La vida de un misofóbico se puede resumir a un continuo infierno aun si se está en tratamiento. Por obvia razón, la gente que la padecemos somos diferentes y por lo tanto, el grado y tolerancia es distinto.
A lo largo de los años con los que he vivido así, solo he conocido a otro más aparte del protegido de JongDae. No sé su nombre porque solo lo vi entrando y saliendo de una clínica especializada pero, recuerdo que llegaba usando una bicicleta, cosa que me sigue pareciendo imposible pues estas expuesto a mucha suciedad. Aquello me hizo pensar que estaba muy cerca de poder vivir "con normalidad". Algo que yo sentía innecesario.
En algún punto de verdad considere entrar a terapia para superar mi Misofobia pero hacerlo significaría olvidar, de alguna manera, por qué la tengo.
Jamás debo olvidar el porqué. Es su culpa toda mi situación, y no lo digo porque sea como los muchos que le echan la culpa a los demás, sino porque si es su culpa. Aquel bastardo me arrebato dos cosas más importantes en la vida. La cicatriz en mi palma izquierda era lo único que me quedaría como recuerdo pero no tenía intenciones de olvidar nada.
Aun podía escuchar el llanto de aquella persona tan importante para mí y su desesperación para que el bastardo no me hiciera daño. Extraño su sonrisa, sus cálidos abrazos y saber que jamás volveré a tenerlo entre mis brazos... me destruye y me llena de rabia. Mi único casi consuelo es que el desgraciado está pagando una condena en un asilo mental.
A la misma vez me acuerdo de BaekHyun y un parte de mí se pregunta el cómo término en ese estado. JongDae se ve tan.... Vulnerable y cauteloso cuando el chico está cerca, me saca de balance pues jamás lo he visto tan afectado o con una mirada llena de rencor e impotencia. Do es otro que también me desconcertó con las actitudes que toma cuando BaekHyun está en el hospital; su mirada se oscurece y lo he atrapo mirando el torso del chico y cerrar los ojos con rabia cuando Baek se retuerce si llegan a tocarlo en esa zona.
JongDae está tratando a BaekHyun diariamente pero no ha logrado mucho, eso lo puedo deducir al ver el comportamiento del chico y padecer lo mismo. La Misofobia de BaekHyun, el motivo por el que la tiene, es aún más grave que el mío. Mi corazón está lleno de rencor y dolor y el de él parece tan herido y asustado, que no me imagino el trauma.
Aquella ocasión donde las campanas lo hicieron gritar, me lleno de angustia e incertidumbre. No era el sonido lo que lo asustaba, sino lo que representaba. De algún modo, quería ayudarlo a salir de este infierno.
.
Busco un poco más de información en la red, en libros y lo que pudiera encontrar. A pesar de que fuera un padecimiento que el viviera, no conocía realmente la Misofobia de BaekHyun pero jamás estaba mal informarse un poco más. No debía enfrentar eso solo.
Se lo comenté a JongDae y este no me creyó al inicio, más bien dejo caer la dona que se estaba comiendo y tartamudeo un buen rato. No fue el único que se quedó en aquella ridícula pose, ChanYeol y YiXing se quedaron así, los tortolos escucharon cuando se lo dije al de sonrisa felina.
Estuvieron encantados con la idea y pronto se esparció por el hospital entero. No pude evitar no sonreír ante eso, íbamos a lograr ayudar a BaekHyun.
.
BaekHyun estaba muy asustado. El hombre sentado en la banca del parque por donde iba a pasar junto a JongDae, le daba mucho miedo y no sabía cómo excusarse para no tener que cruzar por ahí, sobre todo cuando Chen quería un helado de un puesto que se ponía en dicho parque.
No sabía porque pero el hombre le inspiraba un terror parecido al de sus pesadillas. Su miedo aumento conforme lo fue pensando que su cuerpo empezó a temblar y sus pies se plantaron en el piso, frenando a JongDae de golpe. El hombre dejo de hablar sobre invitar a MinSeok para cenar en la casa y se giró a mirarlo.
— ¿Qué sucede, Baek?
El menor le tenía entera confianza a Chen pero temía que sus pesadillas y miedos también atormentaran al sonriente psicólogo. Bajo la cabeza entre decirle o no y termino levantando de golpe la cabeza cuando se escuchó un fuerte sonido de campanas, proveniente de un celular.
BaekHyun se paralizo, mirando a la nada y perdiendo el color en la piel. JongDae no tardo en buscar el sonido y fruncir el ceño cuando un señor en una banca lo dejo sonar por un rato antes de contestar, vaya imbécil.
—Baek, no pasa nada. Es solo un celular. — se inclinó un poco para apartar las manos del chico de sus oídos. —vamos por el helado, ese señor de fea ropa ya se fue.
—La hora de purificación se acerca... — susurro atemorizado. —si hago ruido van a pegarme...
JongDae se escandalizo y se aseguró de grabar aquellas palabras en su memoria, una pista más para encontrar a los culpables del miedo en el bajo. Baek no les había querido decir nada a los policías o a los doctores, nada más allá de lo que lograron averiguar con su repudio a las iglesias y a las campanas.
En cuanto Baek empezó a llorar, el psicólogo lo abrazo contra su cuerpo y lo hizo que se sentara bajo un árbol entre sus piernas mientras terminaba de llorar.
El chico se calmó al cabo de un rato y solo así pudo volver a portarse como antes.
—JongDae hyung, ¿no íbamos por tu helado de fresa?
El mayor lo miro tragándose su impotencia. Ojala encontraran una solución muy pronto. —claro, vamos por él.
.
Dos días después de aquel episodio, JongDae terminaba otra sesión de terapia junto a Baek. El chico no recordaba nada de lo que había dicho o sus episodios de terror con las campanas. Solo tenía la impresión de temor y su inquietud duraba unos minutos. Seguía sin dejar que alguien más fuera de JongDae, Lay, KyungSoo o SeHun le tocaran; incluso si estaban en su mismo espacio se ponía inquieto y se negaba a soltarse de JongDae.
Las lagunas mentales seguían iguales, el chico entraba en pánico cada vez que intentaban hacerlo recordar y lloraba; Dae y los demás paraban al verlo de esa manera. No soportaban el miedo en el llanto de Baek. Podría decirse que estaban estancados.
Al menos hasta ese día, donde estaban terminando otra de las sesiones y BaekHyun había entrado en una especie de trance donde describía un lugar, quizás donde lo tenían recluido en su infancia.
—está muy oscuro... es madera y esta frio, tengo frio...
— ¿Qué más puedes ver?
—estoy... escondido dentro de un ropero...
— ¿estás jugando?
El menor negó, sin abrir los ojos. —estoy escondiéndome y tengo miedo...
— ¿de qué te escondes? ¿Lo sabes?
Baek apretó sus manos en el cojín, pasando saliva con fuerza. —las campanas... están...
— ¿Qué campanas?
—n-no, no me vean...— BaekHyun empezó a alterarse. —odio a las campanas... ¡no me toquen! — exclamo cubriéndose la cabeza u juntando las rodillas.
JongDae se levantó, haciendo a un lado la libreta. —BaekHyun, vuelve a mí. Sigue mi voz. — tomo las muñecas del menor y las bajo, evitando que se alterara.
El menor se calmó un poco, haciéndole creer a JongDae de que ya estaba bien.
Basto un minuto para que el menor se le abalanzara encima y le tomara las manos, poniéndolas sobre su cuello.
— ¡no dejes que me atrapen! ¡Mátame antes de que vengan por mí! ¡No puedo volver a intentarlo solo!
El mayor lo miraba atónito, herido y destrozado. Su niño, su pequeño BaekHyun deseaba la muerte y al parecer, ya lo había intentado.
Los gritos y lágrimas de BaekHyun llamaron la atención de SeHun, quien iba pasando a entregar un reporte. El hombre entro de golpe, corriendo a quitarle al chico una vez que se dio cuenta de que pasaba. El más delgado pataleo e intento arañar al médico.
— ¡no! ¡Mátame! ¡Que se ensucien con mi sangre!
Las palabras conmocionaron aún más a los adultos. SeHun se paralizo unos segundos antes de cubrir los ojos de BaekHyun con una mano mientras que con la otra lo aprisionaba entre sus brazos y cuerpo.
— ¡un sedante! — grito descubriendo uno de los brazos del muchacho.
JongDae espabilo y fue corriendo a traerle uno, siendo seguido por KyungSoo. El mayor de todos se cubrió los labios en cuanto entro al consultorio.
Baek soltó otro grito cuando sintió el piquete y alcanzo a golpear la mandíbula de SeHun con su cabeza.
— ¡no más agujas!
— ¡estás a salvo! ¡Ya no estas más ahí! — respondió SeHun sentándose en el sillón para mejor soporte.
— ¡ellos están en todas partes! — BaekHyun tomo del rostro a SeHun y lo miro con los ojos llenos de lágrimas. —e-en... todas partes...— y el sedante lo obligo a dormir.
Los adultos soltaron un largo suspiro, como si se les hubiera olvidado como respirar. JongDae se acercó con una manta y le extendió los brazos a SeHun. El medico negó con la cabeza mientras se levantaba.
—te acompañare, quisiera decirte algo.
El psicólogo asintió mientras bajaba la mirada y le echaba la manta encima. Se notaba que hacia un gran esfuerzo por no tirarse a llorar ahí mismo. KyungSoo estaba en un estado parecido, mirando con dolor a BaekHyun.
Para sorpresa de ambos, SeHun camino directo al elevador.
—no digan nada, solo démonos prisa.
—iré a marcar mi salida, no tardare. —anuncio JongDae cuando el elevador se detuvo en el primer piso. KyungSoo se había quedado arriba.
El medico salió a sentarse en una banca, no porque BaekHyun pesara, sino porque necesitaba cubrirlo mejor. En su regreso al elevador, siguiendo a un JongDae demasiado callado para su gusto, choco con un hombre.
—perdón. — se disculpó evitando hacer una mueca por haber sido tocado.
.
Una vez en la casa de JongDae, SeHun le entrego al chico, mirándolo seriamente.
—por favor intenta lo que te pido, ayudaría mucho.
JongDae asintió, aun sin quitar esa mueca de dolor. —gracias.
SeHun se plantó frente a BaekHyun, acariciando las rosadas mejillas y limpiando el resto de lágrimas. Quería decirle que no llorara más pero no sabía cómo hacerlo. Asintió y se retiró, llamando un taxi para volver al hospital.
Con lo que había presenciado, tenía un punto del cual partir.
Al otro lado de la calle, un hombre sonreía retorcidamente mientras se mordía las uñas.
—lo encontré... te encontré, mi ángel caído. —se escuchó de parte de aquel hombre de cabello oscuro.
.
-se tira al piso- enserio lamento la tardanza!! Perdí el capítulo y tuve que volver a escribirlo, aparte de que tengo unos líos familiares bien grandes y me hacen perder la inspiración :(
¿Ustedes que creen que le haya pasado a Baek? Se aceptan pedradas.
Fighting!