Lalisa
Taehyung ingresa a mi habitación y su mirada se posa en Rosé, parecía enojado por el moretón de color morado que había aparecido en su ojo.
-¿Lo hiciste tú? - pregunta mirandome.
Asentí.
-Ella me provocó y me tomó del cabello, odio cuando las personas me toman del cabello -
-¿No te quedó claro todo lo que te dije verdad? - asiente - me cansaste -
Taehyung me toma del brazo y me lleva con él hasta su habitación, cierra la puerta y me lanza al suelo de forma brusca.
-¿Qué crees qué haces? - me quejo - yo solo me defendí - dije colocandome de pie.
Al analizarlo noto que abre un gabinete y saca de el una tijera, Taehyung me mira y se acerca a mí con pasos pequeños.
-Llevas solo dos días y ya me tienes cansado, te digo que no hagas estupideces pero golpeas a mi novia - continúa - todo aquello que me pertenezca no puede ser tocado o dañado por ningúna otra persona que no sea yo -
-¿Qué debería haber hecho? - pregunté - ¿dejar que hiciera lo que le diera la gana? -
-Lo más inteligente hubiese sido esperarme, pero veo que te encanta causar problemas - continúa - llevas dos días; me has golpeado, creas un espectáculo escapandote, golpeas a mi chica -
-Ambos se lo han buscado, te dije que no quería estar cerca de tí ni de tu gente pero simplemente me trajiste de vuelta - rio - Taehyung entiende algo, jamás me voy a rendir, seguiré siendo como soy y nadie podrá cambiar eso -
Taehyung me mira y coloca las tijeras junto a la cama, no sabía que planeaba hacer con eso pero estaba preparada para cualquier cosa.
-¿No te rendiras hasta el día que recibas un disparo de mi parte? -
Abro mis ojos de par en par por sus palabras.
-¿L-lo harías? - agregué nerviosa.
Este me mira y sonríe.
-Ya eso depende de tus acciones, si quieres seguir siendo una maldita p3rra o si quieres ser la chica buena y obediente que yo quiero que seas -
No sabía que hacer, no sabía quién era este hombre ni de cuan lejos podía llegar conmigo. El veía a todo el mundo como unas fichas de algún juego, no le importaba nadie, solo le gustaba jugar con cada una de las personas que lo rodeaban.
-P-perdón - añadí con voz temblorosa.
Me dirijo hacía la puerta pero tenía seguro.
-No te irás de aquí Lalisa...- dice mientras se acerca dejando poco espacio entre nosotros - tengo que castigarte, si no lo hago no aprenderas la lección - sonríe - tengo dos castigos para ti, uno cruel y el otro no tanto -
-¿C-castigo? - niego - por favor te prometo que no haré más nada -
-Con todo lo que has causado debo hacerlo - continúa - puedo darte la ventaja de que escojas uno o si te niegas en recibir el castigo elegiré el que yo quiera - sonríe con malicia - te estoy dando un beneficio -
Trago en seco.
-D-dime cuáles son los castigos -
Taehyung rie y asiente seguidamente se acerca al mismo cajón donde había sacado la tijera pero esta vez saca un arma de él.
Doy unos pasos atrás.
-Debes escoger una de las dos, el arma o las tijeras - agrega.
Miro los dos objetos y luego a Taehyung.
-¿Qué pasa si elijo el arma? - pregunté.
-Lo sabrás cuando elijas el objeto cariño -
Ahora yo era una de sus fichas, ahora estaba jugando conmigo. No podía escapar de aquí, no podía negarme a nada o de lo contrario el tomaría el control de mi castigo pero... ¿Cuál de estos dos era el menos cruel?
-Elijo... - hago una pausa pensando en cuál de las dos elegir - elijo las tijeras -
Taehyung parecía satisfecho por mi elección.
-Buena elección - dice con una pequeña sonrisa.
-C-cual es el castigo? -
-Solo déjate llevar por mi - responde acercándose a mí.
Taehyung se quita la corbata y la coloca en mis ojos vendandolos.
-¿E-es esto n-necesario? -
-Silencio... - acaricia una de mis mejillas - solo déjate llevar -
Luego de sus palabras, me lanza a lo que parecía ser su cama.
-¿Qué haces? - pregunté.
Intento quitarme la corbata que cubría mis ojos pero sus manos me detienen, Taehyung toma una de mis manos y un pequeño sonido me dejó completamente asustada.
-T-Tae... ¿Ese fue el sonido de unas esposas?-
Al preguntar, sentí como mis manos habían sido esposadas.
-Eres hermosa - susurra en mi oído.
Unos segundos después sus labios se juntan con los mios, intento alejarlo pero era inutil. Mis manos estaban esposadas y mis ojos vendados me resultaba inutil alejarlo y visualidarlo.
-No lo hagas - dije girando mi rostro para evitar que me siguiera besando.
-El castigo lo decidiste tú, tengo tu consentimiento - dice mordiendo suavemente mi oreja.
Taehyung se aleja y poco a poco sentí como mi camisa era destruida por una tijera.
-¡¿QUÉ CREES QUE HACES?! - grité.
Taehyung no responde y seguidamente la camisa había sido lanzada lejos.
-Te estoy dando el castigo que elegiste -
El peso de la cama fue desapareciendo, al parecer Taehyung se había bajado.
-¿D-donde estás? - pregunté.
-Tranquila, estoy aquí - dice colocando sus manos a cada lado de mis caderas.
En un movimiento rápido Taehyung me quita los vaqueros, dejandome solo en bragas. El peso en la cama se volvío hacer presente y las tijeras cortaron la venda que cubria mis ojos.
-T-tú ... - trago en seco.
Taehyung se veía serio y sus ojos pasan de analizar mis ojos al fijarse en mis labios.
Se acerca lentamente y vuelve a juntar sus labios con los míos. Intenté pensar en otras cosas que no fuera él pero me resultaba difícil ignorar a aquel hombre con aspecto de ángel y personalidad de demonio lo cual hizo que me dejara perder en aquel cálido beso.
Taehyung se separa y empieza a desabotonar su camisa mientras su mirada no se apartaba de la mía, su camisa y pantalón fueron arrojados a un lado dejandolo solamente en boxer.
Estaba nerviosa esta sería la primera vez que tendría relaciones sexuales con alguien.
-No se en que estarás pensando, pero apuesto a que no es nada bueno - dice volviendo a tomar las tijeras y acercandose a mí.
Taehyung besa tiernamente mi frente, nariz y seguidamente llega a mis labios.
En este momento no parecía ser aquel hombre frío que había demostrado ser durante todos estos ratos que había estado junto a él, su ternura al besarme me hacía dudar de si este hombre era realmente así o simplemente quería aparentar ser una persona que en realidad no era.
Al escuchar el sonido de la tijera me dí cuenta que había cortado lo único que cubría mi parte superior. Al fijar la mirada en él no pude evitar levantar la cabeza y besarlo. No sabía que era lo que sentía pero queria que él me siguiera besando, tal vez yo estaba disfrutando de su ternura.
Taehyung no duda en devolverme el beso pero se vuelve a separar, esta vez bajando lentamente por mi cuello hasta llegar a mi pecho; su lengua hacía movimientos que me hacían dar pequeños gemidos.
-Taehyung... - susurré.
Tae se separa un poco y fija su mirada en la mía.
-No me voy a detener -
-Hasme tuya - mis palabras salen sin previo aviso.
¿Por qué había dicho eso? ¿Tal vez estaba tan excitada que no tenía el control de mis propias palabras?
Taehyung parecía sorprendido por mis palabras, tal vez no esperaba que yo estuviera disfrutando esto
-Asi que al final si tengo tu consentimiento...- añade - ¿Lo estás disfrutando? -
Lo estaba disfrutando y por alguna razón quería más pero ¿Debería seguir con esto o simplemente detenerlo? ¿Si le decía que lo disfrutaba podía parar y cambiar su castigo?
Niego con la cabeza.
-Dejame, no quiero que sigas - le dije apartando la mirada de él. Le mentí, era la primera vez que estaba tan excitada y quería seguir sintiendo este placer durante un rato más.
Sonríe y se acerca pasando su lengua por mis labios.
-Lo que empiezo tengo que terminarlo - dice dirigiendose hacía mi parte inferior con una sonrisa perversa.
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No se pierdan el próximo capitulo ❤❤❤