No podia dejar de mirarme al espejo, lucía un uniforme muy aburrido y costoso.
Lo odiaba, no era yo.
-Tn, puedes dejar de mirarte con disgusto- reclamó mi madre, al entrar a la habitación.
-Mamá, esto es horrible. No soy yo, no quiero hacer esto.-
-Es tu futuro, hija.- se acercó hacía mi - iras a esta escuela, te guste o no- dijo con un semblante serio, mientras acomodaba mi falda.
Tomé mi celular, para saber como estaba Finn. Estaba invitado a los Golden Globes y me había llamado hace una hora diciendome que estaba nervioso.
Tomé aire y salí de mi habitación.
Al bajar las escaleras me encontre con un hombre muy bien vestido.
-Asi que tu eres la famosa Tn- el hombre se levantó de donde estaba sentado y se acercó a mi.
-Eso creo- dije poco convencida.
-Nos encantó el informe que nos enviaste.- que?
-Disculpe, pero yo no envíe ningún....- miré a mi madre que estaba fulminandome con su mirada.- Oh ese informe. Si, me alegro que haya sido de su agrado-
El tiempo pasaba y el hombre elegante no dejaba de hacerme preguntas. Ninguna la contestaba segura, me sentía obligada. Y lo estaba.
El teléfono de la casa sonó.
-Yo contesto- dijo mi madre y delicadamente se levantó de su silla y caminó hacia el aparato. ¿Y si era Finn? ¿Le habra sucedido algo? Las preguntas baleaban mi cerebro.
-Estamos ocupados, Matarazzo.- Gaten!- Mi hija no puede atenderlo en este momento- se oía una voz enojada en el otro lado de la línea.
-Mamá! Dejame contestar- tomé el teléfono y se lo quite de las manos.
-Tn, no es momento- dijo entredientes.
-Gaten! Que sucede?-
-Es Finn- no deje que diga nada más, corte el teléfono y corrí hacía la entrada de la casa.
-Qué crees que haces?!!- Gritaba mi madre - VUELVE AQUÍ, TN!-
-NO!- grité -FINN ME NECESITA!-
-DEJALO, ESE NIÑO LO ÚNICO QUE TRAE ES PROBLEMAS. SEGURO TENDRÁ OTRO ATAQUE EN UNAS HORAS ¿Y QUE? VOLVERÁS A RESCATARLO! Solo dejalo. Esta enfermo no es tu problema y menos el nuestro.
-TU ESTÁS ENFERMA!- salí corriendo y tome mi bicicleta y pedalee lo mas rápido que mis piernas lo permitian .
Al llegar, arroje la bicicleta y corrí hacía la entrada. Donde un gran y fuerte hombre me impidio el paso.
-Necesito pasar! Por favor!- decía mientras trataba de salir de su agarre.
-Lo lamento señorita, eso no va a suceder- logre divisar a mi novio. Estaba temblando mientras Caleb masajeaba uno de sus hombros y Sadie trataba de tranquilazarlo. Gaten hablaba enojado por el celular y Millie parecía no estar presente, ya que estaba mirando los vestidos de las bonitas actrices.
-Caleb!!- grité para llamar su atención- CALEB!- el moreno al escuchar su nombre comenzó a buscar al dueño de la voz, y me vio.
Corrió hacía mi.
-Ella esta conmigo- le dijo al guardia y poco convencido me dejo ingresar.
Corrí hacia Finn.
-Finn- dije al llegar a su lado
-Tn?- estaba confundido. Coloqué mis manos en sus brazos, no paraba de temblar.
-Finnie, calmate.- moví algunos de sus rulos ya que estaban sobre su cara - Estoy aquí- acariciaba su cabello.
-Qué hace ella aquí?- apreció Millie detras mío.
-No es momento,Millie- Sadie la detuvo, ya que sus intenciones eran alejarme de mi novio.
-Y tu entrevista?-Preguntó, Finn.
-Eso no importa, a la mierda la entrevista.- me abrazó y acariciaba mi espalda.
-Podrás quedarte?- preguntó y me miró a los ojos.
-Todo lo que tu quieras.- di un pequeño beso en sus labios.
-Gracias!- me dijo.
-Gracias a ti- volvi a abrazarlo
quedo asqueroso