Imagina que amas poner celoso a Park Jimin, tu novio era adorable hasta que sacaba su lado sobreprotector al ver como un chico trataba de ligar contigo. Él sabía a la perfección que nunca le engañarías, confiaba en ti ciegamente, pero no se fiaba en que cualquier capullo se te acercaría para obligarte a hacer algo que tú no quisieras. Pero tampoco lo ponías celoso ligando o coqueteando con otros chicos si no, más bien, diciendo que algún actor de alguna serie o peli que veíais juntos te parecía bastante atractivo. Luego, tras besarlo, le decías que el hombre más sexy en la Tierra para ti lo era él, alegrándolo y sacando a la bestia interior suya para acabar teniendo una gran noche de pasión juntos.
-Disculpa- Dijiste incómoda tartando de alejarte de un chico que llevaba toda la mañana contigo. Te estabas comenzando a asustar pero tampoco querías armar un lío ya que tu novio estaba en una sesión de fotos para la marca que patrocinaban, Puma. - ¡Te he dicho que te alejes!
-Oh, vamos preciosa, ¿vas a seguir haciéndote la dura conmigo?
-Aléjate de ella- Oíste la enfadada voz de tu novio detrás tuya y, a los segundos, unos cálidos brazos te separaron de aquel chico para dejarte con los demás, quienes también deseaban matar al chico que te molestaba. - ¿O acaso estás sordo?
-Lárgate, cara bonita- Escupió el otro con asco, a lo que te alejaste de todos y, para sorpresa de tus amigos, le pegaste tal puñetazo a aquel gilipollas que lo tiraste al suelo. - ¿¡Estás loca?!
-Puedo pasarte que me trates como te salga de los huevis pero a mi novio ni soplarle. Vuelve a acercarte a él y despídete de la poca cosa que te hace hombre, ¿entiendes? -El chico salió corriendo ante tu voz amenazante.
Su reacción: