Todo el mundo pensaba que Gerard era una persona razonable, alguien con quien podías hablar de cualquier cosa y un amigo en quien confiar. El drama no era lo suyo, casi nadie lo había visto llorar. Pero lloraba.
Así que Frank se puso de novio hace un año y medio con un chico tranquilo y amable con el que compartía gustos en música y sexo. Alguien que hacía que el estrés fuera más soportable.
El que estuvo a su lado en la muerte de sus dos padres, dos muertes en 9 meses. Y Gerard tan sólo lo había visto llorar en los entierros, ni una lágrima de más.
Pero tanto como Gerard era amable también era sensible y cada gota de ira que a Frank de le escapaba era para Gerard un mar de lagrimas... Y aunque Frank nunca lo admitiria, había alguna satisfacción en verlo llorar, en que estuviera llorando por el. Como si el dolor y el amor no fuesen divisibles... A veces no lo son.
Otro capitulo? Obvio, si tienen menos palabras que el CI del presidente de mi pais, el gat0. <3