Carlos.
Me encontraba en la cajuela con Dizzy, venia jugando con ella ya que no quería que escuchara todo lo que estaban diciendo, lo que buscaba era distraerla. Explicarle todo esto después a Dizzy será difícil y mas para Evie ya que se tiene que mostrar fuerte.
—¿Que sucede?— Se quejo Mal.
—Chicos, encontramos una tienda y creemos Ben y yo que esta abierta— dijo Jay.
—Entonces que esperamos— dijo Evie apunto de abrir la puerta del carro.
—Primero nosotros, los hombres. Entraremos e inspeccionaremos si el lugar es seguro para ustedes.
Ben y Jay y yo bajamos del coche y nos dirigimos al mini super, abrimos la puerta y si, esta se encontraba abierta. Se notaba que ya habían pasado mucha mas gente a este lugar antes de nosotros. La tienda se encontraba casi vacía.
—-Esta seguro chicas—se acerco Ben. El ayudo a las chicas a bajar y cerro el carro.
Al principio de la tienda se encontraban muchas cosas tirada y abiertas, y uno que otro caminante muerto. Se veía que alguien ya había entrado y saqueado todo.
—Vamos mas al fondo, a ver si logramos agarrar algo que nos sirva— propuso Jane y todos asentimos.
Al caminar por uno de los tres pasillos que tenia la tienda, en una de las esquinas, escuchamos un ruido, como si se hubiera caído un estante.
—Chicos, atrás de mi— musito Jay tomando el tubo que antes habíamos agarrado y camino hacia esa esquina, al final del pasillo se detuvo y nos dijo que había alguien en el pasillo de junto y que guardáramos silencio. El camino unos pasos mas hasta que escuchamos dos gritos, uno proveniente de Jay y otro de una ¿Mujer?
Ella sostenía de su mano un cuchillo. Jay y ella se miraron y luego bajaron las armas.
—¿Quien eres?— retomo la compostura Jay después de haber soltado un chillido ensordecedor.
—Acaso te interesa— respondió bajando el arma.
—¿Que haces aquí?— dijoBen uniéndose a la platica.
—Acaso no es obvio, busco comida como ustedes— respondió mirando al chico de cabello sedoso.
—¿Estas sola?— cuestiono Mal apoyando su brazo en el hombro de Ben.
—Si y si piensan que les voy a dar lo ultimo que queda de la tienda están muy equivocados, ahora váyanse antes de que sus gritos atraigan aun caminante— dijo viendo a Jay para luego guardar su cuchillo.
—Este no es tu lugar— dijo Jay acercándose a ella.
—Ni tampoco de ustedes, así que si me disculpan... — dijo para luego caminar enfrente de nosotros— me iré a otro lugar antes de que me lleven a mi muerte.
—Para la próxima, asegúrate en cerrar la puerta— replico el chico de cabello largo molesto.
—Espera, porque no te unes a nosotros... — agrego Evie tratando de llamar su atención.
—Estas loca Abby— masculló Jay.
—Es Evie— corrigió con una sonrisa. .
—únete a nosotros, tenemos una casa.— dijo Mal tratando de que lo ultimo fuera lo que la hiciera acceder. Sus ojos brillaron, ella estaba apunto de hablar cuando la interrumpí.
—Aparte, te he visto antes...— Todos asintieron —Tu eres la única mujer que esta en el equipo de esgrima, ¿No?
—LONNIE— Exclamo eufórica Jane al adivinar su nombre.
—Si soy ella, enserio muchas gracias pero no todos están de acuerdo con eso— miro a Jay— Por un buen rato he estado viviendo sola así que no me molesta... — salió por el pasillo.
—Jay, no la podemos dejarla sola— susurro Ben golpeado el pecho de su amigo de cabello largo.
En ese momento el ruido de un cristal roto se escucho.
Corrimos donde venia el sonido y era de la entrada, unos 5 caminantes rompieron la puerta que era de vidrio, varios pedazos estaban en el piso.
—¡Chicas! Agarren todo lo que sea necesario y corran al carro, nosotros nos encargamos— grito Ben refiriéndose a los chicos. En ese momento vemos como Lonnie estaba tratando de clavarle el cuchillo en la cabeza a uno.
—¡Que esperan chicos!— mascullo desesperada matando a un caminante para luego hacer una mueca de asco.
—Carlos... — Evie me lanzo un tubo de acero. Lo tome y no pude evitar pensar que esto lo había visto en muchas películas y el estar viviendo en una, era una locura. Cuando un caminante se me interpuso no sabia que hacer, en donde pegarle ¿Qué se supone que debo hacer? Mire por mi derecha y vi como Jay -con un tubo también- le pego a un caminante en la cabeza, haciendo esta se desprendiera de su cuerpo.
"Es tu momento de demostrarles a las chicas de lo que eres capaz"- Pensé y comencé a golpear al sujeto, era algo fácil ya que los caminantes no eran fuertes, lo complicado era que mientras matabas a uno seguían llegando mas y mas y mas.
De reojo vi que las chicas ya habían terminado de saquear toda la tienda así que matamos a todos los cuatro caminantes que restaban y abrimos rápido el carro para huir, adentro de la tienda se encontraban otros dos caminantes que esos los estaba terminado de matar Jay y Lonnie.
Lonnie.
—Jay— Grite para llamar su atención —Abajo— en ese momento Jay hizo lo que le ordene y lance el cuchillo que se enterró justo en la cabeza de uno de los sujetos que se encontraba encima de él.
—Gracias—Se sorprendió ante mi acción y se levanto del suelo.
—¡Jay!— Escuchamos el grito de Carlos, diciendo que se aproximaban mas caminantes.
Jay termino de matar al ultimo. Estábamos apunto de salir del lugar cuando al dar el paso sentí un fuerte dolor en mi pierna, me caí al suelo y solté un grito.
—¿Que sucede?— exclamó Jay apuntó de salir del lugar.
—Nada, nada ve con tus amigos, yo estoy bien aquí— Mentí tomando mi pierna.
—¡Como crees! déjame ayudarte— Dijo y se acerco en donde estaba.
—No, no quiero— Bufe y aleje sus manos de donde se encontraba mi pierna.
La verdad es que en ese momento la que hablaba no era yo, era mi orgullo. Mi pierna me dolía bastante y siendo sincera estando ahí no iba a sobrevivir.
—Perdón, ¿si? Perdón por lo que dije, pero en este nuevo mundo es difícil confiar en las personas— se apeno —Déjame ayudar, tu pierna y tu antebrazo están sangrando.
Volteo a ver mi pierna y mi pantalón estaba manchado por un circulo de sangre, al igual que mi brazo estaba sangrando. A decir verdad esa fue una disculpa sincera...
—Tienes pedazos de vidrio en tu pierna y en tu brazo, vamos te ayudo— insistió extendiéndome la mano.
—Jay..es mejor que se apuren... —escuche el grito de Ben avisándonos que no quedaba tiempo.
—No me dejas ninguna opción— dijo y se acerco a mi, con una de sus manos tomo mis piernas y con la otra mi espalda, tomo mi mochila y salimos de la tienda. Ben abrió rápido la puerta de adelante y Jay me sentó.
Aunque haya hecho eso no le quita lo patán que fue conmigo.
—No te muevas, llegando a la casa tratare de quitar los vidrios— me dijo Jay antes de cerrar la puerta.
Es un patán arrepentido.
—Corre Jay, no nos queda mucho tiempo— presionó Evie.
Mal.
Con un poco de comida nos dirigimos a la casa de Evie que quedaba a una cuadra. Una vez ya ahí, Ben y Carlos se bajaron para verificar que no hubiera ningún caminante.
—Creo que se encuentra en excelentes condi...— no termino de decir Carlos cuando 3 caminantes salieron de la casa. Carlos y Ben se subieron al coche y Jay encendió el coche. Observamos como mas y mas caminantes salían de la casa.
—Mierda... se me olvido cerrar, soy una idiota.
—No es así Evie, no digas eso— Jane la abrazó.
—Otra opción— dijo Jay arrancando el carro.
—Esperen, se aproxima alguien— dijo Dizzy señalando a la ventana donde se encontraba Lonnie, en ese momento Jay detuvo el carro— no habíamos avanzado mucho, solo unos 2 metros de la casa—Es un chico— Termino de decir señalando al sujeto.
—Es Doug-! —Susurro Ben— Es mi compañero en laboratorio, hay que ayudarlo.
Doug venia corriendo y nos estaba gritando, detrás de el habían dos caminantes que lo venían persiguiendo.
—Vamos, ¡déjenlo entrar! Dijo Jay, todos nos sorprendimos al escuchar eso — ¿Que esperan?— insistió Jay, Carlos abrió la puerta y metió al chico de lentes donde también se encontraba Ben. En la cajuela.
—Chicos muchas gracias, se que no nos conocemos del todo pero les agradezco— jadeo y terminó en decir, Ben le dio una palmada en su espalda. El chico se encontraba muy agitado, no podía concretar bien las palabras, estaba pálido del susto.
—Ahg! — Gimió de dolor Lonnie. Todos fijamos nuestras miradas en ella. Estaba muy mal, intentaba ser fuerte pero su mirada pedía ayuda, todo el camino de la tienda a la casa de Evie se la paso callada, sin decir nada. Solo miraba por la ventana y sollozaba.
—¿Como sigues Lon? —Dijo Jane.
—Me esta doliendo mucho, cada vez siento que el vidrio esta llegando a la vena— Trato de decirnos sin que sonara entrecortado.
—Hay que buscar una casa rápido— protesto Ben.
—¿Una casa? No tienen a donde ir— pregunto Doug limpiando sus lentes.
—No amigo, nuestra única casa se acaba de ir a la basura—dije decepcionada apretando mis puños del coraje.
—Mi casa esta a unos 10 minutos de aquí. Podemos quedarnos ahí, el único problema es que no esta muy grande, solo vivimos ahí mi papa y yo, pero el no se si vuelva— lo ultimo lo susurro.
—No importa, es creo nuestra única opcion—dijo el mejor amigo de mi mejor amiga...
—Entonces Dun, guíame—dijo Jay.
—Es Doug— corrigio.
—Como sea—Rodo sus ojos.
Cuando Jay arranco el carro y empezó a conducir, comencé a pensar en todo lo que había estado pasando, un silencio enorme invadió el carro permitiéndonos escuchar los gritos de personas infectadas pidiendo ayuda. Todos nos mirábamos aterrorizados ante esas escenas, no podíamos hacer nada por ellas. Ver como sufrían esas personas era horrible.
Mi corazón se detuvo, en ese momento mis ojos se inundaron de lagrimas, mire por la ventana y todo lo que solía llamar hogar, estaba destruido. Tenemos miedo de lo que pueda suceder, temeroso de lo que vaya a pasar y estamos indefensos a cualquier ataque, solo somos extraños, unidos por sobrevivir ya que Nada será Normal— Pensaba mientras abrazaba a Dizzy, que se encontraba sentada en mis piernas.
—¡Llegamos! —exclamo Doug señalando la casa.
La puerta se encontraba cerrada y no había rastro de ningún caminante.
La casa es linda, de color naranja y de dos pisos con un pequeño patio. Se veía un poco apretada para las nueve personas que íbamos a vivir ahí.
Bajo Ben, Carlos y Doug para inspeccionar la casa.
—¿Como sigues Lonnie? —volvió a preguntar Jane.
Lonnie se encontraba haciendo muecas de dolor, se notaba que los vidrios le venían lastimando su pierna y su brazo. Ella solo miro a Jane levantando una ceja, ya que la pregunta de mi amiga ojiazul era algo estúpida.
—¿Porque no querías unirte a nosotros?— cambio el tema Evie alzando una ceja.
—He vivido muchas cosas...Sufrí el rechazo de muchas personas y pues cuando su amigo... —dijo volteando a ver a Jay que se encontraba a un lado de ella— Dijo que no era bienvenida volví a sentir eso, el rechazo y el desprecio de personas. Pero agradezco su ayuda, enserio— volteo a ver a Jay y este no podía verla a los ojos.
—No hay de que agradecer, para eso estamos— dije sonriendo, ella me devolvió la sonrisa.
—Chicas y Jay, todo se encuentra en perfectas condiciones— intervino Ben acercándose y todos sonreímos al escuchar eso.
Todos bajamos nuestro poco equipaje, los chicos con una manta cubrieron el coche para evitar problemas. En el primer piso se había una la sala y ahí mismo la cocina y el comedor. En el piso de arriba solo había 3 cuartos, dos de ellos tenían una cama y el otro era el baño. Era chiquita para las 9 personas, pero no nos quejábamos.
Evie que venia ayudando a Lonnie, la dejo en el sillón y junto con Ben y Jay la ayudaron a subir, ya que ahí se encontraba el botiquín y el baño.
Me dirigí a donde estaba Dizzy, ella estaba viendo por la ventana con lagrimas en sus ojos. Me acerque a ella.
Ella me abrazo, sentí como ella sollozaba— Tranquila bonita, vas a ver que todo esto va a pasar y seguiremos con nuestra vida normal— dije poniéndome a la misma altura que ella.
–¿Me lo prometes? —Me volteo a ver, no podía ni abrir los ojos de tanto que había estado llorando.
NO era de mentir, pero la mejor opción en definitiva no era ser sincera. Sabia que luego me lo iba agradecer mi mejor amiga.
—Te lo prometo— Le dije y le bese su frente.
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¿Les esta gustando?
Wow, neta aun no puedo creer que tengo que esperar hasta Agosto para Descendientes 3:(
No lograre aguantar...
Nos leemos luego...