ㅡ ¿Desde cuándo fumas?
ㅡ Desde que me dejaste. ㅡsonreí cansada.
ㅡ ¿Tanto tiempo? ㅡsonrió también.
ㅡ ¿Desde cuándo te importa lo que haga?
ㅡ Desde siempre. Lo sabes. ㅡse acercó a mí, muy cerca.
ㅡ ¿Qué pretendes? ㅡreí incrédula.
ㅡ Hacerte mía. Como antes. ㅡtomó mi rostro con sus manos. Estaban heladas, dolían. Se acercó más a mí.
ㅡ Oye... Para. Me estás molestando. ㅡintenté apartarlo.
ㅡ ¿No era esto lo que querías de mí, zorra? ㅡrió jadeoso, apretando más fuerte mis mejillas evitando deshacerse de mí. Mirándome fijamente a los ojos.
ㅡ ¿Qué dices? Para. Me estás asustando... ㅡtiré el cigarrillo y sujeté sus manos para librarme de ellas.
ㅡ ¿Crees que me importa? ㅡtomó el límite de distancia que había entre su rostro y el mío y comenzó a recorrer su lengua por mis labios.
ㅡ Yoongi, basta... ㅡyo seguía intentando escapar de él.
ㅡ Cállate de una puñetera vez, vas a estropear el momento. ㅡrió aún con sus labios rozando los míos.
ㅡ ¡Detente, joder! ㅡcomencé a gritar.
Él me sujetó más fuerte, hasta el punto de inmovilizarme por completo. Seguía recorriendo su lengua, pero esta vez por mi cuello. Trató de quitarme la cazadora.
ㅡ ¿Por qué no te dejas ahora? Vamos, es tu sueño, follarte a tu idol favorito... ¿no? ㅡél seguía.
ㅡ ¡Yoong- ㅡtapó mi boca.
ㅡ Siempre te dije que con la boca cerrada estabas más preciosa. ㅡpataleé agarrando aún sus manos, era muy fuerte, no pude librarme de él.
Socorro.
...🌙...
A pesar de estar cubierta por las sábanas, la luz que iluminaba toda la habitación traspasaba los trozos de tela y mis párpados. Me desperté de repente, me sentía desorbitada, intranquila, asustada, nerviosa. Froté mis ojos olvidando por completo que me quedé dormida sin desmaquillarlos.
Me senté en el borde de la cama, coloqué una de las mantas sobre mis hombros y me levanté. Bostecé mientras mis pies se arrastraban por el pasillo camino al baño. Una vez allí, me puse frente al lavabo.
Abrí el grifo echando la manilla hacia el lado izquierdo, o hacia el lado del agua caliente. Esperé a que se calentara, recogí mi pelo hacia un lado y seguidamente puse mis manos en forma de bol debajo del grifo. Acerqué mi cara a ellas y arrojé el agua que contenía sobre mi rostro. Así, un par de veces más. Cuando terminé, me sequé con una toalla pequeña que colgaba ante mis muslos.
Cepillé mis dientes y mi pelo y después bajé las escaleras, una vez más arrastrando mis pies, hasta llegar a la cocina.
ㅡ Buenos días. ㅡdijo Ross, que estaba desayunando un café dulce y dos tostadas con mantequilla.
ㅡ Buenos murndnd... ㅡmurmuré en un hilo de voz.
Oí la risa de Ross.
ㅡ ¿Quieres que te prepare algo? ㅡpreguntó.
ㅡ No. ㅡvolví a bostezar.
Alcancé una taza del estante, la puse sobre la encimera y cogí del frigorífico el bote de leche. Semidesatada. Lo abrí y eché el líquido en la taza. Tomé cuatro cucharadas de cacao en polvo y también lo mezclé en la leche.
ㅡ ¿No lo calientas? ㅡpreguntó Ross, que parecía estar pendiente a mí.
Mierda.
ㅡ Mierda.
Rió otra vez. Yo suspiré.
Metí la taza en el microondas por un minuto, la saqué y me senté junto a Ross.
ㅡ ¿Qué tal has dormido? ㅡvolvió a preguntar.
ㅡ Bien.
ㅡ ¿Has pasado frío?
ㅡ No.
ㅡ Yo tampoco. ㅡdijo sonriendo.
Sonreí levemente y volví a tornarme seria.
ㅡ Hola. ㅡNerea apareció también por la cocina.ㅡ ¿Me habéis preparado algo?
Yo negué con mi cabeza mientras removía mi desayuno con una cucharilla.
ㅡ No. ㅡcontestó Ross.ㅡ ¿Quieres que te prepare algo?
ㅡ Bah, da igual, me vuelvo a la cama. ㅡhizo ademán de irse, pero la detuve.
ㅡ Tenemos que ir a la agencia, Nerea. ㅡle advertí.
ㅡ ¿No puedes ir tú y decirles que me sentía mal?
ㅡ ¿Te crees que es el puto instituto? Prepárate ya, no pienso esperar por ti. ㅡle di un sorbo a mi taza.
Ella bufó y volvió a su habitación.
ㅡ Ross.
Ella alzó sus ojos buscándome.
ㅡ Dime.
ㅡ Tuve una pesadilla. ㅡme encogí más en mí misma, estremecida.
ㅡ Oh, ¿sobre qué trataba?
ㅡ Yoongi.
Quedó en silencio.
ㅡ ¿Y estás bien?... ㅡfrunció su ceño preocupada, aún mirándome. Yo sólo desvié la mirada.
ㅡ Sí, supongo. ㅡtomé otro sorbo.ㅡ Sólo fue un sueño. ㅡsonreí levemente.
ㅡ Está bien. ㅡella también sonrió compensada.
ㅡ Ya estoy lista. ㅡapareció nuevamente Nerea, ya vestida.
ㅡ Voy a prepararme yo. ㅡme levanté.
ㅡ ¿No quieres más de tu desayuno? ㅡme preguntó.
ㅡ No. Tómatelo si quieres. ㅡdije mientras salía de la cocina.
Ella se sentó y tomó mi taza.
Subí los diecisiete escalones y llegué finalmente a la planta. Fui hacia mi habitación, escogí un atuendo cómodo y simple, pero oscuro, y me lo puse. Arreglé mi pelo peinándolo con mis dedos, apliqué un bálsamo labial rojo en mis labios para darle un poco de color y me coloqué la bufanda.
Esta vez, azul. Quizás con un gorro a juego.
Bajé a la entrada.
ㅡ Nerea, ya estoy lista. Vámonos. ㅡle dije desde allí.
ㅡ ¡Voy! ㅡvino hasta mí.ㅡ Hasta luego, Ross.
ㅡ Hasta luego, chicas. ㅡdijo Ross aún desde la cocina.
🌙...
Namjoonie 🐨
Namjoonie: Idylla
13:02
Yo: ??
13:05
Namjoonie:
¿Puedes pasarte hoy por aquí?
13:16
Yo:
Sí puedo
13:17
Namjoonie:
Gracias 🙌💜
13:20
Yo:
A qué hora?
13:21
Namjoonie:
Cuando puedas, no tengo prisa 😙
13:21
Yo: Ok
Leído 13:23 ✅✅
🌙...
Traspasé la puerta principal de la agencia de los chicos. Había movimiento del personal, pero el ambiente estaba tranquilo. Desenrosqué la bufanda azul de mi cuello, bajé mi tapabocas ocultando mi barbilla y fui hacia la pequeña recepción.
ㅡ Hola, querida. Cuánto tiempo sin verte por aquí, ¿cómo has estado? ㅡla mujer me preguntó sonriente. Pues siempre fue muy cernana a mí, se preocupaba y cuidaba de mis necesidades cuando me veía divulgando sola por estos pasillos.
ㅡ He estado muy ocupada, Hannie. ㅡmostré una leve sonrisa mientras apoyaba mis brazos en el mostrador.
ㅡ Suga está en su estudio, puedes pasar. ㅡcondujo su mirada al monitor del ordenador.
ㅡ Yo no...
ㅡ ¡Idylla! Has venido. ㅡla voz de Namjoon resonó por mi espalda.ㅡ Vamos, ven conmigo. ㅡposó su mano en mi espalda y me guió hasta su estudio.ㅡ ¿Has estado practicando?
ㅡ Sinceramente... No. ㅡbajé la mirada apenada.
ㅡ No te preocupes, ¿me puedes ayudar con la letra? ㅡse sentó en su sillón y yo me senté junto a él en una butaca de la sala. Suspiró relajado.ㅡ Intento meterme en la mente de una chica enamorada pero... Se me hace difícil.
Reí tímidamente ocultando mi boca con una mano.
ㅡ Yo te ayudo. ¿Qué tienes de momento? ㅡme acerqué a la mesa de escritorio, donde habían hojas sueltas con rayadas y pintadas, borrones y letras escritas.
ㅡ Échale un ojo. ㅡrascó su nariz mientras observaba cómo leía sus notas.
ㅡ Hum... Está bien. Pero por ejemplo, aquí puedes poner... Pretendías ser mi prejuicio, pero ahora eres mi prioridad. ㅡcomenté.
Namjoon se quedó en silencio, pensativo.
Canté un poco para él, inventando un ritmo improvisado.
ㅡ Naui pyeongyeon in cheoghajiman, neoneun nae useon sun-wi ya...
Volvió sus ojos a mí y me sonrió ligeramente.
ㅡ No queda mal. ㅡalzó su mano y yo choqué los cinco riéndome.
ㅡ Gracias... ㅡgarraspeé un poco.
ㅡ Idylla.
ㅡ ¿Sí? ㅡle presté toda mi atención.
ㅡ Yo... Bueno. ㅡtosió.ㅡ Sé que puede no ser una buena idea... Pero dentro de unos días daremos un pequeño concierto.
ㅡ ¿Quieres que vaya? ㅡpregunté directamente.
ㅡ Queremos que vengas. ㅡme corrigió.ㅡ Los chicos, y yo incluido, te hemos echado mucho de menos. Nos gustaría pasar todo el tiempo contigo que no hemos podido juntos en ese día. ¿Te apetece?
Me mantuve en silencio varios segundos con mi mirada en el suelo.
ㅡ Está bien si lo rechazas. No queremos obligarte... ㅡdijo. Subí mi mirada hasta toparme con sus ojos rasgados.
Estaban llenos de brillo y esperanzas. Realmente quería ir, pero... ¿Sería buena idea?
ㅡ Me lo pensaré, ¿vale? ㅡle sonreí.
Él también sonrió.
ㅡ Sí.
ㅡ ¿Seguimos con la canción?
ㅡ Por supuesto. ㅡreímos tímidos.
Nos pusimos a escribir más notas, frases y todas las ideas que se nos ocurrieran.
Después de pasar como casi una hora, Taehyung apareció por el estudio.
ㅡ Oh. ¿Idylla? ㅡsorprendido, comenzó a sonreír mucho.ㅡ ¿Qué haces aquí?
ㅡ Estaba ayudando a Nam Oppa con una canción. ㅡsolté.
ㅡ No nos avisaste de que vendría, hyung... ㅡtomó un sillón y se sentó entre nosotros.
ㅡ No quise que Yoongi se enterara. ㅡconfesó Namjoon.
ㅡ Oh... Está bien. ㅡasintió Tae con su cabeza.ㅡ ¿Vendrás al concierto, Idylla? ㅡme preguntó poniendo sus ojos fijos en mí.
ㅡ Intentaré ir... ㅡsonreí.
ㅡ Ven, por favor. Te regalaré una ARMY Bomb grande. ㅡtomó mis manos y las juntó con las suyas diciendo muy esperanzado.
Reí ante ese gesto.
ㅡ Intentaré ir, lo prometo. Esto... Debería irme ya, no quiero que se haga tarde.
ㅡ Claro. Voy a acompañarte. ㅡNamjoon hizo ademán de levantarse, pero Taehyung lo detuvo.
ㅡ ¡No! La acompaño yo. Vamos, noona. ㅡcolocó mi brazo bajo el suyo y me llevó hacia el pasillo.
ㅡ ¡Adiós, Nam! ㅡdije desde fuera.
Él alzó su mano sonriente como despedida.
ㅡ Quiero contarte una cosa, noona... ㅡdijo el chico sonriendo.
ㅡ ¿Qué cosa?
ㅡ Pero es un secreto. No se lo puedes decir a nadie.
ㅡ Tranquilo, no se lo diré a nadie.
ㅡ Lo sé, por eso te lo cuento... ㅡsujetó mi brazo con más agarre mientras seguíamos caminando por los pasillos y algunas salas de fotografía.
Yo sonreí alzando una ceja fingiendo estar confusa.
ㅡ Pues que Jungkook y yo...
Yoongi.
ㅡ Yoongi... ㅡmusité observando a la persona que una vez fue mía y ahora parecía ser mi mayor dolor.
Que sí, que soy una dramática. Pero es lo que siento.
ㅡ No, Yoongi no. Es Jungk-... Idylla... ㅡTaehyung se dio cuenta de lo sucedido. El chico me observaba cuando yo mantenía mis ojos fijos en Yoongi.
ㅡ Idylla... ㅡme fijé que sus labios pálidos pronunciaron mi nombre.
ㅡ Mierda. ㅡsoltó Taehyung.
Este chico me guió hacia fuera de la agencia rápidamente. Cogió su móvil, marcó el número de Namjoon y lo llamó.
ㅡ Hyung. Cuidado con Yoongi... ㅡle dijo.
ㅡ ¿La ha visto?
ㅡ Sí, creo que viene hacia aquí. No es bueno que hablen. ㅡlos ojos de Taehyung estaban puestos en la entrada de la agencia, vigilando si Yoongi venía hacia nosotros.
Yo estuve en shock. Ni pude reaccionar, ¿por qué me siento así, paralizada?
ㅡ Vamos, Idylla.
ㅡ ¿Qué está pasando, Tae?... ㅡle pregunté con mi voz quebrada.
ㅡ Te llevaré a casa, ¿vale? ㅡabrió la puerta del copiloto de un vehículo, me subió en él y seguidamente él también se subió.
ㅡ ¡Taehyung! ㅡJimin salió corriendo de la agencia, Namjoon y Jin lo seguían por detrás. Más tarde apareció Hoseok con Yoongi.ㅡ ¡Déjalos solos, necesitan hablar!
Taehyung hizo caso omiso. Parecía preocupado, quiso protegerme. Pero ¿de qué?
Puso el vehículo en marcha y salimos de allí.
ㅡ Tae... Dime qué está pasando. ㅡal fin pude controlar mi paciencia.
ㅡ Ahora no, Idylla... Necesitas tiempo. ㅡdijo con sus manos al volante.
ㅡ ¿Para qué...?
...🌙...
¿Qué te ocurre, Yoongi?
¿Por qué evitan encontrarme contigo?
¿Por qué no puedo tocarte?
Siento que estás cerca de mí, pero a la vez tan lejos. Siento que me envuelves entre tus brazos, pero si te toco, desvaneces como la pólvora.
¿Acaso son ellos los que no quieren que esté contigo?
¿Acaso quieren protegerme de algo?
¿De la prensa?
¿De las fanáticas?
¿De ti?
¿El problema soy yo?
¿Te protegen de mí?
...
Necesito respuestas, ahora más.
Porque todo es tan confuso, todo está tan perdido.
Estoy tan perdida.
Dime,
¿me echas de menos, Yoongi?
¿Me necesitas para levantarte?
¿Me necesitas como yo a ti?
No te odio, sólo tengo que vomitar todo este dolor.
Pero se me hace bola.
...🌙...
Como era de costumbre, me senté en el borde de mi cama envuelta en mantas. Taehyung se fue enseguida que bajé del coche, lo último que me dijo fue que tuviera cuidado, que no oyera comentarios de terceras personas y que sea paciente.
Pero, ¿paciente con qué?
Metí mis pies en las pantuflas de perrito que me regaló Nerea una vez. Son mis preferidas, y hacen juego con el pijama que me regaló Ross. Este tan calentito que me encanta.
Me levanté para dirigirme al salón, donde estaban las tres chicas. Laura vino a acompañarnos en esta noche, haríamos una "fiesta de pijamas" como dicen ellas. Nada, simplemente estaremos viendo películas hasta no sé qué hora, comiendo no sé qué mierdas, y pretendiendo quedar la última despierta.
Me sincero: yo no permitiré paralizar mis ganas de dormir sin nada a cambio. Y tampoco si lo hubiera. Si tengo sueño, duermo.
ㅡ Idylla, ㅡRoss me llamó, por bajo, sin llamar la atención de las otras chicas.ㅡ ¿te encuentras bien?
Mi mirada estaba paralizada en ella, en su voz. Pero no logré descifrar lo que dijo, sólo escuché ruido. Sólo vi sus labios moverse.
ㅡ ¿Idylla...? ㅡinsistió.
Si Ross no llegara a secar las lágrimas de mis mejillas, jamás habría sabido que estaba llorando. Mi mente no era consciente de lo que estaba ocurriendo, mi cuerpo tampoco respondía.
ㅡ Vamos, ven conmigo... ㅡsujetó mi brazo y me llevó a escabullidas hasta mi habitación. Me sentó delicadamente en la cama y seguido se sentó a mi lado.ㅡ ¿Qué te ocurre?
ㅡ Yo... ㅡpude reaccionar, sólo un poco.
ㅡ Adelante, dilo. Yo te escucho.
ㅡ No sé qué me ocurre Ross... ㅡsolté finalmente asustada.
ㅡ ¿No lo sabes?...
ㅡ N-no... Ni siquiera me he dado cuenta de que he llorado. ㅡcomencé nuevamente a llorar, esta vez consciente de que lo hacía.
ㅡ Tranquila... ㅡme echó hacia su hombro.
ㅡ Siento que todo me sale mal, que todo lo que hago se derrumba como si fuera un castillo de arena. Me siento lejos de todo el mundo, o por debajo del suelo... No me siento viva, Ross. No creo que pueda seguir adelante. ㅡconfesé.
ㅡ Intentaré ayudarte en todo lo que pueda... ㅡme abrazó fuertemente.ㅡ Encontraremos las respuestas a todo, ¿vale?
Yo asentí con mi cabeza, que estaba escondida entre sus brazos.
🌘 Fin Capítulo Tres 🌒
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