23 de Febrero del 2018
—Yo soy la maestra Martha Escalante, especializada en diseño de interiores, una de sus materias en este nuevo semestre, espero y todos cumplan con lo que les acabo de mencionar, pueden irse, eso es todo.
Rápidamente guardé mis cosas y las dejé en mi mesa, esperando a mis amigos para salir a las mesas de la cafeteria en lo que comenzaba la siguiente clase, todos los nuevos semestres eran iguales, introducción de los maestros nuevos y algunos viejos, y lo que resta de clase libre.
Fernando y Majo se acercaron a mi cuando terminaron y caminamos juntos para tratar de encontrar a los demás, nosotros tres estudiábamos arquitectura, mientras que Ernesto, su novia Liliana, Kevin estudiaban leyes junto con Victor, y Ricardo medicina, el campus era muy grande y habían varias facultades, así que todos estábamos en el mismo lugar.
—¡Hey chicos! ¡Por aquí!
Rápidamente caminamos hacia donde nos estaban llamando, en las mesas de afuera de la gran cafetería mis amigos se encontraban.
Desde que inició el primer día podía sentir como algunas personas me miraban, en esta escuela hay varias personas que son fans de One Direction o conocen la Banda y les gusta el pop, y cuando algunas personas dijeron que yo estaba saliendo o conocía a Harry me empezaron a ver como un animal exótico, sigue siendo extraño.
—Hola, chica londinense.
Me reí mientras abrazaba a Ricardo, besando su mejilla y sacudiendo la cabeza un poco.
—Hola, Ricardo.
Después me giré hacia la novia de Ernesto, Liliana y la abracé preguntándole como estaba, y al último Ernesto.
—Niña tonta, mira que te pierdes y apareces sin avisar. Ven aquí para darte un abrazo.
Lo abracé fuerte y me reí un poco por su comentario, ya una vez todos sentados comenzamos a hablar sobre el inicio del semestre y como se sentían. Básicamente todos estábamos conformes y como era el primer día no había nada de que quejarnos... hasta ahora. Luego de comer, cada uno se fue por su lado porque querían ir a la biblioteca a ver sus horarios de asesorías, más Ernesto y yo nos quedamos caminando juntos.
—Habla y dime que te sucede, estás muy seria.
La verdad no quería hablar sobre ello.
—¿Es Harry no?
Asentí lentamente y me decidí a hablar.
—Es solo que lo extraño, mucho, y no es suficiente hablar todos los días, necesito tenerlo frente a mi—, suspiré y me acomodé el cabello, esto era tan difícil.
—Jamás habia tenido una relación a larga distancia—tan larga—y es muy extraño.
Hemos estado un poco distantes por la zona horaria, pero ya que empecemos más las clases podré hablar más con él, tú sabes, arquitectura te mantiene toda la noche despierta.
—Lo importante es que los dos están haciendo el intento y el esfuerzo de que su relación funcione, no te preocupes.
—Eso espero.
***
29 de Mayo del 2018
"I have loved you since I was 23"
Yours truly, x. H
114 días, el equivalente a 3.748 meses... según google.
Hoy se cumplen 114 días desde que no veía a Harry, y estaba tan triste.
Hoy recibí su último mensaje antes de vernos, mañana él daría un concierto en mi país y yo iría, las dos fechas obviamente, él se quedaría hasta el domingo porque tiene que volar a Estados Unidos para terminar lo último de la gira, mientras yo luchaba por pasar mis exámenes y proyectos finales en la universidad.
Estos meses han sido exhaustivos, nunca peleamos pero yo estaba muy ocupa tanto como él y no podíamos hacer nada al respecto, mi carrera tenía mi tiempo completo, y más de una vez es estos 3 meses y pasadito, me quedé despierta con mis amigos en casa terminando maquetas para que al día siguiente nos dijeran que estaba mal y volver a hacerla. Durante esas madrugadas en los lugares que se encontraba Harry normalmente ya era de día, o estaba amaneciendo, lo que logró que nos comunicáramos más y me sacara más de mil lagrimas y sonrisas mientras trataba de concentrarme en las maquetas, Harry estuvo a mi lado apoyándome siempre, y yo a él, es lo que las parejas hacen.
Pero lamentablemente no pude ir a visitarlo porque la escuela es mi prioridad ante todo y no quería reprobar absolutamente nada.
Estando a exactamente dos semanas de clases de terminar mi semestre, quería tenerlo todo perfecto para tomarme una larga siesta con mi novio cuando fuera a verlo, no podía esperar.
Pero hasta ahora las cosas van bien, muchas llamadas, videollamadas, viendo películas a través de FaceTime, 114 mensajes sin falta a la misma hora, saliendo de mi impresora, sigo sin saber como lo hace pero estoy más que feliz de que cada día me mande sus notitas de cariño, adoraba a ese hombre.
Faltaban exactamente 24 shows para que el tour terminara, y Harry y yo estábamos organizándonos para que fuera después de que terminara mi semestre, exactamente en unos 12 días para eso, además de conseguir el permiso de mis padres, si, muy fácil.
—¿Tienes todo listo?
Mi mamá entró a mi habitación mientras revisaba lo que me iba a llevar, asegurándome y asegurándose también de que no olvidara nada.
—Si, creo que ya.
Mamá me miró con una sonrisa y me abrió los brazos para que la abrazara, besándome el cabello y acariciandolo.
—Vaya que estás impaciente, eh.
Le sonreí un poco y agaché la cabeza porque las lagrimas estaban empezando a picarme los ojos y no quería verme como una llorona.
—Eh, eh, eh, ¿qué pasa, corazón?
Me senté y limpié mi rostro, suspirando mientras me dejaba mimar por mi madre, me sentía tan pequeñita, pero agradecía a mi mamá por estar aquí.
—No es nada—, la miré y le sonreí un poco, acomodando mis brazaletes y suspirando. —Es solo que lo extraño demasiado, mamá. Es tan difícil hacer esto, tan, tan difícil, él está viajando por el mundo, súper ocupado y yo igual, y tengo mucho miedo, tengo miedo de que piense o se de cuenta que no soy buena para él o que se canse de no poder ver a su propia novia tan seguido.
—Cariño, escúchame, mírame.
Ella me hizo voltear a verla, acaricio mi rostro y besó mi mano mientras me sonreía.
—Mi niña bonita, tú eres muchísimo más que suficiente para Harry y él lo sabe, a ver, dime, ¿no se llaman?, ¿no es él quien siempre interrumpe nuestras cenas por llamarte y preguntarte cómo estás?.
—¡Mamá!
Ella se rió un poco, levantando las manos en modo de defensa.
—Sin mala intención... pero esos pequeños detalles son los que importan, mi vida. Te llama, te mensajea, buenos días esto, buenos días lo otro, buenas noches, ¡te manda mensajes lindos que se sincronizan con tu impresora para que se impriman! Hacen video llamadas y ven películas a través de ahí, incluso hace todo eso cuando él está ocupado o cuando tú también, están haciendo que funcione, no te digo que será fácil, corazón, pero vale la pena cada segundo si te está haciendo feliz, ¿okay?
Sonreí y asentí energéticamente, mi madre siempre sabía levantarme el ánimo y siempre estaba para mi.
—¿Cuando llegará Harry?
—El treinta, por eso de las 4 de la tarde, pasaremos el treinta y uno juntos y el concierto será el día uno y dos de Junio.
—Okay, bueno, ahora termina de empacar y deja de llorar, niña. Sebastián también irá, no creas que te salvas de ir sola, ¡ya!, que tienes dos horas para llegar al hotel y esperar a tu príncipe azul.
—¡Mamá! Lo bueno es que a Harry se le ocurrió pedir un cuarto para Sebastián.
—¡Por eso es mi nuero favorito!
***
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@hanniasehvia:
Blessed be the mystery of love, @harrystyles, thank you baby, x.
@ricardoruiz: que bonitaaaaaa, ¿sirvió mi chantaje por algo de la tienda Gucci de regalo? #Joke Han.
@ernestoCalvarez: todavía no tiene nuestra aprobación eh. Linda niña tonta, x.
@harrystyles: "oh woe is me, the last time that you touched me, oh, will wonders ever cease?
Blessed be the mystery of love" my love, I miss you and I'll see you soon, x. H
@majo: cambié mi usuario :p, estás preciosa, cuídate mucho bebé.
—@hanniasehvia: @majo, pronto regresaré, tqmmm💓.
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***
—¿Qué quieres hacer ahora?
La voz de mi hermano me sacó de mi burbuja, en la que solo admiraba las lindas rosas rosas que Harry me había enviado a la habitación... y él ni siquiera se encontraba aquí en el país.
—Nada, terminaré unos pendientes de mi tarea, necesito tenerlos terminados para pasar la mayor parte de mi tiempo con Harry, quiero aprovecharlo al máximo.
—Okay, si me necesitas me llamas, iré a dar un paseo, ¿okay? Cuídate, te llamaré dentro de una hora o más.
—¡Bye!
Más tarde ya estaba por terminar y mi reloj marcaba las cuatro de la tarde, lo cual significaba que Harry ya estaría llegando al hotel.
Solo tenía que esperar la llamada.
Estaba tan nerviosa, porque después de más de tres meses nos íbamos a volver a ver y estaba segura que en cuanto lo viera me iba a romper en llanto.
Para mi todo esto era una ruleta de emociones, yo jamás había tenido una relación como con la que tengo con Harry, que es— a pesar de la distancia —la mejor que he tenido, y no cambiaría a nadie por él, me hace feliz, me hace sentir protegida y me transmite el mensaje de ser una buena persona.
Extrañaba sus lindos ojos verdes, hoyuelos y dientes de conejo, como él se refiere a ellos a veces, extraño su voz, sus brazos rodeándome y abrazándome, sus manos y caricias, y más que nada, sus besos.
Mi teléfono comenzó a vibrar y rápidamente lo tomé, el nombre de Harry aparecía en la pantalla, anunciando varios mensajes, no los abrí ya que estaba tan nerviosa, así que solo decidí esperar a que subiera a la habitación mientras terminaba de acomodar el lugar y hacerme ver presentable.
—Um, bueno, esperaba ver a mi novia en la entrada, pero creo que tengo una muy buena vista ahora.
Rápidamente me giré hacia la puerta, quedándome quieta, viéndolo sin poder creer que estuviera aquí... frente a mi y tan perfecto como nunca antes.
—Harry...
¿Había crecido? Su rostro no tenía rastro de ninguna barba, piel blanca relucía y hacía contraste con su ropa negra, viéndose tan cómodo en sí mismo. Su aroma estaba por todas partes y su presencia era tan abrumadora, incluso aún en la entrada con la metas en mano.
Se veía perfecto, era perfecto.
—Darling...
Solo con eso bastó para que mi corazón saltara y caminara muy rápido a él, sin darme cuenta, las lágrimas ya habían salido y a estaba envuelta entre sus brazos, cálidos y amorosos, fuertes, apretando mi cintura mientras mis piernas se cruzaban por su espalda, apretando sus caderas.
—Oh, Harry, Harry... H-harry... y-yo—, era un desastre, éramos un desastre, mis lágrimas y las suyas empapaban nuestros rostros, mis manos tocando cada parte de él que podía, rostro, sus lúcidos rizos color chocolate, tan suaves y brillantes, su cuello, sus ojos, mejillas, espalda, labios, todo.
—Hola, amor... mírame, corazón, necesito verte de cerca.
Más no podía, mis manos tenían a Harry agarrado fuertemente, arrugando su gabardina (que sigo sin saber porque la está usando en pleno Mayo, casi Junio), mientras me acurrucaba en la unión de su cuello y hombro, llorando sin poder controlarme, quería verlo, pero tenía miedo de que si abría los ojos todo fuera mentira.
Luego sentí como nos movíamos y supe que era la cama cuando sentí el colchón en mis rodillas, Harry moviéndome de manera que estuviera cómoda.
Sus manos tomaron mi rostro y yo seguía sin abrir mis ojos, mientras él secaba mi rostro, ahora había arruinado mi maquillaje.
—Abre tus ojos, bebé.
Ahora si lo hice, tratando de hacerlo lento para no sufrir otro ataque de histeria.
Lo primero que vi fueron sus ojos verdes.
Largas pestañas un poco rubias y cafés enmarcaban el verde brillante de sus ojos, chispeando de alegría, más un poco hinchados y rojos por las lágrimas, su cabello perfecto ahora un poco desordenado, y su sonrisa, tan grande con los hoyuelos más lindos de la existencia.
Mis manos subieron a su rostro, delineando su rostro, y sus labios, ojos verdes observándome mientras los míos volvían a picar, luego tomé su rostro entre mis manos y lo acerqué más a mi, una lágrima de alegría derramándose.
—¿En realidad eres tú? Estás aquí.
Él asintió, más cuando iba a responder, no terminó la frase, ya que rápidamente lo callé con un beso, tratando de sentirlo más cerca a mi.
Cuando sus labios tocan los míos siempre siento este paso de adrenalina, esta buena energía que hace que me sienta feliz y viva al mismo tiempo, siento un zoológico en el estomago, y una euforia inalcanzable. Harry me hacía sentir viva, y ahora lo estaba probando otra vez, me estaba reviviendo después de estar lejos de él durante tanto tiempo.
Sus manos en mi cabello, cintura, muslos, mejillas, haciéndome perder la noción y la cordura, y yo estaba más que encantada, de hecho, me estaba fascinando, no había cosa que deseara más, quería sentir sus labios aplastando los míos, sus dientes tirando de mi labio inferior y su lengua rozando la mía, primero desesperadamente y luego... luego con delicadeza.
Nos separamos para tomar aire, más él habló, pegando su frente con la mía y suspirando repetidamente.
—Dios, como te he extrañado... n-necesitaba tocarte, besarte, abrazarte... tenerte cerca de mi—, sus labios bajaron por mi cuello, dejando pequeños besitos dulces y luego volvieron a mi boca, dejando pequeños ahí.
—Harry, oh Por Dios, estás aquí... estás aquí, estás aquí.
—Uhmh, Si. Aquí estoy, corazón, ¿me extrañaste?
Me hice para atrás para verlo mejor, tocarlo mejor y besarlo mejor. Así que no le contesté y lo besé de nuevo.
Ahora todo era más dulce, acariciandonos dulcemente mientras él me recostaba en la cama debajo de él.
—Más que nada en el mundo, te extrañé tanto, Harry, en serio no te imaginas.
Una hora después, estábamos él y yo, en una habitación de hotel, sus maletas tiradas en la entrada y nosotros abrazados en la cama, yo arriba de él todavía, con mis manos en su pecho y mi barbilla recargándose en ellas, observándolo ser hermoso.
—Harry...
—¿Si, amor?
Suspiré y delineé su pómulo con mi dedo índice, maldito hermoso.
—¿Alguna vez te haz visto en el espejo... y, no sé... haber deseado que fueras feo? Digo, debe ser cansado ser tan guapo.
Si risa retumbó por la habitación, haciéndolo ver adorable y los latidos de su corazón palpables bajo la palma de mi mano, latiendo rápidamente.
—Um, no-no sé como responder a eso, amor, pero supongo que no.
Sus ojos parpadeaban más de lo normal, señal de que estaba cansado o con sueño, y no quería quitarle descanso.
—Duerme, amor, lo necesitas.
—Oh no, no, estoy bien, en serio, quiero pasar tiempo contigo.
—Sh, lo harás, no me iré a ningún lado, aquí estaré cuando despiertes, ¿okay?
Él me besó una ves más, girándonos para que él quedara recostado con su cabeza en mis pechos, no sin antes preguntar su típico "¿esto está bien?"
Harry quedó dormido en minutos, y yo con él entre mis brazos, viéndolo tan vulnerable mientras dormía me hacía sentir feliz, y muy viva.
—Descansa, mí amor.
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He terminadooo, mañana subo el otro porque estoy mega enferma y tengo que descansar, los amo las amo mucho❤️🙇🏻♀️⭐️ x, A.
Si encuentran errores díganme, es que es muy tarde y tengo mucho sueño 🤣🥺❤️🥰🌈