PDV John
Caminaba por los pasillos de la empresa con Randy al lado mío mirando su celular.
No quería decirle que iba a ver a Nikki, probablemente se molestaría y se muy bien como se pone cuando se molesta. Así que mi plan era:
Decirle a Randy que tenía un dolor en el estómago y debía ir a la enfermería.
— Randy...— trate de hablar.
— ¿Qué pasa? — Respondió Randy concentrado en su celular. Podría jurar que estaba jugando Pokemon Go.
— Eh... Nos vemos después. Me duele el estómago y debo ir a la enfermería. — mentí.
Orton me miro muy serio, tenía el ceño fruncido.
Randy puede ser algo tonto aveces pero era evidente que no me creyó ni una sola palabra.
¡Rayos!
— ¿Dónde irás John? — preguntó.
Lo sabía, sabia que no había creído nada de lo que dije. ¿Ahora qué iba a responder? La verdad no, eso era obvio.
— A la enfermería. — Quise caminar pero el puso su mano en mi hombro deteniendome de inmediato.
Gire para verlo y el quitó su mano para acercarse un poco a mi.
— ¿Qué es lo que tienes? ¿Quieres que vaya contigo? — Se notaba preocupado y eso me causó ternura.
Randy no era de los que mostraba sus preocupaciones o sus debilidades. Ese hombre siempre fue muy frío. No entiendo porque pero quizá la vida lo convirtió en eso. Aunque aveces era amigable, tenía cambios de humor muy repentinos. Tal vez era bipolar.
— No, puedo ir solo Randy. Nos vemos después. — Dije y deje un beso en su mejilla y sonríe por última vez para irme a hablar con Nikki.
Camine hacia el frente mientras sentía la mirada de Randy en mi espalda.
— ¡No vemos después John! — Escuché la voz de Randy un poco lejos.
Bien, ahora Randy no se molestaría, lo único que quedaba era ir a hablar con la mujer que más ame en la historia de mi vida.
[***]
Después de unos minutos llegue a la puerta del camerino de Nikki, antes de golpear, tomé aire para darme valor.
Di un toque a la puerta y después de unos segundos escuché como alguien se acercaba para abrir. El manubrio de la puerta giro y esta comenzó a abrirse.
Ahí estaba, tan bella como siempre.
— Nikki.— Hablé. Tenerla frente mío me causó algo de rabia, a mi mente solo venía el momento que me dijo Gay y todas sus palabras.
Si ella me dijera de nuevo Gay no me molestaría, ahora lo soy, o eso creo.
— John... Pasa. — se alejó de la puerta y entre en el camerino de la gemela.
Ella cerró la puerta y me señaló el sofá de dos personas que estaba al lado mío.
Entendí su mensaje y me senté en el, ella hizo lo mismo y se sentó al lado mío.
El ambiente estaba algo incómodo, era obvio que sea así después de todo lo que pasó entre nosotros.
— John... Yo...— Nicole comenzó a balbucear.
Miré su rostro, cada parte de su cuerpo, era hermosa no había duda.
— Lo siento John. — dijo Nikki.
Me sorprendió mucho esas tres palabras, ¿se estaba disculpando? ¿Después de engañarme e insultarme?
— Nicole..— me interrumpió.
— Se que te lastime John. Perdóname por todo lo que te dije. Perdóname por tratar de causarte problemas con Randy. Perdóname por todo. — Ella tomó mis manos.
Era hora de perdonar todo, tampoco quería seguir así con Nicole, ella era una gran mujer y no quería que me odiara. Si ahora tenía la oportunidad de cerrar las heridas lo haría.
— Nicole... Te perdonó por todo. Pero...— No podía estar con ella de nuevo. Yo amaba a otra persona. No podía mentirle así. — Yo no puedo volver contigo.
Ella sólo sonrió, ¿acaso le hacía feliz que no vuelva con ella?
— John... No te pedí que regresemos. — río muy bajo.
Que ridículo soy, me deje llevar por lo que siempre pasa. Aunque era un alivio que no quiera volver conmigo.
— Yo se que eso no va a pasar. Te falle y una traición no se olvida ¿verdad? — dijo con esa sonrisa en su rostro. — Además se que tu amas a alguien más.
¡Rayos!
Mi corazón comenzó a palpitar a una velocidad maratonica, en cualquier momento se saldría de su lugar.
Mi cabeza comenzó a hacer hipótesis de lo que sabía Nikki, ¿y si ya sabía todo?
— No se de que hablas. — Solté un risa algo nerviosa mientras jugaba con mi camiseta. Más obvio imposible.
— Después de todo no me equivoqué, tú quieres a Randy. Ya lo sé John. No lo puedes negar.
¿Es bruja o algo parecido? ¿Dónde está su bola de cristal?
— No. Somos amigos.
Nikki soltó una risa.
— Los vi John. — Dijo.
¡Oh por las esferas del dragón!
Esto era malo, se supone que nadie debía saber.
— ¿Cuando? — pregunté.
— Los vi en la 56, creí que estaban ahí por mujeres pero vi que no era así. — Me miro y guiño el ojo.
No puede ser, Randy era el culpable de esto, el me llevo a ese sitio. Cuando lo vea lo mató.
— No te asustes John. Ya no quiero causarte problemas, no diré nada. — ¿Eso debía calmarme?
— No. Estas equivocada seguro te lo imaginaste o viste a otras personas.
— No lo imagine. Vi aún hombre alto con tatuajes en el brazo y una camiseta con las letras RKO atrás y a un hombre más pequeño que el otro con unos grandes brazos y zapatos Nike. ¿No eran ustedes? — Río.
— Pudieron ser otras personas. — sonríe nervioso.
— No. Eran ustedes, era el coche de Randy. No me engañaras Johnny. Además dejame decirte que hacen una hermosa pareja. Se complementan muy bien.
Imposible, seguro se estaba burlando. ¿Cómo podíamos complementarnos? El era tan idiota y bipolar. Yo en cambio era más tranquilo e inteligente.
— Para nada. — Reí.
— Claro que sí. Randy es un idiota y tú eres inteligente. — Lo sé — Randy es más violento y tú apenas te enojas. Randy es rebelde y tú difícilmente rompes reglas. Randy es alto y tú más pequeño. Vamos John claro que son hermosos juntos.
Me quedé callado pensando en sus palabras. Quizá si nos complementamos.
— Tal vez. Pero él es casado. — Respondí desanimado.
— A la mirada su esposa. Tú me dejaste por él. ¿Porqué él no lo hace? Desde ya te digo John, que si ese imbécil te hace daño yo misma lo mató. — Chocó su puño con su palma e hizo una cara de guerra.
— Gracias Nicole. No te preocupes no creo que me lastime. — dije sonriendo y separando su mano y su puño.
Nikki era muy graciosa y agradable, por eso me enamore de ella. La mujer ideal al menos para mi. Aunque ahora estaba en busca del hombre ideal.
— Entonces ¿Aceptas que tienes algo con Randy? — preguntó dándome codazos para molestarme. Típico de ella.
— Okey, si. — Respondí.
Nikki sonrió de oreja a oreja y comenzó a molestarme con eso. No se porque no me sorprende que haga eso. ¿Podía considerar a Nikki mi amiga ahora? Tal vez si.
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Perdón por tardar un milenio. Pero aveces me da mi bloqueo y se me va inspiración. Pero ya volví.
¿Nikki es buena?
¿Será una trampa?
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Besos y abrazos sexys para todas.