Manola pudo notar el nerviosismo de Alfonso, su intención no era delatarlo, sino todo lo contrario,
- Manola: Tuviste suerte que me quedara para escuchar todo,
- Alfonso: ¿Todo?
- Manola: Todo,
Alfonso respiró profundo,
- Manola: Mi intención no es delatarte, no voy a ser yo la que le diga a Anahí que tú y Ángela se conocen desde antes y que tienen una historia, eso te corresponde a ti,
- Alfonso: Aquí hay un error, entre Ángela y yo no hay ninguna historia, eso te lo puedo jurar si quieres. No sé qué te habrá dicho ella pero...
- Manola: Nada, primero quise hablar contigo, no sé por qué confío más en lo que me puedas decir tú,
Alfonso la miró,
- Manola: Es por eso que necesito que me aclares las cosas, no sé porque Ángela todavía no le ha dicho nada a Anahí, pero cuando lo haga lo va a hacer a su manera y te aseguro que no va a ser la mejor. Si Anahí sabe que yo estaba enterada de todo este enredo y que estoy de tu parte tal vez sea mejor para ti,
- Alfonso: Si sé y no creas que es fácil hablar de esto,
Agachó la cabeza,
- Manola: ¿Entonces? ¿Me vas a contar como fue que tú y ella se conocieron y cómo fue que llegaste hasta aquí?
Alfonso respiró profundo y se sentó en una de las sillas del comedor diario que había en la cocina, Manola se sentó frente a él,
- Alfonso: Ángela se hizo pasar por Anahí,
- Manola: ¿Qué?
- Alfonso: Yo hasta hace poco supe que existían dos personas iguales... Ángela se casó con Enrique, mi hermano, usando el nombre de ella, él estaba enamorado de Ángela, pero ella no de él,
- Manola: ¿Tú también estabas enamorado de ella?
- Alfonso: No. En ese entonces yo estaba muy bien con la que era mi pareja, además Ángela y yo nunca nos llevamos bien,
- Manola: Sigue,
- Alfonso: Ángela le robó todo lo que tenía a Enrique y luego se fue con su amante dejándolo solo y en la miseria,
- Manola: ¿Y es por eso que estás aquí? ¿Le viniste a cobrar?
- Alfonso: No. Quería hacerla pagar, pero de otra manera,
- Manola: Dijiste quería ¿Ya no quieres?
- Alfonso: Cuando llegué todavía pensaba que existía una sola persona, y me encontré con Anahí, la de verdad,
- Manola: ¿Y cuándo supiste que Ángela se había hecho pasar por Anahí?
- Alfonso: Al tiempo después de casarnos,
- Manola: ¿Fue ahí cuando las cosas cambiaron entre ambos?
- Alfonso: Sí, en el fondo veía a esta Anahí tan diferente a la que conocía que me parecía imposible que fuera ella quien yo buscaba,
- Manola: Entiendo, pero hay algo que no me encaja ¿Por qué no vino tu hermano?
A Alfonso se le hizo un nudo en la garganta,
- Alfonso: Porque después que Ángela se fue cayó en depresión y...
- Manola: ¿Y?
- Alfonso: Tenía un montón de deudas, problemas, y decidió acabar con su vida,
Manola estaba más que sorprendida, creía conocer todo lo malo de Ángela, pero eso era más de lo que hubiera esperado,
- Manola: Lo siento, debe haber sido muy difícil,
- Alfonso: Eso es todo lo que te puedo contar, no hay más,
- Manola: Gracias a Dios,
Miró cómo tenía la cabeza agachada y conteniendo las lágrimas,
- Manola: ¿Te puedo hacer una última pregunta?
- Alfonso: Dime,
- Manola: ¿Qué sientes por Anahí?
Alfonso sonrió y la miró,
- Alfonso: Por ella siento algo que no se puede describir con palabras,
- Manola: ¿Y qué hay de tu venganza en contra de Ángela?
- Alfonso: Desde que supe que estaba enamorado de Anahí esa posibilidad dejó de existir,
Así como Manola confiaba en lo que él le pudiera decir, él también confiaba en ella y en ese minuto se lo había demostrado. Entre los dos decidieron hacer todo lo posible para que Anahí no supiera nada por el momento y mantenerla alejada la mayor cantidad de tiempo posible de Ángela.
Ya había pasado más de media hora y Anahí todavía no veía a Alfonso en la casa, apenas se cambió de ropa, bajó, con la espera le había bajado el hambre, al llegar a la cocina se encontró con Ángela quien tenía la oreja apoyada en la puerta de la cocina,
- Anahí: Ángela,
Ángela despegó la oreja de la puerta y la miró sobresaltada,
- Ángela: Me asustaste,
- Anahí: ¿Nunca te dijeron que es mala educación escuchar conversaciones ajenas?
- Ángela: ¿Y no te interesaría saber qué fue lo que escuché?
- Anahí: No,
- Ángela: ¿Y si fuera algo que no supieras de tu adorado Alfonso?
- Anahí: Todo lo que tengo que saber de él ya lo sé,
- Ángela: ¿Estás segura?
Sonrió,
- Ángela: Deberías ser un poco más curiosa y cuidar más lo que tienes antes que en el momento menos pensado te lo arrebaten,
Sin decir nada más subió a su cuarto, para ella en ese momento empezaba la diversión, mientras que para Anahí y Alfonso, los problemas,
A los pocos segundos la puerta de la cocina se abrió, Alfonso y Manola se miraron al salir y encontrarse a Anahí con la vista pegada en la nada,
- Manola: Anny,
Anahí los miró ¿Qué podría haber estado conversando Alfonso con Manola?
- Alfonso: ¿Llevas mucho tiempo aquí?
Mientras Anahí los analizaba, con la mirada, podía notar algo de nerviosismo en ambos ¿Qué podía importar el tiempo que ella llevara ahí? ¿Acaso conversaban algo que ella no debía escuchar?
- Anahí: No,
Seguía con la vista puesta en ambos,
- Manola: ¿Te sientes bien?
- Anahí: Sí, me vino un mareo, pero ya se pasó
- Alfonso: ¿Estás segura? ¿Si quieres llamo al doctor?
- Anahí: No, ya estoy bien,
Sonrió forzadamente,
- Manola: Además estando embarazada son normales,
- Alfonso: Pero de todas maneras ya es tiempo de hacer una nueva cita con él, hace un mes más o menos fuiste por última vez y yo quiero saber cómo está mi bebé,
- Manola: En eso tienes razón,
- Alfonso: ¿Te parece si sacamos hora para la próxima semana, Anny?
- Anahí: Sí ¿Vamos?
- Alfonso: Primero voy a llamar para que nos den una cita con tu doctor y nos vamos,
Ninguno de los dos quería volver a encontrarse con Ángela, por lo menos no por el resto del día, ya que vivían bajo el mismo techo e inevitablemente la tendría que ver todos los días.
El camino estuvo silencioso, en el fondo a Anahí le hubiera gustado que Ángela le hubiera dicho que era lo que estaban conversando Alfonso y Manola, seguramente ella lo sabía y ahora cada vez que se encontraran se lo iba a recordar. Por el momento sólo iba a preocuparse de pasar una tarde agradable con Alfonso, ahora era ella la que estaba con él y nadie más. Cuando se volviera a encontrar con Ángela buscaría la manera que le dijera de una vez todo lo que sabía.
- Alfonso: Supe que en la galería que está en el centro pusieron una tienda de niños ¿Quieres ir a ver cosas para Mía después de almorzar?
- Anahí: ¿Te puedo pedir un favor?
- Alfonso: Dime,
- Anahí: No le digas más Mía,
- Alfonso: Pero si habíamos quedado que si era niña se iba a llamar Mía,
- Anahí: Si sé en lo que quedamos, pero si en la ecografía que me van a hacer la próxima semana resulta ser niño, voy a pensar que no lo quieres,
Alfonso se rió,
- Alfonso: No te enojes, si le digo Mía es porque ya me acostumbré a llamarla así y si en la ecografía que te van a hacer resulta que es niño, estás loca si piensas que no lo voy a querer porque va a ser mi bebé y de todas maneras lo voy a amar,
Anahí le sonrió,
- Alfonso: Eso sí, si es niño, como buenos padres que vamos a ser, más adelante tenemos que darle una hermanita ¿No crees?
- Anahí: Claro, le damos dos si quieres,
- Alfonso: Mejor todavía.
Con Manola, el secreto de Alfonso estaba a salvo, pero no con Ángela. Si antes, cuando ella estaba con Enrique odiaba a Alfonso cuando la rechazaba, ahora ese odio también iba para Anahí, si ella no podía tener a Alfonso, tampoco lo tendría su hermana Anahí.
Salió del cuarto de Anahí y Alfonso encontrándose con Manola,
- Manola: ¿Qué estabas haciendo ahí adentro?
- Ángela: Nada,
Sonrió,
- Manola: No sé por qué no te creo,
- Ángela: Problema tuyo,
Se guardó algo en el bolsillo,
- Manola: ¿Qué traes ahí?
- Ángela: ¿A ti que te importa? ¿Quién te crees? ¿El hada madrina de esa mosca muerta?
- Manola: Es tu hermana,
- Ángela: No sabes cómo me gustaría que no lo fuera,
Siguió caminando, ahora sólo tenía que esperar los resultados de esa visita al cuarto de Anahí, tarde o temprano iba a causarles una discusión.
Una semana más tarde, mientras Alfonso se bañaba, Anahí se estaba maquillando, en un rato más tenían hora con el doctor,
- Alfonso: Si a la noche quieres que pase por ti a la casa de Maite me llamas ¿Si?
- Anahí: Bueno, pero no te preocupes, he ido muchas veces a su casa y no creo que me pierda, me sé el camino de memoria,
- Alfonso: ¿Y supiste cómo le fue ayer con el doctor?
- Anahí: Anoche hablamos, pero dijo que hoy me daba más detalles,
- Alfonso: ¿No te contó que va a ser el bebé?
- Anahí: Ninguno de los dos quiere saber,
Salió del baño dejando la puerta junta y se puso a ordenar su cartera para esperar a Alfonso mientras se secaba,
- Alfonso: AMOR,
- Anahí: Dime,
- Alfonso: Se me olvidó traer la camisa ¿Me la puedes pasar por favor?
- Anahí: ¿Dónde están?
- Alfonso: No creo que estén en el living,
- Anahí: Que gracioso estás, quiero decir en qué cajón del closet,
- Alfonso: Ah, creo que en el segundo,
Anahí abrió el closet para sacar la camisa mientras Alfonso le seguía conversando, pero ella ya no lo escuchaba, se había quedado helada al ver una de las camisas de él con una marca de labial en el cuello,
- Alfonso: Anny ¿Estás aquí?
Al no escucharla salió del baño con la toalla envuelta en la cintura y ella se dio vuelta con la camisa en las manos para mirarlo
- Alfonso: ¿Qué pasó? ¿Por qué no contestabas?
- Anahí: ¿Qué es esto?
Alfonso miró la camisa y luego la miró a ella.