Capitulo 12 : Padres Loud
Presente:
El señor Lynn y Rita llegaron a casa en vanzilla, cuando se aseguraron de tener todo lo que habían traído bajaron rápido del vehículo abrieron un paraguas y corrieron hasta el pórtico de su casa luego dejaron el paraguas a un costado de la puerta y entraron al hogar resguardándose de la fuerte lluvia y el feroz viento. Ese día el señor Lynn salio temprano del restaurante y paso a buscar a Rita del trabajo, los dos estaban agotados luego de una larga jornada en sus respectivos empleos así que optaron por pasar a comprar pizza para llevar a la hora de la cena.
Sr. Lynn: ¡chicas llegamos! ¡Y trajimos pizza para cenar! Bajen rápido antes de que esto sea como en la película lo que el viento se llevo. Dijo con alegría mientras dejaba las pizzas en el suelo y se sacaba su chaqueta empapada y la colgaba en un perchero de la pared mientras rita reía por el chiste.
Rita: Mmm..... que raro.... en estos momentos deberíamos estar en el piso rodeados de niños y adolescentes devora pizzas. Dijo extrañada mientras también se quitaba su prenda para la lluvia y luego levantaba las cajas de pizzas.
Sr.Lynn: ¿quizás estén ocupadas? Dijo mientras se rascaba la cabeza.
Los padres se miraron el uno al otro extrañados. Esto era un comportamiento extraño de parte de sus hijas, siempre que se ordenara pizza una gran nube de chicas y Lincoln peleando bajaba a toda velocidad por sus porciones de pizza. Pero esta vez nadie bajo.
Después de unos minutos se oye que alguien se aproximaba. La primera persona a la vista es Lola que bajaba inusualmente más feliz de lo usual. La pequeña tenía una sonrisa de oreja a oreja mientras levantaba su vestido para bajar por las escaleras. Esto trajo una sonrisa al rostro de sus padres. Pero luego a quien vieron bajar los dejaron sin palabras. La segunda persona que bajo por las escaleras fue Lincoln. Sus padres estaban sorprendidos.
Lana: ¡Pizza! ¡Si! ojala hayan traído con extra pepperoni es la favorita de Ace savvy. Dijo Lola alegremente.
Lincoln: No olvides que también es la preferida de Jack un ojo. Dijo Lincoln mientras sonreía.
Cuando los dos niños Loud estuvieron frente a sus padres Lola salto a los brazos de Lynn, el rápidamente la tomo en brazos y le dio un beso en la cabeza. Mientras tanto cuando Lincoln vio a sus padres su expresión tomo un tono serio y amargado.
Lola: ¡mama! ¡Papa! Pasamos un rato genial con Lincoln, me enseño muchas cosas sobre su súper héroe favorito y me leyó sus cómics, al principio pensé que iba a ser aburrido como lo que le suele gustar a Lincoln pero en realidad ¡sus cómics son grandiosos! Dijo feliz la princesa.
Rita: ya veo, bueno me alegro que hayas pasado un buen rato con tu hermano. Dijo rita mientras le sonreía a la pequeña
En ese momento los adultos miraron a Lincoln. Les pareció extraño que el estuviera adentro de casa sobre todo por el asunto de la mala suerte, desde que ocurrió Lincoln comenzó a dormir en vanzilla y solo entraba en casa para comer usar el baño y cambiarse. Poco a poco sus padres fueron los primeros en darse cuenta de su terrible error, en un principio fueron convencidos por lisa de la supuesta mala suerte de Lincoln, ya que ella planteo el problema de la mala suerte desde una punto de vista científico y uso un amplio esquema de ejemplos de como la mala fortuna de Lincoln podía traer accidentes fatales a la vida de la familia , movidos por el temor y la superstición en un principio estuvieron de acuerdo con que el peliblanco no durmiera en el cuarto de arriba por la seguridad de las chicas siempre y cuando el tuviera todas sus necesidades cubiertas en un inicio iba a dormir donde antes se había mudado Lori pero cuando quisieron ver el lugar para Lincoln se dieron cuenta actualmente no era seguro ya que termitas habían estropeado el lugar y no era seguro para Lincoln así que vanzilla era su única opción. Pero con el paso del tiempo vieron lo miserable que era Lincoln así que planeaban hablar con sus hijas y que todo sea como antes. ese día ellos dejaron el garaje abierto por si llovía para que Lincoln no se mojase. Pero ahí estaba el. Su hijo. con una mirada seria y sin ninguna hermana más que Lola a la vista. Era obvio que algo había pasado.
Rita: Hola cariño veo que estas en casa. Dijo nerviosa
Sr. Lynn: si, estas en casa campeón, ¿como lograste entrar con tus hermanas aquí? , automáticamente Lynn se arrepintió de su pregunta cuando vio la expresión de tristeza de Lincoln. ¿Que clase de padre le pregunta eso a su hijo? Pensó.
Lincoln: digamos que alguien tenía que ponerlas en su lugar de una vez por todas. Dijo en un tono enojado acompañado de una expresión de ira.
Lola comenzó a notar el ambiente y empezó a ponerse triste
Sus padres se encogieron de hombros jamás habían visto a alguno de sus hijos tan molestos ni tan enfadados. No es que a Lincoln le faltaran motivos con todo lo vivido pero ese comportamiento no era normal. De repente Lincoln cambio su expresión a una feliz cuando le hablo a Lola.
Lincoln: Lola voy a hablar con mama y papa, ¿por que no subes arriba a comer pizza con las chicas?, yo subiré en un rato y te prometo que haremos un gran fiesta de te, solos tu y yo, ¿Qué te parece?
Lola: ¿espera quieres tener una fiesta de te? ¿Conmigo? ¿Voluntariamente?
Lincoln: Claro, realmente me la pase bien contigo, ¿así que por que no seguir pasándola bien haciendo algo que a ti te guste?
Lola: pero yo quiero hacer algo que te guste a ti.
Lincoln: Bueno en ese caso ahora mismo me gusta pasar tiempo contigo así que por que no subes compartes pizzas con las chicas y preparas a todos tus peluches digo.....''Invitados'' para la fiesta de te, tengo que discutir una o dos cosas con el señor botones sobre como debe comportarse en la mesa cuando esta frente a mi hermanita princesa. Dijo guiñando un ojo.
Lola: ¿E-enserio? Dijo Lola asombrada.
Lincoln: absolutamente hermanita. Dijo mientras sonreía.
Lola bajo de los brazos de su padre, tomo de las manos de rita un par de cajas de pizzas y subió a toda prisa por las escaleras. Se escuchaba como chillaba de alegría en el camino. Lincoln de nuevo volvió a su anterior expresión.
Lincoln: ¿podemos ir al comedor a hablar? Dijo serio
Sr. Lynn: Por supuesto campeón. Dijo su padre mientras compartían con rita miradas de preocupación.
El joven Loud y sus padres fueron al comedor y tomaron asiento mientras Lincoln permaneció parado mirándolos fijamente. Luego de un rato sin decir nada el peliblanco rompió el silencio.
Lincoln: ¿Ustedes me quieren? Dijo entrecerrando los ojos
Rita: ¿Q...? ¿Que? , dijo extrañada su madre
Lincoln: dije.... ¿Si ustedes me quieren? Dijo con un tono elevado.
Sr.Lynn: ¡Por supuesto que te queremos! Dijo apresuradamente el padre.
Lincoln: ¿Entonces por que me hicieron esto?.... ¿Por que no hicieron nada cuando las chicas me dejaron fuera de mi propio cuarto? ¿Por que no me creyeron cuando les conté la verdad sobre la mala suerte? ¿Por qué no me llevaron a la playa con ustedes? ¿¡POR QUE RAYOS QUERÍAN QUE USARA ESE ESTÚPIDO TRAJE!? Dijo en un grito desesperado que hizo eco en toda la casa.
Sus padres estaban perplejos en estos 17 años de crianza jamás alguna de sus hijas les habían levantado la voz ni gritado de esa forma, si bien ellas podían tener un carácter fuerte. Ninguna se atrevía a ir contra ellos de esa manera, ni siquiera la más vieja de las hermanas se mostró comporto así. Además siendo Lincoln como era nunca lo esperaron de el. Mientras ellos quedaron sin palabras Lincoln poco a poco comenzó a romperse, había pasado por mucho esta última semana, ya no podía mas, lucho mucho por contenerse, con cada gramo de su alma intento guardar todas esas emociones y ser fuerte. Pero ya era suficiente, el solo tiene 11 años y por mas maduro que pudiera ser llego a su limite.
Lincoln: ¿Seguro si hubiese nacido niña hubiesen intervenido en todo esto? ¿Es eso no es así? Ustedes seguramente querían once perfectas niñas pero tuve que venir yo el loud sin talento de pelo blanco a arruinar su talentosa y perfecta familia. Dijo Lincoln mientras las lágrimas comenzaban a caer sobre sus mejillas.
Sr.lynn: ¡NO HIJO! ¡JAMAS DIGAS ESO! ¡TE AMAMOS CON TODO NUESTRO SER! Grito angustiado su padre.
Rita: ¿por dios Lincoln esto es lo que te hemos hecho sentir? Mientras llevaba las manos a su boca para tapar sus sollozos.
Lincoln en otro momento quizás hubiese pensado mejor lo que le decía a sus padres pero todo ese río de emociones que corría en su interior no lo dejaba razonar. El necesitaba sacar todo de adentro y no iba a contenerse.
Lincoln: ¡DEJEN DE MENTIRME! ¡ES OBVIO QUE NO HAY AMOR EN ESTA FAMILIA PARA MI! ¡SIEMPRE PODRÁN A LAS CHICAS POR SOBRE MÍ! Grito con una mezcla de emociones.
Lincoln: ¡QUIZÁS! Quizás.... Si.... no tuvieran otra boca que alimentar tendrían más dinero para hacer las cosas que les gustan.... Quizás si no habría alguien que se metería en los problemas de las chicas no terminaría a veces todo tan mal.... Quizás si yo no hubiera naci--. Lincoln no pudo terminar de decir esa frase por que su madre se acerco y le dio una leve cachetada en su mejilla izquierda.
El peliblanco estaba en shock su madre jamás le había pegado bajo ninguna circunstancia.
Ella junto con Lynn tenía una regla a la hora de criar a los niños, jamás castigar físicamente a un hijo por más cosas malas que este hubiese dicho o hecho, ellos podían ser estrictos y marcar límites pero nunca levantarían la mano contra uno de sus hijos. Por eso Lincoln quedo estupefacto mientras se llevaba una mano a la mejilla. No creyendo lo que sucedía.
De repente Rita se acerco mas a el. Esto hizo que Lincoln retrocediera y cerrara los ojos esperando otro golpe. Uno que jamás llegaría. En su lugar sintió como los brazos de su madre lo rodearon y abrazaron.
Rita: Lincoln.... perdóname por la cachetada pero jamás en tu vida se te ocurra decir algo así. Escuchaste NUNCA intentes decir algo como eso de nuevo. Dijo su madre mientras de sus ojos brotaban lágrimas.
En ese momento su padre también se acerco y lo abrazo por el otro lado.
Rita: Tú como todas tus hermanas fueron 11 bendiciones para nosotros y no podríamos estar más contentos por la maravillosa familia que tenemos.... Tus eres mi hijo....Lincoln Marie Loud y si tu padre y yo tendríamos que dar la vida por ti o por cualquiera de tus hermanas lo haríamos sin dudarlo.
Sr. Lynn: ¿y sabes por que? Dijo también llorando.
Rita y Lynn: Por que te amamos. Dijeron simultáneamente con una sonrisa llorosa.
Lincoln todavía lloraba en los brazos de sus padres pero las palabras de ellos le habían llegado. Y estaba comenzando a calmarlo.
Sr., Lynn: te pedimos perdón Lincoln...hicimos las cosas entupidamente mal y te lastimamos pero no creas ni por un segundo lo que estuviste apunto de decir. El día que viniste a esta casa cambiaste la vida de todos para siempre. Eres el hijo que siempre deseamos y un gran hermano para todas tus hermanas jamás te cambiaríamos por nada del mundo. Dijo lo más serio que pudo el patriarca de la casa mientras seguía lagrimeando.
Rita: Eres un niño amable y bueno que no duda en poner la felicidad de otros por sobre la suya y del que unos padres cabezas de chorlitos como nosotros no podrían estar mas orgullosos. Dijo mientras acariciaba el pelo del peliblanco.
Lincoln: P-ero y la mala...suerte. Mientras sollozaba
Rita: Al diablo la mala suerte, que me pise un camión si dejo que mi hijo sufra un solo segundo más...tendremos una seria charla con las chicas sobre lo ocurrido...actuamos como unos tontos supersticiosos dejando de lado a nuestro pequeño conejito. Dijo rita con mucho amor.
Sr. Lynn: Y Lincoln sobre lo que dijiste antes. Hijo tu tienes una capacidad enorme para desarrollar cualquier talento que tu quieras sino dime, ¿que clase de chico de once años tiene la habilidad para ayudar a sus 9 hermanas con todas sus actividades y eventos. Si eso no es un indicio de que eres una persona capaz de lo que sea entonces que me parta un rayo. Dijo su padre con orgullo hasta que un rayo fuerte sonó afuera de la casa. Lo que hizo estremecer al señor Lynn.
Sr. Lynn: ¡Lo decía en sentido figurado! Exclama el padre con miedo mientras Lincoln reía junto con su madre.
Lincoln: este bien....les creo. Dijo mientras daba una débil sonrisa.
Esto rompía el corazón de sus padres. Ellos jamás quisieron ver a su hijo en ese estado. Rita saco un pañuelo y seco las lagrimas del rostro de su hijo mientras Lynn tomaba algunas cajas de pizzas y acomodaba todo para que ellos 3 comieran en la mesa. Luego de que rita se encargo de limpiar la cara del peliblanco le dio un beso en la mejilla, lo sentó en una silla junto a la mesa con Lynn y ella.
Sr.lynn: hijo no importa que...te lo compensaremos te lo prometo.
Rita: Así es linc.... También haremos entrar en razón a tus hermanas
Lincoln: No...Esperen... no hagan eso...quiero que ellas se den cuenta de su error.
Los padres lo miraron extrañados.
Lincoln: olviden también la charla que quieren darles mama y papa por favor háganlo por mi.
Rita: ¿pero por que?
Lincoln: por que esto no puede ser como otras veces, tienen que entrar en razón por su cuenta. No quiero que sean obligadas por ustedes y luego esto se vuelva a repetir esto conmigo o con cualquiera de ellas, no podría sopórtalo. Dijo mientras sus labios comenzaban a temblar.
Rita se dio cuenta de esto y abrazo a Lincoln de nuevo mientras Lynn ponía una mano sobre el hombro de su hijo.
Lincoln: Yo....Pude hacer las paces con Lola. Y si conozco bien al resto de mis hermanas por más tercas e irracionales que sean... tarde o temprano harán las cosas bien...por eso quiero que confíen en mí , tengo un plan, dejen que las cosas pasen y si ven que todo comienza a descontrolarse...intervengan. Dijo el peliblanco con algo de determinación,
Sr.lynn: esta bien hijo, haremos lo que podamos pero si veo que estas sufriendo de nuevo no durare en castigar a esas jovencitas hasta que cumplan la mayoría de edad. Dijo Lynn mientras con una mano revolvía los cabellos del peliblanco.
Rita: cariño
Sr. Lynn: ¿si? cielo
Rita: Lori cumplirá 18 este año, ella ya será mayor.
Sr.: Lynn: Huh...bueno, ¡sin chocolate por un año!.
Lincoln no pudo evitar reír.
Lincoln: gracias. Los amo. Dijo con una sonrisa.
Sr. Lynn y Rita: Y nosotros a ti. Dijeron sonriendo
Lincoln: y lo siento por lo de antes yo...creo que perdí los estribos. Dijo con pena.
Rita: nada de eso tesoro...juntaste todo eso hasta que no pudiste más. Lamento haber golpeado tu mejilla pero por favor de ahora en adelante habla con nosotros sobre lo que te molesta trataremos de buscar una solución, no guardes todos esos sentimientos dañinos en tu corazón .somos tus padres estaremos allí para ti. Y si alguna vez no volvemos a creer en ti. Eres libre para golpear a tu padre en su pelada.
Sr. Lynn: así es golpearme en mi pela... ¡Oye! dijo sorprendido Lynn.
Lincoln y sus padres comenzaron a reír fuertemente y comenzaron a comer la pizza. Lo que no sabían era que su enfrentamiento previo fue presenciado por una rockera que había bajado por algo de tomar.
Continuara....