando la parte inferior del bikini con su mano a una distancia prudente.

En ese momento lo que pienso es ¿Esto es lo que realmente quiero? ¿Me siento preparada para dar este paso?

Mientras yo me sigo debatiendo y dudando interiormente él hace el amague de alejarse, pero lo detengo no quiero que se aleje de mi, esto me da miedo pero no puedo vivir toda la vida con miedo a los hombres, además con él me siento bien y estoy segura de que si le pido que se detenga lo hará.

-Si puedes -respondo por fin soltando un pesado suspiro, él se acerca a mi y finge que me va a besar pero no lo hace, por unos segundos se mantiene así, debo admitir que la distancia de sus labios me está matando, así que lo miro frunciendo un poco el ceño.

Ahora si me vuelve a besar pero está ves de forma más intensa, ahora mientras me besa con una mano masajea uno de mis pechos y con la otra va bajando lentamente por mi abdomen hasta llegar al borde de mi bikini, al llegar ahí acaricia mi panza y luego baja por fin a mi parte íntima. Cuando comienza con estás acciones continuos e incontrolables quejidos se escapan de mi boca, pero son callado de inmediato por sus labios, lentamente siento como cuela sus dedos por debajo de la tela y ahora si me alarmó un poco y él sin dudas lo nota.

-Tranquila princesa me detendré cuando tú me lo pidas, ¿De acuerdo? -el tono de su voz me transmite la calma que necesito.

Tras calmarme respondo con un: -De acuerdo.

Me vuelve a besar causando que olvide la incomodidad o vergüenza cuando lo hace, comienza a masajear mi húmeda intimidad, tengo miedo de lo que puede llegar a pensar de mi, no quiero que tenga una mala idea. Pero él no dice nada en un momento determinado entre besos y toques el comienza a tocar lo que creo es mi clítoris, y causa que una oleada de infinitas nuevas sensaciones me recorran de pies a cabeza, lo que siento es difícil de explicar. Arqueó mi espalda y unos fuertes sonidos escapan de mi boca, de repente siento un fuerte cosquilleo en mi parte íntima y un fuego insoportable en mi vientre bajo, vuelve a tocarme rápidamente en esa zona, estoy sudando.

-¡Enzo! -digo alto en tono de súplica, aunque no se porque estoy suplicando.

-Córrete para mí peque -me susurra suave al odió.

En ese momento todo queda gris para mí, es como si con esas simples palabras hubiera encendido algún interruptor de mi interior, siento como algo se escurre entre mis piernas, seguramente mojando por completo sus dedos y mano, Enzo no para de decirme cosas bonitas al oído, pero no lo escucho con claridad, me siento en un momento en el que mi mundo paro de girar y el reloj de correr, siento que todo desaparece por unos minutos y soy totalmente incapaz de pensar en cualquier cosa o incluso de emitir palabras.

Cuando recupero la conciencia, me levanto avergonzada por todo lo que acaba de suceder.

-Me hice pis -hablo totalmente avergonzada e inundad de ignorancia, no sé como mirarlo a los ojos .

Hago el intento de escapar a el baño pero Enzo me lo impide -Pequeña no te has hecho pis -habla con una paciencia admirable.

-Si Enzo claro que si, que vergüenza -me cubro el rostro con las manos.

-¿Nunca habías tenido un orgasmo? -parece totalmente sorprendido y yo cada vez me siento peor con la situación.

-¿Un qué? -suspiro resignada -mira no se que sea lo que acabas de decir, pero necesito que me expliques el porque cuando estoy contigo me pasan estás cosas, siempre siento que mi ropa interior se humedece y juro que no me hago pis, pero siento muchas cosas que no me se explicar.

Él se sonríe mostrándome sus perfectos dientes, me pega a su cuerpo y me da un fuerte abrazo, cuando menos lo espero me toma en sus brazos y yo solo soy capas de esconder mi rostro en su cuello.

Nos guía a el baño y al ya estar ahí me deposita en el suelo -¿Puedo quitarte esto para que tomemos una ducha? -pregunta.

-Pero no quiero que me veas desnuda, de seguro has visto a chicas mucho más guapas que yo y con mejores cuerpos como esa tal Celeste o como yo le voy a decir "Rubia cuello largo"-me sincero y río de mi último comentario.

-Tú cuerpo es arte mi niña y aunque he visto muchas mujeres desnudas piensa en que ahora no estoy con ninguna de ellas, sino aquí contigo -me deja un suave beso en los labios al acabar esas palabras.

Suspiro -Está bien -termino por ceder no muy convencida.

Enzo deja dulces besos en mi nuca y lentamente me quita la parte de arriba del traje de baño, al dejar libre mis pechos deja caer la pieza y me da vuelta haciendo que mi cuerpo quedé frente a él suyo nuevamente. De forma lenta se agacha delante de mi y se dirige a el borde de las bragas del traje, yo apretó los ojos mientras los cierro ya que verlo ahí en esa posición causa algo en mí haciendo que sienta un fuerte calor en esa zona íntima que ya se encuentra totalmente húmeda por lo de hace rato, además que los nervios y la vergüenza están por acabar conmigo.

Siento como lentamente va dando besos en mis piernas y dejando suaves caricias también mientras retira la parte baja del bikini, cuando siento que las está por por retirar de mis piernas abro los ojos y levanto un pie seguido por el otro para que la pueda retirar por completo sin mayor esfuerzos, siento mi rostro arder. Cuando se incorpora capta mis labios nuevamente, luego se quita su traje de baño quedando solo en ropa interior, ni siquiera hace el amague de quitarse el bóxer.

-¿Me dejas bañarte princesa? -sin emitir palabras simplemente asiento, con la cabeza dándome vueltas, todo esto es nuevo para mi.

Sus pupilas están dilatadas, causando que su mirada se vea aún más intensa que de costumbre, ya que se sus ojos se encuentran negros con un iris verde al rededor realmente apenas se ve ese verde que tanto me gusta admirar. Al abrir el agua, ambos nos colocamos bajo de ella, él toma el shampoo y comienza a hacer espuma en mi cabello, gracias a mi baja estatura no se le dificulta en absoluto lavar mi cabello, creo que ser medio enana tiene sus ventajas. Me da un delicioso masaje en mi cuero cabelludo que causan que yo suelte un "mmm" ganando un pequeño sonido de su parte.

Cuando acaba con el cabello, toma entre sus manos la esponja y la llena de jabón, al ya tenerla con abundante espuma comienza a pasarla por mis pechos, mis brazos, mi abdomen, luego lava mi espalda y por último se detiene en mi parte íntima me mira como buscando aprobación y yo mirándolo a los ojos asiento. Lava dulcemente mi intimidad y piernas, mientras lo hace la electricidad que recorre mi cuerpo es increíble, me encanta lo que hace con mi cuerpo, literalmente este hombre me tiene totalmente a su merced.

Cuando acaba conmigo me quedo unos segundos dudando lo que estoy a punto de hacer, no quiero ser cobarde, tras un extenso suspiro en el cual libero un poco mis miedos y nervios decido darme la vuelta y tomar dulcemente de sus manos la esponja que aún sostiene, repitiendo su acción de hace algunos minutos la lleno de jabón y por fin me digno a mirarlo a los ojos ya que hasta ahora estaba huyendo de su atenta mirada que no se pierde detalle de mis movimientos.

-¿Puedo hacerlo yo? -pregunto tímida y acobardad mirando mis pies con pena.

-Por supuesto que sí -me dice mientras levanta mi barbilla, provocando que nuestras miradas conecten.

Muerdo mi labio inferior y lentamente comienzo a pasar la esponja en sus anchos hombros, luego bajo a sus pectorales, para luego de forma suave ir bajando a su abdomen. En ese momento me es inevitable dejar de mirarlo a los ojos detenerme a admirar cada músculo que guarda en su cuerpo. Cuando vuelvo a bajar la vista su boxer está totalmente abultado.

-¿Porqué te sucede eso? -pregunto liberando mi curiosidad y sacando una ves mas a la luz mi ignorancia en todo lo que compete a la sexualidad. Él suspira y sus mejillas se tornan muy rojas, ahora es él quién huye de mi mirada que atenta lo mira esperando una respuesta -Te ves muy lindo y tierno cuando quedas rojo -le hago saber.

-Gracias... -se aclara la garganta -respondiendo a tú pregunta, he... -duda unos minutos -digamos que los hombres nos ponemos así cu-cuando nos excitamos o cuando tenemos delante una chica que nos gusta demasiado.

-Wow -digo sorprendida -¿Y yo causó eso en ti?

-Si mi peque, tú lo causas -responde recuperando su postura de siempre.

-Me explicas porque me hice pis ahí afuera, mientras t-tú... -no termino lo que iba a decir, porque simplemente no encuentros las palabras para referirme a lo que ocurrió.

-Mientras te tocaba -termina por mí al notar mi timidez.

-Si eso... -digo avergonzada mirando a otro lado.

-No hay nada de que avergonzarte -me tranquiliza mientras toma mi cintura y traza suaves círculos en mi piel -y de hecho no te hiciste pis como tú dices, lo que realmente te paso fue que tuviste un orgasmo, te corriste y es totalmente normal en las mujeres cuando se excitan.

-¿Por qué me mojo tanto cada ves que nos besamos? -continúo preguntando.

-Por que de seguro te debo parecer atractivo y cuando nos besamos quizás te excitas un poquito... -bajo mi mirada avergonzada.

-Me siento una tonta al no saber eso, pensarás que soy una niñita, pero jamás nadie me explico estas cosas.

-Primero que nada, no pienso que eres tonta, de hecho me encanta que seas tan inocente y segundo no eres una niñita eres mi niñita -me roba una inmensa sonrisa con sus palabras, sin agregar nada más lo abrazo Enzo me abraza y acaricia de forma reconfortante mi espalda, yo por mi parte dejo de lado mi desnudes y me quedo tranquila en sus brazos, pero él me causa esto, me da seguridad y confianza.

Luego de unos minutos de silencio salimos de la ducha y tras secarme me coloco una remera que él me tiende definitivamente es suya por el tamaño y al ponermela lo compruebo ya que tiene su perfume.

-Ven Pau quiero que hablemos de algo -me propone, mientras me invita a sentarme en sus piernas dando unos leves golpes en las mismas, yo por mi pare sin basilar me siento en sus piernas... La verdad me da curiosidad saber de que quiere hablar así que en total silencio me quedo en sus piernas esperando que comience a hablar.


Hola mi gente bella ❤️ ¡Espero que se encuentren muy bien!

Bueno espero que les este gustando la edición de la historia, cómo siempre en breve nos leemos mis pervertid@s

Continue Reading

You'll Also Like

4K 433 8
Harry termina con su novio, al descubrir que lo engañaba con una de sus mejores amigas. ¿Será mucho pedir un regalo de navidad más? Dónde a Ryan le d...
1.8M 127K 88
Becky tiene 23 años y una hija de 4 años que fue diagnosticada con leucemia, para salvar la vida de su hija ella decide vender su cuerpo en un club...
91 11 2
Alex y Aleck, ambos mejor conocidos como los hermanos Quackity o HQ estaban en la casa de su tía mirando la tele y derrepente se escucha como tocan l...
1M 60.8K 51
Ellos me aman... yo los amo. Ellos me protegen... yo los protejo. Ellos darían todo por mi... yo daría todo por ellos. Ésta obra es totalmente mía po...