«Amnesia, jb»

By NicoleEspinall

85K 3.8K 232

La ordenada vida de la estudiante de Psicología, __(tn), toma un giro hacia la locura cuando encuentra el tem... More

Capitulo 1: "No recuerda nada de su vida"
Capitulo 2: "¿tu me...me conoces?"
Capítulo 3: "¿Ves algo que te gusta?"
Capítulo 4: "Dime lo que esta pasando"
Capítulo 5: "No quiero tu compasion, _(tn)"
Capítulo 7: "No quiero estar solo"
Capítulo 8: " Drew, no tienes que hacer esto"
Capítulo 9: "Acuestate conmigo"
Capítulo 10: "Entonces me tienes miedo"
Capítulo 11: "Lo se, nena"
Capítulo 12: "Llama a la policia"
Capítulo 13: "Suelta el arma, te prometo que es bueno"
Capítulo 14: "¿Celos?"
Capítulo 15: "Deja de retenerte, se que sientes algo por mi"
Capítulo 16: "Buena manera de matar el romance, _(tn)"
Capítulo 17: "¿Demasiado, nena?
Capítulo 18: "Vuelve a tu vida"
Capítulo 19: "oh, eres tu"
Capítulo 20: "Lo recuerdo todo"
Capítulo 21: "¿Tenemos que ir?"
Capítulo 22: "No quiero que eso te moleste"
Capítulo 23: "shh. Ven aqui"
Capítulo 24: "Solo dime lo que sabes"
Capítulo 25: "¿Crees que shelby sabe algo?"
Capítulo 26: "Soy Drew"
Capítulo 27: "Hay mucho que descubrir en este momento..."
Capítulo 28: "¿Por que estaba aqui?"
Capítulo 29: "¿Por que has vuelto?"
Capítulo 30 - Final
Agradecimientos
| Aviso|

Capítulo 6: "Quedate aqui conmigo"

2.9K 137 7
By NicoleEspinall

Tomé una respiración profunda, abrí la puerta del baño, y me dirigí hacia la sala de estar. Esperé verlo haciendo la cama en el sofá, pero ya no estaba allí. Revisé la cocina y el comedor. Ambos vacíos.

Su archivo estaba abierto y esparcido sobre la mesa del comedor. Las fotos de la escena del crimen y un correo electrónico del Profesor Clancy estaban en la cima de la pila. El correo era breve, pero contenía una severa advertencia contra involucrarse con Drew, reiterando la violencia en la escena del crimen. Maldita sea. No tenía la intención de que Drew viera esto. Corrí hacia el pasillo.

Drew estaba retirándose por el pasillo, pero cuando llamé su nombre, él se detuvo y se volvió hacia mí.

-Por favor. -Fue la única palabra de súplica que pude verbalizar.

Quería decir tantas cosas, por favor quédate, por favor no me dejes, por favor no seas el hombre que dicen que eres...

Él pareció entender en un nivel tácito y comenzó a caminar hacia mí. Me encontré con él a mitad del camino, como atraída hacia delante por una fuerza mayor.

-Esas cosas en mi archivo. -Suspiró y se frotó la cara con las manos- No soy seguro. Tú ni siquiera me conoces.

-Te conozco mejor que nadie. Confío en ti. -Sabía una cosa con certeza; no quería que se fuera.

-__(tn)... -Mi nombre en sus labios era el sonido más suave. Su voz ronca y profunda era increíblemente sexy.

-¿Qué? -Susurré, dando un paso más cerca.

-Sobre el asesinato... -Apretó los puños a los costados.

Mi estómago se cayó. Oh mierda. Tal vez esto fue una terrible idea. Drew no parecía violento o peligroso para mí, pero ¿qué tan bien lo conozco realmente? Ni siquiera él se conoce.

-Honestamente no creo que tenga en mí... hacer algo así. Tuvo que ser en defensa propia, pero la verdad es que no lo sé con seguridad. Pero quiero que sepas, que puedes confiar en mí estando aquí contigo.

El asesino le dijo a la débil, joven chica. Me tragué el nudo en mi garganta, y lo miré a los ojos. Eran sinceros y amables, y estaban puestos en mí, buscando perdón. Confianza. Esa era la única cosa que tenía para ofrecerle, después de que se había abierto a sí mismo para ayudar en mi investigación.

-Lo se.

Él se quedó callado por un momento mientras me estudiaba.

-Gracias.

-De nada. -murmuré, mirando hacia mis pies.

-Se que no lo merecía, pero fueron tus visitas las que me ayudaron a través de las últimas semanas.

-A mí también. -admití.

Él parecía sorprendido con mi admisión. Levantó mi barbilla con sus dedos.

-¿Qué quieres?

-Quédate aquí conmigo.

-No debería estar solo contigo. Tal vez lo que dicen sobre mí es verdad.

-No creo que seas peligroso. Confío en ti.

-Tal vez no deberías.

Fue como un balde de agua helada sobre mi libido.

-Yo era tu sujeto de prueba, alguien a estudiar y experimentar con ver cómo respondía. ¿Eso era todo lo que fui para ti?

-No, Drew. Nunca te vi así. Probablemente debí haberlo hecho. Lamento que vieras el correo de Clancy, pero esa fue su advertencia porque él y el Dr. Andrews sabían que me estaba uniendo a ti, y mi amiga Liz me sacó esta noche para que conociera a un hombre porque ella dijo... -me detuve de decir algo vergonzoso- Ella dijo que necesitaba, um, tener algo.

-¿Tener algo? - Él arqueó una ceja.

Mierda. Mis mejillas se encendieron. Suficiente para no incriminarme con algo vergonzoso.

Me apartó el pelo de la cara. -Eres hermosa. Podrías tener a cualquier hombre que quisieras de rodillas rogándote.

-Sí claro.-dije pensativa.

Su mirada de preocupación se mantuvo. -Entonces... ¿lo hiciste? ¿Tuviste algo, quiero decir..?

Lo miré fijamente a los ojos, mi labio inferior haciendo pucheros sólo un poco.

-No.

Bueno, ese era el alcohol hablando. Usualmente nunca fui así de audaz. Pero él ya había admitido que estaba atraído por mí.

Él se inclinó, acercando sus labios a ras con los míos.

-No deberíamos hacer esto -susurró contra mi boca.

-Lo se -le susurré.

Mi cabeza sabía que estaba cruzando una línea profesional que no era apropiada, pero maldita sea si mi cuerpo no había recibido el memorándum. Yo quería sus manos en cada centímetro de mi. Me incliné más cerca, deseosa de sentirlo presionado contra mí.

Sus ojos se mantuvieron en los míos, mientras traía su mano hacia mi mandíbula.

Su pulgar se deslizó contra mi mejilla, rozando mi labio inferior. Mis labios se separaron ligeramente, en una invitación abierta para él.

-No deberíamos -susurró, pero sus ojos estaban llenos de caliente pasión.

-Por favor. -Mis ojos se cerraron mientras él se inclinaba y le dio un sólo beso a mis labios. Era suave y cuidadoso, casi inocente, como un beso entre amigos. Excepto que su boca continuó cernida sobre la mía.

Tracé con mi lengua su labio superior hasta que él abrió su boca. Cuando su lengua tocó la mía, una ráfaga caliente de calor se disparó justo entre mis piernas y dejé escapar un gemido irregular.

Drew se detuvo de pronto y se retiró.

-Sabes a licor. ¿Estás borracha? -Levantó mi barbilla, forzándome a mirarlo a los ojos.

-No borracha, sólo un poco tomada. -Me incliné hacia él, queriendo sentir su boca contra la mía de nuevo, pero él dudó besarme de nuevo.

-Quiero esto, __(tn), créeme, he pensado en esto desde que te vi la primera vez, pero no así. No cuando estás borracha. No cuando no eres capaz de pensar claramente sobre lo que quieres. Te arrepentirás de esto.

-No lo haré...

-Shh. -Me hizo callar con un dedo puesto sobre mis labios-. No me tientes. Mi fuerza de voluntad no puede soportar mucho más.

-Entonces cede. -Le sonreí tímidamente.

Respiró profundamente y dejó escapar un suspiro. -Mujer, eres problemas.

Deslicé mis manos por su pecho, amando la sensación de los músculos firmes de su pecho bajo su camiseta. Mis manos encontraron su camino por su pelo por detrás de su cuello y usé esto como palanca para traer su boca a la mía de nuevo. El beso comenzó suave y vacilante, sólo labios húmedos explorando al otro, pero pronto se volvió salvaje y caliente, nuestras lenguas coqueteando y saboreando mientras nos poníamos más cómodos. Él puede no recordar nada de su pasado; pero yo sabía una cosa con certeza, él era un maldito buen besador.

Él se apartó ligeramente, respirando con fuerza contra mi boca.

-Dime que pare.

Yo no podía. Mi voz no saldría. Yo sólo continué besándolo, deseando que esto nunca tuviera que acabar.

-__(tn), hazme parar.

-No, -respiré en su cuello, aferrándome a la vida en ello. Él gruñó cerca de mi oreja mientras yo movía mis manos hacia su trasero, tirando de él con firmeza contra mí. Sentí su gruesa erección presionada contra mi vientre.

-No pares -gemí.

Él se apartó de mí de pronto. Mis labios estaban hinchados y húmedos de su asalto de besos.

-Confío en ti.

-Si supieras en lo que yo pensaba... no confiarías en mí.

Mi corazón pulsaba en mi corazón.

-¿En qué piensas?

-Todas las cosas que quiero hacerte, pero no puedo. -Él pasó su pulgar sobre mi labio inferior.

Succioné mi labio dentro de mi boca y contuve el aliento.

-¿Cómo qué? -Susurré.

Él se inclinó hacia mí. Pensé que podría besarme, pero volvió la cabeza, inclinándose cerca de mi oído. -Estar dentro de ti. -susurró contra mi cabello- Hacerte venir.

Mi sexo se apretó al sonido de su sensual voz y un gemido entrecortado se deslizó fuera de mis labios. Oh Dios, él era caliente.

-Pero no haré eso. No puedo. -Él tragó bruscamente, su garganta estrechándose con esfuerzo.

Froté mis pechos contra él, esperando que cambiara de opinión. Mis pezones sensibles rozaban contra su firme pecho, lo que sólo conseguía ponerme más caliente.

-Por favor... Drew... -Respiré, continué frotándome contra él como un gato contra un poste para arañar.

-No aquí. -Tomó mi mano y me trajo dentro de mi apartamento, pateando la puerta para cerrarla detrás de nosotros y presionando mi espalda contra la pared. Me beso sin sentido mientras yo me retorcía contra él. Él agarró mi culo y presionó su erección contra mí. No estoy segura de cuánto tiempo pasó, pero mis bragas estaban empapadas, y nunca había estado tan excitada en toda mi vida.

Alcancé entre nosotros por el botón de sus vaqueros, pero su mano encontró la mía y me detuvo.

-__(tn), no. -Dejó escapar un gruñido frustrado y trabajó por mantener su respiración bajo control. Luego me dio un beso en la nariz.

- Has estado bebiendo. Por favor. Déjame llevarte a la cama.

-Dios, sí, -gemí.

Él se rió entre dientes. -Quiero decir que te arroparé para dormir.

Oh diablos. Había intentado sin éxito seducir al hombre que realmente quería. Mi pecho de pronto se sintió apretado, y tragué duro, forzando mis emociones a tomar un segundo plano. Asentí con mi consentimiento y me desenredé de él. No iba a llorar, pero maldita sea si no me sentía rechazada, traicionada.

Me dirigí hacia mi habitación, sin molestarme en encender la luz, ya que la luz de la luna que se filtraba daba suficiente luz para poder ver. Me desplomé sobre mi cama, esperando que él sólo me dejara sola antes de que rompiera en lágrimas que de seguro estaban por salir. Así que, por supuesto, él no lo hizo. Drew me siguió adentro, se arrodilló al lado de mi cama y me ayudó a meterme bajo las sábanas.

Cerré mis ojos y respiré profundo, lo cual sonó más como un suspiro de decepción.

-Oye. -Él apartó unos mechones sueltos de mi cabello fuera de mi rostro- ¿Qué pasa?

Me tragué el nudo gigante que se había alojado en mi garganta.

-Me siento como una idiota. Me lancé sobre ti, y... y... -Ni siquiera podía pronunciar las palabras. Fracaso. Épico.

Él continuó rozando mi cabello fuera de mi frente, alisándolo.

-Lo siento.

-Sólo déjame. -Presioné mis muslos juntos y apreté los puños.

Él me observó con una expresión de curiosidad. -Oh diablos, no puedo dejarte así. Déjame cuidar de ti esta noche.

Mis ojos se abrieron de golpe y mis latidos tomaron un ritmo incómodo. Quería decir que...

Él quitó las sábanas que estaban sobre mí y pasó sus manos sobre mis piernas desnudas. -Dime cómo hacerte venir.

Miré sus ojos, pero mi voz se negaba a cooperar. Él no me estaba rechazando, pero no pasó desapercibido para mí que él se negaba a compartirse a sí mismo conmigo. Por el momento, yo era impotente para detener esto. Necesitaba desesperadamente la liberación.

-¿Qué es lo que te gusta, hermosa?

Mi clítoris palpitaba con sus palabras. Oh, yo quería esto. No podía parar ahora ni por todo el dinero del mundo. Él se inclinó y besó mi boca con suaves mordiscos y tiernos besos castos.

-Tócame, por favor, -le supliqué.

Él se apartó de mi boca y con facilidad bajó mis pantalones cortos de algodón y mi ropa interior, removiéndolos por completo. Debí haberme sentido avergonzada, expuesta, pero no lo hice. Yo sufría por su toque. Él colocó su palma sobre mi vientre, sus dedos rozando mi tatuaje en su camino hacia el sur. Mi respiración se dificultó y no pude evitar levantar mis caderas de la cama, deseosa de sentir sus manos contra mí. Era como la fantasía que tuve sobre él, sólo que mejor de lo que esperé.

Sus ojos me devoraban y me encontré de repente agradecida de que Liz había reprendido mis hábitos de cuidado personal hace unos meses y yo estaba ahora con el hábito de afeitarme completamente desnuda. Él se inclinó más cerca y me dio un beso sobre mi cadera tatuada y no pude evitar dejar escapar un gemido. Sus besos continuaron a lo largo de mi vientre y en la parte superior de mi monte de Venus. El calor y el deseo inundaban sus ojos cuando él se apartó para mirarme.

Él levantó mis caderas para dar cabida a sí mismo en la cama y posicionarse cerca de mí. Me dio un beso en el vientre y soltó un suave gemido.

Se sentó de nuevo para admirarme, y pasó sus dedos sobre mi vagina bien afeitada. Usó sus pulgares para abrir mis labios internos, frotando suavemente con sus dedos sobre la humedad.

-Tan bella. -susurró.

No podía dejar de gemir. Mi clítoris estaba hinchado y demasiado sensible.

-Por favor, -le supliqué.

-Voy a hacerlo mejor.

Usó su pulgar para trazar un patrón lento y circular sobre mi clítoris y se inclinó para besarme. Arrasé su boca con mi lengua, agradeciendo sus hábiles dedos. Mi respiración se aceleró y mis gemidos eran más pronunciados contra su ataque de besos. Él trajo su otra mano hacia mi mandíbula, e inclinó mi cabeza hacia un lado, chupando y mordiendo a lo largo de mi cuello mientras sus dedos continuaban su fascinante danza.

Presioné mi cabeza contra la almohada y levanté mis caderas para retorcerme contra su talentosa mano. Yo estaba tan cerca. Abrí mis ojos para mirarlo y sus ojos estaba fijos en los míos.

Él se llevó su dedo medio a la boca, y lo humedeció con un movimiento de succión. Luego gentilmente extendió su largo dedo dentro de mí sin dejar de trabajar en mí con su otra mano. Las sensaciones eran demasiado. Levanté mis caderas de la cama, igualando su ritmo para moverme contra él. Mis gemidos se hicieron más fuertes y menos controlados.

-Drew, -grité.

-Shh. Te tengo, nena. -Continuó deslizando su dedo dentro y fuera, su ritmo acelerándose ligeramente mientras yo me acercaba. Besó mis labios y respiró contra mi boca mientras me venía. Grité su nombre una y otra vez hasta que lo último de mi orgasmo se sacudió a través de mí.

Unos momentos más tarde, abrí mis ojos para verlo aún mirándome. Mis mejillas estaban sonrojadas y mi respiración aún entrecortada, pero no me importó cómo lucía entonces, yo sólo quería tocarlo, hacerle sentir de la misma manera, verlo venirse.

Me senté y alcancé por la cintura de sus vaqueros, trabajando para desabrocharlos.

-No. Sólo duerme ahora, cariño. -Empujó suavemente mis hombros contra la cama, y luego ajustó su erección.

Gemí en señal de protesta, pero él me besó de nuevo, silenciando mi súplica.

Mis ojos se cerraron y saboreé su beso.

-Sólo descansa.

Yo quería discutir, pero de pronto la cama se sentía demasiado bien y el sueño estaba demasiado cerca. Los efectos combinados del alcohol y mi orgasmo me habían dejado agotada.

Continue Reading

You'll Also Like

6.8K 439 12
Bueno esta es mi primera historia así que no se quejen asi que espero que les guste ... está historia es TanjiKana pero también hay otros dos y se tr...
931 70 6
"El amor es un sentimiento que se puede expresar de diferentes maneras" Una ves mas nos encontramos en la InoAoi weeck que emoción :) para la gente n...
807K 96.7K 118
Después de que esa persona se fuera de su vida estaba sola. Pasó toda su adolescencia con ese hecho, y es que su condición la obligaba a no entablar...
4.1K 436 20
todo iba bien entre serena y darien hasta que ocurrió algo que iso que estos se separaran y todo cambiará en el futuro...