Die trying + jjk + kth + myg...

By xngl25

559K 63.3K 40.2K

Si veías a Lee Sungkyung por primera vez podías ver que era una chica tímida y fría, sin embargo, el concept... More

abstract
prologue
playlist
one
two
three
four
five
six
seven
eight
nine
ten
eleven
twelve
thirteen
fourteen
fifteen
sixteen
seventeen
eighteen
nineteen
twenty
twenty-one
twenty-two
-
Playlist
book trailer + personajes
abstract
prologue
uno
dos
tres
cuatro
cinco
seis
siete
ocho
nueve
diez
once
doce
trece
catorce
quince
dieciséis
diecisiete
dieciocho
diecinueve
veinte
veintiuno
veintidós
veintitrés
veinticuatro
veinticinco
veintiséis
nota
veintisiete
veintinueve
treinta
treinta y uno
treinta y dos
treinta y tres
treinta tres.dos
treinta y cuatro
treinta y cinco
treinta y seis
treinta y siete
treinta y ocho
treinta y nueve
cuarenta
cuarenta y uno
cuarenta y dos
cuarenta y tres
cuarenta y cuatro
cuarenta y cinco
epílogo
Agradecimientos + algo más
Explicación + Q&A

veintiocho

5.9K 719 563
By xngl25

Su mano pálida con dos anillos en ella acarició la mía, mientras ahora sus lágrimas parecían secarse y mirarme con dolor. Le había dolido lo que había dicho, pero era lo mejor. Yoongi en ese momento me podía empezar a odiar por romperle el corazón, pero ¿A quien debería yo odiar por romper el mío? ¿A él?  ¿A quién, maldita sea? ¿A Joohee?

Nadie mandaba al corazón, ni siquiera nosotros mismos. Yoongi se había acercado a ella apesar que su razón le gritaba miles no. Su corazón había ganado a su razón, y cuando eso sucede, significa que estás jodido. Así como yo en el pasado, como cuando mi corazón había ganado e intenté hacer que Taehyung se enamorara, pero por razones del destino mi razón terminó ganando, parando todo ese juego, tal como su razón, ahora, estaba queriendo hacer lo correcto, el sólo enfocarse en mí. Pero, ¿Qué si el pasado está muy arraigado al presente?

Y yo estaba cansada de vivir en el pasado. Quería olvidar que existió un ayer. Y tampoco no quería volver a sentirme así. No quería.

No quería sentirme como si no fuera suficiente para alguien, que fuera la segunda. No quería eso. Eran muchas cosas que tenía en cabeza, él no sentirme tan bien conmigo, en cómo quise ser perfecta para él, en como me obligué a quererle, en cómo no era yo misma a su lado, en cómo me afectaba sus acciones. No quería sentirme así por un amor. Eso no era sano. Y por más amor que sintiera por él, esto ya no era sano.  Tal vez Yoongi y yo hicimos una gran simbiosis que pudo haber funcionado o seguir funcionando, pero cuando uno se quiere bajar de aquel sube y baja, no hay forma de que aquello siguiera. O Yoongi o yo se quedaría colgando en el aire hasta que cayera al suelo por la gravedad, brutalmente o no. El truco estaba en aprender a caer y sabía que Yoongi podría saber caer.  Podría saber aterrizar.

En cambio yo, una vez más... Había abierto mi paracaídas y no había cedido, en medio del cielo. En vez de sentirme querida, había terminando más herida. Era como el beso del diablo disfrazado de ángel. Tan perfecto por un momento hasta que el verdadero rostro te golpea duro contra el suelo. Solo debía aprender a aterrizar en este momento, me dolerían los pies y quizá sufra alguna otra herida, pero sobreviviría. Sobreviviría a mi caída libre.

—¿Por qué?— él dijo, mientras apretaba su mano con fuerza. La acerqué a mi boca, besando sus nudillos. —¿Qué tiene de bueno que me dejes, Sungkyung? Fue un error... Y te juro que no lo volveré a hacer, no volveré a verla.

No era eso.

—Porque así lograrás darte cuenta de la verdad, que no me quieres, que es a ella a quien quieres. Y no lo digo necesariamente porque la hayas buscado todas esas veces, son muchas cosas que me lo gritan. Sé que ambos se hicieron daño, pero merecen una segunda oportunidad. Ambos se la merecen.

Él negó.

—Nosotros somos quienes merecemos una segunda oportunidad, empecemos de cero, Sungkyung. No quiero estar con Joohee.

Me lo iba a agradecer.

—Tal vez yo ya no quiero estar contigo Yoongi. Desde el inicio sabíamos que no debíamos estar juntos. Tú solo querías olvidarte por completo de Joohee y yo de Taehyung. Fue una simbiosis, una en la que desgraciadamente nos sumimos tanto que generamos algo.

—¡Y eso es suficiente para que estemos juntos, Sung! — exclamó ante mi enunciado. Él apretó su agarre contra mi mano. Negué.

—No es suficiente. No ahora. Yoongi... Necesitamos tiempo y lo sabes muy bien.

Él soltó mi mano despeinándose. Ahí, ambos, sentados en el pequeño comedor dentro de la cocina. Estaba haciendo lo correcto. Quizá el tiempo nos haría reflexionar más. Si realmente debíamos estar juntos... Pasará de todo para que volvamos. Sin embargo, estaba segura que su lugar no era a mi lado, era al lado de Joohee. Aunque la odiase ahora, ella se merecía también a Yoongi. Le había visto mirarme con dolor. Joohee, la que siempre era dulce, parecía siempre estar con dolor conforme a Yoongi. Estaba segura que ella se había dado cuenta de los errores que cometieron, que ella tal vez no debió reaccionar así, pero ¿Quién te enseña a reaccionar a ciertos episodios de la vida? Lo que le había pasado no había sido fácil. Perder un hijo y a tu mejor amiga en el mismo día... Y luego a la persona que amas. Me hubiera vuelto loca tal vez. Joohee... Sería mejor persona si volvía con Yoongi. Y Yoongi debía darle la oportunidad, porque ella no fue la única que cometió errores, él también... Por lo que contó.

Yo no sería, tampoco, igual que Joohee quien había buscado separarnos a todo costa. Yo sería lo contrario, los haría volver. Y sé que Yoongi me lo iba a agradecer.

Yoongi tenía miedo de volver con ella así como yo tenía miedo de que si volvía con Yoongi, ya no iba a ser feliz como lo fui hacía solo unos días atrás. Nada sería lo mismo. Yo no lo sería y Yoongi se daría cuenta que una grieta en una relación puede dañar muchas cosas. Se podía sobrevivir a ello, sí, pero yo no quería sobrevivir a eso tal vez. Porque prefería que él fuera sincero consigo mismo.

Así como estaba siendo sincera conmigo misma, sabiendo que mi lugar no era a su lado.

—Mierda... Sungkyung...

—Estarás bien sin mi.

—¡No quiero, Sungkyung, no quiero estar sin ti! —Exclamó. Verle así era un puto dolor. Aunque seguía con marihuana y alcohol encima era consciente de lo que decía y hacía. Él sostuvo mi rostro mirando mis ojos, sabía que él podía ver mis signos de que estaba fuera de mí, pero que esté así no significaba que no sabía lo que decía, al contrario, lo decía con todo el corazón. Mis ojos debían estar rojísimos por las lágrimas acumuladas. Pronuncié lo contrario a sus últimas palabras, pero él solo pegó sus labios contra los míos, desesperado, hambriento. Algo que tampoco podía negarme, pero aferrarme mucho a él no lo veía tan necesario. Era él quien me sostenía de la camiseta con una mano y con la otra la nuca, quitando espacio al espacio, quitando los pocos centímetros que nos separaban, en un beso tan amargo y duro que dolía. Me veía con una gran herida por la mañana, pero no era impedimento para continuar. Yo quería ese beso porque era el último de todos.

Su boca aunque era pequeña y delgadita, sabía cómo generar placer y dolor a la vez. Placer porque amaba sus labios con todo mi ser, eran cálidos, precisos y sobre todo tan húmedos. Dolor porque su precisión y salvajismo causaría heridas y porque también me dolía saber que ese sería un último beso.

Me separé suavemente luego de un momento que pareció lo contrario a efímero, había sido sempiterno. Sin embargo, solo pareció. Lo sempiterno no existía en este caso.

—Lo siento, Yoongi. Vete... No me busques más.

—Sung... No quieres esto. Nos queremos, por favor.

—¡Tal vez no quiero ser querida por ti, Yoongi! Ese es el problema... Tal vez ya no quiero ser querida por ti. —quería ser amada por ti, pero me lo guardaría. —Quiero estar sola ¿No lo puedes comprender? Yoongi, necesito tiempo... Por favor. No me busques hasta ese entonces...

—¿Hasta cuándo?

Preguntó, con la voz rota.

Cuando se diera cuenta que no me quería, que eso es lo que él quería hacer. Pero, como había dicho... Querer no es lo mismo que hacer. Quería que lo hiciera, no que lo quisiera.

—Tú te darás cuenta, Yoongi. No lo hagamos más difícil ¿Sí?

Me acerqué a él, inclusive a acaricié su cabello negro. Tenía la nariz roja y sus ojos... Ni que hablar. Húmedos y rojos como la sangre. Él se apartó, bruscamente. Estaba furioso, pero podía entender su furia. Tomó su chaqueta y se levantó. Sin decir nada se marchó. Bajé mi cara, cubriéndomela, llorando sin cesar. Ni siquiera sé si se marchó por completo. Prefería que Yoongi me odiara a que me quisiera a medias. Podrás con ellos, Sungkyung, serás feliz después de esto. Me dije a mí misma. Me había puesto a pensar que sería si volvía con él, la desconfianza de mi parte estaría presente, la frialdad que nace cuando me decepciono tal vez aparecería de vuelta. Muchas cosas podrían hacer que esa relación se tornara horrible, pero también estaba la teoría que podría ser mucho más bella, más sincera, que ya no sería simbiosis, pero ¿no lo sería igual? pues Yoongi seguía aferrado a Joohee mientras yo ya había cerrado el libro llamado Taehyung. Eso ya no era simbiosis... Yoongi y yo ya no éramos una simbiosis. Y si me permitía continuar, la dañada sería yo.

Escuché unos pasos de repente. Era Taehyung acercándose a mí, lentamente, le observé directamente y luego miré hacia la mesa, perdida. Él pronunció mi nombre mientras se acercaba cada vez más. —¿Estás...— dejó su oración al aire. —¿Te sientes bien?

Terminó su frase al mismo tiempo que se sentó donde Min Yoongi había estado. ¿Sentirme bien? Me sentía como la mierda. Yoongi, al final, había confesado haber visto a Joohee tres veces desde que habíamos estado. Antes de llevarme a la fiesta de Changmi, allí y luego, donde los había atrapado, que solo hablaban de cosas triviales, pero sabía que no era así. No hablas de cosas triviales con un ex con quién rompió por problemas, no porque no la quisiera más. Ellos se extrañaban y por eso se veían. No solo eso, Yoongi también había admitido que había mentido conforme a la droga cuando le mencioné que Taehyung me había dicho que Seokjin había sido su dealer en el pasado. Yoongi sabía de eso, muy bien, pero quiso ocultarlo porque eso era lo ideal. No sé qué cosas más me habrá ocultado, pero era suficiente para saber que una relación en base a mentiras nunca iba a funcionar, aún si él dijese que se arrepentía y me quería.

Yo... Yo no iba a volver con Yoongi por esa y las razones ya mencionadas.

—Sí. —dije, pero las lágrimas cayendo decían todo lo contrario. Taehyung me dio esa mirada, la misma mirada que me dio cuando me revelaba su historia de amor por mí. Una de pena, una de impotencia por no poder hacerme parar de llorar. Pues, inmediatamente me cubrí el rostro.

¿Saben? Es difícil también darse cuenta como alguien te utiliza. Apesar que yo había utilizado a Yoongi en un inicio, antes de enamorarme de él, que él lo hiciera cuando nuestra relación había empezado me caía peor. Prefería mil veces que me utilizará antes, cuando aún no sentíamos nada, pero él había dicho que la primera vez que había visto a Joohee fue después de nuestro primer beso, justamente el mismo día. Yoongi... Yoongi me utilizaba para olvidarla desde ese momento, en serio. No era que no había estado olvidándola desde antes, lo intentaba, pero conmigo tras ese beso fue cuando más trató. Todos esos gestos del comienzo... Saber ahora que eran todos fingidos, me dolía. Él nunca fue sincero conmigo. Ahora entendía porque todo me parecía tan perfecto, pero cuando más lo pensaba, más sentido tenía. Nadie es tan perfecto en esta vida, a menos que te muestre esa faceta por ocultar una verdadera. Su verdadera faceta era un: amo a otra, pero te estoy utilizando, Sungkyung. Puede que ahora finalmente sienta algo por mí, pero no lo suficiente, no lo suficiente para olvidar a Joohee. Yoongi, yo sabía muy bien, eventualmente volvería a Joohee.

Sus palabras bellas de al inicio de nuestra relación, nuestra primera vez, todo, absolutamente todo fue mentira. Excepto cuando me contó sobre Joohee, porque yo se lo pedí. Sino fuera mi prima, no le hubiera cuestionado, hubiera seguido siendo un clavo sacando otro clavo más profundo, para quedarme en el hueco de su corazón aunque mi punta no lo llenase por completo.

Y recordando muchas cosas me limpié las lágrimas antes que Taehyung me abrazara con fuerza. Un sollozo, dos sollozos, incontables sollozos salieron de mi boca mientras apretaba la camiseta de Taehyung, acurrucándome en su pecho porque estaba más que destruida.

Tenía por primera vez... Un corazón roto.

Era diferente de cuando Taehyung me rechazó. Era un dolor diferente, completamente diferente. Me dolió cuando Taehyung me rechazó, cuando me dijo que nunca dejaría a Jieun, sí, era dolor, pero lo que sentía era muchísimo peor. Mil veces peor. Era como si realmente mi paracaídas nunca había abierto y mi cuerpo se había estampado contra el suelo, teniendo una muerte por hemorragia interna. Una que podía ser lenta o bien podía ser inmediata. En este caso, parecía ser lenta y dolorosa. Tal como el nombre de su pieza favorita de piano.

Irónicamente...

Y solo debería aprender a recuperarme.

🌸

—Solo una camiseta blanca estaría bien. —Le dije a Taehyung cuando me senté en la cama. Me dolía la cabeza un poco, pero Taehyung me había traído una taza de té, un analgésico más unas tostadas con mermelada. Despertar así había sido algo extraño, mucho más si recordaba haberme ido a la cama con él. Aunque supuse que apenas me había quedado dormida él se había marchado a la sala. Bueno, si él se había quedado a dormir a mí lado no habría problema, pues nada más que charlar  había pasado. Tomé una tostada y me la dirigí a mi boca. Tenía hambre. Mis ojos pesaban y no quería verme en el espejo. Ni siquiera había traído maquillaje en mi bolso, bueno, solo polvo y un labial, pero el primero no era suficiente para cubrir mis ojos hinchados por haber llorado tanto de madrugada. Iríamos de frente a la universidad, puesto que teníamos clase a primera hora. Tendría que llamar a mi madre apenas pudiera, aunque esta ni siquiera se había dignado a preguntar por mí, haciéndome suponer que realmente creía que estaba en la casa de Sojin.

—¿Está bien esta? — dijo Taehyung mientras sacaba una camiseta suya del color que le había pedido. Alcé mi puño dándole una afirmativa y él se acercó una vez a mí. Me colocaría el mismo pantalón y zapatos. Me retiraría el protector femenino y me colocaría otro. Solo mi camiseta pasaría a ser guardada. Lo único que me preocupaba en ese momento era mi aliento, pero Taehyung pareció pensarlo mejor. —Tengo un cepillo sellado, así que lo iré a ver. Luego puedes darte una ducha. Dentro de una hora debemos ir saliendo de aquí.

Asentí mientras le veía irse y yo me devoraba la tostada sin dudar. Realmente la marihuana me había hecho dar un tremendo hambre que bien podía comerme diez pizzas familiares y aún tendría hambre. Empecé a beber el té cuando decidí revisar mi móvil. Solo notificaciones de Sojin diciendo que yo debía hablar con Jungkook. Byeol disculpándose porque la cena había sido un fracaso. Byeol no tenía culpa de nada, no tenía culpa de que Jungkook tuviera sentimientos por mí ni que se peleara con Taehyung. Pensar en Jungkook de hecho era un dolor de cabeza en ese momento y agregarlo al real sería peor, así que tragué el analgésico sin dudar antes de levantarme de la cama.

Taehyung regresó en ese preciso momento con un cepillo sellado y agradecí enormemente ese gesto de su parte. Lo tomé y él volvió a dirigirse a su ropero para sacar la ropa que usaría hoy. Me ducharía rápido porque él también se debía duchar. Cuando salí del baño, con el cabello enmarañado y la ropa puesta, Taehyung se encontraba sobre la cama ahora tendida mirando al techo mientras la música desde su celular sonaba. Se veía tan en paz...como si nunca antes la hubiese tenido.

Me quedé observándolo recordando las palabras de consolación que me había dado hacia unas horas atrás.

"Si ya oíste su versión de los hechos, y aún así decides no estar con él más, está bien. El punto es que tú te sientas bien. Ser egoísta en estos casos no está mal ¿Verdad? "

Eso era lo que me había dicho tras contarle lo que había pasado con Yoongi. Taehyung era sabio con sus palabras aunque fuera un ser vil de vez en cuando. También dijo :

"Si en algún futuro decides volver a intentarlo con él, no está mal. Estoy seguro que tú eres sabia para decidir que cosa te hace bien o que te hace mal"

Ese momento de consolación me hizo reflexionar mucho.

—Ya puedes usar la ducha— le dije, secándome el cabello. Él inmediatamente me miró desde su posición haciendo una mueca. No sentía la situación extraña, pero sí un poco incómoda. Tal vez porque estaba siendo un estorbo para él, había incomodado su dormir y ahora le privaba de su momento de relajación. Él se levantó mientras yo me dirigía hacia la cama para colocarme los zapatos que había utilizado el día anterior. Él ingresó inmediatamente a la ducha, sin decir algo. Absolutamente nada.

Traté de cubrir mis ojos hinchados, pero era imposible. En ese momento deseé tener unos lentes de sol, pero me conformaría con al menos tener un poco de tinte sobre los labios y mi piel cubierta de polvo. Me miré en el espejo de Taehyung, colocando su camiseta blanca por dentro del jean, me quedaba gigante, pero tampoco me podía quejar de eso. Al menos el jean disimulaba bastante el hecho que la camiseta era de hombre, pues podía pasarse como una camiseta de tamaño grande. No mucho después, decidí que debía pasar por la librería por una libreta y algunos lápices, pues ¿Con qué iba a tomar apuntes hoy? Pero Taehyung al salir de la ducha y al haberle dicho sobre eso se ofreció a darme una, pues tenía varias libretas que no utilizaba, él podía prestarme algún bolígrafo y compartiríamos separatas en el caso que en la clase de griego nos pedieran la inmensa antología que nos habían entregado al inicio. A veces no la utilizábamos, a veces sí. Esperaba que ese día fuera un no.

Taehyung estaba vestido y se acercó a mí lado, cuando revisaba mis redes sociales mientras le esperaba,  para entregarme una gorra suya y un par de lentes de sol, que eran notoriamente de hombre.

—Se te ve muy demacrada y apuesto que no quieres hablar de lo que pasó anoche, así que recíbelo.

Me dijo. Taehyung era atento. Tomé sin dudar la gorra de color negro para colocármela, sin decir nada. Taehyung no dejaba de mirarme y estiró su mano para colocar un mechón que se escapaba tras de mi oreja, eso me hizo retroceder sin ser tan evidente y sonreír bastante falsa mientras ahora me amarraba el cabello. Que sea tan afectivo no le iba a ayudar a superarme, y realmente quería que sane sin tener que estar peleándonos ni alejarnos. Él notó aquello, así que solo sonrió suavemente y luego pidió disculpas.

Quise decir algo por aquello, pero nada salió de mi garganta. Me coloqué las gafas, pero no iban con mi tipo de rostro, así que terminé quitándomelas. Taehyung tenía ojeras, así que decidí mejor dárselas a él. —Tú las necesitas también.

Él giró a mirarse al espejo. Tenía unas bolsas negras bastante grandes bajo de sus ojos. Pronto se decidió colocarse los lentes. Sin tener nada más que hacer en su habitación decidimos salir de una buena vez hacía la universidad. Era aproximadamente las ocho de la mañana y no dejaba de bostezar. Podría dormirme inclusive parada, pero en cierta forma, Taehyung terminó prestándome su hombro durante el trayecto a clases. Él también aprovechó en descansar algo aunque solo nos tomaría veinte minutos llegar hasta allá. Cuando escuchamos el anuncio de la estación en la que teníamos que bajar, Taehyung terminó pasándome la voz.

Bostecé una vez más, cubriéndome la boca. No iba a aguantar de seguro. Yoongi se había marchado aproximadamente a las dos de la mañana y me había ido a dormir a las cuatro luego de una larga charla con Taehyung, este sobretodo hablando. Al punto que en ese momento, solo nos dedicábamos a estar en silencio.

Cuando llegamos a la facultad, Taehyung venía agarrando de mi brazo suavemente, como si me guiara para no caerme, o bueno, no caernos por el sueño. Sin embargo, aunque eso no podía ser tomado como un gesto de amor, muchas personas nos miraron. Taehyung era alguien bastante llamativo en la facultad. Yo no era la única que había sido rechazada por él, sino que él lo había hecho decenas de veces. Que me vieran llegar con él era darles incentivo para hablar y confirmar que la ruptura con Jieun era mi culpa. Aunque eso no era cierto, de cierta forma yo era la razón, más nunca mi culpa. Era culpa de Taehyung. Jieun al haberle hecho un escándolo, la gente estaba pendiente de cada movimiento de él. No todas las personas eran así, pero más que todo eran ciertas chicas las que sí estaban pendiente de todo lo que Taehyung hacía y eran justamente ellas las que nos observaban.

Taehyung, como siempre, ni siquiera las miró. Taehyung era como el chico tsundere de un anime, frío por fuera, pero cuando uno empezaba a tratarlo podías notar que radiaba ternura por doquier. Y los tsunderes siempre llamaban la atención. Él llamaba la atención mucho.

Sojin y Byeol fueron las primeras que nos vieron llegar. Sojin frunciendo el ceño y Byeol con la boca abierta. Era extraño, pues solo hace una semana Taehyung estaba muy alejado de mí, pues mantener distancia con él parecía lo adecuado, aunque luego había sabido su verdadera historia. Después de aquello solo la rabia me había consumido, pero al haber sido fin de semana tampoco había tenido oportunidad de topármelo en clases hasta aquel sábado desastroso y  ayer en el restaurante. Apesar del drama vivido con él y mis ganas de mantener distancia, pensé que ahora ya no era tan necesario.

Simplemente lo sentía así.

Ambos nos habíamos dañado en cierta forma, más él a mí en el pasado, y yo ahora le habíala dañado por haberle rechazado sin ninguna declaración de por medio. Ambos estábamos heridos aunque en mi caso ahora era por otro hombre. Tal vez... Tal vez me sentía como él, y podía sentir que él comprendería lo que te rompieran el corazón y más si viene de la persona que menos lo esperabas. Taehyung, obviamente, todo este tiempo creyó que nunca lo rechazaría hasta que empecé a hacerlo, queriendo recuperarme y tomarme en serio después. Eso le había destruido, eso le rompía el corazón, pero él mismo se lo permitió, se lo buscó . Y en mi caso, también me permití que alguien me rompiera el corazón aunque nunca lo vi venir

Quienes nos rompen el corazón son las personas que menos esperamos.

Yoongi, para mí.

Para Taehyung, yo.

No obstante, algo que tenía en claro, que apesar que nuestros corazones buscaban ser sanados, era consciente qué una simbiosis no volvería a hacer en mi vida. No en este caso. La simbiosis era peligrosa si se involucran sentimientos, si se involucra el amar a alguien con todas las fuerzas. Y ya había aprendido la lección con Min Yoongi.

Me senté al lado de Byeol mientras Taehyung al lado de Sojin. Inmediatamente miré a Byeol preguntando—¿De casualidad tienes corrector?

Y me señalé las ojeras. Necesitaba cubrirlas.

—¿No has dormido?—me preguntó ella

—Tuve pesadillas, así que me fue imposible conciliar el sueño—le mentí. Miré a Sojin quien ahora volteaba a mirar a Taehyung. Taehyung seguía con los lentes de sol. Él nunca cruzaba tantas palabras con Sojin apesar que se conocían desde hacía mucho. Si apenas lo hacían eran por clases o algún favor o bien tomando. No se llevaban mal, pero era como mi caso con Jimin. De los tres hombres del grupo era él con quién menos hablaba. En este caso, para Taehyung, de las tres chicas era Sojin con quién menos hablaba. En un grupo bastante grande de amigos era normal que eso sucediera. Sojin no dijo, pero era bastante perspicaz para notar que Taehyung tampoco había dormido. Más, se lo guardaría para sí misma. Ella solo analizaba situaciones.

—Bueno, sí tengo. —dijo ella, abriendo su bolso para sacar un pequeño set de maquillaje. De ahí sacó aquel corrector que tanto necesitaba. De paso me prestó un espejo. Mientras me aplicaba el corrector. Sojin empezó a hablar con Taehyung, no de una forma agradable. Tanto que Byeol y yo volteamos a mirarlos.

—No puedo creer que le hayas hecho eso a tu amigo, Taehyung. Eres un malnacido. —Sojin soltó con furia.

Estaban hablando el tema de Solbin. Byeol y yo nos quedamos mudas.

—Di lo que quieras, me da igual.

—¿Qué necesidad había de contarlo, Taehyung? Eso es algo delicado. No es tu maldito problema.

—Si eso significa proteger a la chica que me gusta, sí, es mi problema.

Taehyung soltó. Yo de cierta forma intervine. —¿Pueden parar? Da igual lo que me dijo Taehyung, da igual si Jungkook hizo eso o no. No se metan en este puto problema. Solo lo único que hacen es arrastrarme a un maldito drama en el que no tengo que ver. Y Sojin, escucha, sé que Taehyung no tiene nada que ver con el tema de Jungkook, pero ¿Sabes realmente por qué me lo contó? No fue necesariamente para hacerlo quedar mal, era para que pudiera comprender más. No creo que él buscara simplemente dañar a Jungkook.

—¿Eres tonta o qué? ¿No buscaba dañar a Jungkook? Dios, él te dijo que Jungkook...

Se calló. Byeol no sabía nada de ese tema, pero estaba ahí.

—¿Tan ciega estás? Por favor. Ni siquiera dejaste que Jungkook te contara su versión.

—¿Disculpa?—Me exalté. —Jungkook no me quiso decir su versión apesar que la versión de Taehyung no me convence. Esa chica...—dije. — esa chica es de lo peor, por eso creí que Jungkook no lo hizo.

—Aun así, pareces defender a Taehyung de algo que tú dices no creer ¿Te imaginas si Jungkook te escucha ahorita defendiendo a Taehyung? Es como si realmente lo tomaras como un maldito violador.

—¿Qué?

Byeol soltó, estupefacta. Bien, Sojin la había cagado. Una persona más sabía.

—¿Que Jungkook es qué?

Repitió.

—No hagas caso. —Taehyung dijo, pero Byeol no se quedaría conforme. —

—¿Como que no? Sojin acaba de decir...

—¡No te metas, Byeol! Por una vez en tu vida no te metas en este maldito problema. —le alcé la voz. Ella parecía como una niña curiosa que esperaba que le explicaran todo. Nadie de los presentes estaba siquiera enterado de lo que realmente sucedía. Sojin no sabía toda la mierda que Solbin había causado en Taehyung, le había hecho tanta mierda que él hasta ahora llega a pensar que Jungkook quiere abusar de mí por parecerme a Solbin supuestamente y porque tiene sentimientos de cierta forma enfermizos. Le había hecho tanta mierda que Taehyung distorsionaba la realidad, o eso creía, pues mi yo interior confiaba en Jungkook, que él no haría eso, pero él ni siquiera se había dignado a explicarse, a contarme su versión y lo único que había hecho era confirmar sus sentimientos por mí, uno que Taehyung ya sospechaba y me había advertido aunque enfermizos no eran. Sojin solo estaba del lado de Jungkook, porque estaba segurísima que ella sabía todo sobre sus sentimientos. Así como también sabía la versión de Jungkook. Ambas estábamos del lado de cada uno. Sojin, Jungkook; Taehyung, yo. Pero al menos yo no iba gritándole "violador" a Jungkook, pero Sojin estaba siendo bastante tonta en este caso al solo mirar una versión de los hechos y gritarle a Taehyung sin saber nada.

Y eso me estaba sacando de quicio en ese momento.

Byeol abrió los ojos sorprendida. Maldición, no debí hablarle así. No debí y sabía que era mi falta, pero antes de decirle lo siento alguien tenía que intervenir... Justamente esa persona.

—Dios, eres tan... ¿Tanto defiendes a Taehyung al punto de gritar a tus amigas?

Jungkook estaba ahí, cerca. Si la pelea no había acabado la noche anterior, ahora realmente lo haría. No supe qué decir, simplemente la rabia se me desbordaba.

—A ver, Jungkook, cuenta tu versión ahora mismo, para acabar toda esta mierda de drama. —Taehyung dijo, también hastiado.

—¿Y si tú también la cuentas, Taehyung? ¿Por qué mierda crees eso?

Sojin soltó.

Esto se había salido de control.

—¿Y yo por qué? Que la cuente él primero. —Taehyung respondió. Podía notar como él evitaba tocar su peor recuerdo. ¿Eso sucedía con Jungkook? Sí, de seguro. Así que empecé a negar.

—No lo va a decir.—dije finalmente. —¿O me equivoco?

—No te equivocas. —me respondió toscamente. Lo sabía.

—¡Jungkook!— Sojin dijo.

—¿Es que no te das cuenta que es algo que no quiero recordar, Sojin? Ni siquiera te lo quise contar de no ser porque Taehyung me delató en la casa de Byeol.

—¿Yo qué? ¿Exponer que tuviste relaciones durante la preparatoria estaba mal? Bien pudiste haberte quedado callado y no beber, pero bebiste, Jungkook. Tú mismo te delataste, tú mismo te pusiste la soga en cuello, no me eches la culpa. —dijo Taehyung. Esto cada vez me sorprendía.

—¿Y seguir soportando tus indirectas?

—¿Y tú no me tiraste indirectas sobre que estabas feliz que finalmente Sungkyung me había superado con Yoongi? —Taehyung atacó. Jungkook empezó a reírse, sínicamente.

—Es que lo estaba. Realmente eres una basura para ella.

Él soltó. Una personalidad que nunca había visto apareció. Quién...¿Quién era él realmente?

Taehyung se levantó para agarrarlo del cuello. Sojin chilló y rápidamente intervino entre ellos mientras que Byeol estaba ahí, estática tratando de absorber toda la información.

—¡Hijo de puta!

—¡Tú eres el hijo de puta aquí! Jugando con ella siempre.

—¡No sabes ni mierda, Jungkook!

Cada uno tenía la versión de lod hechos. Jungkook siempre había pensando que Taehyung había jugado conmigo, cuando en sí él luchaba contra los demonios de su pasado para no hacerme "daño". Ahora que lo sabía... Entendía que Jungkook estaba equivocado, pero simplemente porque no sabía la verdad. No sabía toda la mierda que Solbin había hecho a Taehyung, pero... ¿Jungkook también tenía un pasado lleno de mierda causado por Solbin? Estaba segura que sí.

—Jungkook...—llamé primero. —¿Sabías que Taehyung fue el ex de Solbin?

Quise saciar mi curiosidad. Si él lo sabía... Sentí que las cosas podrían cambiar.

Jungkook volteó a mirarme. Sojin también, deteniéndose, abriendo los ojos soltando un qué. La raíz de su odio mutuo era a causa de Solbin, no de mí. Yo solo lo había intensificado. Taehyung se soltó, pues Jungkook también le había tomado del cuello.

—¿Qué?

Sojin no lo sabía. Eso estaba segura, pero el silencio de Jungkook decía mucho. Él lo sabía.

—A ver responde, Jungkook... Dile cuándo y cómo te enteraste.

Taehyung soltó.

Sojin se agarró la frente, como si finalmente comprendiera porque Taehyung se comportaba así con él. —¿Por qué no me contaste eso, Jungkook?

Parecía que el juego había dado un giro.

Y no para  bien 




Nota

Me costó un egg escribir esto porque no sabía cómo continuar después de la ruptura.

Solo puedo decirles que entramos al inicio del desenlace.

He estado pensando o bien alargo unos cuantos capítulos o habrá una tercera parte. Eso está en un veremos, no me presionen. Tengo qué pensar bien, quizá sea suficiente con el final de esta parte o tal vez no.

Espero que les haya gustado y dejen muchísimos comentarios ❤❤❤❤

Las amo.

Pero amo más a la chica de las teorías 💕 y su complemento (Sí, Eileen, tú) ❤

Continue Reading

You'll Also Like

46.8K 2.3K 46
Eva, una talentosa fotógrafa en ascenso, y Jase, un apuesto modelo, se cruzan en una fiesta caótica donde Jase, tras beber en exceso, cuenta con la i...
195K 7.2K 54
Thiago es un chico de 22 años que vive solo con su hermana pequeña. Sus padres lo abandonaron y él tuvo que cuidar de su hermana, se convirtió en un...
795 113 19
Es 1922. Al detective Aemond Targaryen se le ha ordenado cumplir con la captura de Jason y Tyland Lannister, el terror que ha estado operando en las...
4.1K 654 12
𝐒𝐢𝐧𝐨𝐩𝐬𝐢𝐬: ●▬▬▬▬▬▬୧✬୨▬▬▬▬▬▬▬● Después de la desastrosa llegada de Willow(tú) al hotel, ella terminará haciendo un trato con el famosisimo demo...