- ¿Está todo bien? –Preguntó Miranda a María José, quién parecía estar ida con una expresión en su rostro de sorpresa, nunca la había visto de esa manera, incluso podía apostar a que María José estaba pálida, aunque las luces no enseñaran bien su rostro
Todos los familiares y amigos de María José y Miranda miraban a Daniela anonadada en el escenario mientras el piano continuaba sonando.
María José miraba a su ex novia fijamente, como quién ve a un fantasma en la mitad de la noche; Daniela tampoco podía creer que se tratara de la chica que tanto le robó el aliento ocho años atrás, sus manos estaban temblando y su piel estaba fría, es que era... increíble lo que pasaba en ese momento
- ¿Señorita? –Interrumpió el pianista, quién se había levantado de donde estaba para acercarse a Daniela –¿Se encuentra bien? –
-Necesito agua –Respondió Daniela apartando la mirada de los ojos de María José para bajar del escenario y dirigirse a los baños del lugar
-Tendremos una breve pausa –Dijo el señor por micrófono y todas las personas que estaban en el pub continuaron conversando entre sí, mientras que otros se acercaban a la pareja para felicitarlas
-María, estoy muy feliz por ustedes... cuando me dijiste que querías casarte con nuestra hija yo simplemente sonreí, es genial tenerte como otra integrante más de la familia –Pronunció el padre de Miranda, sin embargo, María José miraba a la nada, como si sus ojos se hubieran perdido en un trance
-Bebí –Dijo Miranda al ver que María José no reaccionaba –Te están hablando –
-Necesito aire –Respondió María José después de varios segundos, caminó hacia fuera del lugar dejando a su futura esposa y su familia confundidos
María José salió rápidamente del lugar, se puso de cuclillas mientras cerraba los ojos e inclinaba su cabeza hacia el suelo
"No está pasando esto" era lo único que pensaba mientras suspiraba una y otra vez, había mucho viento por ende estaba frío el lugar, la chica no sintió absolutamente nada, podía estar en llamas en ese momento que lo dejaría pasar por alto.
-Ay María José, María José –Se dijo a sí misma en un susurro antes de ponerse en pie y mirar hacia el cielo –¿por qué? –Dijo al cielo –¿Por qué me pasan estas cosas a mí? –
-Bebi –Interrumpió la voz de Miranda –¿Estás bien? –
- ¿Me ves bien? –Dijo María José inmediatamente –Mírame.... No estoy bien, es obvio –Añadió alterada como si su novia supiera lo que estaba pasando
-No entiendo nada –Confesó Miranda frunciendo el ceño, María José suspiró lentamente
-No es nada... solo estoy un poco mareada –Mintió, poniendo una sonrisa falsa en su rostro
-Siéntate entonces –Sugirió Miranda mientras guiaba a su novia a una de las pequeñas bancas de afuera del lugar –Debes de estar agotada –Añadió mientras masajeaba los hombros de María José y esta permanecía con sus ojos cerrados –Me imagino todo lo que hiciste el día de hoy para que todo esto saliera a la perfección –
-No tienes idea –Respondió María José con ironía mientras su novia continuaba masajeando sus hombros
-Vamos adentro, necesitas tomar algo –Dijo Miranda al oído de su novia después de varios minutos, María José cerró los ojos lentamente, su corazón se pausaba al recordar lo que minutos atrás había visto y solo deseaba que se tratara de alguien similar a Daniela Calle, su doble tal vez.
-No quiero ir adentro –Contestó María José con su voz ronca
-Tenemos que regresar bebi –Dijo Miranda quién acariciaba sus brazos debido al frío –Nuestra familia y amigos querrán vernos –María José volvió a suspirar y después de unos minutos se levantó
-Si –Dijo al levantarse –Tienes razón... ellos querrán saludarnos –
-Toma mi mano –Dijo Miranda mientras guiaba a su novia hacia dentro del Pub, María José ya se encontraba un poco mareada, vaya noticia fue a recibir el día de su compromiso
- ¿Estás bien María José? –Preguntó la madre de Miranda al verla entrar de nuevo
-Si... me mareé un poco, eso es todo –Respondió María José con un tono escueto en su voz
- ¿Te sientes mejor? –Preguntó el padre de Miranda
-Si... creo que si –Mintió la chica pequeña, su novia fue por un vaso con agua mientras ella seguía saludando a sus invitados
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Daniela se miraba al espejo con los ojos fijos en su reflejo, después echaba algo de agua en su rostro y repetía ambas acciones una y otra vez, quería que lo que había pasado hubiese sido una broma de mal gusto solamente. ¿Cuál se supone que sea tu reacción al ver a tu ex novia de hace ocho años comprometerse con otra mientras tu estás cantando en un evento que ni siquiera sabías que era de ella?
Su teléfono interrumpió sus pensamientos, miró la pantalla y se dio cuenta de que se trataba de su mejor amiga, a la cual le había escrito muchos mensajes minutos atrás
-Pau –Dijo Daniela al contestar, su voz estaba cortada y amenazaba con llorar en cualquier momento
-Estaba en una entrevista –Dijo la rubia del otro lado de la llamada –¿Qué te pasó? –
-Estoy en Madrid –Respondió Daniela alterada
- ¿Cómo te está yendo? –Preguntó Paula con curiosidad
-Hace diez minutos me estaba yendo mal... ahora me está yendo peor –Admitió Daniela en un suspiro
-Oyee ¿Por qué así? –Preguntó su mejor amiga preocupada, aunque sabía que Daniela siempre exageraba las cosas
-Pau es que no tienes idea –Dijo Daniela mirándose al espejo de nuevo
-Dani, estoy en una entrevista y salí para responder esta llamada importante –Confesó la rubia –Date prisa –
-Me encontré a María José –Admitió Daniela, sus ojos ya estaban lo suficientemente cristalinos y su corazón, el cuál dicen no duele por amor, estaba doliendo
- ¿QUÉ? –Dijo Paula en lo que fue algo similar a un grito
-Me contrataron para cantar en un pub aquí en Madrid... canté dos canciones y después me di cuenta... -Suspiró, ni siquiera podía seguir hablando porque su voz se había quebrado –Es el evento de compromiso de María José y su novia –
Paula del otro lado de la llamada había llevado la mano a su boca en forma de sorpresa, la rubia no podía creer lo que su mejor amiga estaba diciéndole, podía sentir el dolor de Daniela desde kilómetros y kilómetros de distancia y escuchar los pequeños sollozos de su amiga hicieron que se le partiera el alma
-Dani bebé –Respondió Paula con el tono de voz que usaba cuando tenía mucha lástima de algo o alguien
-Pau no sé qué hacer –Admitió Daniela limpiándose las lágrimas con un costado de su mano –Me contrataron para cantar toda la noche... yo simplemente no... no puedo –Comenzó a sollozar de nuevo –Esto es... es lo más difícil que me ha pasado... -
-Gordi –Respondió Paula con su voz entrecortada también
-Nunca me sentí tan humillada... -
-No no –Dijo Pau con ánimos –Nadie te va a humillar Daniela Calle, tú tienes que limpiar tus lágrimas y salir de ese lugar lo más rápido posible, a mí no me importa que no te paguen ni nada –
-La única puerta es en el frente del pub Pau –Admitió Daniela –Tendría que atravesar todo el pub para poder salir y... -La morena se vio interrumpida por alguien que abrió la puerta del baño –Te marco luego –Dijo antes de colgar y voltearse a limpiar las lágrimas
-Hey –
-Hey –Respondió Daniela tratando de ocultar lágrimas antes de voltearse de nuevo
-Te mentiría si te dijera que no me sorprendí al verte en ese escenario –Contestó la chica con una media sonrisa ambas suspiraron
-Hola Poché –Respondió la chica más alta, ninguna podía hacer contacto visual por más de dos segundos con la otra, no se atrevían –Vaya sorpresa ¿eh? –
- ¿Cómo estás? –Preguntó María José jugando con sus dedos, los nervios eran obvios
-Estoy bien –Mintió Daniela mientras ponía una sonrisa falsa en su rostro
-Bebi –Interrumpió una voz entrando al baño, se trataba de Miranda –Aquí estás, te he buscado por todas partes –Añadió la chica antes de depositar un breve beso en los labios de María José, María José cerró los ojos de inmediato queriendo hacer menos incómodo el momento, Daniela miró hacia abajo, su corazón estaba palpitando muy fuerte –¿Está todo bien aquí? –Preguntó Miranda confundida al ver la tensión del lugar
-Ehh –Trató de decir Daniela, pero se vio interrumpida
-Dani... -Dijo María José de inmediato –Ella es Miranda –Señaló a su novia quién sonrió de oreja a oreja al verla –Miranda... ella es Daniela –Continuó María José mientras ambas chicas se miraban
-Holaaa –Dijo Miranda sonriendo
-...Daniela Calle –Añadió María José y la reacción en la cara de Miranda cambió totalmente
- ¡Oh! –Exclamó la chica sorprendida –Es un... es un placer –Extendió la mano a la morena, María José solo miraba incómoda
-Igualmente –Respondió Daniela quién tragaba en seco
-No sabías que vivías en Madrid –Dijo Miranda confundida
-No –Respondió Daniela inmediatamente –Vivo en California –Añadió nerviosa, María José la miraba prestando mucha atención a lo que decía
-Niña rica de Cali –Bromeó Miranda y Daniela se sonrojó y miró hacia el suelo, Miranda notó la incomodidad –En fin... Tú eres la que cantó, ¿cierto? –
-Si –Contestó Daniela con una media sonrisa
-Cantas hermoso –Dijo Miranda abrazando a María José –¿Te dedicas a eso? –
-Si –Respondió Daniela con nervios –Me presento en Brodway –Añadió, sabía que técnicamente no estaba mintiendo ya que si había hecho dos musicales en Brodway... aunque no era lo que las chicas en ese baño se esperaban cuando se refería a Brodway
-Wow –Exclamó María José inmediatamente
- ¡Vaya! –Dijo Miranda sonriéndole a Daniela –Una estrella tenemos con nosotros bebi –Le dijo a María José y esta sonrió
-Si que cumpliste tus sueños, Dani –Respondió María José con una sonrisa, Daniela medio sonrió y miró al suelo... si tan solo María José supiera todo lo que está viviendo en este momento
-Si –Dijo con su voz baja –... yo... Yo debería ir al escenario... -
-Adelante –Dijo Miranda abriéndole la puerta a Daniela para que saliera
–Felicidades en su compromiso –Añadió la morena antes de salir, María José la siguió con la mirada y una pequeña sonrisa
-La amo –Dijo Miranda a su novia una vez que Daniela se había ido –Es tan adorable –María José sonrió –Siempre quise conocer a alguien que participara en Brodway –
-Ella es fantástica –Dijo María José entre un suspiro y una media sonrisa
-Espérame aquí –Dijo Miranda abriendo la puerta de uno de los baños –Ya que estoy aquí voy a usar uno –
María José escuchaba a su novia hablar, pero su cabeza estaba en otro lugar, Daniela Calle
*FLASHBACK 8 AÑOS ANTES*
"Amor -Calle"
"Respóndeme el teléfono -Calle"
"María José por favor, necesitamos hablar -Calle"
"Hoy fui a tu casa y Juan Carlos me dijo que no estabas... no le creo nada, se que ahí estás -Calle"
"Necesitamos hablar Poché, no te hagas la dura conmigo -Calle"
"Lo siento ¿ok? Lo siento por no haberte dicho nada de la universidad -Calle"
"Al menos contesta la llamada, si no quieres hablar en persona al menos coge el teléfono -Calle"
"Poché -Calle"
"Por favor -Calle"
Desde el día en que Poché abandonó la casa de los Calle no había hablado ni una sola palabra con Daniela, ya había pasado una semana y su celular no paraba de vibrar cuando un mensaje de su novia llegaba, y es que Poché no sabía como entablar una conversación con ella sin que explotara de rabia al recordar todo lo que hizo... había perdido su confianza y no creía que pudiera recuperarla, todos lo sabían, absolutamente todos excepto ella... había pensado que la prioridad en la vida de Daniela era ella y estaba muy equivocada. Solo quería encerrarse en su habitación y meterse debajo de las cobijas.
"Poché, amor, por favor –Calle"
Poché miró el mensaje y dejo caer su celular en la alfombra, no quería saber nada de Daniela Calle
*FIN DEL FLASHBACK, ACTUALIDAD*
- ¿Lista? –Miranda interrumpió los pensamientos de María José
-Si... si –Respondió la chica pequeña –Estoy lista, vamos –Dijo María José y caminaron hacia el pub donde estaban sus familias hablando, pero la música no estaba sonando, María José miró alrededor y estaba confundida
-Bebi ellos son mis tíos... nos visitan desde Valencia –Dijo Miranda, pero María José continuó buscando entre la multitud –¿Bebi? –
-Espérame aquí... ya casi vuelvo –Dijo María José mientras caminaba entre sus amigos y familia hasta acercarse al escenario
-Hey –Gritó al señor que estaba sentado en el piano, el señor se acercó
-Hola –Dijo el tipo sonriéndole a María José –¿Sucede algo? –
-La chica... la que estaba cantando contigo ¿Dónde está? –Preguntó María José mirando alrededor confundida
-Se fue –Respondió el hombre encogido de hombros
- ¿A dónde? –Preguntó María José con el ceño fruncido
-Dijo que se iba... no se a dónde –Confesó el señor honestamente –No creo que regrese, si le soy sincero –
María José con el ceño fruncido suspiró y miró hacia el techo del lugar, Daniela Calle se había marchado... otra vez.