La chica rubia le sonrió a Dorian y este intentó no distraerse con el escote profundo de su pecho, le hablaba de lo bello que era Rusia en aquella época del año y demás cosas a las cuales él sólo asentía y sonreía. Ella hablaba sin parar, se reía y gesticulaba con las manos, estaba bastante animada, él sólo le contestaba ocasionalmente pero a ella parecía bastarle.
Ella decía ser americana. Dorian sabía que no lo era, esa aparentemente confiada y parlanchina rubia era Sophi Chen, una agente de la inteligencia china.
De padre de origen chino y de una madre rusa de la cual había heredado el físico, se aprovechaba de su apariencia nórdica para despistar, y hacía un excelente trabajo.
En sólo una semana la rubia ya tenía comiendo de su mano a Derek Mamáyev, su objetivo.
Había estado con ojos y oídos puesto a todo lo que ocurría en ese hotel desde que había llegado hace diez días, y había visto como esa rubia, en menos de una semana interceptaba a Mamáyev, coquetea con él y poco a poco se ganaba su confianza.
Ella era muy buena en lo que hacía, pero, era una pena, no sabía cuál era su objetivo y él tenía sus propios planes para Mamáyev.
Sería su fuente.
Tenía que descubrir dónde llevaban a los Omegas que secuestraban.
Pero ya llevaba diez días investigando y no descubría nada todavía.
Incluso si tenía ocultos micrófonos y cámaras en su habitación, Mamáyev no había dejado caer nada, era demasiado precavido.
Y por eso él estaba charlando con la rubia.
Ella tenía puesto un vestido azul estilo griego que resaltaba su blancura, el cabello recogido en lo alto con rizos colgando, era muy hermosa.
Dorian se preguntaba dónde tendría guardado el micrófono, no parecía usar sostén.
Sabía que ella aun no había conseguido nada, de lo contrario no estaría aun ahí. Siendo ella humana tal vez no supiera que Mamáyev era un Alfa, y por eso iba tan despreocupada, o tal vez si lo sabía.
En el expediente de Mámayev ponía su gusto de juguetear con mujeres humanas, sólo salía con Omegas femeninos y mujeres humanas. No salía con Omegas masculinos ni con nada masculino. Tal vez la rubia también sabía eso, o sólo era coincidencia.
Como fuera, no importaba.
Dorian tomó un trago de su whiskey y vio caminar a Mamáyev y sus dos gorilas hacía la barra donde estaban.
-Veo que hiciste un amigo, querida,- Dijo Mamáyev al llegar al lado de Sophi.
Ella sonrió y besó su mejilla, desdeñando lo dicho anteriormente contestó, -Así es, su nombre es... Cómo dijiste que te llamabas?,- Le preguntó como restándole importancia.
-No lo dije,- Contestó Dorian aparentando desinterés.
La rubia no supo como reaccionar, Mamáyev guardó silencio. Finalmente la rubia sólo se rió, -Es verdad, -Concedió. -Entonces, cómo te llamas?-Lo dijo con gesto de coquetería y condescendencia, como diciendo "Todos soy amables conmigo y me dan lo que quiero por ser bella, y lo sé".
Dorian fingió estar desinteresado en la situación. Era un hombre calvo, con un traje caro, sentado en la barra de un bar, Cuál era el maldito problema? Quería ver cómo trataría Mamáyev a un hombre que no sabía leer entre lineas, o sólo no quería apartarse de él con miedo, como si no le interesara su presencia amenazante.
Lo más útil sería que él empezara a notarlo y esa era su manera.
Esperaba que Mamáyev fuera el tipo de persona poderosa que no soporta ser ignorada.
Dorian sólo bebió de nuevo y sonrió para volver a beber, a ver si le quedaba claro que no iba a hablar.
-Un hombre que no quiere decir su nombre tiene mucho que esconder,- Soltó Mamáyev.
-Veo que tu acompañante ya ha llegado, así que les deseo una buena noche,- Dijo dirigiéndose a la rubia, luego miró al Alfa, al cuál miró a los ojos dos segundos contados, sin más se volteó y se enfrascó más en su bebida.
Entendiendo la despedida, Mamáyev con sus gorilas y la rubia se retiraron y no lo miraron dos veces.
Pero Dorian ya había sembrado la semilla.
Lo que era bueno ya que estaba harto de beber agua en un vaso pasado de olor a Whiskey.
Tres días después volvió a aparecerse en el mismo lugar, en la misma silla y con el mismo trago falso que le daba el barman contratado.
Ya llevaba media hora fingiendo emborracharse cuando uno de los gorilas de mamáyev le tocó el hombro diciendo -Mi jefe te manda a llamar,-
-Dile a tu jefe que no me joda,- Dorian fingió pasar de él.
El hombre le puso una mano en el hombro y repitió -Señor, le insisto, sigame, mi jefe lo solicita,-
-Dile a tu jefe que mueva el culo hasta aquí entonces,- Contestó Dorian sacudiéndose el hombro tranquilamente y volviendo a lo suyo, que era fingir emborracharse.
El gorila hizo una seña al otro gorila y entre los dos lo arrastraron fuera del bar, Dorian fingió resistirse pero se dejó "guiar".
Lo metieron en una habitación y lo pusieron frente a Mamáyev. Dorian frunció el ceño para parecer estar indignado mientras se arreglaba el caro traje gris que traía puesto.
-Es un placer tener su vista,- Dijo Mamáyev quien estaba sentado cómodamente en un sillón rojo, tranquilo como si no lo hubiera obligado ir a él.
-Qué quiere?- Le preguntó Dorian bastante calmado, fingiendo ser el glamuroso y caballeroso hombre adinerado que pretendía interpretar.
-Sólo conversar un poco,-
-Ya,- Contestó Dorian viendo que el Alfa quería meterse con él. No iba a dañar su imagen de tipo poderoso y aburrido, así que se fue.
-Ahí fuera estarán mis hombres para detenerlo,- Le dijo Mamáyev a su espalda.
Entonces Dorian se detuvo haciendo su teatro y volteó, -Qué quiere?,- También se suponía que era valiente y poderoso.
-Ya le dije, charlar,-
-Sobre qué?,-
-Su nombre por ejemplo,-
Su semilla dio los frutos, pensó Dorian, -Diga el suyo primero y lo seguiré yo,- Se preguntaba si daría su nombre real.
-Mi nombre es Derek,- Contestó el Alfa.
-El mio es John,-
Derek sonrió enigmáticamente. -Entonces, señor John, lo invito a tomar asiento,-
Esa sonrisa desconcertó un poco a Dorian... El tipo estaba demasiado atento con él como para ser por pura curiosidad, Qué pensaba ofrecerle? Decidió picarlo un poco, -Si es porque tiene sus intereses románticos puestos en mi, desista, no soy gay, -
Derek se rió, -Yo tampoco, sólo quiero ayudarlo,-
-Con qué? - Le preguntó Dorian sintiendo que todo iba de maravilla.
Derek señaló el asiento a su lado, -Sientese, por favor,-
Dorian lo hizo con los ojos fijos en él.
-He notado su aburrimiento señor - Hizo una pausa -John. Se ve aburrido, cansado, desinteresado, ha perdido la chispa de la vida. Yo puedo ayudarlo con eso,-
-Oh, Puede?- Dijo Dorian realmente interesado con lo que le propondría, aunque por fuera se mostró burlón e incrédulo.
-Puedo.- Aseguró.
-Qué puede ofrecerme que yo no pueda obtener por mis propios medios? Mujeres? Más dinero? No me haga perder mi tiempo señor Derek,- Se hizo el difícil.
-Le mostraré otro mundo,- Ofreció Derek.
-Conocí a un tipo al que le dijeron lo mismo, le metieron una bala en la frente, ahora está en el otro mundo, le cumplieron,-
Derek se rió de lo que dijo Dorian.
-Esta bien, le mostraré lo desconocido de este mundo,- Especificó Derek.
-Va a mostrarme un Alíen?- Fingió burlarse Dorian.
-Algo como eso, va a ampliar sus horizontes, se lo garantizo, Qué puede perder?,-
-Además de dinero?,- Le preguntó Dorian. Derek sonrió, -Cuánto?,-
-Dos billones,-
Dorian se sorprendió por esa suma exorbitante, pero no lo demostró, fingió pensarlo y aceptó.
Era un dinero que después con suerte se recuperaría, y efectivamente, el dinero valdría la pena.
Y así fue cómo utilizó a la rubia y la sacó de la ecuación.
Después de hacer su interpretación de hombre rico y aburrido, y pagar la entrada a un "Mundo nuevo" Derek lo llevo a conocer distintos lugares de los que obtuvo información muy valiosa.
A lo largo de dos meses enteros visitó desde hoteles de lujo en islas remotas a submarinos con la misma finalidad. Derek le mostró diferentes criaturas difíciles de encontrar, una serpiente gigante en un día, un calamar gigante en otro, le presentó mujeres que en su momento no tenía idea de si eran hombre lobo, o no, pero todas muy hermosas, realmente vio cosas que no había visto, como si estuviera en un mundo nuevo.
La riqueza se reflejaba en todo.
En ese momento visitaban una Isla muy extraña, dónde vivía una mujer extremadamente bella. Estaba sentada en una silla dorada y miraba a todos detrás de un grueso vidrio.
Se veía tan ideal y perfecta como una estatua viviente, con un cabello largo oscuro que le llegaba a los tobillos, tan irreal, como una ninfa en un cuento.
Pero estaba siendo tratada como un fenómeno de circo. Con los cristales gruesos rodeándola, encapsulada y apartada del mundo. Había un letrero que decía, "No se acerque, peligro".
Dorian sintió tanta pena por ella.
Derek se puso a su lado, -Hermosa, no?, Tiene más de ochenta años,-
-... No es humana?,-
-No, no lo es, esa criatura es muy feroz y despiadada, no se deje engañar, o, se ha enamorado acaso?,- Se burlo Derek.
En esos meses Dorian se había ganado la confianza de Derek, al cuál le agradaba el personaje frío y cruel que interpretaba.
Por su parte Dorian detestaba a Derek, se enfermaba de rabia al saber que había alguien tan malo en el mundo y nadie hacía nada para detenerlo... Hasta ese momento, y para eso tenía que seguir fingiendo ser John, -En cinco minutos? Déjeme mirarla diez minutos más y le diré, -
-Si ella le parece interesante déjeme mostrarle algo más, -
-De acuerdo,- Aceptó Dorian.
Derek lo guió, subieron a una plataforma frente a un acuario, estaban alejados varios metros pero veían todo como si fuera una pantalla, habían barias sirenas nadando. Dorian puso cara de hastío sin poder reprimirlo, no le interesaban las sirenas desde que una había intentado ahogarlo hace meses ya.
-Por su expresión me doy cuenta de que no le agradaron,-
Dorian se fijó en que unas asomaban el rostro en la superficie, sólo el rostro, no la cabeza completa y que se agrupaban para hacer esto, sus colas se rozaban entre si. -Podrían hacer un buen negocio como fenómenos de circo, pero no las encuentro atractivas ni interesantes,-
-Ni un poco? Había visto una antes?,- Le preguntó Derek.
-No, jamás, pero, no siento nada al verlas, me tocan un poco mi sentido de lo natural, cola en lugar de piernas... Pero es todo,-
-No va a preguntarme qué comen, cómo se reproducen o que hacen en el día a día? Ni siquiera cómo las capturaron? Increíble, jamás le mostré esto a alguien que no preguntara después,-
-No me interesa eso, sólo nadan, es como tener peces en casa, Qué más hacen?,- Preguntó Dorian resistiendo sus ganas de preguntar todo eso, eran las preguntas que la humanidad se hacía y él también, pero... La imagen de su personaje desinteresado no podía afectarse.
Derek sonrió he hizo una seña, una escotilla del tanque se abrió y un enorme tiburón entró en escena.
Dorian frunció el ceño, el tiburón mataría a esas sirenas, se las tragaría de un bocado, el espacio del tanque no era muy grande, no había donde esconderse. Imaginó un espectáculo muy bizarro y para nada quiso verlo, sería ver como si un tiburón se comiera a una persona, pero tuvo que quedarse ahí.
Las sirenas rodearon al tiburón y se lanzaron hacia él, en un torbellino de garras y dientes en poco tiempo lo despedazaron, sorprendiendo a Dorian, que sintió nauseas al pensar que él había estado cerca de una piraña así.
Derek notó el cambio en su semblante y se rió sonoramente, -En este mundo nada es lo que parece,-
Dorian volteó y lo miró intentando calmar su horror. Volvió a mirar la escena y notó que no había quedado nada del tiburón, ni un pequeño hueso, lo habían devorado en casi segundos.
No quería ni pensar en lo que hubiera pasado si en aquella ocasión Mikhail no lo hubiera sacado del agua, ahogarse era de por si bastante malo como para aparte servir de cena...
Como militar había visto cosas bastante impactantes, y cada vez que las veía se horrorizaba como si fuera la primera vez que las veía, tenía que ser inhumano para que esas cosas no lo afectaran.
Por ejemplo, desde que la sirena había intentado ahogarlo no había vuelto a la playa...
-Cómo es que la humanidad no sabe de ellas siendo como son?,- Preguntó Dorian sinceramente.
-Se comen a quien las ve, tal vez,-Contestó Derek, -Tiene hambre?.- Le preguntó obviamente por molestarlo.
Dorian no le hizo caso, en su lugar dijo, -Quiero verlas más de cerca,-
-Pensé que no le interesaban,-
-Quiero detallarlas, tal vez sea la última vez que vea una,-
Derek lo llevó bajo la plataforma, pasaron por encima de la barra de seguridad hasta llegar a la base del tanque. Aunque estaban más cerca la vista no era tan buena ya que por la altura sólo veían arena. Las sirenas estaban en otros lugares más al fondo, el tanque era más grande de cerca, la perspectiva y el agua lo habían engañado antes.
Dorian no veía con claridad, estuvo a punto de irse hasta que una sirena de pronto nadó frente a él, y luego otra y otra.
No sabía si podían verlo, a veces los vidrios creaban reflejos, tal vez sólo se veían a sí mismos pero podían olfatearlos.
Dorian no lo sabía a ciencia cierta, pero lo miraban con los ojos fijos, otros le mostraron los dientes incluso, como si supieran que él estaba ahí... Si lo veían.
Algunas sirenas sacaron unas extrañas crestas de detrás de su cabeza y los colores comenzaron a cambiar con cierta fluorescencia en zonas de sus pechos y colas... Las aletas al final de la cola también se expandieron y empezaron a hacer movimientos extraños. Era un raro espectáculo.
Una de pronto se lanzó contra él vidrio y comenzó a lamerlo, una sirena con cresta la apartó con un brusco empujón y se puso justo en frente de él.
Dorian veía todo esto extrañado,-Por qué hacen eso?-
-No lo sé, es la primera vez que pasa,- Derek veía todo eso también sorprendido. -Es la primera vez que alguien las ve desde aquí, tal vez eso las exaltó,-
-Nunca nadie había pedido verlas de cerca?,- Dorian se extrañó.
-Si, pero no lo está permitido, se ponen salvajes cuando alguien está tan cerca,-
-Eso es salvaje? No importa. Si está prohibido que hacemos aquí?,-
-Hice una excepción, ellas tienen muy buen olfato, si sienten nuestra presencia muy cerca se lanzan contra el cristal,-
Así que era una excepción... -Pues gracias. Vámonos ya, tengo hambre, Me llevarán la cena a mi habitación o bajo a un restaurante?- Realmente Dorian no sabía que hacer para cenar.
-Come conmigo, soy él único que come carne de un animal conocido,- Dijo comenzando a caminar.
...Qué?
De una animal conocido? qué clase de carne servían ahí entonces?, Se imaginó criaturas engordadas por tubos, mejor no saber. -Como me de cuenta que antes me daban sirena por filetes de pescado, vamos a tener un enorme problema,-
-Tranquilo, sólo era una broma,- Derek se rió.
-Pero ahora igual debo reconocer la parte del animal que me estoy comiendo o mejor que no me envíen nada,-
-Se lo diré al chef, vamos,-
Derek lo guió a un restaurante y allí cenaron, luego lo llevó a un bar y dijo que tenía que irse.
Así que sólo se quedó en ese bar bebiendo hasta tarde y luego se fue a a su habitación. Ni de coña iba a arriesgarse a que lo descubrieran, lo mejor era quedarse quieto, tal vez lo tenían vigilado.
O no.
Pero no iba a arriesgarse, tenía mucho que perder.
Al día siguiente Derek fue por él a su habitación, pero realmente se estaba sintiendo algo mal, así que se lo dijo, que no le apetecía salir ese día de la habitación.
Derek sólo asintió y se retiró.
Dorian tenía dolor de cabeza y algo de nauseas así que se acostó en la cama y se dispuso a dormir.
Mientras tanto en una sala pisos más abajo...
-Derek, quien es el hombre calvo que siempre te acompaña ahora?,- Preguntó una Omega, que estaba sentada en las piernas de un Alfa.
-Pensé que no te iban los hombres,- Le dijo el Alfa que tenía a la Omega sobre sus piernas.
-Eso era antes,-
Los Alfas estaban impresionados y empezaron a burlarse de él con vítores y risas.
El único que no se rió ahí fue Mikhail, que no se creía lo que escuchaba, Tan lejos había llego Dorian por información?. Decidió no dejar que eso lo impresionara, muchos agentes utilizaban el sexo para obtener información.
-Ya en serio Derek, de verdad el calvo es tu nuevo amante?,-
-Si, es verdad,- Aceptó Derek.
-Lo sabía!,- Celebró la Omega en las piernas del Alfa, -Si es que andas con él en todo momento, para aquí y para allá, algo había ahí, no lo dejabas ni a sol ni a sombra,-
Derek rió. -Me gusta bastante, si,-
Un Alfa se rió, -Tan bueno es?,- preguntó jocoso con rostro de "Sé que es coger".
-Más que eso,- Se burló Derek también casi en el mismo tono.
Todos rieron porque si, a Mikhail le parecieron estúpidos, como niños pubertos, siempre riendo sin razón, como todos los finales de peppa ping...
Un Omega presente le preguntó, -Y que le ves?,-
-Alguien está celoso,- Hizo notar el Omega sobre las piernas del Alfa.
-No es eso, sólo que, bueno, es calvo, no? Y hombre, no que no querías nada con los hombres?,- Dijo el Omega.
-Eso es lo que me gusta,- Le contestó Derek.
-Qué es calvo?,-Preguntó un Alfa.
-No, que es un hombre, y es como un reto,-
Mikhail encontró todo eso incongruente, decía que era como un reto, pero al mismo tiempo decía que ya era su amante y sugería que tenía sexo con él, si ya tenía lo que quería, Por qué seguía siendo reto? Empezó a sospechar de la veracidad de lo que decía, pero nadie más notó nada raro.
-Y por qué no lo trajiste contigo esta noche?,- Preguntó alguien.
-Se sentía demasiado cansado,- Se jactó el otro, insinuando algo.
A Mikhail el tipo le pareció patético, jactarse de cogerse a un humano hasta cansarlo, que payaso, como si fueran muy resistentes.
Dorian esa misma noche tuvo sueños muy extraños, soñó con la mujer hermosa que estaba encerrada.
Al día siguiente seguía sintiéndose mal, pero no tanto como antes, así que con un rostro como de cadáver y pocas ganas de comer se levantó dispuesto a seguir con su misión, que ya casi acababa.
Su misión era averiguar donde llevaban a los Omegas secuestrados, ya había dado con muchos lugares pero no sabía si eran todos, así que por eso se quedaba.
Cuando bajó por el ascensor tuvo un mareo así se sostuvo de la pared.
Recordó ese extraño sueño dónde la bella mujer de exhibición le decía que se estaba envenenando...
Cuando pasó por la urna de cristal la vio sentada en el pasto, tan irreal y hermosa. Aunque el sueño pasado fue algo realista en ese momento se quitó la sensación de realidad. En el sueño ella decía que era el momento de irse y se desvanecía, pero ahí estaba, cautiva como siempre.
Que triste, aunque ella también podía ser rescatada de ese lugar.
No creía que hubiera cometido algún delito diferente al de ser hermosa.
Ella tenía el cabello muy negro y la piel muy blanca, tan femenina y delicada.
Y el traje largo casi japones azúl oscuro que llevaba la hacía parecer una flor.
No sabía porque estaba encerrada, pero era igual a las otras criaturas, sólo estaba ahí por ser muy peculiar, tal vez.
La liberaría, lo decidió en ese momento.
Derek tocó su hombro sorprendiéndolo.
-Realmente te gustó,- Afirmó.
-Soy un hombre con buen gusto, por supuesto,- Aceptó poco emocional.
-Veo que estás mejor, Qué quieres hacer hoy? Hay más criaturas para mostrarte,-
-Sólo quiero ver las más bonitas, estoy harto de las horribles,-
-De acuerdo,- Concedió Derek.
De esa manera pasó nuevamente otro día junto a Derek, que era muy atento con él, tal vez demasiado atento para su gusto.
Lo bueno era que había dejado bastante claro que era un hombre heterosexual, y según el informe que había leído, Derek también, así que no creía que hubiera problema con eso.
Lo extraño de Derek era que aparte del primer lugar donde fueron jamás le mostró un prostíbulo.
Por qué? Acaso tenía cara de tener inapetencia sexual,?
Así le había sido más difícil saber si ahí estaban los Omegas o no, pero igual se las había arreglado para descubrir donde estaban y esta vez haría lo mismo.
Pensaba hacer eso pero Derek lo invitó a beber.
Derek eligió una mesa, lo que era muy malo ya que lo alejaba de la gente y por lo tanto de la información, pero no protestó y se sentó con él, ya encontraría la manera de saber lo que necesitaba.
En la mesa con Derek este volvió a mostrarse muy simpático, tanto que lo hacía pensar que coqueteaba con él, pero no estaba seguro.
De pronto vio un hombre de espalda que se le pareció a Mikhail, el hombre llevaba un traje azul oscuro y estaba rodeado de Omegas, no estaba seguro si eran Omegas pero por sus gestos nada masculinos suponía que lo eran, o eran hombres gays al menos.
Qué podría estar haciendo Mikhail ahí? Tal vez no era él, rogaba para que no lo fuera.
No quería encontrarse con él.
Derek notó que se había quedado mirando la espalda del tipo y le preguntó al respecto.
-Sólo me parece que no es un hombre normal, tiene muchos hombres girando al rededor de él, se ve bastante influyente a primera vista, Quién es?- Disimuló su distracción, aunque luego agregó en su mente, "Se ve homosexual" y sonrió, no era así, pero se veía como un imán para homosexuales al menos, lo que le hizo gracia.
-Así que te interesa,?- Le preguntó Derek con la mirada fría y una sonrisa.
-No realmente,- Contestó Dorian sintiéndose muy incomodo por Derek y el aire pesado y frío que exudaba, afortunadamente este recibió una llamada y tuvo que dejar la mesa un momento.
Dorian por fin se relajó y respiró, incluso bebió un trago, Derek comenzaba a ponerlo nervioso.
Sintió a alguien ponerse a su lado, era Mikhail realmente, -Largate- Lo echó.
No necesitaba mala suerte en esa misión y Mikhail la portaba.
-No jodas, Dime, Por qué estás aquí?, - Dijo con la voz baja.
- Por los Omegas secuestrados, debo averiguar si están aquí, cuando lo haga me iré,- Le dijo mirando alrededor preocupado porque lo vieran.
-Lo están, en un lugar escondido en la costa de esta isla. Hay un cambio de planes, Mamáyev va a reunirse con alguien mañana, un pez gordo, es muy importante. No sabemos como se ve, ni su nombre, pero intercepté una llamada y la voz coincidía en un 90 porciento con el hombre que buscamos. Mañana es nuestra oportunidad, hemos estado rastreándolo durante mucho tiempo sin resultados. Tu estás más cerca de Mamáyev, si puedes descubrir la identidad del hombre, hazlo. Es importante que no expongas tu identidad, no hasta que obtengas un nombre por lo menos,- Mikhail fue breve he iba a irse pero Dorian lo detuvo.
Mikhail sintió impaciencia, estaba arriesgando la fachada de los dos con sólo hablar, pero era demasiado importarte darle esa misión, así que por eso se había acercado y había intentado ser lo más breve posible para que no los descubrieran, pero él lo detenía...
Era una misión importante, si, pensó Dorian, pero... -Espera, cuando descubra su identidad, A quién se lo digo?,- Faltaban detalles.
-A mi, si lo descubres mañana antes del anochecer estaré en la discoteca del sexto piso, si no, encuentrame en mi habitación, es la 307, pero si puedes busca otra forma de decirmelo, hay cámaras y no puedo perder mi fachada, lo que me recuerda, si ves que estoy rodeado de hombres lobo no te me acerques, en mi papel odio a los humanos,- Le advirtió.
-Así que ni siquiera tuviste que fingir... Ya lárgate antes de que algo malo pase,- Le dijo Dorian fastidiado solo con su presencia, no quería que empezaran a sospechar de él.
A Mikhail lo jodía pedirle algo a él, el humano, pero no habían opciones, - Mamáyev confía en ti, y yo no puedo duplicarme. Pronto empezaran a liberar a los Omegas y a desmantelar los lugares, es posible que sospechen de ti, recuerda, no debes dejar que te descubran hasta saber de quien se trata, Entiendes? no lo Arruines,-
Dorian estaba algo fastidiado con que Mikhail estuviera ahí hablándole y arriesgando su papel, era un imprudente, lo iban a descubrir, él tenía que irse antes de que alguien notara que hablaban, tenía prisa porque se fuera, -No me lo Arruines tu, lárgate antes de que él... Oh no, muy tarde... - Dijo Dorian al ver a Derek llegar.