Le envió un mensaje a Luke diciéndole que debía ir a una exposición de pintura para una tarea de su clase y le encantaría que fuese con él.
Michael aun tenía en su cabeza lo que le había dicho Ashton.
«Luke tiene Parkinson »
Eso hacía que Michael quisiera con todas sus fuerzas estar con él, animarlo, cuidarlo. Aun cuando Luke era mas grande que él, Michael sentía la necesidad de cuidarlo, lo sentía muy frágil, como cuando compras un jarrón valiosísimo y no quieres ni tocarlo para que este no se rompa, asi era Luke para Michael, una persona valiosísima que tenia miedo a perder.
Jugó con el teléfono entre sus manos unos minutos hasta que este vibró.
«Si, claro. Me haría bien salir»
Una enorme sonrisa se formó en el rostro de Michael.
Lo vería de nuevo.
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Caminaron juntos por las calles llenas de nieve y canciones navideñas, faltaban dos días para ello y las tiendas de regalos estaba repletas de gente y niños pidiendo regalos.
Se dirigían a la exposición en silencio. Michael no quería hacer que Luke se molestase o dejara de responder (solía hacerlo cuando no quería hablar del tema, lo había notado y Ashton se lo había dicho).
Entraron a la exposición con bonitas pinturas y Michael las observó como un niño cuando va a una tienda llena de dulces y quiere todos.
El admiraba cada una de las pinturas detalladamente mientras le explicaba a Luke cada una de ellas. Luke sonreía en ocasiones y admiraba las pinturas junto con él.
Salieron de la exposición con apuntes y fotos que Michael necesitaba, caminaron hacia el centro comercial ya que Michael necesitaba comprar mas lienzos y pinturas para las clases.
Entraron a la tienda y subieron al tercer piso donde tenían los materiales. Mientras caminaban por los pasillos, Michael intentó hablar con Luke.
"¿Quieres contarme que te ha pasado el viernes?" Le dijo mientras tomaba 3 lienzos y los ponía en el carrito.
"No es nada, solo" se rasco la parte de atrás de la cabeza " un mal dia"
Michael estaba seguro que Luke no le contaria nada, pero esperaba que pudiera sacarle algo de la verdad, asi (supuso él) se sentiría un poco mejor.
Pagaron los lienzos y se dirigieron al tren. Abordaron y se sentaron uno frente a otro, Luke estaba por sacar su libro cuando la voz de Michael lo interrumpió
"Podemos amm ir a mi casa si tu quieres" el rubio asintió
Bajaron del tren y caminaron a casa de Michael en silencio. Michael tenia un montón de preguntas acerca de Luke, de su vida, de su enfermedad.
Pero todas debían esperar, no quería que Luke se portara grosero o dejara de dirigirle la palabra, Michael había llegado ya al punto que, sin saber mucho de Luke, no podía dejarle ir, no podía siquiera vivir sin él.
Subieron y entraron al departamento de Michael. Luke se sentó en sillón mientras Michael corría al baño, se miró en el espejo y se lanzo agua sobre la cara. Salió del baño y le ofreció algo de comer, el rubio aceptó y Michael entró a la cocina.
Después de un rato, sintió a alguien detrás suyo.
"Asi que... ¿Sabes cocinar?" Le dijo Luke cruzado de brazos recargado en el marco de la puerta.
"Un poco si"
"¿Hay algo que no sepas hacer?" Le dijo sorprendido.
"No se conducir" rió para después oír al rubio reír con él.
Después de unos minutos la cena estuvo lista y se sentaron en el suelo poniendo la cena en la mesita de la sala.
"Luke" lo miró "Se que tienes algo que contarme" era ahora o nunca "Y se que no lo harás, entiendo tus razones, pero debes saber que yo estaré siempre para ti..."
Luke le miraba atentamente, Michael podía notar que estaba preocupado.
Michael estaba nervioso, sus manos sudaban y su pie no paraba de moverse. Era ahora o nunca. Le costaba trabajo hablar pero necesitaba hacerlo. Necesitaba decirle.
"... Porque estoy enamorado de ti Luke Hemmings"