F L A S H B A C K; U N T E A T R O, E L
T I T I R I T E R O
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Me sentía vacía, y cuando digo vacía, era que no podía moverme o mencionar una sola palabra. Sólo miraba al vacío, mis ojos totalmente perdidos entre la nada expulsando aquellas lágrimas sin un sólo sollozo.
Mi psicóloga había venido a verme varias veces al hospital, ¿Y sabes qué dijo?
Mencionó mi nombre con preocupación, pero no era preocupación lo que en realidad su rostro mostraba.. Era lástima. __ Casi mueres. Casi pierdes tu vida y la de tu bebé.
Mi bebé estaba vivo y sí me sentía feliz por ello, pero esa tristeza e infelicidad me tenían prisionera de su sentir.
Era un terrible estado de shock.
La psicóloga me preguntaba cosas, pero yo seguía igual, neutra, sin mostrar una pizca de nada mas que aquellas gotas saladas corriendo por mis mejillas para luego llegar a mi cuello.
No quería hablar, no podía en realidad, yo no quería sentir nada, pero en ese momento no lo hacía por simplemente querer.. Yo no podía hacer nada. Parecía un títere que estaba siendo controlado.
Aunque después de todo, el destino me manejaba a su antojo, sólo que esa vez se había apoderado un poquito más.