La hija de un Rey.

XMariaMoraesX által

8.7K 2.4K 238

..."Las princesas no son historia vieja"... Tras encontrarse un testamento que exige el cambio de gobierno... Több

Prólogo
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20

Capítulo 7

498 150 20
XMariaMoraesX által

Capítulo 7- UN MENSAJE QUE PROVOCA LAGRIMAS.

Narra Kaidan:

Miré a Nat, comía no tan tranquilamente sus cereales, nunca conocí a alguien que tragara cereales a la hora de la cena y menos aún que no tomará leche con ellos.

-¿Qué?- Me preguntó ella, levantando su cabeza al notar que la observaba.

-¿No puedo observar como tragas esos cereales?- Le dije.

-No- Me respondió en tono seco, levantándose de la mesa y saliendo del comedor.

La reina se había ido hace ya unas horas, y Nat había estado muy callada desde entonces, algo sin duda le pasaba.

Opté por seguirla, había salido al patio y se encontraba sentada en un banco, observando a la nada, y con su plato de cereales en la mano.

-¿Estas bien?- Le pregunté de lejos.

Ella no respondía, se escuchaban como sollozos pero francamente no creo que Natalia McCurthy estuviera llorando, además no tenía razones para hacerlo, o al menos que yo conociera. Di dos pasos más hacia ella.

-Aléjate Kaidan, estoy bien- Dijo en un tono bajo, obviamente no estaba bien, en primer lugar por su tono de voz y en segundo me llamo Kaidan, ella nunca me llama así, si lo estuviera me hubiera dicho bicho raro, idiota, mono, gorila, renacuajo, prostituto, o algún nuevo insulto.

-Nat ¿Qué pasa?- Le pregunté, sentándome a su lado.

-Nada que te importe- Me respondió ella.

-Nat-

-¿Qué quieres malnacido? Te estoy diciendo que estoy bien- Me respondió casi gritando, secándose las lágrimas que corrían por sus mejillas.

-Cualquier persona, hasta un niño se daría cuenta de que no estás bien Nat- Puse mi mano sobre su hombro.

-¡NO ME TOQUES!- Parecía asustada, enojada.

-ESTA BIEN- le dije parándome.- ¿SABES QUE?, NO ME DIGAS QUE TE PASA, TRATO DE AYUDARTE Y SOLO NO NO NO Y NO- en los "no" trate de imitar su voz.

Ella soltó una pequeña sonrisa, supongo que lo que hice fue un cacho gracioso.

-Es que...- Me dijo, levantando su cabeza para mirarme. –Recibí un mensaje-

-¿Qué mensaje Nat?- Le pregunté volviendo a sentarme a su lado.

-"Princesita, princesita, disfruta de lo que tienes"... - Dijo, hizo una pausa. –"mientras dure"-

La estaban amenazando, o algo por el estilo.

-De seguro es una broma pesada Nat, no les hagas caso- Le dije.

-No creo que sea una broma Kaidan, y no me preocupo por mí, me preocupa que le pueda pasar algo a mi abuela o a mi familia o a ti- Dijo, esto último en un hilo de vos, ¿Nat se preocupaba por mí?.

-Bien, mañana mismo le llevamos este mensaje a la policía para que investiguen, pero primero iremos con John, el de seguro sabe mejor que nosotros que hacer- Le dije, extendí mi mano para que la tomara y se levantará.

Caminamos hasta la habitación de John, le enseñamos el mensaje, él nos dijo que no nos preocupáramos y siguiéramos con nuestras vidas, él se encargaría de todo, además de que la reina estaba segura, y que al palacio no entraba nadie que no fuera requerido.

Nat lucia mucho más tranquila, ya no tenía lágrimas en su rostro y su sonrisa diaria ya estaba presente.

-Qué bueno que todo esté bien- Me dijo. –Gracias Kaidan-

-No hay de que Nat- La acompañe hasta su habitación. –Mañana levántate temprano, daremos una vuelta- Le dije.

-Está bien...idiota- Me dijo sonriendo, ya empezaba a acostumbrarme a sus insultos.

-Adiós fea- Le dije con la misma sonrisa.

-Buenas noches prostituto-

Narra Natalia:

Me levante, como siempre protestando, me di una de mis largas duchas para luego bajar a desayunar la rica comida de Nelly, fui directo a la cocina para saludarla y ayudarla.

-¿Y Nelly?- Le pregunte a Kaidan, quien estaba de espalda, buscando algo desesperadamente en la nevera.

-Hoy era su día libre- Dijo el cerrando la nevera.- Y gracias a tu atraganto de cereales anoche y los dos litros de leche que tragaste después de que Amanda se fue no hay nada para desayunar más que harina- Levantó el paquete y lo agito suavemente en el aire, abriendo sus ojos.

-Dos cosas, la primera no trague dos litros de leche, fuiste tú, aun no sé cómo te entró esa cantidad de leche, creo que tu ego hizo un agujero en tu estomago.- Le dije y el sonrió- Y dos ¿no hay huevos?-

-Si hay, pero yo no los voy a cocinar- Me dijo. –Tú lo harás- Camino hacia mí y me puso el delantal de Nelly.

-Claro que no- Le dije quitándomelo.

-Claro que si- me respondió.

-Dije que no Kaidan-

-Entonces no desayunaras- Me dijo.

-Dios, eres tan imbécil, dame los huevos- Le dije refunfuñando.

-¿Cuántos quieres?- preguntó acercándose a la nevera.

-Dame dos- Le dije.

- Yo quiero tres- Me dijo.

-Espera, espera, espera, ¿tú crees que yo te voy a cocinar para ti?, JAJAJ, no querido príncipe, estos dos huevos son para mí- Le dije sonriendo.

Él no me dijo nada, aprovechando el silencio del tarado me di la vuelta y camine hasta el cajón donde se guardaban las ollas y esas cosas, pero antes de llegar sentí algo duro estallar en mi espalda y luego las carcajadas de Kaidan, y si me había tirado un huevo.

Me voltee con la mejor sonrisa que puede y le tire los dos huevos que tenía en la mano. El frunció el ceño y miro hacia el paquete de harina que me había mostrado hace rato, al ver su acción y el notar que lo había descubierto, ambos corrimos hacia el paquete.

-Es mio Kaidan, ya suéltalo- Le dije luchando por el paquete.

-Para que me embadurnes en harina, no queridita-

El obviamente es más fuerte que yo, así que logro sacarme el paquete fácilmente, lo que no se esperaba fue el pisotón que di segundos después.

Fue así que comenzamos nuestra guerra, no era solo de harina y huevo, sino de tirarnos todo lo que había a nuestro alcance, incluso le di un sartenazo. Definitivamente nuestra guerra no era la típica como la de las películas, donde los protagonistas ríen y son felices, esta era una de vida o muerte, él que gane se lleva el respeto del otro.

Expandimos nuestro desastre de la cocina a toda la primera planta del castillo, estábamos ensuciando todo, pero teníamos que buscar escondites.

Después de un rato de buscar a Kaidan con dos paquetes de harina en la mano, lo vi, estaba como una niñita escondido atrás de un sofá, vigilando hacia el lado equivocado, me fui acercando como un ninja silencioso hacia él, cada mueble que había me servía para esconderme, y cuando por fin llegue, le volqué los dos paquetes de harina en la cabeza.

El me tiro al suelo y se puso encima de mí, sacudiéndose para embadurnarme más, y luego refregarse como gato, ahora estábamos ambos completamente sucios, me miro, estaba trepado arriba mío, y no me molestaba, sus ojos se encontraron con los míos, él sonrió, y yo también.

-Estas sucia- Me dijo.

-Tú estás peor renacuajo-

-Te vez linda sucia- Me dijo sonriendo.

Y justo ahí sucedió, mi perdición, mi maldita perdición, estábamos besándonos, si, así es, ESTÁBAMOS BESÁNDONOS, y no era un beso tranquilo, ¿Acaso yo quería ese beso?, ¿por qué tanta pasión?.

-¿QUÉ DEMONIOS PASO AQUÍ?- gritó una de las empleadas que acababa de llegar, esto provocó que ambos nos separáramos de inmediato, ella de seguro no vio nuestro beso, porque estábamos atrás del sofá, eso era bueno. Kaidan se paró, y luego yo.

-Miranda, nosotros...- Kaidan hizo una pausa. –Estábamos haciendo el desayuno-

-Ya veo- Dijo la chica sacudiendo la cabeza. –Vayan a ducharse, yo limpio-

Ambos asentimos y nos dirigimos a las escaleras, yo estaba callada, tratando de procesar lo que acababa de pasar.

-Nat, yo... -Comenzó Kaidan.

-No tienes que disculparte pues yo tamb...- Lo interrumpí pero el hizo lo mismo conmigo.

-No me iba a disculpar por algo que no lamento haber hecho- Me dijo, y siguió caminando hacia su habitación.

Entre, cerré la puerta y corrí al baño, el flashback de aquel beso se repetía en mi mente, no entiendo, nunca en mi vida, en mi maldita vida había sentido lo que sentí hace unos minutos, pero, ¿Por qué?.

Luego de la ducha, baje, ya estaba todo limpio, y Kaidan estaba parado al final de las escaleras.

-Iremos a desayunar, ya que cocinando no somos muy buenos- Me dijo sonriendo.

- Esta bien señorito-

Caminamos hasta su auto, él se puso un gorrito ridículo y unos lentes, supongo que para que no lo reconozcan.

A la media hora llegamos al centro comercial.

-Nunca había desayunado a las 10 de la mañana- Dijo Kaidan cerrando la puerta del auto.

-10,15- lo corregí.

Caminamos hasta un restaurante y allí esperamos para pedir.

-¿Qué plato te gusta Nat?-

-¿Pues no es obvio? El hondo, porque cabe más comida- Le dije sonriendo.

-Pero tú sí que eres angurrienta, me refiero a... - Comenzó.

-Si, al menú- Le dije.

-NATALIA MCCURTHY- Esa voz yo la conozco, era Sam.

-Mi mejor amiga- Le dije asustada a Kaidan.

-¿Qué hacemos?- Me preguntó el con la misma cara de desesperación que tenía yo.

Nadie podía saber que yo era princesa, nadie más que mi familia, y si me ven con el príncipe, eso no ayudaría...

...

COMENTEN SU PAÍS

KAIDAN ARRIBA.

Olvasás folytatása

You'll Also Like

166K 7.9K 48
Una historia que promete atraparte desde el principio hasta el final. Camila es una chica humilded, Ignacio Besnier es el heredero de un imperio empr...
393K 12.5K 35
keily siempre había sido de talla grande y aunque siempre ha tenido sus inseguridades, nunca a dejado que se interpusieran en su camino. Eso es hasta...
1M 92.5K 44
¿Y si por accidente te ganas el odio del cantante más famoso del país? *♫* Kale es el cantante juvenil más amado de la década, pero está cansado de s...
12.1K 551 14
¿Que pasaría si te sintieras completamente atraída por la prima de tu nueva compañera de trabajo? Descubre la historia de Chiara una artista emergent...