Empecemos por el día en que nos conocimos, te vi pasar frente a mí y después sentarte a mí lado, en ese instante mi corazón se aceleró y pensé que jamás te volvería a ver pero qué equivocada estaba.
Hubiera deseado haberme equivocado pero no, tan solo si ese día no hubiera salido de mi casa todo sería diferente, pero yo no conocería el amor o bueno no sabría cuanto amor tengo para darle a alguien y déjame decirte que estoy sorprendida de su magnitud.
Tal vez también tengo la culpa de mi corazón roto pero eso ya lo veremos después no me quiero adelantar a los acontecimientos que me llevaron a dónde estoy ahora con una esperanza de ser libre, de dejarte atrás tal vez no es lo que más deseo pero se que será lo mejor.
Ese día tú traías el uniforme de tu instituto , y tenías las mejillas sonrojadas y la mirada hacia el frente, tú no te percatarse que yo te miraba de reojo por alguna razón no podía dejar de mirarte es como si tuvieras una fuerza magnética y yo no pudiera resistirme a ella.
Tiempo después te levantaste y seguiste tu camino mientas yo veía como te alejabas y yo con una sonrisa pensando.
- Jamás te volveré a ver fue lindo mientas duro-
Que equivocada estaba pero eso ya no importa y ese día fue el que cambió mi vida hasta el día de hoy.
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Espero y les esté gustando la historia y poder ayudar a alguien que talvez se encuentra en la misma situación y necesita encontrar paz