Las Puertas.
Después de contemplar el cielo, Sophie fue directo a desayunar lo más rápido que pudo. Ya se había levantado tarde, no podía perder más tiempo. Comió junto con Minho y Thomas y partieron al Laberinto juntos. Esta vez su recorrido los llevaba a quedar cerca de el pasadizo que conducía a la Sección Uno, donde ella debía separarse y seguir su recorrido. Minho iba adelante, con Sophie pisándole los talones y Thomas detrás. Iba a doblar en una esquina hacia la derecha, cuando se echó para atrás casi de un salto. Paso su mano en frente de Sophie y tomó la camisa de Thomas tirándolo hacia atrás, haciendo que la chica igual se dirija a el muro.
- Shh.- Comenzó a susurrar.- Hay un maldito Penitente detrás del recodo.
Minho se llevó el dedo a los labios y soltó a Thomas. Dio un paso atrás y luego se arrastró al rincón detrás del cual había visto al Penitente. Sophie estaba tranquila, ya había pasado por esto varias veces, ya ni le hacía efecto. Para ella era peor sumergirse en sus emociones en estos momentos. Se mantenía neutra y alerta. Lista para todo. En cambio, Thomas estaba que desfallecía. Se podía notar lo nervioso que estaba de kilómetros.
- Esta sentado allí. Me recuerda al que nosotros vimos, que parecía muerto.- Anunció Minho
- ¿Que hacemos?- Preguntó Thomas.- ¿Viene hacia nosotros?
- No, idiota. Te dije que estaba sentado.
- No sabía que esas cosas podían sentarse.- Dijo Sophie para ella.
- ¿Y entonces?- Thomas levantó las manos en signo de frustración.- ¿Que hacemos?
- Yo me voy a mi sección, adiós. Y suerte.- Le susurró la chica mientras le guiñaba un ojo a su amigo.
Ahora se vendría un largo recorrido de pensar en Gally y todo lo que había pasado. Sin el "sol", no tendremos plantas y los animales morirán, estamos jodidos, pensaba ella.
❂
Sophie ya estaba en la Sala de Mapas cuando los dos Corredores de la Sección Ocho atravesaron la puerta de metal. Todos estaban en silencio y bastante desanimados, incluida ella. Le resultó raro ver a Minho de un humor normal, casi feliz. Sabía que habían descubierto algo. Siempre se veía de esa manera cuando lo hacía. De todas formas volvió a enfrascarse en su mapa para terminarlo de una vez. Como todo el resto, tenía ganas de una ducha y una buena comida.
La sala solo se cubría por las molestas órdenes de Minho hacia Thomas, que continuaba distrayéndole todo el tiempo. El novato se veía muy confundido haciendo su primer mapa, aunque no estaba tan mal para ser la primera vez. ¿Acaso hay algo que a este chico le salga mal?, pensó, hasta resulta molesta su perfección. Terminó su mapa y lo comparó con el del día anterior. Ya muchos Corredores se habían ido. Había quedado Hawk que estaba comparando sus mapas, al igual que ella.
Ya había terminado, pero no quería irse antes de que Minho le dijera lo que había pasado. Apenas los chicos comenzaron a guardar las cosas ella los imitó. Ellos salieron antes, ya que a Sophie se le cayó su bloc y la retrasó. Termino de poner todo en orden y salió de la Sala de Mapas. Se encontró con un Alby muy enojado y un Newt sumamente confundido y desesperanzado.
- Porque todo este lugar miertero se está cayendo a pedazos. - Dijo Alby al tiempo que Sophie aparecía en la escena.
-¿De qué hablas?- Preguntó Minho.- ¿Qué más ocurrió?
Newt señaló hacia la caja.
-Hoy no llegaron los malditos suministros. Durante dos años, han venido todas las semanas, el mismo día y a la misma hora. Pero hoy no.
Sophie dirigió su mirada a la caja. No podía creer que todo esto estaba pasando. Sin el "sol" ni los suministros, debían encontrar una salida o morirían. Una sensación extraña se apoderó de su estómago. Sentía que su cuello se cerraba, pero podía respirar con normalidad.
- Shuck, ahora sí que estamos jodidos.- Murmuró Minho, alterando más a la chica.
- No hay sol para las plantas,- dijo Newt- ni provisiones en la caja... Sí, yo diría que estamos completamente jodidos.
Alby estaba cruzado de brazos, furioso. Miraba hacia la caja con el mayor odio que la chica había visto en toda su vida.
- Claro, pero de todos modos,- continuó Minho- descubrimos algo raro.
Nadie se inmuto demasiado, las cosas estaban tan mal que un pequeño descubrimiento ahora se veía estúpido.
- ¿Qué?- preguntó Newt, arqueando las cejas.
Minho se tomó unos largos tres minutos para explicar todo lo que pasó desde que Sophie los dejo. Habían perseguido a aquel Penitente y este los había conducido al Acantilado, por donde se tiró. Se habían quedado examinando el lugar. Tiraron piedras pero nada pasó hasta que Minho tomó impulso y tiró una más lejos, dando en el centro. Había desaparecido.
- Debe conducir al sitio donde... ya saben... viven los Penitentes.- concluyó.
- La Fosa de los Penitentes.- agregó Thomas.
Todos lo miraron mal, como si no tuviera ningún derecho a meter bocado en la conversación.
- Tengo que ver eso por mí mismo, caray.- dijo Newt, y luego murmuró.- Es difícil de creer.
Sophie ya tenía todo lo que quería saber. Saludó con la mano para no interrumpir y se fue caminando hacia las duchas. Necesitaba paz. De todas formas no la encontró. Llegando a la Finca se encontró con un gran alboroto. Allí divisó a Sartén y le preguntó qué estaba pasando.
- La chica despertó.
Sophie asintió y siguió su camino. No sabía como esto la hacía sentir. Ahora más que nunca necesitaba esa ducha. Ni siquiera le importó que hayan otros chicos ya bañándose. Se tomaría su tiempo, dándoles tiempo a irse. Después del tiempo, uno se fue, pero entró alguien más. Pasó el tiempo y al fin quedaba solo un ducha, que al poco tiempo fue cerrada. Ella espió para ver de quien se trataba. Era Minho.
- ¿Ey, me pasarías mi ropa?- preguntó Sophie.
El asintió.
- Está sobre esa mesa.- le dijo mientras señalaba su ubicación.
Ella volvió a meter su cabeza en el cubículo hasta que lo escuchó.
- ¿Son cómodas?- preguntó el chico sosteniendo sus bragas.
- Dame eso idiota.- dijo ella agarrándolas.
La sangre se le había subido a las mejillas y había vuelto a meter su cabeza en el cubículo. Minho solo reía.
- Te odio shank.- dijo ella mientras mordía su labio.- Solo cuida la miertera puerta hasta que salga.
Volvió a sacar su cabeza, viendo como su amigo se iba riendo levemente. Rodó sus ojos y salió a cambiarse.
❂
- Sophie necesitamos buscarla. Acompáñame al Bosque. Ya.- dijo Newt jalándola del brazo, y alejándola de el conglomerado de Habitantes del Área.
Alby y otros dos Habitantes iban detrás.
- ¿Por qué yo?- preguntó ella como si fuera lo más terrible del universo.- Ya las cosas están complicadas.
- Por que eres mujer. Entre ustedes se entienden. Malditas chifladas...
- Cierra el hocico.- le ordenó la chica mientras le pegaba un codazo en el hombro.
Caminaron por el bosque hasta escuchar voces. Las siguieron y se encontraron con la chica y Thomas.
-¿Pero dónde...? - exclamó Newt.- ¿Cómo llegaste hasta aquí? El Doc me dijo que desapareciste en un maldito segundo.
Ella se levantó del suelo y lo enfrentó.
-Creo que se olvidó de un pequeño detalle, la parte en que le di una patada en la entrepierna y salí trepando por la ventana.
Sophie sonrió, reprimiendo sus ganas de reir. Tal vez me caiga bien, pensó. Newt volteó su cabeza mirando a Jeff, quien tenía toda su cara roja.
-Felicitaciones, Jeff.- le dijo.- Eres el primero en recibir una golpiza por la segunda niña.
La Corredora quería decirle que deje de hacerse el macho ante la nueva. Que ese papel era ridículo, pero ella respondió primero, haciéndola sorprender nuevamente.
- Si sigues hablando así, tú serás el próximo.
Sophie sonrió nuevamente y sacudió su cabeza en signo de aprobación. Newt por su lado, estaba desafiando a Thomas y a la chica a una batalla de miradas. Alby se acercó alterado.
-Ya estoy harto de esto.- exclamó, apuntando al pecho de Thomas como si fuera a golpearlo.- Quiero saber quién eres tú, quién es esta larcha y cómo es esto de que ustedes se conocen.
Su sonrisa se esfumó. No se había dado cuenta de lo que esto significaba. Todo era culpa de ella y que conociera a Thomas, no la beneficiaba.
-Alby, te juro... - comenzó a decir el novato, claramente herido.
- ¡Garlopo, ella vino directo hacia ti apenas se despertó!
Sophie se acercó a Alby y puso una de sus manos en su hombro, quedando cerca por si se le tiraba encima.
- ¿Y con eso qué? Yo la conozco y ella me conoce, o al menos, eso solía ocurrir. Pero no me acuerdo de nada y ella tampoco.
- Eres un garlopo miertero.- dijo Sophie mientras largaba una carcajada.
- ¿Qué hiciste?- le preguntó Alby mirando fijamente a la novata.
Ella no respondió. Sophie aumentó su agarre en el hombro de Alby.
- ¡¿Qué hiciste?!- gritó el líder.- Primero el cielo y ahora esto.
- Activé algo.- contestó con tranquilidad.- No fue a propósito, lo juro. Detoné el Final, pero no sé lo que eso significa.
- ¿Qué ocurrió?- preguntó Thomas hacia Sophie y Newt, evitando al líder.- ¿Cuál es el problema?
Alby lo tomó de la camisa. Sophie le agarró los hombros, intentando que se calmase y lo soltara.
-¿Qué pasó? Yo te voy a contar qué pasó, larcho. Estabas tan ocupado acá haciéndole ojitos a esta chica que no te molestaste en mirar a tu alrededor. Bueno, ¡fue por eso que no te diste cuenta de la hora que es!
Alby lo soltó, pero Sophie seguía con sus manos en sus hombros.
-Las paredes, shank. Las Puertas. Hoy no se cerraron.