I
Te he hallado tantas veces merodeando en los caminos de mi alma.
Te he visto sonriendo en toda la cima del sol.
Te ves tan perfecto a contraluz mi amor.
II
He visto tantas veces tu fotografía que me sé de memoria cada línea de tu rostro.
La oscura noche que esconden tus ojos, y los sueños rotos que hay detrás de cada cabello.
Sé dónde empieza y termina cada bella ceja, sé de memoria tu sonrisa decorada con esas dos líneas que la rodean.
Me sé tu rostro de memoria que podría retratarte en cualquier superficie del cielo.
III
Muero por esa boca, por esos ojos.
Muero por besarte, por tenerte a mi lado cada noche y no parar de acariciarte.
Déjame desgastar tu piel con mis besos.
Déjame soñar que esto no ha terminado, que yo aún te tengo.
IV
Debo creerme el cuento que he inventado.
Déjame disfrutar de nuestros besos y abrazos, esos que nunca pasaron.
V
Te he hallado tantas noches mi amor caminando perdido en mis recuerdos.
Me has hallado tantas noches merodeando en tus sueños.