Capitulo extra mega largo. Disfrutarlo
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El día en la librería fue genial. Pude soñar tanto como quise y ayudar a gente a hacerlo. Ryan vino a buscarme para hablar, pero fuimos interrumpidos por una llamada de su familia que le invitaba a cenar ya que su hermano había llegado. Lo malo de todo esto fue que me invito (obligo) a asistir.
Eddie se sintió usado después de su momento intimo con Josh y él se fue sin siquiera decir adiós, pero no se pudo comparar ese sentimiento con el de oír los gemidos de una chica que Josh había traído a casa solo tres horas después de haber estado con él. Usado era una palabra muy pequeña para describir como se sentía.
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POV Ryan
Llamo a la puerta y veo como el nerviosismo de Rose aumenta. No sé porque la he traído la verdad, pero no me arrepiento. Es un momento feliz que mi hermano este en casa, ¿Por qué no hacerlo junto a ella?
Los pasos suenan y sé que en menos de cinco segundos la puerta se abrirá y Rose se preguntara que está haciendo aquí.
La puerta se abre y Rose se aleja un poco de mí. Sin poder evitarlo, pongo mi brazo en su cintura y la acerco a mí. Mi hermano nos mira e inmediatamente salta a mis brazos como yo a los suyos.
El abrazo está cargado de cariño y amor, aunque suene muy cursi. Mi hermano y yo no nos hemos visto desde hace casi un año. Está estudiando arquitectura en Nueva York y le ocupa casi todo el tiempo. Aunque él tiene casi 23 años, cuando nos juntamos somos como críos.
-Te he echado de menos.- le digo manteniendo el abrazo.
-Yo también colega.- me dice soltándose de mi abrazo. Cuando nos separamos el rápidamente centra su mirada en Rose y pone una sonrisa que no me gusta nada. Vuelvo a coger a Rose por la cintura y cuando le voy a presentar a mi hermano, mis padres aparecen.
-Oh, por favor Ryan. ¿Dónde están tus modales?, invítala a pasar o cogerá frio.- dice mi madre con un delantal puesto.
Yo suspiro y entro a la casa junto a Rose, que no ha hablado en ningún momento. Sí que debe estar nerviosa. Le doy un leve apretón en la cintura y ella me mira. Yo le sonrío y ella segundos después me imita.
-Estos son mis padres, Elizabeth y Robert.- digo. Rose le da a mi padre la mano pero el rápidamente se la aparta y se acerca a ella dándole un abrazo que seguramente, la toma por sorpresa. Mi madre, igual que mi padre, le da otro abrazo que ella ya corresponde menos cohibida.
-Eres preciosa. Me encanta tu ropa.- dice mi madre mirándola. Rose lleva lo mismo que esta mañana, es decir, una camiseta a cuadros rojos y azules junto a unos pantalones negros que le hacían unas piernas preciosas. Llevaba el pelo un poco más enmarañado y su cara tenía un rubor que se podía atribuir a la situación actual. Rose respondió con un gracias y una sonrisa.
Mi hermano que esperaba su turno, cogió su mano y la beso mientras le decía "Tienes unos ojos tan azules como el mar, me gustaría sumergirme en ellos" en francés. Supe que Rose lo entendió por su aumentado color rojo en la cara. Mientras, yo, rodaba los ojos. Rose volvió a mi lado pero no se acercó tanto como estábamos antes.
-Familia esta es mi...- me corte. ¿Qué era Rose? Había ido a buscarla para hablar precisamente de eso y solo nos habíamos quedado en que no éramos solo amigos. ¿Qué les podía decir a mis padres? Esta es mi amiga, pero no es mi amiga, todavía estamos hablando de eso. Nos hemos besado un par de veces pero no sabemos que somos.- Ella es....- Rose me interrumpió, y no pude estar más agradecido.
-Soy Rose. Vivo en la fraternidad de Ryan junto a los demás chicos.- dijo ella sonriendo. No pude evitar sonreír por lo segura que estaba ahora.
Mis padres la invitaron al salón, pero ella se ofreció a ayudar en la cocina, cosa que mi madre acepto emocionada. Le encantaba cocinar, todo lo que yo sabía lo había aprendido de ella. Mi padre se disculpó cuando le sonó el teléfono y se fue hacia su despacho. Mi hermano y yo nos quedamos solos y el rápidamente se acercó a mí.
-Me encanta.- fue lo primero que dijo.
-Ni lo sueñes.- dije yendo hacia el salón.
-¿Por qué no? Me gusta.- dijo esto último poniendo un puchero como un niño pequeño.
-Ya, ¿Y?, a mí también me gusta, y mucho. Tú la acabas de conocer. No, no y no. Es mía.- le dije protestando como si me hubiese dado una rabieta.
-Tranquilízate hermano.- me dijo haciendo con los brazos movimientos raros para que me relajara.- No sabía que te gustaba tanto.- dijo riendo.
Mi madre y Rose entraron al salón cargando con fuentes llenas de comida. Mi madre rápidamente nos mandó a mi hermano y a mí a por más comida mientras ella iba a avisar a mi padre.
POV Rose
Terminamos de traer la comida. Ryan me indico donde sentarme y me movió la silla donde me senté y luego el me acerco a la mesa. Yo sonreí por el pequeño, pero caballeroso detalle que había tenido.
La verdad es que había estado nerviosa desde que Ryan me había dicho que iba a cenar con su familia esta noche, pero rápidamente ese nerviosismo desapareció al encontrarme con la familia que me hubiese gustado tener. La madre de Ryan me enseño algunos trucos de cocina y no paraba de decirme que era guapísima, yo no paraba de agradecérselo, pero la verdad es que seguramente llevaba las peores pintas del mundo y lo decía por cortesía.
Empezamos la cena. Elizabeth, la madre de Ryan, acribilla a Matt a preguntas. Él contesta a todas sin queja hasta que pregunta si ha conocido a alguna chica, el rápidamente intenta cambiar de tema pero al no conseguirlo, Matt le hace la misma pregunta a Ryan. Elizabeth vuelve la mirada a su otro hijo esperando respuesta, pero esta última no llega. Me lo estoy pasando bastante bien, Robert me pregunta sobre mi carrera y sobre Florida, y ahí llega el tema escabroso.
-¿Por qué te fuiste de Florida?, ¿No había universidad de Derecho ahí?- pregunta Elizabeth. Yo hago una mueca apenas perceptible, pero alguien sí que la vio. Ryan baja su mano y la posa encima de la mía mientras le da un leve apretón dándome ánimos. Yo hago una pequeña risa y le contesto sinceramente.
-La relación de mis padres no era muy buena entre ellos y mucho menos hacia mí. Mi madre visito la casa de la fraternidad hace unas cuantas semanas y dejo claros muchos aspectos de nuestra relación... Bueno, ya no hay relación y lo prefiero. Con mi padre todo lo contrario, hice un viaje para verle y lo arreglamos todo, ahora nos escribimos todos los días para saber cómo nos va el día.- digo encogiéndome de hombros. A las preguntas de mis hermanos ya había contestado. Cuando dije que mi hermana estaba en un internado y que yo también fui, vi como la madre de Ryan hacia una mueca igual a la que acababa de hacer. Pero lo que no me esperaba era que dijera lo siguiente.
-Siempre que quieras, esta es tu casa corazón.- me dijo con una cálida sonrisa. Yo asentí porque si hablaba lloraría. Volver a hablar de mi madre y que Elizabeth me dijese aquello, me afecto un poco. Rápidamente cambio de tema, cosa que agradecí, aunque fue uno que no era mi preferido.
-¿Has sido modelo?- me pregunto. La mirada del hermano de Ryan se levantó rápidamente y se dirigió hacia mí y vi como centraba su atención.
-Bueno.- dije riéndome- De pequeña lo fui durante unos 7 años y hace poco mi padre me llamo, su novia necesitaba una modelo de manera urgente y lo hice. Pero no es a lo que me dedico ni nada, simplemente si me necesitan, ayudo.
-Ya decía yo que me sonabas.- dijo Elizabeth sonriendo.- Matt cariño podrías traer la revista que hay en la sala de estar, por favor.
Matt se levantó y se fue a por la revista, mientras la madre de Ryan me halagaba diciendo que tenía un cuerpo envidiable y que ya le gustaría a ella. Yo no paraba de sonrojarme y Ryan se reía, ¿Por qué no lo acribillaban a preguntas? ¿Por qué no hablamos de las trastadas de cuando era pequeño y así lo avergonzamos un poco? Matt volvió a aparecer en escena literalmente babeando en la revista. Este estaba mirando el interior de la revista, pero de fijo que ya había visto la portada. Qué vergüenza. Se sentó y le dio la revista a su madre mientras me miraba pícaramente hasta que su hermano emitió uno especie de gruñido que hizo que su padre levantase la cabeza, se riera y negase mientras miraba a sus dos hijos. Más roja no podía estar.
La cena transcurrió sin ninguna otra situación embarazosa... Para mí. Cuando todos los comensales terminaron de ver la revista, su madre cambio de tema al de los líos de Ryan y Matt cuando eran pequeños. No me reía tanto desde la fiesta de pijamas.
Tristemente la cena acabo y una llamada de mi padre y de Lana hizo que no nos pudiésemos quedar. Sorprendentemente Lana me volvía a necesitar. Me reí por la casualidad y cuando se lo dije a Elizabeth ella me imito.
Nos despedimos de ellos. Le había dicho a Ryan que se quedase, que podía ir en taxi pero él dijo que no y que quería acompañarme. Lana nos había dado la dirección de su agencia aquí, ahí nos esperaría su secretaria para darme el billete y viajar hacia Baltimore.
Nos montamos en el coche en silencio hasta que no pude aguantarme más.
-Así que...capitán calzoncillos.- dije riéndome - ¿o prefieres drag queen?
-Era pequeño, no sabía cómo era el maquillaje y mucho menos la ropa de mi madre, fue un experimento.- dice enfurruñado.
-Me ha encantado la foto.- le digo intentando evitar que salga la carcajada.
-Ja, ja, ja- dice serio, pero veo como una sonrisita se asoma por sus labios.
Nos pasamos el resto del camino en silencio, pero es un silencio agradable. Observo las calles casi vacías-Normal, son la 1:32 am- Mi padre ha tenido mucha suerte de pillarme despierta.
Llegamos a la agencia y veo que hay una luz encendida. Ya me acompaña a pesar de que ya le he dicho que no hacía falta. Al entrar una mujer rubia de unos 40 años y bajita nos atiendo.
-¿eres Rose, no?- me pregunta mirando el ordenador.
-Sí, esa soy yo.- digo. Ella asiente y coge el teléfono, supongo que estará llamando a Lana. La mujer rubia asiente y oigo que dice algo sobre un chico, supongo que se referirá a Ryan. De repente fija su mirada en él y Ryan y yo fruncimos el ceño. La mujer cuelga y vuelve al ordenador, al rato unos papeles salen de la impresora.
-Vuestros billetes.- dice la mujer.- tenéis que ir a este hotel, no he podido reservar, no me cogían el teléfono. La sesión es mañana a las 9 am en la dirección que os voy a dar ahora.- toma una pausa cuando coge el papel y nos mira.- Venga, que no llegareis al tren
-¿Por qué me da un billete?- dice Ryan sacándome de este momento de incertidumbre.
-Oh!..Disculpa- dice sonrojándose, yo mientras ruedo los ojos.- Lana me ha dicho que querían a un chico, te he visto y ha dicho que te quería. Te pagaran y estaras como un rey asique por un día que no vayas a clase, no pasara nada, además apuesto a que no es la primera vez.- dice. La mujer nos empuja hacia fuera del local cuando todavía estamos adquiriendo la información. Al rato Ryan habla.
-Vámonos, no quiero perder el tren.- dice con una sonrisa divertido. Esa sonrisa se me contagia cuando veo que no está enfadado conmigo por haberle metido en este embrollo.- ¿nos vamos o no?
Me acerco a él y nos montamos en el coche. Ryan me hace enviarle un mensaje a su madre diciendo que hay un modelo en la familia. Segundos después su madre le llama y pongo el manos libres. Ryan le cuenta lo sucedido y no se quien está más emocionado Ryan o su madre. Yo me estoy riendo, me encanta esta emoción, me ha encantado la cena, me ha encantado la familia de Ryan y me encanta Ryan.
Oh Dios, borra eso último.
Llegamos justísimos a coger el tren, pero llegamos. En el tren nos ponemos a jugar como niños pequeños a hacer pruebas. La prueba más vergonzosa que he tenido que hacer ha sido hacer que un hombre me invitase a un café utilizando todas mis armas. Mientras yo le he hecho que aparentase tener sexo en el baño, al principio él me ha dicho que sería más creíble si iba la baño con él, pero eso lo veía demasiado...peligroso para nosotros.
El tiempo se pasa volando y en un abrir y cerrar de ojos , llegamos a Baltimore. Cogemos un taxi que nos lleva a un hotel del que ni si quiera me fijo del nombre del sueño que tengo.
Vamos a recepción donde hacemos cola ya que hay una pareja delante de nosotros. Cuando nos toca a nosotros sucede lo peor.
-Solo nos queda una habitación sin reservar, lo siento.- dice la secretaria revisando en el ordenador. Esto tiene que ser una broma.
-¿y una con dos camas individuales?- pregunto esperanzada. La chica vuelve al ordenador y frunce el ceño.
-Nada, todo reservado, lo siento.- dice. Suspirando, le digo que nos de la llave y subo junto a Ryan a la habitación. No llevamos ni maleta, ni bolso pero sé que la ropa no será un problema, podemos comprar algo en la tienda del hotel.
Entramos en la habitación y lo primero que veo es la cama de matrimonio, al menos es grande.
-Me voy a dar una ducha- le digo a Ryan, no dejo que diga nada ya que rápidamente cierro la puerta del baño.
Suspiro, no sé si seré capaz de dormir junto a Ryan sin hacer alguna estupidez. Abro el grifo de la ducha y dejo que se lleve todos estos pensamientos. Cuando termino me enrosco una toalla en el cuerpo y otra en el pelo. Es entonces cuando me doy cuenta de que no tengo ropa, ¿con que voy a dormir? Mierda. Abro la puerta del baño suavemente y me asomo, veo a Ryan con ¡ROPA! Asomo todavía más mi cabeza y le llamo.
-Ryan.- le digo inocentemente.-¿Me has comprado ropa?¿quizás..Un pijama?- él se ríe.
-No te lo vas a creer, creo que estamos en un hotel de esos en los que los casados vienen con sus amantes. En la tienda solo había cosas...poco casuales.- dice riendo mientras niega con la cabeza.- Había consoladores y más juguetes.- Me uno a su risa sin darme cuenta que he salido del baño. Ryan deja de reír y yo al darme cuenta también. Carraspeo.
-¿entonces...?- le pregunto. El alarga la mano y veo que me da lo que parece ser ropa interior. ¿Y el resto?- ¿No hay más?- le pregunto
-lo creas o no, eso era lo más discreto que he encontrado.- dice bostezando. La verdad es que ambos estamos demasiado cansados como para discutir sobre qué es lo que había en la tienda.
El pasa al baño y yo aprovecho para ponerme lo que va a ser mi pijama, es decir, un sujetador negro de encaje y unas braguitas que casi se convierten en tanga a juego con el sujetador
Cuando estoy a punto de meterme en la cama el abre la puerta del baño pillándome totalmente destapada. Veo que el rápidamente desvía su mirada y yo me tapo lo más rápido que puedo. Él se pone el calzoncillo, todo el rato cubierto por la toalla. Al meterse en la cama sus músculos se tensan y yo hago lo mismo. Pongo dos cojines entre nuestros cuerpos.
-Por si acaso.- le digo sonriendo. Él se ríe y se asoma sobre los cojines, me da un beso en la cabeza.
-Que descanses Rose.- me dice. Yo sonrío a la habitación ya oscura.
-Buenas noches capitán calzoncillos.- le digo. Lo último que oigo antes de quedarme dormida es su risa.
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La alarma suena y yo protesto. Me encuentro a Ryan abrazado a mí, sin rastro de los cojines. Despierto a Ryan que se ve igual de sorprendido que yo pero aun así nos levantamos y nos vestimos con nuestras ropas de ayer que Ryan había mandado a la lavandería. Es un amor.
Pedimos un taxi mientras desayunamos en nuestra habitación un par de tostadas con mermeladas. Ryan me pregunta que como es lo de posar y yo se lo explico cómo puedo. Ryan ofrece un juego que es que yo le tengo que hacer fotos posando. Cojo el móvil y le hago fotos, fotos que muy posiblemente no borrare.
Llegamos a la nave donde vamos a hacer las fotos y Lana y mi padre nos saludan.
-Hola mi niña.- me dice mi padre
-Hola papa, Lana.- le digo abrazándolos.- Este es Ryan, uno de mis compañeros de casa.- digo y veo como mi padre lo escanea y frunce el ceño.
No da tiempo a que ninguno diga nada ya que Lana nos lleva a maquillaje donde yo vuelvo a encontrarme con Francesco. Lana entra en el camerino y me explica que lo primero que haremos será unas fotos de una marca de ropa que la verdad, es que no me acuerdo como se llama y luego volveremos a hacer unas fotos en ropa interior.
Salgo del camerino y me encuentro con un Ryan guapísimo vestido de negro, estilo motero. Oh Dios. Yo voy parecida, camiseta roja con un chaleco negro de cuero y unos pantalones iguales junto a unos taconazos.
-Perfectos.- dice Lana
Al principio nos hace fotos individuales, pero luego pasamos a las de pareja. Lana nos hace ponernos en posiciones un poco comprometidas, pero no demasiado. Un brazo por aquí otro por allá. Nos vamos cambiando de ropa y yo no puedo dejar de admirar lo bien que le queda todo a este hombre.
Las fotos con ropa terminan y volvemos a los camerinos. Al entrar veo la ropa interior y lo primero que pienso es que ni de coña me voy a poner eso, pero luego pienso en Ryan y pienso en sorprenderle.
El primer conjunto es suavecito. Conjunto de encaje rosa fuschia. Braguita y sujetador, también me hacen ponerme unos zapatos negros de tacón.
POV Ryan
Lana se ríe cuando me ve en ropa interior.
-Guarda el relleno, no lo necesitamos.- dice riendo. Yo me sonrojo un poco pero desaparece rápido. Cuando salgo del camerino me encuentro con Rose apoyada en la pared con un conjunto rosa que... hace que se me caiga la baba. Ella me ve y me sonrío inocentemente. Dios, no sé si voy a aguantar toda la sesión.
Como he dicho, la sesión es dura estando al lado de Rose en ropa interior y más, en las posturas en las que estamos. Me han hecho morderle el cuello, bajar uno de sus tirantes mientras miraba a la cámara -cosa difícil por cierto- Se ha sentado encima mocha tenido que simular que me bajaba los calzoncillos etc... Horrible. Pues suerte solo nos queda un conjunto más y terminamos. Me dan un calzoncillo negro con una banda negra pero con las letras en blanco, se ajustan perfectamente, me gustan.
Al salir, Rose está esperando donde siempre, solo que esta vez, con una bata larga puesta. ¿Cómo puede tardar menos que yo en cambiarse, ella tiene más cosas?
Lana nos dice que estas fotos van a ser más sensuales y que tenemos que simular gran atracción, pero atracción sexual. Primero, voy a tener que morder la oreja de Rose, luego poner mi cara en sus tetas y luego, ya tumbado en el suelo, ir mordiendo su piel desde sus pies hasta su cabeza.
Voy a morir.
De repente Rose se quita la bata y yo me quedo inmóvil, me he despertado totalmente y cuando digo esto quiero decir lo que quiero decir... ya me entendéis. Rose lleva un sujetador negro de encaje con un lacito en el centro, un tanga también de encaje que va unido a una liga que sujeta unas medias cuyos bordes son también de un sensual encaje, todo esto acompañado de los zapatos negros que ha estado llevando durante toda la sesión.
Me muerdo el labio, esto tiene que ser una fantasía. Rose ni me mira, simplemente se coloca dónde debe y yo lo mismo. Cuando me pongo detrás de ella para hacer lo de la oreja la obligo a mirarme.
-Estas guapísima.- le digo mordiéndome el labio al igual que ella.
-lo mismo digo.- dice echándome un vistazo de arriba abajo, cuando llega a mi entrepierna levanta una ceja y me mira riéndose.
-No te rías, ha sido muy difícil aguantar, pero con lo que llevas, me ha sido imposible.- le digo y ella se vuelve a reír.
Hacemos las fotos de pie y yo estoy que exploto. Noto la tensión sexual por toda la nave y mira que es grande.
-¿Os podéis tumbar?- dice Lana mirando las fotos ya realizadas.
Rose se tumba boca arriba y yo me posiciono en sus pies donde comienza mi camino de mordiscos. Empiezo por el tobillo y voy subiendo hasta la rodilla, ahí empieza lo malo. Rose lleva ya un rato respirando entrecortadamente y cuando llego a donde termina la media y la muerdo, veo que ha estado conteniendo el aire.
Esto todavía no ha terminado y sigo mordiendo el muslo interior. Se ve que Rose es toda una profesional porque si yo fuera ella, yo ya me hubiera abalanzado.
Lana me dice que suba ya hacia su vientre y eso hago, me demoro un poco más en su ombligo y en su canalillo, pero cuando llego al cuello y levanto la mirada veo que está jadeando, suave, pero lo hace. No puedo evitarlo y aunque esto no me lo ha pedido Lana, me acerco a su rostro y dejo nuestras bocas a pocos centímetros, si me echase hacia delante juntaría nuestros labios y acabaría con la tortura, pero la voz de Lana me distrae.
-Habéis estado fabulosos, perfectos.- nos dice sonriendo. Ayudo a Rose a levantarse, la pobre esta sofocada y roja, no creo tener mucha diferencia con ella ahora mismo.- Lo último que has hecho me ha encantado. Ir a cambiaros y vemos las fotos.
Cuando me giro Rose ya ha desaparecido.
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POV Josh
No me suele costar mucho estudiar pero ahora mismo me cuesta horrores. Eddie ha traído a un compañero para hacer un trabajo sobre no sé qué después de la comida y llevan ahí como dos horas, cada dos minutos oigo risas, pero ahora no se oye nada. Llevan como media hora sin que se oiga nada. ¿Qué estarán haciendo?¿se estarán liando?¿estarán teniendo sexo?
No puedo evitarlo y me levanto de la silla para salir por la puerta. Pego la oreja a la puerta pero nada, no oigo nada. Estoy unos minutos con la oreja pegada a la puerta hasta que se me ocurre una idea.
Bajo a la cocina y cojo un vaso alargado de cristal, esto funcionara. Subo corriendo las escaleras y pego suavemente el vaso a la puerta, pongo mi oreja al otro lado del vaso e intento escuchar. Oigo pasos.
Mierda!!
Me tiro al suelo y pongo el baso en la boca del radiador justo cuando la puerta se abre. Eddie y su compañero me miran con cara extraña .
-¿Qué haces?- dice Eddie frunciendo el ceño. Que guapo esta cuando hace eso.
Eddie acompaña a su compañero hacia la puerta y yo me pongo en pose casual sin alejarme del radiador. Cuando Eddie sube me mira serio y entra a su habitación, va a cerrar la puerta pero se lo impido pasando yo también al interior de esta.
-¿Qué quieres?- me pregunta bruscamente.
-Yo..¿Os habéis acostado?- le digo. Veo como Eddie se tensa y deja de ordenar papeles.
-¿Qué derecho tienes a preguntarme eso? Lo primero no es de tu incumbencia. Lo segundo, yo me acuesto con quien quiero, al igual que tu ¿no es así?- me dice a centímetros de mi cara. Me voy a lanzar a besarlo pero el ruido de la puerta hace que me separe de la puerta como si estuviera ¿avergonzado? De que alguien me pillase en esta situación.
-¡Cuéntame coraz...!- dice Rose- Ups, no sabía que tenías compañía. Estoy en mi cuarto.- dice y cuando va a cerrar la puerta Eddie habla.
-No, tranquila, Josh y yo ya hemos terminado.- dice Eddie.
Y sé que esa frase, tiene doble significado
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No os quejareis e.e. Este capitulo es super largo, lo se, pero es que no me parecia bien partirlo y haceros esperar hasta el domingo, pero si me equivoco decirmelo jajajaja
No tengo mucho que decir, que espero que os haya gustado y bueno alguna preguntita.
¿que os parece lo que pasa con Ryan y Rose?
¿Que deberia hacer Eddie?
Elegir team si quereis, estan en el capitulo anterior.
Le dedico el capitulo a luisaleyva1510 por sus comentarios, muchas gracias amor.
Ya sabeis, decir que os gustaria que pasase, habeis visto que he cogido la idea de la revista
Decirme tambien si veis algun fallo.
Votad y comentar
Hasta el domingo
Muchooos besos <3<3<3<3