Bárbara: te dije que somos amigos.
Eduardo: no te creo, sé que entre ustedes dos hay algo más.
Antonio apareció sorpresivamente.
Antonio: Bárbara, te estaba buscando.
La oportunidad de aclarar las cosas se había desvanecido esa noche.
Terminada la cena, todos regresaron a sus casas.
La cosas fueron bastante tensas las próximas dos semanas, Eduardo concentrado en sus trabajo y su divorcio, Bárbara en el cuidado de Aurora, su embarazo y su trabajo.
Los terapeutas dieron de Alta a Aurora, ya podía llevar una vida normal.
Aurora: de verdad no te molesta que me regrese a la hacienda?
Bárbara: claro que no, tu esposo y tu hijo te esperan, yo estaré feliz, solo prométeme una cosa.
Aurora: claro dime.
Bárbara: que recibirás mis llamadas, quiero saber cómo están los dos.
Aurora:claro, te portaste muy bien con nosotros, es más podría traértelo de vez en cuando para que lo veas.
Bárbara: de verdad? gracias mi amor, pero no quiero que tengas problemas con tu esposo.
Aurora: no te preocupes que yo buscaré la manera mamá.
Esa palabra "Mamá" removió bellos sentimientos en Bárbara, por fin su hija después de tanto tiempo la había llamado así como siempre soñó, empezó a llorar, Aurora la abrazo.
Bárbara: me dijiste mamá? no sabes lo feliz que me hace escucharte decir eso.
Aurora: es que después de todo eres mi madre y no veo porque no pueda llamarte así.
Bárbara: me permites llevarte a la hacienda?
Aurora: por supuesto.
Bárbara llevó a Aurora a la hacienda, en el camino le confeso que se iría por un tiempo de la ciudad, le pidió discreción, pero no le dijo sus razones.
Llegando a la Hacienda los Elizalde esperaban a Aurora en la entrada.
Aurora: hola a todos!
Santiago: mi amor bienvenida.
Gonzalo: que bueno tenerte con nosotros de nuevo.
Liliana:por fin regresaste.
Fernanda: Aurora bienvenida, feliz de tenerte con nosotros, ahora si esta la familia completa.
Aurora: y mi bebé?
Todos ignoraban la presencia de Bárbara, a ella poco le importó, el ver a su hija recuperada por completo la hacia muy feliz.
Tomasa: aquí esta el bebé señora Aurora.
Aurora cargo a Santi y de inmediato se lo entregó a Bárbara.
Aurora: te autorizo a que veas a mi hijo, el te adora, y tu a él, gracias por cuidarme y hacerte cargo de el gracias Bárbara por ser mi mamá.
Aurora Abrazó a Bárbara...
Aurora: pido respeto para mi mamá, de ahora en adelante mi hijo y yo la frecuentaremos.
Santiago: pero Aurora, como puedes decir eso después de todo el daño que te ha hecho?
Aurora: entiende Santiago, es mi mamá , además ya la perdoné y quiero olvidar lo que pasó, disfrutarla por los años que no pude, no estoy pidiendo que la quieras, y la aceptes pero sí que respetes mi decisión.
Santiago: no estoy de acuerdo.
Bárbara:me retiro, tengo cosas que hacer, cuídate mucho y cuida a este pequeño.
Aurora: claro que si mamá.
Bárbara regreso a su casa y arreglo su viaje a San Pedro, sus maletas y sus boletos ya estaban listos, viajaría al día siguiente, pero antes visitaría a su ginecólogo.
Antonio: pero esta vez yo te acompaño no? Quiero ver cómo están mis sobrinos.
Bárbara: esta bien, mira tenemos tiempo el vuelo sale hasta la noche.
Bárbara y Antonio fueron a la clínica para revisión.
Doctor: que alegría verte, él es el papá de los gemelos?
Bárbara: no Doctor, es mi hermano.
Antonio: así es, vengo a ver cómo están mis sobrinos.
Doctor: bien, entonces vamos a ver, Bárbara vas en la semana número 10, mira como han crecido tus bebés.
Antonio: ya podemos saber el sexo?
Doctor: aún es muy pronto, a lo mejor en las siguientes 10 semanas.
Antonio: como están Doctor?
Doctor: muy bien, son muy saludables.
Bárbara: Doctor, mañana viajo a san Pedro el lugar que elegi para el nacimiento de mis hijos.
Doctor: ese pueblo tiene un clima delicioso, tengo colegas que pueden seguir controlando tu embarazo, si quieres me contacto con ellos.
Bárbara: me parece perfecto.
Sebastian estaba preocupado por Bárbara a través de un mensaje ella le confesó que el día de su viaje había llegado, así que decidió buscar a Eduardo y hablar de frente con él.