La idea de ir a la tal ciudad me pareció muy emocionante. Por primera vez estoy fuera de algún lugar, y no encerrada. Bueno, eso pensé cuando llegamos a la ciudad.
-Eme aquí la ciudad donde nadie puede rastreaste - dijo Tayron extendiendo los brazos para mostrar dicha ciudad - No era como lo pensé. Era lago...
-Horrible - dijo Sara. Bueno no podía decirlo mejor - esta horrible, ya veo porque nadie te puede rastrear, quien va a querer venir a este lugar. Y tras de eso, el olor no es muy llamativo
-No esta tan mal - en realidad no. Estaba hundida en las arenas del desierto. Sus edificaciones estaban muy dañadas, a la igual que la carretera. Bueno, era enserio un completo apocalipsis
-Bueno, es el mejor desastre que conozco - dijo Tayron - su nombre, puesto por mi es Tuyra
-Lindo nombre - dije cautivada por su elegancia al moverse
-Bueno, el nombre se lo otorgue gracias a mi nombre, porque esta ciudad es mía - dijo - solo es habitable para mi
-Bueno, yo por allá estoy viendo a un hombre barbudo que esta mirándonos hace 5 minutos - dijo Sara
-Bueno, no del todo, pero el único habitante digno soy yo - no me había dado cuenta que cargaba una mochila en su espalda. La dejo caer al suelo
-Bueno, Tara ¿Que hacemos ahora?
-No lo se. Todo lo que hicimos fue improvisado - podía ver a Tayron pendiente de nuestra conversación mientras sacaba algo de su mochila
-¿Nos quedamos aquí?
-¿Eso quieres? - le pregunte
-Él me cae bien, y se que sientes lo mismo, ademas es lindo, pero ¿Podemos confiar en él?
-No lo se.
Era muy lindo, y enserio me encantaba que su nombre sea igual al mio. Ademas, que tuviera el mismo color de pelo que el mio es mucha coincidencia.
Habrá que tomar una decisión.
-Mañana veremos que hacemos, hoy tendremos que descansar y quedarnos en este lugar.