Fue pasadas dos horas después de su habitual hora de levantarse que Dobby finalmente despertó a Severus y Harry. El profesor Dumbledore había pedido verlos una vez despertaran pero Dobby no se dejó persuadir por la petición de molestarlos en su sueño. Severus estaba particularmente indignado por el hecho de que un elfo doméstico interfiriera en su horario de esa forma, pero cuando Dobby hacía algo para proteger a Harry Potter, no se disculpaba ni bajaba la cabeza ante una reprimenda.
Para el tiempo en que ambos arribaron en la oficina del Director en busca de un adelanto de lo que había pasado en el mundo en el correr de la noche, Madame Bones y el Auror Kingsley Shacklebolt ya se encontraban esperando ahí para ver a Harry. Al contrario de la percepción de Cornelius Fudge, Albus Dumbledore era en realidad muy cuidadoso de mantener su rol de Director de Hogwarts separado de cualquier otro papel que pudiera ocupar en el mundo de los magos. Accedió a que el encuentro se diera en la Dirección debido a que había echado un rápido vistazo al espacio mandado a construir para Harry a mano de los elfos domésticos, y estaba razonablemente seguro que el muchacho estaría mortificado por el enorme trono en el salón adornado con los colores de Gryffindor. Mejor dejar que el chico lo viera en privado y lo ajustara según su gusto.
Basados en la reacción de Fudge a las noticias de que Harry había sellado el Pozo de la Desesperación en las Tierras del Invierno, se encontraba un poco nervioso de que el Director y él estuvieran en problemas ahora con Madame Bones por haber realizado el hechizo como lo hicieron la noche pasada sin participación del Ministerio. Tal no era el caso, para nada. Al contrario de su predecesor auto-engrandecido, ella se encontraba muy agradecida por su ayuda, y quería poner al tanto a Harry y Albus de los avances que el Ministerio había hecho durante la noche.
–Hemos hablado con los dirigentes mágicos en casi todos los países al rededor del mundo. El número de víctimas es enorme, tanto para los muggles como para los magos, y el daño es terrorífico. Sin embargo, sabemos que aquellos muggles que sobrevivieron al lanzamiento del hechizo durmiente y a sus secuelas inmediatas tienen por lo menos probabilidades de sobrevivir al mismo. Esta mañana, he creado una nueva Situación de Emergencia Oficial en el Ministerio para coordinar la respuesta mágica a la situación aquí en Inglaterra, y así colectar y dispersar información acerca de los eventos y los esfuerzos de rescate. Será también nuestro punto de contacto con los gobernantes de otros países acerca de la situación, para la coordinación de esfuerzos y asistencia mutua. He invitado a los dirigentes mágicos a reunirse en una asamblea en nuestro Ministerio mañana y así discutir nuestros recursos y respuestas mientras planeamos como actuar. El mundo muggle es una absoluta desgracia, y necesitamos hacer algo ahora si queremos que esté disponible para ellos cuando despierten.
Harry no quería verse envuelto en lo que suponía era la responsabilidad cívica de los dirigentes mágicos, y sintió que Madame Bones estaba probablemente esperando que lo hiciera.
–Tengo fe en los respectivos dirigentes de cada país para determinar qué pasos deberemos tomar para reparar y preservar tanto del mundo muggle como sea posible. Es también un asunto de encontrar y ayudar a squibs que no sabían que tenían magia, y que probablemente están desenfrenados por lo que ven; trajimos bastantes aquí cuando recuperamos a los familiares de estudiantes. Les dejo a ustedes y al resto de los dirigentes el desarrollo de planes para direccionar lo que hay que enfrentar, y para movilizar los recursos que están habilitados para ellos. No voy a ejercer un rol en ese trabajo, ni dirigirlo. No me necesitan para eso.
Madame Bones asintió en signo de comprensión. No había esperado que Harry quisiera un papel en todo este asunto, pero pensó que era apropiado comentárselo.
Harry le preguntó.
– ¿Permitiría que el señor Shacklebolt trabajara con nosotros aquí en algunos asuntos que quisiéramos aclarar? Si necesitamos adentrarnos en la comunidad, o conectar con el Ministerio en base a ciertos asuntos, su participación como miembro del equipo de Hogwarts sería muy valiosa.
Kingsley se mostraba muy complacido por ser consultado. Madame Bones no dijo "no" pero sí quería saber qué, exactamente, iba a estar haciendo el equipo de Hogwarts.
Severus señaló las áreas que parecían requerir el trabajo más inmediato.
–Hemos notado el impacto del hechizo de Voldemort en aquellos que llevan la Marca Tenebrosa; unas cuantas muertes, varias reducciones al estado squibs o incluso muggle, un drenaje masivo en sus poderes. Personalmente creo que Voldemort ve esto como una fuente de poder perpetuo para sí mismo, y queremos aprender cuanto nos sea posible sobre la Marca Tenebrosa y la forma en que opera, para encontrar formas de remover, bloquear o revertir el proceso. Tenemos un grupo aquí con acceso a algunos textos antiguos que podrían almacenar alguna información sobre esto, pero nos gustaría encontrar a más Mortífagos y comenzar a divulgar su corriente situación. Sospecho que muchos nunca imaginaron que esto era lo que Voldemort planeaba hacerles, y si toman conciencia sobre los destinos de algunos de sus rangos, por lo menos unos pocos vendrán aquí a trabajar con nosotros. Necesitaremos la asistencia de Kingsley para contactarlos, y asegurarnos de que la información llegue a las manos correctas. ¿Se encuentra su Oficina de Prensa involucrada en esto?
–Hemos puesto un miembro del personal de la Oficina de Prensa en la Oficina de Situaciones de Emergencia, y ya ha formado contactos con los periódicos. El Profeta se ha mostrado sorprendentemente serio acerca de esto. ¡Su reportaje, por primera vez, es directo y honesto!
–Eso es una sorpresa, pero una buena noticia. ¿Accedería a dejar al señor Shacklebolt en Hogwarts sabiendo ésta parte del enfoque general de nuestro trabajo? A medida que los eventos se desarrollen, podríamos movernos hacia otras direcciones, y puede que no haya oportunidades de informarles de antemano.
Madame Bones miró pensativa hacia Severus, luego hacia Harry.
–Creo que sería bueno tener al señor Shacklebolt aquí, quizás para proveer asistencia en la seguridad, y cualquier otra cosa que sea requerida por él, o el Ministerio, si es necesario. Lo designaré como mi Represente Especial en el Anexo del Ministerio en Hogwarts.
Harry intervino otra vez.
–No sabemos cuáles son los planes de Voldemort a seguir. Si podemos encontrar a alguien con quién haya compartido algún elemento de sus planes, o que haya observado cualquier cosa que podría darnos una pista, o que tenga alguna otra teoría acerca de sus intenciones, queremos encontrarlos y averiguar lo que sepan. También debemos movernos en base a su reacción de lo que hemos hecho para alterar sus planes. Claramente, él espera que los muggles mueran, ¿cómo responderá cuando se entere que no están en peligro? Imagino que espera también varias muertes por parte de brujas y magos, y estamos todos vivos a causa del pulso de magia que envié. ¿Cómo reaccionara al vernos a todos despiertos y dando vueltas por ahí? Hemos escuchado a los elfos domésticos de aquí referirse a él como "El Que Caminará Solo." ¿Qué medidas tomará cuando nos vea caminar a todos por el mismo camino que él?
Kingsley asintió a esto.
–Así que esto no ha terminado, ¿verdad?
Albus respondió en favor de todos.
–Me temo que puede simplemente estar comenzando.
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Albus escoltó amablemente a Amelia Bones hacia la red flú, y así dar tiempo a Harry y Severus para tener unas palabras en privado con Kingsley.
–Supongo que puedo ver tus intereses en remover o inactivar la Marca Tenebrosa, Severus, ¿pero ayudar a los Mortífagos? ¡Son el enemigo! ¿Por qué demonios querríamos protegerlos de su elección de amo?
Un parpadeo de molestia cruzó las facciones de Severus, pero por una vez, contuvo su temperamento.
–Estoy seguro que ninguno de ellos esperó ser usado de esta manera, y por lo que hemos visto, muchos de ellos se encuentran en un estado lamentable, sin mencionar el que varios están muertos. Estoy seguro que más de unos cuantos se replantearán su elección de Voldemort como su amo y estarán encantados de tener una forma de abandonarlo. Voldemort se alió con muchos de los magos y brujas más poderosos del mundo, por lo tanto, si permanecen con él, serán potenciales enemigos. Mejor que sean nuestros aliados, o por lo menos que no formen parte de la batalla. Lucius Malfoy fue traído ayer por su hijo a Hogwarts; lo hemos instalado en una habitación de la Casa Slytherin para que se recupere. Me dijo meses atrás que él creía que el Señor Tenebroso se había vuelto loco. No creí que hubiera dejado a los Mortífagos hasta esa gresca en el Ministerio. Sospecho que Voldemort vio eso como la deserción de sus filas. Sin embargo, Lucius ya se encontraba preocupado un tiempo antes y puede que tenga información de uso para nosotros. Sugiero que hablemos con él primero.
Kingsley estaba fascinado y horrorizado a la vez.
– ¿De veras piensas que puedes confiar en alguien así?
–Harry lo hace. Y yo confío en él.
Harry le sonrió cálidamente a Severus por ese comentario.
–Se encuentra en un nuevo camino. Lo vi ese día en el Ministerio. Una vez que tomó esa decisión aquel día, plantó pie en ése camino y no hay vuelta atrás. No tiene alternativa.
Kingsley frunció el ceño ante esto; no tenía absoluta idea sobre qué estaban hablando he hizo una nota mental de pedirle luego una explicación a Severus.
Kingsley se unió a Severus en la red flú hacia su oficina en las mazmorras, y Albus le pidió a Harry que se le uniera por un minuto y así echar un vistazo al espacio creado por los elfos domésticos para su uso. Mientras la red flú lo transportaba lejos, Severus estaba seguro de haber escuchado un fuerte y lastimero gruñido de parte de Harry. Tal como Albus sospecho, necesitaba unos pocos retoques.
Albus le ofreció a Harry su red flú para partir también, pero el muchacho quería una breve caminata para así aclarar su cabeza. Antes de pisar en las escaleras giratorias, preguntó.
– ¿Por qué, en nombre de Merlín, me buscarían a mí para arreglar toda ésta situación? ¿Qué puedo yo hacer?
–Hiciste justamente lo que ellos necesitaban que hicieras, mi muchacho. Darles inspiración, coraje y un propósito. Amelia aquí en Britania y sus contrapartes en países a lo largo del mundo; ellos son los que saben lo que su gente necesita en estos momentos, y cuáles son sus recursos y la infraestructura que pueden proporcionar. Déjaselo a ellos. El lugar dónde te necesitamos, Harry, es donde siempre te hemos necesitado: en ayudarnos a entender los planes de Voldemort, para así frustrarlo y derrotarlo. Ése no será un ejercicio de país en país. Tu posición será esencialmente el unificar los recursos del mundo mágico para librarnos de toda la maldad y locura de Voldemort.
–Debería regresar a traducir esos libros entonces. Puede que haya algo ahí que los ayude a usted y a Severus a detectar cualquier cosa que se encuentre en los Libros de la Luz que sea capaz de derrotar las persistentes ideas ofrecidas en sus Libros de la Oscuridad.
–Sí, y no. En estos momentos, y si me permites sugerir, creo que deberías reunirte con tu padrino y Remus, y con tus amigos y compañeros de clase. Averigua qué están haciendo y experimentando, y escucha sus historias. Ellos también necesitan tu inspiración. Tu amigo Ron conoce las formas de batalla, por tanto ponlo a pensar en las batallas que están por venir. Los que han estado fuera rescatando personas; ¿qué es lo que han visto y cómo se sienten al respecto? ¿Tienen alguna idea u observación? ¡Y por Merlín, no podemos ni imaginar lo que la señorita Granger está investigando mientras hablamos! En ayudarte a descubrir tu verdadera naturaleza, ha hecho ya tanto, ¡y sin embargo sospecho que todavía hay tanto que puede venir de su parte! Podemos reunirnos todos después del almuerzo, y dedicarle tiempo ésta tarde a los negocios de traducciones y estrategias.
Harry asintió. Sabía que el Profesor Dumbledore estaba en lo correcto. Pero no eran solo su familia y amigos quienes necesitaban a Harry. Él los necesitaba desesperadamente, para un respiro de normalidad, para recordar por unos pocos momentos quién era él y que otros lo amaban. Se dirigió al Gran Salón para averiguar qué estaba sucediendo allí.
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El Gran Salón era un hervidero de charlas y actividad, la cual Harry encontró increíblemente reconfortante. Por supuesto, no podría infiltrarse desapercibido, pero a la par que un remolino de gente se acumulaba a su alrededor, igual de rápido, Ron, Neville y Sirius cubrieron sus flancos, y gentilmente lo dirigieron fuera de la multitud hacia un asiento en la mesa de Gryffindor. Todos sus amigos estaban claramente felices de verlo, y era maravilloso que junto a ellos, él era solo Harry. Era prácticamente como un día normal, excepto por el hecho de que Sirius se encontraba sentado junto a ellos, y Charlie Weasley estaba en la mesa, con Draco viéndose apenas fuera de lugar rodeado de tantos Gryffindor.
–Bueno, ¡parece que muchos la pasamos bien anoche! Entonces, ¿Qué está pasando? ¿De qué me perdí?
En medio de chismes y comentarios de los demás, Ron se encargó de actualizarlo en lo que había ocurrido en los expandidos y aún en pie esfuerzos de rescate, alcanzando ahora a familias extendidas y mejores amigos, y con la ayuda de Remus, a ayudar a algunas personas que quedaron atascadas en accidentes en su camino a casa. Había descubierto que en la forma de Lunático, era capaz de levantar pequeños automóviles, e incluso paredes de edificios medio colapsadas; hazañas que claramente impresionaron a los demás.
– ¿A quién se encuentran afuera ayudando? ¿Alguien que no sea de Hogwarts?
Neville respondió a eso.
–Ningún mago, pero de todas formas, los lugares a los que hemos ido no son en los que esperarías ver magos. Sí vimos unos cuantos squibs vagando por ahí. El Profesor Dumbledore nos pidió que obtuviéramos sus nombres y direcciones, y que así el Ministerio pueda suministrarles ayuda, y quizás hacer que se involucren en los esfuerzos de rescate.
–Madame Bones estuvo aquí esta mañana. El Ministerio estará organizando esfuerzos para hacer lo posible en preservar el mundo mágico, y estoy seguro de que harán algo para cuidar de los squibs. Asignó a Kingsley Shacklebolt al Anexo del Ministerio aquí en Hogwarts, para que nos ayude y los mantenga informados. Me enerva que no sepamos si Voldemort está al tanto de lo que hemos hecho, o lo que hará cuando se entere.
Hermione levantó la vista de una pila de libros.
–Siempre has sido capaz de sentir cuándo Voldemort experimenta emociones fuertes, por lo tanto imagino que serás capaz de saber si está realmente molesto. ¡No puedo imaginarlo no estarlo cuando se dé cuenta que has arruinado completamente sus planes! Lo que quiera hacer puede no estar claro, pero sospecho que te darás cuenta a la par que él.
–Bueno, tendremos que estar preparados entonces para ajustar nuestra estrategia en la marcha, si no podemos planificarla por adelantado. Ron, si tienes alguna idea sobre estrategias para esto, avísame. Hermione, ¿has encontrado algo interesante allí?
Por supuesto, Hermione había encontrado muchas cosas interesantes, pero llegó a la conclusión de que tendría que sintetizarse a sí misma en favor de su audiencia.
–He estado investigando sobre los Wyrms Negros. Los registros que los describen como meros animales, según la descripción de Fudge, se remontan a solo doscientos años atrás. No hay absolutamente nada acerca de ellos antes de eso. Luego recordé que tú los llamaste "dragones" asique busqué dentro de esos parámetros. Ninguna información acerca de dragones incluye nada de lo que tú describiste, pero encontré un ensayo acerca de los mitos de la creación de los dragones, asique investigué sobre eso.- Extrajo un libro desgastado y polvoriento de la pila frente a ella y lo abrió en una página marcada con un pequeño pedazo de pergamino. Había un dibujo hecho a pluma y tinta que mostró a los demás, creando miradas de vago disgusto y alarma de todos menos Harry y Sirius. Apenas se miraron entre ambos asintieron y Sirius confirmó.
–Ésos son, es exactamente como lucen.
–Bueno, la cosa es que, éste libro dice que éste es un dibujo de una criatura mítica, una que nunca existió. La historia cuenta que ésta era una raza de criaturas que vivían sobre y en la tierra, que eran muy mágicos, muy inteligentes. Sus corazones fueron fijados en el cielo, y por más de mil años, comerciaron mucho de lo que tenían como Wyrms Negros por la habilidad de volar, y así convertirse en los dragones voladores que conocemos.
Harry movió la cabeza y se encogió de hombros.
–No, Mione, están aquí hoy en día. Igual que en el dibujo. Con los que hablé en las Líneas Ley dijeron que todos nacieron sabiendo como viajar entre los túneles, a pesar de que prefieren el sol en lugar de la sombra algunos de ellos se adentraron en la Tierra.
Hermione frunció el ceño con molestia hacia el libro. No culpaba al manuscrito por estar equivocado, pero estaba muy molesta con el investigador que lo escribió hace tanto tiempo por saber tan poco sobre el tema. Buscaría más allá en la mitología entonces, para ver si existía alguna información útil sobre los Wyrms. Si Harry dijo que iban a ser sus aliados, sentía que él debería saber en qué formas podrían ser capaces de contribuir.
Sirius se encontraba curioso acerca de la visita de la actual Ministra.
–Le pregunté al Profesor Dumbledore sobre eso. Cree que ella solo quería informarme en caso de que quisiera involucrarme. Le dije que éste era su trabajo y que ella y el Ministerio deberían hacerlo, y pareció estar bien. Al parecer mi trabajo se limitará a lidiar con Voldemort en última instancia. Es visto más como un flagelo a nivel mundial, en vez de nacional, y al parecer yo represento la respuesta internacional.
Sirius miró a su ahijado con ojos increíblemente tristes ante su respuesta; qué carga tan horrible de poner sobre los hombros de alguien tan joven, ¡y qué triste que el mismo joven aceptara la carga como su suerte en la vida! Harry atrapó la expresión triste en los ojos de su padrino, y le dio a Sirius una sonrisa.
–Está bien, Canuto. En verdad.
Harry se puso a escuchar los chismes que corrían por la mesa y se entretuvo bromeando un rato, hasta que vio a Severus en la entrada del Gran Salón, aparentemente buscándolo a él, momento que aprovechó para despedirse, prometiendo regresar más tarde para seguir comparando datos.
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Severus y Kingsley acababan de tener una muy interesaren conversación con Lucius Malfoy. Ambos, Kingsley y Lucius estaban atentos el uno del otro, y era solo la palabra de Severus acerca de que Harry confiaba implícitamente en ambos los que les permitió mantener la corriente de información fluyendo, una vez pasado el obstáculo.
Lucius no había estado en condiciones de mantener una conversación hasta ése día, y aún se encontraba bastante débil. Le ofreció a Severus su gratitud por la hospitalidad de la Casa Slytherin, y los cuidados de Madame Pomfrey. De repente, la Mansión Malfoy no se sentía tan segura como antaño, y Lucius aún no confiaba en el nuevo y valiente mundo formándose alrededor de Harry Potter como para ir a un lugar tan público como San Mungo.
Su habitual expresión controlada y altanera se vino abajo una vez Severus le comentara la suerte que habían sufrido algunos otros Mortífagos. Severus creyó haber viso horror y miedo, de seguro, en sus movimientos Lucius no pudo ocultar la rabia.
–Severus, te dije meses atrás que el Señor Tenebroso se había vuelto loco. Se había puesto muy reservado. Quizás no receloso o desconfiado, pero de repente no quería a sus Mortífagos a su lado. Narcissa mencionó que incluso mandó a Bellatrix lejos. Cuando convocaba a alguno de nosotros, era para muy específicas, y cortas tareas, para las cuales nunca éramos informados del propósito final. Su serpiente Nagini se encontraba con él constantemente, y se susurraban entre ellos todo el tiempo, a pesar de saber que obviamente ninguno de nosotros podía entender el lenguaje en el que hablaban. En el pasado, cuando el Señor Tenebroso estaba planeando algo, se mostraba muy jactancioso. Incluso si decidía no compartir los detalles de lo que estaba haciendo, realizaba referencias frecuentes de eventos que le recordarían al mundo su grandeza. No dijo absolutamente nada acerca de sus planes o su impacto, pero si había una pizca de presunción, una certeza. Después del llamado, no supimos nada acerca de él, hasta que nos drenó nuestros poderes –Lucius sonaba aturdido todavía por sus palabras mientras les hablaba
–Señor Malfoy, el señor Potter nos dijo que quiere investigar la Marca Tenebrosa, y ver si hay alguna posibilidad de bloquear el drenaje, o remover la Marca, cualquier cosa, para prevenir que El Que No Debe Ser Nombrado retire cantidades de energía a través de ésta.
Ante esto, Lucius le echó una mirada de total incredulidad a Severus.
– ¿Potter? Admito por completo que su poder mágico se encuentra casi más allá de la comprensión. Pero muchas de las más brillantes mentes del mundo han tratado por años de deshacer estas Marcas, sin ningún éxito.
Severus sonrió ante esto, y trató de contener el gesto fuera de su rostro.
–En realidad, Lucius, sospecho que ésta búsqueda recaerá en su amiga, la señorita Granger. ¿Sabías tú que fue ella quien descubrió todos esos antiguos hechizos y se los enseño al señor Potter? Además, tienen acceso a algunos textos antiguos de los que sospecho son contemporáneos a los que imagino habrá consultado el Señor Tenebroso para crear la Marca. Me encuentro bastante optimista.
Lucius dirigió una mirada incrédula hacia Kingsley, quien parecía completamente imperturbable por éste lado de la conversación.
–Como estaba diciendo, señor Malfoy, tenemos interés en encontrar una forma de escudar a aquellos que portan la Marca de un futuro drenaje de sus poderes. Mientras que la intención es prohibirle Al Que No Debe Ser Nombrado el tener acceso a sus poderes, habrá beneficios en esto mismo para usted. Empezaremos a hacer públicas las historias del impacto que sufrieron aquellos que fueron drenados por la Marca a causa del hechizo; El Profeta comenzará a lanzar los obituarios ésta tarde. Asumo que muchos de sus asociados se encontrarán en peor estado del que sufre usted en estos momentos y estarán bastante disconformes al saber que muchos murieron a causa de ésta experiencia. Puede que incluso necesiten asistencia médica, por lo cual me pregunto si podríamos establecer una enfermería en la Mansión Malfoy, para proveer cuidados de una manera más privada. Segundo, el Profesor Snape y yo creamos una lista de aquellos que él conocía como portadores de la Marca Tenebrosa, así que puedo intentar ubicarlos de manera rápida e instalarlos en su mansión. ¿Podría por favor confirmar dicha lista y hacernos saber si cree que hay más personas que deba intentar localizar?
Lucius no sabía muy bien que creer acerca de esto. ¿Sería una trampa?; ¿Juntar a todos los Mortífagos para luego matarlos? Él confiaba en Severus, por lo menos como para no estar detrás de un complot con el fin de ejecutar a un grupo de agotados e indefensos magos y brujas. Potter era más como un enigma a cada día transcurrido, pero su naturaleza Gryffindor le aseguraba que no sería engañoso. Un servicio como éste podría ser de su beneficio en el camino, con mínimos riesgos hacia él mismo, al menos por ahora. Con un asentimiento, Lucius tomó la lista que se extendía frente a él.
–Haré unos arreglos con mi hijo, Draco, para ajustar las protecciones de la Mansión y así admitirlo a usted y a aquellos portadores de la Marca que pidan asilo, y para establecer un espacio apropiado para atender a los que lo necesiten. Le daré la información de contactos de medimagos en los que confío para ésta tarea y le pediré que se ocupe de ello a su vez. Todo debería estar listo a media tarde.
Revisó la lista, y agregó dos nombres de personas que creía podrían haber tomado la Marca luego de que Severus abandonara las filas del Señor Tenebroso.
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Severus hizo un rápido resumen de lo que había sido discutido con Lucius. Harry tenía unas preguntas acerca de la idea de instalar una enfermería en la Mansión Malfoy. El pocionista había sido un invitado allí muchas veces, y le describió el gran salón de baile en la casa principal, y un pabellón en el jardín con varias habitaciones de buen tamaño.
–Lucius tiene contactos envidiables en el mundo médico; conoce varios hábiles y discretos medimagos. Y las protecciones en la Mansión, que se extienden hasta los jardines, rumorean ser las más poderosas en cualquier residencia privada en Britania. Kingsley, ya hemos traído a los Mortífagos que tienen hijos estudiando en Hogwarts. Si en algún momento, creemos que deberían ser trasladados a la Mansión Malfoy, podemos arreglar su partida. Por ahora, ¿planeas encargarte de estas visitas tú solo? ¿O preferirías que yo o alguno de los demás te acompañara?
–Dudo que sea necesario. Si el destino es la Mansión Malfoy, no espero que se nieguen a ir, en el caso de que tengan fuerzas para intentarlo siquiera. Traeré unos trasladores para hacer el viaje más eficiente, en caso de ser necesario, luego de que haya hablado con el joven Malfoy. Si no te importa, planeo decirles que Harry Potter y Lucius Malfoy les han ofrecido un refugio y una oportunidad de recuperarse en la Mansión bajo el cuidado de uno de los medimagos personales de la familia. ¿Es eso aceptable?
Harry accedió, mientras Severus se dirigía una vez más hacia las puertas del Gran Salón, ésta vez para informar a Draco, para que así pudiera hablar con su padre.
Mientras Draco y Charlie Weasley (Draco insistió en que Charlie lo acompañara) fueron a visitar al mayor de los Malfoy, Harry le preguntó a Severus.
– ¿Crees que podría tener unas palabras en privado con el señor Malfoy luego de que se hayan ido?
–Debo imaginar que se sentirá halagado, Harry. ¿Sobre qué querías discutir con él?
–Quiero repasar con más detalle alguno de los cambios que observó recientemente en el comportamiento de Voldemort. Tuvo meses de contacto con él luego de que dejaras tu rol como espía, así que tal vez si hacemos esto de forma muy cuidadosa, y en un ambiente más privado, puede que reconozcas pequeños cambios en sus patrones o planes.
Severus estaba secretamente aliviado de que Harry pretendiera incluirlo en la reunión. No había poder en el mundo que le hubiese permitido el dejar a Harry solo con Lucius., y estaba contento de no tener que hacerse problemas por eso. Simplemente, no se fiaba de Lucius para con Harry.
–Además, Hermione me mencionó algo que Sirius le dijo. Se ofreció a traerle unos libros de la biblioteca Black de Grimmauld Place; ¿recuerdas, los que le trajo Remus ayer a la oficina del Director? Dijo que la de la familia Black era una de las más extensas de las bibliotecas mágicas privadas en Britania, sólo en segundo lugar comparada con la de los Malfoy. Espero que nos conceda acceso a ésta. Y recuerda, Voldemort le entregó al señor Malfoy el diario privado de Tom Riddle para que lo custodiara. Así es como llegó a Hogwarts en mi segundo año; lo puso en el caldero de Ginny Weasley cuando nos cruzamos con ellos en el Callejón Diagon. En verdad espero que Voldemort le haya confiado con más que sólo el diario; ¿quizás algunos manuscritos, por ejemplo?
Severus se encontraba muy divertido por el persistente uso que tenía Harry sobre los títulos a la hora de dirigirse hacia los adultos; ¡Estaba consciente de que haría añicos cualquier esperanza de una intimidad que albergaba el mayor de los Malfoy! Estaba también muy impresionado por la rapidez en que Harry y su pequeño grupo parecían unir pistas y hechos, y así llegar a fascinantes conclusiones.
– ¡Una excelente idea, señor Potter! –Harry le sonrió ante el elogio.
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Mientras Harry y Severus esperaban a que Draco y Charlie abandonaran la habitación de Lucius y así dirigirse a la Mansión Malfoy, Severus se deslizó en su oficina para rápidamente tomar pergamino y pluma con un encantamiento de dictado, vinculándolo con una protección que identificaría al hablante. Una vez estuvieran en la habitación de Lucius, un rápido encantamiento incrustado en un hechizo de silencio activaría las plumas, y una transcripción seria realizada del encuentro. De ésa forma, la señorita Granger tendría un documento para revisar; estaba seguro de que estaría encantada. Además, ¡esto era mucho más fácil que tomar notas!
Harry estaba impresionado de lo mal que Lucius se veía; cansado, encogido sobre sí mismo, incluso frágil; ¡y él era uno de los afortunados! Pero como Severus predijo, su ego estaba hinchado por la visita personal de Harry. Casi podía ver los engranajes girando en su mente, de cómo tomar partido de la situación.
–Señor Malfoy, espero que se sienta en condiciones de mantener una conversación con Severus y conmigo –Suavemente (demasiado para el gusto de Severus), Lucius respondió.
–Por favor, llámeme Lucius.
Para el alivio y/o júbilo de Severus, no estaba seguro cuál, Harry no hizo caso de la petición y continuó.
–Nos gustaría revisar cuántos detalles le sea posible recordar acerca del comportamiento de Voldemort en relación al pasado año, cuando comenzó a ver los cambios que lo llevaron a comentarle a Severus su creencia acerca de que se había vuelto loco. Con su permiso, señor Malfoy, Severus ha encantado unas plumas en su oficina para tomar notas sobre la conversación, para que podamos trabajar en ellas más tarde.
Severus realizó el hechizo para activar las plumas ante el asentimiento de Lucius. Casi una hora más tarde discutieron algunos de los puntos ya comentados con Kingsley, pero haciendo hincapié en los detalles, con Harry y Severus sondeando y haciendo más preguntas.
–Gracias por los detalles, señor Malfoy. Espero que podamos percibir algunas pistas en todo esto y así descubrir los planes de Voldemort, si es que hay algo más grande de lo que ya ha hecho. Me quedan unas pocas preguntas, si le parece bien –En realidad, Lucius parecía a punto del desmayo, pero aparte de aceptar una taza de té de los elfos de la casa, estaba dispuesto a continuar.
–He escuchado acerca de su biblioteca en la Mansión, con fama de ser la más completa de las bibliotecas privadas mágicas en Britania. Necesitamos acceso a varios esotéricos, antiguos materiales, no disponibles en Hogwarts, o prácticamente ninguna biblioteca general, y en verdad espero que acceda a concedérmelo a mí, Hermione Granger, Severus, y el Profesor Dumbledore. Me gustaría que Draco trabajara con nosotros, aunque supongo que ya cuenta con el acceso. Sospecho que posee el tipo de material que necesitamos – Lucius fue rápido al acceder.
–También, señor Malfoy, imagino que en debidos momentos, Voldemort le confió algunos de sus viejos libros, para custodiarlos. Estoy bastante interesado en saber si le dio alguno que fuera particularmente antiguo, o escrito en algún lenguaje extranjero.
Lucius fue claramente tomado por sorpresa ante ésa pregunta. Nunca admitió nada acerca del diario de Tom Riddle a Harry o ningún otro en Hogwarts, pero sabía lo que Harry creía. Pensó acerca del resto de los libros que el Señor Tenebroso le diera. Con un fatalista encogimiento de hombros interno, se dio cuenta que no tenía opción. Sus pies ahora puestos en el sendero de Potter, y no en el del Señor Tenebroso. Los secretos que una vez fueron entre él y Lord Voldemort no podrían ser mantenidos, si Potter los necesitaba.
–El Señor Tenebroso me ha dado una serie de volúmenes con el correr de los años, algunos para su protección, y algunos para añadir a mi colección personal. Los mantengo todos juntos en un gabinete protegido, porque francamente, no sabía qué hacer con ellos. Muchos están escritos en inglés antiguo, sin mencionar que otros tantos se encuentran en un lenguaje que ninguno de mis investigadores o yo hemos podido descifrar con el correr de los años.
–Como estoy seguro ha deducido en estos momentos, mientras estudió en Hogwarts, Tom Riddle encontró la Cámara de los Secretos. Ésta no era simplemente la casa de un basilisco. Durante su tiempo en Hogwarts, Salazar Slytherin la utilizó como su guarida personal, y más importante aún, almacenó su biblioteca personal allí. Poseía una remarcable selección de libros, en un tiempo en que cualquier libro se consideraba raro y preciado. Severus, ¿aproximadamente cuántos libros supones que habrá en la biblioteca?
Severus comprendió lo que Harry estaba haciendo, y se encontraba muy impresionado. A Lucius se le hacía agua la boca ante la idea de que la librería personal de Salazar hubiera sobrevivido, y Harry estaba reforzando el entendimiento de Lucius acerca del papel que Severus cumplía al informarle que habían estado en la Cámara juntos. Harry hubiera sido un positivamente aterrador Slytherin de haber aceptado la oferta inicial del Sobrero Seleccionador; ¡Los demás de la Casa Slytherin no hubieran tenido una oportunidad!
Ante la pregunta de Harry respondió.
–Es difícil de decir, aunque ahora que lo mencionas, deberíamos en algún momento catalogar de manera cuidadosa todo lo que se encuentra en la biblioteca. Yo estimaría que hay quizás alrededor de quinientos libros y manuscritos allí, incluyendo anotaciones. Los espacios vacíos contenían quizás otros veinte o treinta libros y manuscritos, y por supuesto, tú tomaste, qué, ¿una docena de éstos últimos?
Los ojos de Lucius casi salen de sus órbitas al escuchar esa información. ¿Podría ser posible que él hubiera tenido, en sus propias manos, material perteneciente al legendario Salazar Slytherin?
Como si Harry hubiera leído sus pensamientos, continuó.
–Me gustaría ver esos libros. Por supuesto, podrían ser simples libros viejos que Voldemort compró por su cuenta, pero es posible que sean libros tomados de la Cámara en su época de estudiante. De todas formas, descubrir qué tipo de cosas eran de interés para Tom Riddle o Voldemort puede ayudarnos a entender más acerca de la dirección que está contemplando en estos momentos.
Severus estaba pasándolo a lo grande, viendo a su viejo amigo retorcerse. Y sabía que lo mejor estaba aún por venir; se permitió a sí mismo una sonrisa interna ante la situación. Por el aspecto de las cosas, era muy probable que Lucius viniera, en sus pijamas, cuando Harry trajera los manuscritos.
–Y los libros, en el lenguaje extraño, ¿qué puede decirme acerca de ellos?
–Debe haber quizás media docena probablemente. El Señor Tenebroso me los dio todos hará cosa de veinte años pidiéndome que los mantuviera a salvo. No parecía precisarlos en un futuro; nunca los pidió. Los revisé, pero no pude comprender el lenguaje. Hice que mis investigadores, al igual que algunos bien afamados epigrafistas los estudiaran, pero el lenguaje o escritura no es conocido.
Harry asintió ante esto.
–En realidad, señor Malfoy, yo creo que la existencia del lenguaje es conocida para muchos, pero la habilidad para hablarlo o leerlo es extremadamente rara. Es muy probable que los libros estén escritos en lengua Parsel.
Lucius quedó sin aliento ante esto.
–Encontré una docena aproximadamente de libros en lengua Parsel que Tom Riddle ni se molestó en mirar. Eran anotaciones que Salazar había hecho en temas referentes a magia de la Luz. En el otro extremo de la biblioteca, había una serie de espacios vacíos, donde otros libros, la mayoría de magia Oscura fueron removidos. Creo que Tom se llevó todas las anotaciones de Salazar acerca de magia Oscura. En verdad espero que le haya dado algunos de ellos a usted, y que me permita tomarlos por prestado.
Lucius parecía necesitar un minuto para encontrar su voz. Cuando lo hizo, todo lo que pudo lograr fue un sin aliento "Por supuesto, señor Potter." Más allá de eso, las palabras parecían fallarle.
Severus ya había determinado la logística que quería implementar.
–Draco está ajustando las protecciones para admitir a Kingsley Shacklebolt, tus medimagos, y aquellos Mortífagos que deseen instalarse en la Mansión Malfoy, y está realizando acomodaciones apropiadas para suministrar los cuidados necesarios. ¿Puedo pedirle que permita una conexión vía flú entre la red de la biblioteca en la Mansión y la de la oficina del señor Potter en Hogwarts? Sería un pequeño grupo intentando tener acceso, y quiero que sean capaces de hacerlo de forma rápida y privada. ¿Permitirías que removiéramos materiales de interés hacia la oficina del señor Potter aquí para rápidas referencias? Obviamente, colocaríamos los materiales antiguos junto a los protegidos y salvaguardados gabinetes que almacenan el resto de manuscritos valiosos; de ser necesario, podríamos guardarlos en la Cámara.
Lucius odiaba perder el control del acceso de sus premios de ésta manera, pero no vio forma de evitarlo. Quizás fuera capaz de llegar a un acuerdo con Potter en base a esta acomodación por algo más tarde; suponiendo, claro, que hubiera un "más tarde". ¿Posiblemente algunas traducciones? ¿Quizás una visita a la biblioteca de Salazar? Veía cierto potencial aquí.
–Por supuesto, Severus.
–Gracias, señor Malfoy. Le pediré a Draco que nos dé un rápido paseo por su biblioteca antes, y estableceremos un sistema para identificar cualquier material que removamos, para que no haya confusión alguna y nos aseguraremos de devolverle todos sus libros y otros documentos cuando terminemos.
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Después de que Harry y Severus se fueran, Lucius tomó un momento para meditar la absolutamente asombrosa suerte que ése bastardo de Snape tenía al estar enlazado con Potter. Poniendo por completo a un lado que el muchacho había madurado en un absolutamente delicioso joven, ¡el poder que poseía! Acceso a la biblioteca personal de Salazar Slytherin, y sus notas personales, ¡en sus propias manos! Nada había sido dicho, pero Lucius asumió que Potter podría traducir esos documentos escritos en Parsel, también.
Lucius nunca tenía celos, no con todos sus recursos, su excepcional buena apariencia, su pedigrí. Por lo menos, no tuvo celos hasta ése día.
– ¡Maldito seas, Snape!
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