"El lado oscuro de mi corazón es la imborrable tristeza de mi pasado; no pasa nada si nadie lo sabe."-Anónimo-
No quería pero tenia que admitir que Alex tenia razón, quizás lo que me faltaba era algo de aire y entretener un poco la mente, así que como mi novio es sin duda el mejor de todos en este mundo, el fin de semana me llevo lejos de la ciudad, a un lugar donde lo único que podías oler era aire libre y hacia tanto frío que si no tenias puesta una chaqueta capaz y te podía dar una hipotermia, y si, era la montaña.
Alex decidió que pasaríamos un fin de semana en la casa de la familia que quedaba justo en una colina en la cual la neblina y la nieve prácticamente gobernaban. El viaje en auto duraba aproximadamente de 10 a 11 horas y en avión unos 30 minutos como máximo pero obviamente este último era demasiado caro y no quería hacer que Alex gastara su dinero en algo como eso cuando obviamente tenía un auto en muy buen estado para usar...
Lo cierto es que después de 10 horas con 19 minutos de viaje que parecían interminables, cuando llegamos el abuelo de Alex nos recibió como siempre, tan dulce, la abuela si era un poco mas estricta que el abuelo así que no nos dejo entrar hasta verificar como veníamos vestidos, supongo que es normal de una ex diseñadora de ropa.
A Alex lo inspecciono de pies a cabeza y como este siempre suele vestirse bien y a la moda, obvio lo dejo pasar pero no se quiso mover de mi lado, vaya no pensé que se tomaría tan en serio su promesa...
- puedes entrar yo te seguiré en un momento- le dije mientras tocaba su hombro suavemente
- pero...- protesto
- estoy bien- fue lo único que tuve que decir para que Alex callara todas los protestas que estaban a punto de salir para finalmente rendirse y entrar a la casa, y luego de unos cuantos segundos en silencio hable-abuela Katherine no entiendo cual es el problema con mi ropa- me dirigí tratando de decirlo normal pero a la vez formal a la abuela, ella me miro por encima de sus lentes sin marco para luego cruzarse de brazos y decir:
- querido tienes que entender que la imagen lo es todo, y seria un desperdicio si un cuerpo y cara tan bonitos como el tuyo se ocultaran detrás unas horriblemente gigantes prendas de ropa que deben ser como 10 tallas mas grandes que tu
Bueno, luego de que me reprochara la abuela me pidió que me fuera a cambiar por algo que si fuera de mi talla, no lo entiendo, es muy cómodo la ropa que es más grande que tu pero si quiero cenar junto con ellos tengo que estar de acuerdo a sus condiciones...
¿Sabían que la primera vez que vine a la casa de los abuelos de Alex ninguno era capaz de dirigirme la mirada? Era muy incomodo jajaja, recuerdo que la única que me hablaba de la familia era Camile (la hermana mayor de Alex) y de vez en cuando la madre de Alex, los demás miembros de esta solo me miraban, algunos con desprecio y otros con curiosidad, a la final termine adaptándome a ellos, me di cuenta que por parte del papa de Alex la mayoría me tenia cierto odio mientras que por parte de mama casi todos me adoraron cuando llegue a sus vidas, eran todos muy calidos, cariñosos y se podría decir que divertidos, en cada fiesta familiar al que éramos invitados siempre pasaba algo. Una vez mientras cantábamos cumpleaños un primo de Alex lo baño a este prácticamente todo de pintura, después el mismo se pinto todo y comenzó a abrazar a todos los invitados jajajajaja mas nunca fue invitado otra vez a una fiesta de cumpleaños... han pasado muchas cosas en esa hermosa familia; En cuanto a la parte de papa... bueno ellos respiran y parpadean, no son para nada amistosos, son mas fríos y calculadores, también son muy estrictos, hemos ido unas cuantas veces a cenas familiares pero no es algo que quiera contar, ellos sobrepasan el limite que puedo soportar y me hacen sacar rápido de mis casillas, les gusta mucho humillar, no solo a Alex y a mi sino a todos, es muy incomodo cenar sin tener hambre por culpa de que un extraño te juzgue sin conocerte...
Pero volviendo a la realidad, después de cambiarme de ropa baje a ayudar a la abuela a ordenar un poco la casa, obvio que no me dejo, no me deja hacer nada
- Ethan!- me llama Camile- pero que sorpresa que también estés aquí!- sonríe calidamente y se acerca a mi a darme un abrazo el cual obviamente correspondo
- Tanto tiempo desde la ultima vez que nos vimos Camile- sonrío, ella es realmente muy agradable
- No puedo creer que no hayas llamado desde hace dos semanas- me reprocha y hace un puchero, no puedo creer que tenga 21 años
- Es que mi teléfono se daño- miento, es solo que se me había olvidado, por dios que esperaban- y ¿porque no intentaste comunicarte tu conmigo?
- M-mi teléfono también esta dañado- aparta la mirada- bueno lo que sea- me toma de una mano- tengo tanto que contarte y me imagino que tu igual
- Si!- digo y con esto ambos salimos a sentarnos a la entrada de casa
No se los había dicho pero Camile es como una amiga que nunca tuve de niño, es como una hermana mayor para mí también, es agradable, es graciosa y se preocupa por todos.
- ¿fumas?- digo al ver como saca de su bolsillo de la chaqueta una caja de cigarros y un encendedor
- Si...- responde encendiendo el cigarro y dándole una calada
- Eso es nuevo- comento y comienzo a toser, no soporto el olor ya que me hace recordar malos momentos- ¿sabes que? Voy a ir a preparar un poco de café para ambos y luego me cuentas el porque realmente comenzaste a fumar, porque no creo que haya sido por voluntad propia
- Okey- responde sacándose el cigarro de la boca y votando el humo de esta
Me dirijo a la cocina y le pregunto a la abuela en donde esta el café, me dice que no hay, pero que si tienen chocolate en la nevera y que si quiero puedo calentar un poco, así que eso hago. Cuando este finalmente esta listo sirvo en dos tazas diferentes pero del mismo tamaño una gran cantidad de aquella deliciosa bebida chocolatada y salgo de nuevo a la entrada de la casa
- volví- le aviso a Camile
- hola- se ríe
- y bien ¿ya vas a contarme?- le doy un sorbo a la bebida, delicioso...
- bien... hace un tiempo salí con un chico, un chico rudo que tenia tatuajes, una moto cool, piercings y fumaba
- vaya- le interrumpo y mira- perdón, continua
- la cosa es que ese chico a pesar de todo lo rudo que aparentaba ser por fuera, el realmente era dulce y gentil, gracioso y amoroso, era justo mi tipo... se lo presente a mama y a papa pero ellos no lo aceptaron, dijeron que el no era compatible conmigo
- Camile...- la abrace, ella parecía que estaba a punto de llorar
- Las cosas luego solo fueron de mal a peor, ese chico ya no me visitaba, ya no me llamaba ni tampoco me escribía, me sentía sola y abandonada así que decidí salir con mis amigas y contarles todo a ver si ellas me podían dar algún consejo útil pero... ni siquiera me prestaron atención, ellas estaban tan ocupadas con lo suyo que ni siquiera notaron mi tristeza. No es justo que yo siempre este para todos pero cuando yo necesito a alguien nunca nadie este para mi
- Tienes razón, no es justo...pero tampoco es cierto- ella voltio a verme con sus ojos cristalizados, el cigarro que fumaba se había apagado con la fría brisa de aquella alta montaña- siempre puedes contar conmigo- le doy una pequeña sonrisa
- Ethan...- lagrimas comienzan a bajar por sus rosadas mejillas- lo siento- me abraza y llora- l-lo si-e-ento n-no e si-d-do una bu-buena herma-na- dice entrecortadamente, su respiración es muy agita igual que su pulso
- Esta bien, claro que lo has sido- la consuelo- has sido muy buena hermana hasta ahora
- P-pero...
- Nada de peros, eres la mejor Camile, no importa ese estupido chico, al parecer el no sabe valorar aquello que tiene en frente y prefiere ir en busca de amor por no darse cuenta de que ya lo había conseguido contigo
Duramos largos segundos en silencio, fue como si el tiempo se hubiera detenido. Y al transcurrir unos minutos Camile dejo de llorar y se levanto de golpe
- Ethan... muchas gracias
- E-eh ¿por que?
- Por estar aquí conmigo y escucharme- me sonríe- será mejor que entremos esta haciendo mas frío y parece que esta a punto de nevar
- Bien- también me levanto y entro junto a Camile, ambos nos sentamos en el sofá de la sala y vemos una película de terror, no soy muy fan de aquellas cintas del genero que le gusta hacer que las mentes de las personas le jueguen malas pasadas pero esas son las únicas películas que trae Camile siempre
- Oye Ethan...- dice ella sin dejar de mirar la tele- muchas gracias en verdad...-me sonríe
- No te preocupes, y sabes que siempre puedes contar conmigo...
- Oye una cosa mas
- ¿Si?
- ¿Dónde esta Alex?
Me quede en blanco, no sabia donde estaba, a lo mejor estaba en la habitación durmiendo, o en el baño tomando una ducha o tal vez salio a la tienda, no quise darle mucha importancia, no es como si mi madre nos hubiera seguido hasta aquí ¿o si?
- no lo se...
- mmm...- come palomitas- entiendo
- ¿puedes ponerle pausa? Necesito ir al baño
- Esta bien
Me levanto de aquel sillón donde me encontraba sentado al estilo indio, y me tropiezo contra la pequeña mesa que se encontraba frente a mi pero que no vi porque las luces estaban apagadas, Camile se ríe. Parece que los abuelos se acostaron a dormir, así que veo la hora en aquel antiguo reloj que parece del siglo 19, y efectivamente eran las 4 de la tarde, ellos deben estar durmiendo la siesta o tal vez están viendo la televisión en su cuarto, pero no se, así que da igual...
Subo las escaleras y camino por aquel corredor con las paredes llenas de fotos familiares, es algo aterrador como aquellos retratos te observan y pareciera que te siguen con la mirada, creo que no debería seguir viendo películas de terror con Camile.
Al llegar al final de aquel corredor, abrí aquella puerta de madera con unos finos tallados para entrar a la habitación donde Alex y yo nos estábamos hospedando, me dirijo a la cama donde estaba mi mochila y rebusco entre las cosas mi teléfono, al encontrarlo este comienza a vibrar entre mis manos dando la señal de que un numero desconocido me esta llamando, contesto la llamada, con algo de miedo
- ¿hola?
- ...- no se escucha nada mas que una respiración
- ¿Hola?- nada otra vez- ¿quien es?
- ...-
Cuelgo, eso si que es escalofriante, tal vez fue una llamada broma, luego otra vez mi teléfono vuelve a vibrar pero en la pantalla aparece que es... ¿Alex?
- ¿hola?
- ...- otra vez el sonido de respiración
- Eres tu Alex? Esto no es gracioso
- ¿E-Ethan?- dicen del otro lado, su voz se escucha rara
- ¿Que sucede? ¿Donde estas?
- N-no, no lo se- se escuchan susurros y otros sonidos que no pude identificar desde atrás- esta oscuro... será que ¿puedes venir a buscarme?
- Voy para allá- cuelgo y detrás de mi se escuchan igual susurros como en el teléfono, la luz de la habitación esta apagada y las cortinas están cerradas, busco una chaqueta y bajo las escaleras casi corriendo, paso por detrás del sofá y veo que Camile no esta sola, esta sentada conversando con... ¿Alex?