Ahn BoKyung.
Después de dejar a Jungkook llegue a mi casa y me sentí completamente sola, Min Yoon no estaba, no tenia muchos amigos, así que cambie mi ropa y decidí salir sola.
Él clima era agradable, las calles no estaban muy llenas, todo parecía estar tranquilo.
Compre una malteada y comencé a caminar, me detuve inmediatamente al ver a un pequeño llorando, él estaba en medio de un parque.
—Hola pequeño, ¿Donde esta tu mamá?
—Vine con papá y lo perdí —dijo llorando.
—No llores, te ayudaré a encontrarlo —le sonreí y limpie sus lágrimas—Dime, ¿Donde lo viste por ultima vez?
—Fuimos a comprar a una tienda que esta cerca de aquí, pero no recuerdo cual —volvió a llorar.
—Ven conmigo —tomé su mano— Vamos a buscarlo —Hubiésemos seguido caminando si no hubiese sido por que alguien grito y él niño se soltó de mi y comenzó a correr, me lleve una gran sorpresa al ver a quien corrió. Él ya había encontrado a su padre y yo ya no tenia nada que hacer, así que di media vuelta y comencé a caminar.
—¡BoKyung! —me giré y lo vi aproximarse con él niño en sus brazos—Gracias, muchas gracias.
—No hay de que —le sonreí— nunca mas te sueltes de tu padre pequeño -dije limpiando sus mejillas— ¿Entendido?
—Entendido —afirmó él pequeño.
—Espero verte otra vez, por ahora me tengo que ir —miré a Jungkook— Nos vemos mañana.
—BoKyung—me giré— ¿Quieres comer con nosotros?
—No, muchas gracias.
—Por favor come con mi papá, él siempre esta solo.
—¿Que dices? —preguntó Jungkook avergonzado.
—Solo sera un momento —él sonrió-
Nos fuimos a una cafetería y él niño se fue a jugar dejándonos solos.
—¿Como se llama? —pregunté mientras lo veíamos Jugar.
—Jeongsan.
—Lindo nombre —Sonreí mientras miraba mi café.
—Cambiando él tema... cuentame de ti, ¿Que tal?
—Bien.
—¿Solo eso?
—¿Que quieres saber?
—¿Que has hecho? ¿Como te ha ido?
—Terminé mis estudios y ahora estoy aquí, esperando que llegue él momento para tomar la empresa en mis manos.
—¿Que tal tu relación con Yoongi?
—¿Porque preguntas eso? ¿Quieres que te hable de mi vida personal? —él me miraba directamente— Él es estupendo, ambos estamos bien y en la cama es...
—No es necesario que hables de eso —rascó su nuca.
—Entonces no preguntes —me giré a ver al niño— ¿Y la madre?
—Se fue.
—¿Él la extraña?
—No hablamos de ella.
—Ya veo ¿Que madre deja a su hijo? de verdad, disculpa que diga esto, pero esa mujer es una idiota.
—Es Yang Mi —reí falsamente.
—Ahora entiendo, esa mujer no tiene corazón, pero algún día se dará cuenta de él daño que ha causado —lo miré.
—¿La odias?
—No tengo porque odiarla.
—Se entrometió entre nosotros.
—Se metió contigo, tu deberías de haberla alejado y advertirme de la amiga que tenía, pero fue todo lo contrario —tomé un sorbo de mi café.
—Lo lamento.
—Eso es pasado, ya olvídalo —le sonreí.
—Papá ¿Ella es tu novia? —sonreí.
—Es linda, ¿verdad? —me miró.
—Siiii, entonces ¿si es tu novia?
—Lo siento pequeño, pero ya tengo novio.
—A mi papá le gustas.
—No lo creo, no soy su tipo —Dije recordando sus palabras aquel día, y al parecer él lo noto, sentí su mirada en mi.
—Si lo eres, eres bonita, trabajadora, amable y me encantas.
—Yo lo sabía —dijo él pequeño.
—No le creas —susurré— Ya se me hizo tarde y debo irme.
—¿No te despedirás de mi linda? —hablo levantándose también— Nos vemos mañana —posó su mano en mi cintura y me beso la comisura de los labios.
Salí rápidamente de allí, ¿Que estaba haciendo?, le doy la mano y él me toma él codo, pero bueno mañana tendrá sus consecuencias.
A la mañana siguiente yo ya estaba en mi oficina esperando a que Jungkook llegue.
—Él joven ya llego -dijo Annie en mi puerta.
—Dile que lo necesitó aquí
Arregle mi blusa, mi falda y luego me miré a un espejo... ¡¿Que demonios hago?!
—¿Me necesitaba? —habló entrando a mi oficina.
—Lo de ayer no quiero que se vuelva a repetir, no tienes derecho a hablarme así de amable como si nada pasara, te lo dije una vez y lo volveré a decir —me levanté de mi escritorio y me pare frente a él de brazos cruzados— Tu eres él empleado y yo la jefa.
—¿Y? —me miró sonriente— Ayer estábamos fuera del trabajo, no hice nada malo —dio un paso al frente y yo retrocedí— solo dije la verdad —dio otro paso, él cual también retrocedí y casi caigo sobre mi escritorio, si no hubiese sido por sus brazos alrededor de mi cintura, entonces mi cuerpo estaría en el suelo. Presionó mi cintura acercándome mas a el—Me encantas —sin mas juntó sus labios con los míos y yo desgraciadamente me dejé llevar. Me acomode sobre mi escritorio y pasé mis brazos alrededor de su cuello atraiéndolo mas a mi; sus manos comenzaron a subir debajo de mi blusa y al sentir su tacto contra mi piel, inmediatamente reaccioné.
—¿Que haces? —me bajé del escritorio y acomode mi ropa—Acabamos de hablar.
—No finjas, lo disfrutaste al igual que yo —se acercó otra vez— no creas que esto se acaba aquí —me besó velozmente y salio.
Lo único que esperaba era que llegara Yoongi y gracias al cielo no quedaba mucho.
—Adelante —hablé mientras pedía a dios de que no fuera Jungkook.
—Hola preciosa —habló Yoongi frente a mi puerta.
—Te extrañe —dije colgándome de su cuello.
—También yo —me besó— y no sabes cuanto —envolví mis piernas alrededor de su cintura y él camino haciendo mi escritorio colocándome sobre éste, sus manos comenzaron a recorrer mi espalda, mientras que las mías acariciaban su sedoso cabello y si no hubiese sido por él ruido de la puerta, ninguno se hubiese apartado del otro.
—S-Siento interrumpir —habló Jungkook. Su mirada transmitía ira.
—No te preocupes, después de todo estamos en la oficina, no podemos —habló Yoongi.
—¿Que necesitabas? —dije arreglando mi ropa.
—Aquí están los documentos que pediste hace un rato —los dejó sobre mi escritorio— Adiós
—Creo que debemos tener mas cuidado —hablé bajo.
—Tienes razón —me besó— salgamos. Mañana tengo que salir otra vez y no se cuando volveré, así que quiero pasar tiempo contigo.
—Esta bien -dije triste- ¿Cuantos viajes te quedan?
—No lo se, espero y sean pocos —tomó mi mano- Vamos
El resto fue una tarde normal; comimos helado y luego nos fuimos a casa.
A la mañana siguiente Min Yoon ya no estaba y encontré una nota.
“Buenos días preciosa, lamento haberme ido sin despedirme, pero ayer te veías tan cansada y hoy en la mañana no quise que despertarás. Preparé él desayuno para ti, tómalo y no trabajes mucho"
Te quiero”
Atte: Tu Novio.
Con una enorme sonrisa me levante de la cama, tome él desayuno y fui a la empresa.
—Buenos días Annie —saludé antes de entrar a mi oficina.
—Buenos días señorita —entró después de mi.
—¿Que tengo partambién.
—Nada, todo él día estará libre —se posicionó frente a mi escritorio.
—Muy bien —sonreí— puedes tomarte él día libre.
—¿En serio?
—Si, ahora ve y disfruta —mis cambios de ánimo son raros, lo sé— Puedes decirle a Jungkook también