Este capitulo esta dedicado para: Jazminefv
Realmente aprecio que me apoyes y espero que los capítulos sigan siendo de tu agrado.
I love <3😘😘
-Si sigues así vas a engordar-Comente.
-No me importa-Dijo Dominic con la boca llena.
-No hables con la boca llena-Lo empuje con mi palma este sonrió y me miro divertido.
-Esta bien mamá-Se burlo, yo reí y seguí comiendo.
Los sandiwchs estaban deliciosos y las fresas con crema y chocolate no se quedaban atrás.
Quien diría que todo esto lo hizo mi prometido.
Me siento orgullosa.
Me imagine a Dominic de pequeño comiendo un helado o jugando a la pelota, se veía adorable. Recordé un poco de lo que me contó cuando era niño.
Me dijo que le encantaba jugar con la tierra y con las pelotas, fingía ser jugador profesional o un increíble chef.
Yo me la pasaba con mis hermanos siempre fueron con quienes jugaba pero debo de admitir que fueron hermosos juegos y momentos que añoro pero la edad de niñez ya se fue ya somos adultos que no se van a poner a jugar con muñecas o a la cocinita.
-Dame una fresa con chocolate plis-Extendí mi mano para que me pasase una la tomo pero no me la dio en cambio se la comió y me sonrió triunfante.
-Vas a engordar.
-Aun así tu me querrías ¿No?-Pregunto y aunque había un toque se diversión en sus palabras sabía que la respuesta le preocupaba.
-Por supuesto, amor-Lo bese con ternura pero poco a poco el beso se torno apasionado.
-Te amo Aida-Dijo con voz ronca.
-Y yo a ti-Le respondí.
-¿¡Saben lo preocupados que estábamos!? ¡Les estamos marcando para saber en donde diablos andan y no entra la maldita llamada!
Bien en estos momentos estabamos siendo reprendidos por mis hermanos aún que ni Dominic ni yo nos arrepentíamos de lo que hicimos. Como mis hermanos estaban siempre tras de mí no habíamos podido estar un tiempo a solar.
-¿Nos van a dejar de regañar si les digo que trajimos bocadillos?-A mis amigas se le iluminaron los ojos entusiasmadas.
-¡Si!
-¡No!
Sonreí inconscientemente, nadie dijo nada por unos segundos hasta que Daniel suspiro rendido.
-Estábamos muy preocupados, para la próxima avisen. No nos molesta que salgan juntos pero no estamos en condiciones de juego y lo saben.
El ambiente se torno tenso el mencionar la situación no era algo común de hecho nunca lo hacíamos pero tenían razón seguro que mi padre estaría buscándonos era solo cuestión de tiempo para que nos tuviésemos que refugiar en otro lado.
-Aida, Dominic dame su teléfono-Ordeno Fernando mire confundida a mi hermano pero su seriedad y frialdad me hizo saber que hablaba enserio.
Saque el aparato de mi bolsillo y se lo entregue mi prometido repitió la acción cuando el nos entrego otros fue cuando decidí hablar.
-¿Por qué?-Cuestione.
-Por si acaso a papá se le ocurre rastrearles.
-¿Que?-Pregunte confundida o más bien atónita.
-Es posible que pueda rastrear el teléfono por lo cual decidimos comprar nuevos y vender o regalar los nuestros, y ustedes no son la excepción.
Suspire agotaba.
No quería discutir por lo cual sólo me recoste en el hombro de Dominic y cerré los ojos, esto se estaba volviendo cansado y fastidioso. Teniéndonos que ocultar como ratas o ladrones.
No era justo que mi padre nos hiciera esto pero sabia que el no se tentaba el corazón no los hizo en todos mis años de vida ¿Por que cambiaría ahora?
-¿Puedo llamar a mamá?
Fernando y Daniel se miraron unos segundos para después asentir me levante con la mirada perdida, cuando me encontraba en la cocina llame a mamá que para mi buena suerte aun mantenía su numero.
-Hola mamá-Dije con la voz apagada.
-Hola cariño ¿Esta todo bien?-Maldije internamente por ser tan obvia.
-Claro mamá-Mentí.-Es solo que te extraño.
Eso no era mentira. La echaba tanto de menos, sus abrazos, sus besos, su sonrisa que permanecía aún en medio de la tormenta, que me dijera cosas que me calmasen.
-Yo también te extraño pequeña-Me dijo con nostalgia.
-¿Como estas allí?-Pregunte. Mamá estaba en las fronteras de México.
-Perfectamente bien, tus tíos me tratan muy bien.
Mis tíos vivían en las fronteras de México y aunque no sabia con exactitud en donde, sabia que estaban lejos de mi padre y eso era lo que me importaba. Aunque me comento mamá hace algunas llamadas que en efecto no se encontraban en México sin embargo no sabia en donde se estaban quedando o si quiera en donde estaba.
-¿Como están todos por allá?
-Daniel y Fernando están igual que siempre por ellos no debes de preocuparte siempre serán unos auténticos locos.
-Me alegro-Dijo y después nos mantuvimos en silencio por un rato.
Después de cortar la llamada me senté en una silla y me quede pensando en diversas cosas pero ninguna tenia sentido o relevancia en mi vida así que recoste mi cabeza en la mesa y sin previo aviso me quede dormida.
Cuando desperté me encontraba en mi cuarto, observe a mi alrededor y divise a Fernando.
-Has despertado.
Solo asenti y lo observe con cuidado.
-¿Estas bien?
Volví a asentir.
El suspiro con pesar y se acercó.
-Por lo menos contestame quieres-Dicho esto me abrazo yo le devolví el abrazo sin pensármelo dos veces.
-Te quiero-Le dije.
-Y yo a ti-Se recostó a mi lado y me abrazo me deje embriagar por su aroma y pronto volví a caer en un profundo sueño del cual para ser honesta no quería despertar.
Las cosas iban de maravilla una vez que me había casado con Dominic, mi padre se encontraba en la cárcel ¿La razón? Sencillo tenia cargos con anterioridad entre esos iba el maltrato intrafamiliar después de descubrir todos sus actos lo detuvieron y encerraron; nos suplico, nos imploro piedad pero no la tuvimos no argumentamos nada a su favor al contrario solo hicimos que su condena fuese más grande.
Y bueno Luke, Luke entendió las cosas y se alejo a tiempo no se en donde este o con quien pero se que no me hará daño.
-Dominic-Llame a mi ahora esposo para que viniese a la sala.
-Hola cariño-Me beso los labios y se sentó frente mío.
-Quería hablar contigo...-Murmuré apenada y feliz a la vez, me estaba costando demasiado no ponerme a gritar en estos momentos.
-¿Sucede algo?-Pregunto frunciendo su ceño. Asenti con la mirada baja aún que trate de ocultarlo no pude, la comisura de mis labios se levanto para tratar de ocultarlo mordi mi labio inferior sin embargo termine gritando la noticia.
-¡Estoy embarazada!
Los ojos de Dominic se abrieron como platos y por segundo creí que dejo de respirar, con una velocidad increíble se levanto y se arrodilló frente a mi.
-¡Dime que no es ninguna broma!-Dijo con temor y alegría a la vez.
-No cariño no es ninguna broma-Tome la prueba de embarazo y se la mostré.
El la tomo con de desesperación y la observo con detenimiento, después de que el mismo comprobara la muestra la arrojo y me cargo.
-¡Voy a ser padre!-Grito cargándome y dando vueltas en su eje.
-Dominic me voy a marear-Dije entre risas.
Desperté lentamente gracias a que me llamaban.
-¿Que sucede?-Pregunte somnolienta me percate de que Fernando ya no se encontraba si no que ahora quien dormía conmigo era Dominic.
-Quería saber si estabas bien-Dijo con sencillez.-Estabas hablando en sueños.
-¿Enserio? ¿Que decía?
-Algo de ser padre-Sonrió pícaro aquella sonrisa tan característica de el.-Estabas embarazada ¿No?
Asenti contenta.
-Pues que pena que no sea de verdad, pero pronto lo sera-Su mano se colo debajo de mi camisa y acaricio mi vientre.
-Después no sabrás que hacer con ellos-Reí.
-Cuidarlos y a ti también.
Beso mi mejilla y después mi cuello, mordió un poco e hizo un chupetón.