Fundashi En Entrenamiento.

By Sxmbuka

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Ser un fundashi conlleva tiempo, y Adrien sin querer comienza a ser entrenado por su amiga Marienette para se... More

Prólogo.
Capítulo 1
💞You Lost It💞
Capítulo 2.
Capítulo 3.
💕You Lost It x2💕
Capítulo 4.
Capítulo 5.
You & I. [Special.]
Capítulo 6.
Capítulo 7.
Capítulo 8.
Capítulo 9.
No creo que sea importante, pero léelo.

Capítulo 10.

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By Sxmbuka

Debo aclarar que si tardé fue por que este capitulo es el más extenso que he escrito para el fanfiction, so, espero lo disfruten tanto como yo me divertí escribiéndolo aunque fuese a un paso lento. Sin más, espero disfruten la lectura. Aunque estará dividido en dos.

Adrien se encontraba en su habitación, probándose ropa para la aclamada cita que tendría con Nathaniel, se veía al espejo para tan sólo negar y probarse otro atuendo, nada la convencía para dar una buena impresión si es que se encontraba con el padre de su amigo, aunque el profesor Ridgewell ya lo conocía quería ir presentable para la esposa de su profesor y madre de quién sería su acompañante. Soltó un suspiro, no le gustaba la idea de Marinette de salir con Nathaniel, entendía que fuera una fujoshi en busca de yaoi hard real, pero lo que había querido evitar era envolverse en eso, pero obviamente no lo había logrado y había terminado enganchado a una salida con él.

En su estéreo sonaba "Heroine" de Sleeping With Sirens a todo volumen, mientras Adrien tarareaba la letra buscaba en su gran armario algún buen atuendo que le convenciera. Tenía a Félix viéndole moviéndose de un lado a otro en busca de ropa desde el marco de la puerta con él apoyado en el marco con una pequeña sonrisa en su rostro. Adrien obviamente no se había dado cuenta, seguía en lo suyo, y eso lo agradecía Félix, no quería que su amado hermano pequeño lo viera acosándolo de una manera no muy discreta en si.

—¡Aleluya, alabado sea Saitama!—exclamó Adrien, sacando de su armario una camisa de algodón con un diseño de rayas azules de manga corta, una sudadera de mezclilla con las mangas arremangadas, un pantalón tipo pescador por debajo de las rodillas y un Cinto azul rey. Se sacó la ropa sin pensarlo dos veces para cambiarse, ya estaba bañado así que tan sólo se preocupó en ponerse la ropa, dándole la espalda sin darse cuenta a su hermano mayor. Este se sonrojó levemente al ver la espalda desnuda de su hermano y decidió irse de ahí y dejar de pensar de manera tan sucia con Adrien incluido.

Al ya estar vestido se miró al espejo y decidió ir a ponerse unos tenis blancos con detalles grises y unos calcetines del mismo color, tomó sus lentes de sol junto a una mochila donde llevaría variadas cosas para una pequeña comida en el parque. Volvió a mirarse en el espejo para acomodarse un poco el cabello mientras sonaba "The Pantaloon" de Twenty Øne Pilots en su estéreo.

Mientras tanto, en la Suite del hotel se encontraban Chloé y Lila buscándole una buena ropa a Nathaniel en su armario personal, él se sentía nervioso, pero agradecía que Chloé le dejara poner la música que él quisiera a un alto volumen en la gran pantalla plana que tenía ella en su habitación, sonaba "King" de Years & Years a un volumen bastante alto, con Nathaniel tarareando la letra.

—¡Nathaniel, ya tenemos un outfit que te podría gustar!—gritó Lila desde el fondo del armario al tiempo que comenzaba a cantar Zayn en "Like I Would" suspiró y esperó a que sus amigas vinieran con la ropa que habían escogido para él. Sus amigas se aproximarnos a Nathaniel emocionadas con la ropa en sus manos, hasta zapatos habían elegido.
—¿Qué esperas para comenzar a cambiarte?—preguntó Chloé, Nathaniel soltó un respingo.
—¡Yo no planeo quitarme la ropa frente a ustedes!—exclamó apenado Nathaniel y Lila rió, se veía algo tierno.
—No es nada que no hayamos visto, vamos, estás en confianza, aparte de que no queda mucho tiempo, tan sólo unos cuarenta minutos...—al escuchar el tiempo que quedaba se sobresaltó y comenzó a quitarse la ropa con gran velocidad hasta que dar sólo en boxers, quería que esa vergüenza pasara rápido.

Comenzó a ponerse una camisa de botones azul cielo de manga media, sus amigas le ayudaban para que se la acomodara de manera correcta, pues esta estaría fajada. Luego se puso el pantalón, en forma campana color caqui que le llegaba unos cuantos centímetros por debajo de las rodillas, por encima de la camisa y fajarse correctamente con la ayuda de Chloe mientras que Lila le comenzaba a acomodar los tirantes que iban con el pantalón correctamente, Nathaniel se abrochó los últimos dos botones restantes y se acomodó la manga un poco.

—Bien, ahora vete a sentar y ve a ponerte los Zapatos que están a un lado de la cama, nosotras decidiremos como arreglarse un poco el cabello—Nathaniel asintió y se sentó en la cama tomando en sus manos el par de Zapatos de piso color café tocando lo claro a cuadros. Se los puso no sin antes haberse puesto unos calcetines cortos. Se acomodó los zapatos y se levantó para dirigirse a donde a sus amigas y preguntar:
—¿M-Me veo bien?—preguntó con timidez, sus amigas voltaron a verlo ya bien vestido y chillaron de la emoción, logrando que Nathaniel se espantara un poco ante su reacción.
—¡Te ves genial!—chilló de emoción Lila, dando un pequeño saltito hasta donde se encontraba Nathaniel.—Pero, deberías dejar ver tus ojos, son lindos—comentó Lila mientras que con su mano derecha retiraba los mechones de cabello rojizo y le sonreía a Nathaniel.
—¿No me veré mal?—preguntó Nathaniel a Lila, quién le contestó negando con la cabeza.
—Te ves bien, no hay nadie más lindo que tú... Bueno, si, pero en cuanto hombres no—soltaron ambos una risita.
—¡Oigan, no me dejen fuera!—exclamó en broma Chloé, acercándose a ellos desde el tocador con unos cuantos prendedores para cabello en mano. —Traje unos cuantos, para que no te vayan a molestar tus mechones de cabello
—Gracias, supongo—agradeció Nathaniel.

Chloé sonreía a su amigo y le daba consejos para que todo fuese a salir bien en ello, aunque no se preocupaba mucho, Nathaniel ya tenía experiencia en cuanto a las citas. Miró su reloj, y dio un pequeño salto de exaltación al notar que quedaban sólo diez minutos para que Adrien fuera por Nathaniel.

—Si, si, si, muy lindo y todo pero deberíamos irnos ya, quedan menos de quince minutos—soltó Chloé, espantando un poco a los otros dos.
—Espera ¿Qué?—Nathaniel se sorprendió ante lo dicho, mas tardó un poco en reaccionar sobre lo que había dicho Chloé—¡¿Entonces que esperamos?! ¡Hay que irnos pero ya!

Las chicas asintieron y comenzaron a arreglar todo como la velocidad de la luz, Chloé pedía un auto para irse lo más rápido posible y Lila arreglaba el cabello de Nathaniel y le daba consejos de como comportarse, unos muy diferentes a los que Chloé le había dicho. Nathaniel se los sabía de memoria, pero un recordatorio no le iría mal.

—Ya está listo, vámonos—expresó Chloé, Nathaniel tan sólo tomó unas cosas suyas junto a Lila y Chloé para salir de la habitación, proceder a bajar por el elevador y al ya estar en la recepción del primer piso salir del edificio lo más rápido posible de ahí. Subieron al auto, y al ya estar los tres arriba de este y cerrar la puerta, el auto arrancó, siendo la acción ordenada rápidamente por Chloé.

Por otro lado, Adrien ya se dirigía ya totalmente listo a la casa de Nathaniel, conocía la dirección ya que habían hecho unos cuantos proyectos junto a otros compañeros, nada importante. Traía sus audifonos puestos con "Alumina", el primer ending de Death Note, sonando a un volumen favorable para estar atento, su celular guardado en el bolsillo izquierdo del pantalón que traía puesto, caminando con relativa prisa para tratar de llegar puntual a la puerta del hogar de Nathaniel, pues faltaban al menos unos cinco minutos para estar a la hora acordada. Tarareaba un poco la letra, debía aclarar que ese ending le había encantado desde el primer episodio, y lo amó aún más cuando descubrió la traducción de este, aparte de que le gustó un poco más cuando vio ese doujinshi yaoi de LxLight.

Sonrió al ya estar frente a la rejilla del cercado de la casa de Nathaniel, detuvo su reproductor y guardó los audífonos en el bolsillo del pantalón; al lado izquierdo de la rejilla se encontraba el timbre, con calma presionó el botón y esperó a que alguien, en especial su compañero, saliera a recibirlo. Un par de minutos después salió un hombre de cabello algo desordenado color café claro, vestido de manera algo formal, con el color verde como resaltante combinando con sus ojos, y una amable mirada junto a una sonrisa plasmada en su rostro.

—Buenas tardes, ¿necesitas algo?—preguntó el hombre, detrás de la reja, dirigiéndose a Adrien.
—O-Oh, hola señor...
—Cierto, soy Edd, un gusto.
—Hola señor Edd, mi nombre es Adrien, venía a buscar a Nathaniel...
—¿A Nathaniel? No se encuentra, salió con unas amigas pero dijo que vendría llegando como a estas horas ¿gustas pasar a esperarlo?
—Si no es mucha molestia, lo que menos quiero es molestarlo señor.
—No importa, a estas horas mi esposo está trabajando y Nathaniel empezó a salir muy seguido con sus amigas, me haces un poco de compañía.—expresó el hombre, Adrien sonrió un poco apenado, él no recordaba que Nathaniel tenía dos padres, vaya que era olvidadizo.—Pasa Adrien, hice galletas, tal vez y te gusten—invitó a que Adrien pasara, al tiempo que abría la rejilla y dejaba entrar a Adrien a la residencia.
—Gracias señor Edd.—agradeció entrando con algo de pena, y siendo dirigido por el señor hacia la entrada de la casa a paso lento, miraba alrededor, realmente la casa era linda, con un jardín delantero lleno de diferentes tipos de flores, y si bien recordaba, a Nathaniel le encantaban las flores.

Al entrar directamente llegaron al living, donde el padre de Nathaniel le pidió que tomara asiento y que esperara, le traería de las galletas que había cocinado para que su espera fuera más cómoda ahí, ese señor se merecía el bendito cielo según Adrien. Edd al ya haber traido una bandeja de galletas de diferentes tipos puso esta en la mesa de decoración y dijo a Adrien que ya podía tomar cuantas quisiera, él agradeció y tomó una, debía decir que en cuanto las probó sintió la gloria, realmente eran buenas, y no sólo buenas, una maravilla. Ambos iban a comenzar a charlar cuando Nathaniel entró por la puerta, dio un pequeño Respingo al notar a Adrien hablando con su papá.

—¡L-Lamento la tardanza!—exclamó Nathaniel, tratando de recuperar su aliento por venir apurado hasta ahí. Las otras dos chicas entraron después de Nathaniel, casi regañando a Nathaniel por salir casi saltando de auto que unos momentos anteriores aun se encontraba en movimiento.
—Oh, ¡No hay problema!—respondió con una sonrisa, Adrien, para después dar el último mordisco a la galleta de chispas de chocolate y levantarse del sofá. —Gracias por todo, señor Edd.
—No hay de qué, ven a visitarme siempre que quieras—dijo amable, acompañando a los demás a la salida, pues Nathaniel había tomado a Adrien del antebrazo izquierdo, diciendo que era mejor irse en ese mismo instante y no perder tiempo.

Para menos de lo que esperaban, o tal vez era que Nathaniel estaba apurado por irse y que Adrien realmente no estaba muy al pendiente del tiempo y noción a su alrededor, ya se encontraban a unas cuantas calles de la torre Eiffel. No hablaban, Nathaniel se sentía incomodo junto a Adrien y éste simplemente no sentía necesidad de decir algo, le gustaba el silencio; caminaban a paso lento, a una distancia que no era ni muy lejos ni tampoco muy cerca, con la mirada al frente pero viéndose de reojo entre ellos, con uno queriendo romper el silencio que se le hacía de lo más incómodo y con otro disfrutando el silencio, por que él no necesitaba decir algo. Sólo son conocidos dando un simple paseo, y nada más.

—Uhm... —murmuró Nathaniel, pensando en que podía decir para comenzar una conversación, ni siquiera sabía de los gustos de Adrien—Entonces —habló un poco más fuerte— ¿te gusta One Direction?
—¿Eh?—soltó, al no haber analizado siquiera la pregunta— ¡Oh, ya! Pues... Me gustan unas cuantas canciones, mas no soy fan de ellos ¿a ti te gustan?
—La pregunta ofende— respondió Nathaniel, soltando una leve risita y dirigir su mirada a Adrien—, claro que me gustan, son mis favoritos.
—Yo sólo he escuchado varías canciones de ellos por que, bueno, Marinette pone canciones suyas—expresó Adrien, sonriendo de manera amable a Nathaniel—. Por cierto, linda ropa.
—Oh, gracias, la tuya no está nada mal.
—Soy modelo, ¿qué esperabas?—cierto aire de orgullo se sintió en el aire por parte de Adrien en cuando dijo eso. Nathaniel rodó los ojos al escucharlo, con una sonrisa de lado pintada en su rostro.
—Ajá, ajá, modestia ante todo joven Agreste.—soltó en broma.
—Ya sabes que siempre, sobre todas las cosas—respondió Adrien, guiñando el ojo a Nathaniel en broma. Nathaniel rió un poco.
—¿Y entonces cuál es tu artista favorito?—preguntó Nathaniel.
—Hum, la pregunta es algo difícil joven Søren, tengo dos bandas favoritas y entre ellas no me decido.
—No es tan difícil, sólo ti-
—¡Oye Nathaniel!—interrumpió Adrien— ¿qué tal si vamos a la Torre Eiffel? —le miró con una sonrisa, logrando un levísimo sonrojo en Nathaniel.
—Uh, creo que está bien...

Lamento los casi tres meses de espera, so aquí tienen la primera parte, la cosa era muy larga así que se los parto en dos para que disfruten y tenga más detalles de todo y no se les haga aburrido.

Por cierto, beieza de portada nueva por LittleErrors la cual tiene un apartado donde hace portadas geniales, Gracias muhé <3

No tengo excusas para no haber actualizado en este lapso, así que nos vemos dentro de un milenio, chauj <3

-All The Love, Zay.

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