Los dedos delgados y largos de sus dos manos apretaban con fuerza el delicado cuello de la humana mientras esta lloriqueaba e inhalaba desesperadamente intentando succionar algo de oxígeno para sus pulmones. Sus pies colgaban, no los movía por miedo a golpear al demonio que estaba ante ella, hacer tal acto solo empeoraría el enojo del ser sobrenatural. Una vez más, no sabía cómo exactamente, había logrado desatar la furia de Lucifer, y vaya que eso no era cosa sencilla, aun así parecía que siempre se las arreglaba para hacerlo enojar. No era la primera vez que la había intentado matar desde que llegó a Devildom, si bien no habían sido muchas ocasiones, ya había pasado un par de veces en el pasado, de resto eran solo amenazas de muerte cuando el demonio de cabello negro sentía a (TN) como amenaza para él o sus hermanos. Poco a poco empezaba a perder el conocimiento, su visión se hacía borrosa y puntos negros intermitentes comenzaban a llenar su vista empezando por el rabillo del ojo. El agarre que tenía la humana sobre las muñecas de Lucifer cada vez se debilitaba más y más, era inútil que intentara quitarlo por la fuerza, él la superaba en cualquier aspecto. Su desesperación se fue apagando junto con su conocimiento al aceptar su muerte, lo único que agradecía era que no la fuera a matar de una forma horrible como tanto se presume que hacen los demonios habitualmente, pero esto a la vez la confundía, ¿por qué no simplemente acabar con ella de una vez? ¿solo quería prolongar su agonía? Fuera lo que fuera que pensara el demonio del orgullo, estaba al menos un poco agradecida de que no la hiciera sentir más dolor del que sentía ahora.
Tiempo después, ahora esa misma humana vestía un hermoso vestido de novia frondoso de color negro; y frente a ella se encontraba nada más y nada menos que Lucifer mostrándose orgulloso en su forma demoníaca mientras danzaba con su ahora esposa. Como era de esperarse, sus seis hermanos estaban sorprendidos que de una simple humana hubiera sido capaz de despertar tales sentimientos dentro de Lucifer, si bien ellos mismos habían experimentado lo que fue caer ante el encanto de (TN), hacer que su hermano mayor cayera también era una gran hazaña. Ninguno de los seis estaba de acuerdo en el matrimonio de aquellos dos, puesto que obviamente todos ellos tenían sentimientos hacia la chica, pero también tenían muy en claro que no podrían vencer a Lucifer ya que era el más fuerte de los siete, además de que (TN) había sido quien eligió al demonio de la soberbia como su eterno acompañante. Aunado a esto, el azabache también había puesto mucho de su parte para que (TN) fuera suya.
"Verás, los demonios no podemos resistir tentaciones. Cuando hay algo que realmente queremos mirándonos directamente a la cara, tenemos que tenerlo. Simplemente así es como somos."
Las palabras que alguna vez le dijo Lucifer resonaban en su cabeza, a veces pareciera que en realidad no fue ella quien lo eligió a él, sino más bien al revés, el demonio en algún momento la escogió a ella y decidió que contraerían matrimonio.
Aún así, no podía evitar sonreír al ver el brillante anillo que reposaba en su dedo anular que simbolizaba su unión. Desde que llegó a Devildom por el intercambio, nunca se imaginó ni por un segundo que se convertiría en la esposa de Lucifer.
He estado muy enviciada con este juego. ;-;
Si alguna también lo juega, dígame su número de ID para agregarla. 👀
ღ ¡No olviden comentar y votar! ღ
Publicación: may. 24, 2020