Alfonso la miró. Era tan bella. Sus rizos dorados formaban una cascada que caía alrededor de sus pequeños hombros. Sus facciones eran suaves y delicadas. En el momento que su mirada se cruzó con los ojos azul intenso de Anahí, supo que estaba perdido, se acercó a ella, lentamente unieron sus labios para besarse sin reservas.
Posó sus manos en la cintura de ella, pegándola más a su cuerpo, el beso se profundizó a medida que sus lenguas se entrelazaban, después de unos minutos Anahí tomó la iniciativa buscando los botones de la camisa de Alfonso, desabrochándolos uno a uno con toda la calma del mundo, Alfonso por su parte le acariciaba delicadamente la cintura debajo de su blusa. La camisa de él cayó al suelo y sin pensarlo dos veces Alfonso la cargó hasta llegar al cuarto, poco a poco se recostaron en la cama, él sobre ella, y continuaron besándose como si el tiempo no existiera, lentamente se desprendieron de las prendas que los cubrían quedando completamente desnudos, piel con piel, Anahí se estremeció al sentir la notoria erección de Alfonso en su zona más íntima y dejó escapar un gemido de placer. Los besos y caricias no cesaban pero tampoco aumentaban su intensidad. Anahí movió sus caderas contra las de Alfonso impaciente por unir su cuerpo al de él, cuando por fin se conectaron ambos sentían que tocaban las estrellas, la sonrisa dibujada en el rostro de Anahí hizo que Alfonso aumentara la fuerza en sus movimientos para después besarle el cuello nuevamente mientras ella de manera poco sutil le clavaba las uñas en la espalda indicándole que no se detuviera, bañados en sudor y entre sollozos llegaron a la cúspide, ambos quedaron acariciándose lentamente con sus respiraciones agitadas, sintiendo los espasmos producidos al llegar al placer total. Alfonso se quedó al lado de Anahí y ella se acomodó posando su cabeza en el pecho de él y acariciándolo con la yema de sus dedos.
- Anahí: Te amo.
Alfonso agachó su cabeza para encontrarse con una mirada que trasmitía desolación,
- Alfonso: Anahí, yo…
- Anahí: No digas nada,
Con sus dedos le tocó los labios y lo contempló detenidamente,
- Anahí: Abrázame
Se acurrucó entre sus brazos y él la rodeó con ellos, después de darle un beso en la frente miró al techo, a pesar de sentir exactamente lo mismo que ella, no se sentía capacitado para decirlo, definitivamente el corazón le había ganado, aunque se negara a reconocerlo, quería detener el tiempo y olvidarse de todo, pero lo peor estaba por venir.
Se despertó en la madrugada, la vio durmiendo a su lado y la miró detenidamente, se veía tan frágil e indefensa que le provocaba abrazarla y no soltarla jamás, pero al recordar quien era, todo pensamiento se borraba, apoderándose de él una angustia que desconocía.
A la mañana siguiente, Alfonso fue el primero en despertarse, miró a Anahí quien aún dormía a su lado, se levantó con cuidado, cuidando su sueño, así también evitaría hablar con ella, no sabría qué decirle en ese momento, su corazón tenía todo claro, pero no su cabeza, salió en silencio y a los pocos minutos despertó Anahí, nunca esperó encontrarlo a su lado la mañana siguiente por lo que la desilusión no fue tal, se quedó unos segundos abrazada a la almohada, aún podía sentir el olor masculino de Alfonso en ella, aterrizó cuando Derrick se alojó en sus pensamientos, se vistió y antes que Alfonso llegara se había marchado.
Al llegar a su casa antes de bajarse de su auto Manola estaba interrogándola,
- Manola: ¿Dónde te has metido? Me tenías muy preocupada,
Anahí se bajó el auto,
- Manola: Te he dicho que me avises cuando no llegues,
- Anahí: No es para tanto, ya estoy aquí,
Entraron a la casa, Manola detrás de Anahí,
- Manola: ¿Y no me vas a decir dónde has estado?
Anahí pensó la respuesta más adecuada,
- Anahí: Me quedé con Derrick,
- Manola: No me mientas, Derrick te ha llamado desde anoche,
Anahí la miró,
- Anahí: Voy a cambiarme
Se dio media vuelta y subió a su cuarto. No salió de ahí en todo el día, por la tarde llegó Derrick tal como lo había dicho el día anterior, Manola fue a buscarla, al entrar la vio llorar y aunque ella intentó disimular, no pudo,
- Manola: ¿Qué pasa?
- Anahí: Nada,
Se limpió las lágrimas y se sentó en su cama,
- Anahí: ¿A qué venías?
- Manola: Derrick está abajo,
- Anahí: ¿Qué?
- Manola: Quiere verte,
- Anahí: No, no puedo,
- Manola: Pero…
- Anahí: Dile que no estoy,
- Manola: Imposible, ya le dije que te vendría a buscar,
Anahí cerró los ojos y sintió la mano de la mujer en su hombro,
- Manola: Nadie dijo que la vida era fácil. Tienes que enfrentar los problemas,
- Anahí: No puedo,
- Manola: Si puedes,
- Anahí: No,
- Manola: Ven, vamos.
La ayudó a levantarse y la abrazó, ambas bajaron, Derrick estaba esperándola, Manola la dejó sola y Anahí avanzó unos pasos, su aspecto no era el mejor, tenía los ojos notablemente hinchados y las mejillas rojas, Derrick volteó y por sus ojos pudo notar su decaído ánimo, pero no le dio mayor importancia, se acercó a ella y cuando la iba a besar se corrió, nuevamente Derrick no le dio importancia, presentía hace días que algo no andaba bien y prefería seguir como si nada pasara, tal vez lo mejor era darle tiempo. Anahí se sentó en uno de los sillones mirando al suelo y él se sentó junto a ella,
- Derrick: Mira,
Le enseñó los partes del matrimonio, ella los miró y luego lo miró a él,
- Derrick: Mañana yo mismo me encargo de repartirlos. También voy a ver lo del banquete, creo que el menú que elegiste es el más indicado y…
- Anahí: Derrick,
- Derrick: Mañana voy a ir con el sastre para…
- Anahí: Derrick, es inútil,
Tenía los ojos inundados en lágrimas y al hablar la voz se le quebró completamente,
- Anahí: Perdón,
- Derrick: ¿Perdón? ¿Perdón por qué?
Anahí se paró y lo miró, el seguía sentado,
- Anahí: No puedo,
- Derrick: ¿Qué no puedes, Anahí?
Derrick se paró para quedar frente a ella y la miró,
- Derrick: Dime ¿Qué no puedes?
- Anahí: Casarme contigo
Derrick seguía mirándola, la expresión de preocupación que su rostro tenía en un comienzo cambió, estaba notablemente furioso
- Derrick: ¿Qué?
Se alejó de ella,
- Derrick: ¿Es una broma?
- Anahí: Perdóname,
- Derrick: Estás loca, ya está casi todo listo,
- Anahí: Te juro que lo intenté,
- Derrick: ¿Intentaste qué? Siempre has intentado estar bien tú, sin importarte el resto,
- Anahí: No, eso es mentira. Tú sabes que…
- Derrick: Lo único que sé es que eres una egoísta, que solamente piensas en ti,
Anahí rompió en llanto,
- Derrick: ¿Qué hice? Dime, algo tuve que haber hecho, hasta ayer todo estaba bien,
- Anahí: No, hace tiempo las cosas no están bien y lo sabes,
- Derrick: ¿Por qué no me lo dijiste antes? Tuviste que esperar que todo ya estuviera listo,
Anahí agachó la cabeza, seguía llorando,
- Derrick: NO LLORES, MALDICIÓN,
Anahí no era capaz de decir nada, el nudo en la garganta no le permitía pronunciar palabras, se tapó la boca con las manos para ahogar el llanto,
- Derrick: Siempre has tenido la atención de todos, no era necesario hacer esto,
- Anahí: No lo hice para llamar la atención.
Lo miró a los ojos,
- Anahí: Tú sabes que te quiero…
- Derrick: Sí, se nota,
- Anahí: Pero…
- Derrick: No me amas. Siempre lo supe, nunca me lo dijiste y así y todo yo intenté ganarme tu amor,
- Anahí: Y te juro que lo intenté,
Notó que Derrick también lloraba,
- Anahí: Intenté corresponder a ese amor,
- Derrick: ¿Sabes? Mejor ya no me sigas diciendo nada,
Se secó las lágrimas,
- Derrick: No te preocupes por cancelar los preparativos de la boda, yo me encargaré de eso.
La miró por última vez,
- Derrick: Adiós.
Tomó su chaqueta que estaba en el sillón y salió rápidamente de la casa, Anahí se dejó caer al suelo y apoyó su cabeza en el sillón quedando justo al frente donde estaban los partes del matrimonio, los tomó y los miró detenidamente.
- Anahí: Fue lo mejor.
Sentía como el peso de la enorme roca que llevaba desaparecía. Derrick siempre estaba ahí cuando ella lo necesitaba, con él había vivido cosas que jamás olvidaría y siempre lo tendría en sus pensamientos, pero ya formaba parte de su pasado, tenía que seguir adelante con su vida, tenía la seguridad que amaba a Alfonso, pero por el momento lo mejor sería estar sola, aunque no fuera por mucho tiempo.
Cuando Alfonso regresó a su casa se encontró con la soledad que habitualmente lo acompañaba, una parte de él quería que Anahí aún estuviera ahí esperándolo, quería abrazarla y besarla, sentir una vez más la calidez de su piel, aunque supiera que no era lo correcto, con el sólo hecho de verla se le olvidaría todo. Por más que intentaba no pensarla era inútil, el paseo que había dado por la mañana no le había servido de nada, por una parte estaba el recuerdo de su hermano que lo atormentaba cada día más y por otra parte estaban las dos caras de Anahí, se lavó la cara para disimular las lágrimas que había estado derramando en las últimas horas y salió, lo mejor sería quitarse las caretas de una vez.
Para Anahí montar era una buena terapia, no era difícil estar sola cuando quería, sólo bastaba con cabalgar un par de minutos para estar lo suficientemente alejada de su casa y adentrarse en el campo que la rodeaba. Después de estar mirando el atardecer y estar notablemente más tranquila, decidió regresar, al llegar a las caballerizas para dejar a su caballo ahí, lo primero que vio fue a Alfonso, a ambos el corazón le latía a mil por hora, pero él lo disimulaba mejor que ella. Cuando por fin estuvieron cerca, el primer impulso de Anahí fue abrazarlo, pero Alfonso la rechazó y la alejó de él tomándola fuertemente de los brazos, la miró con rencor dispuesto a desenmascararla de una vez, ella se alejó de él y lo miró confundida.
- Anahí: ¿Qué te pasa?
- Alfonso: ¿Quieres saber qué me pasa?
La soltó bruscamente,
- Alfonso: Pasa que me cansé,
- Anahí: ¿De qué hablas? No te entiendo,
- Alfonso: Por favor, ya deja de fingir y por una vez muéstrate tal cual eres.
- Anahí: Sigo sin entenderte, Alfonso.
- Alfonso: No puedo creer que seas tan cínica,
La miró con desprecio y a Anahí se le llenaron los ojos de lágrimas,
- Alfonso: Eres muy buena actriz, pero hasta aquí te duró el juego.
*Cada vez más interesante 😏 dejen sus comentarios 🙈