-Y así es la forma correcta de contar y organizar la métrica de un poema. ¿Tienen dudas?- pregunta Zayn mirándonos una a una, pero nadie habla. Todas parecen estar muy sumidas en sus pensamientos.
Incluso yo, lo miro fijamente y sus ojos encuentran los míos, lo desafío con la mirada y él no la aparta.
Le suplicaría pero me ve de tal forma, sonriendo de lado, las pupilas dilatadas. Siento mi corazón latiendo más deprisa.
"¿Qué escondes Malik?" Le pregunto mentalmente.
"No me conoces... Y nunca lo harás" susurra en silencio.
-Humm ¿profesor?- pregunta Inés.
Zayn vuelve la vista hacia ella y luego vuelve a la clase, escribe en el pizarrón y me doy cuenta como todas lo ven de una manera seductora, está claro que quieren algo con él, pero Zayn no las quiere a ellas, no las necesita. Me tiene a mí, y si tengo que aguantar otro golpe con tal de saber quién es mi padre, lo haré.
Julien... ¿Cómo pudo meterse en mis sueños igual que... Demian? ¿Quién es mi padre y de dónde los conoce?
-Quiero que escriban un poema, pero que hable del... Erotismo.
Todas abren los ojos como platos, sí, yo también.
-Procuren no ser vulgares, usen el poder de las palabras simples, la belleza está en cómo lo escriban, dejen volar su imaginación, el erotismo no es nada malo, apuesto a que todas- me ve a los ojos- han tenido experiencias eróticas, o simplemente imaginen. De las estrofas que quieran, comiencen.
Se sienta en el escritorio y yo lo miro fijamente, el suéter negro oculta sus músculos cubiertos con tatuajes, sin embargo yo he visto cada centímetro de su cuerpo, su piel entera, la masculinidad de la que está muy orgulloso, el placer que le provoco con una simple caricia, mis manos a su alrededor, mi lengua recorriéndolo...
Tomo el lapicero antes de que la inspiración desaparezca y escribo. Escribo las sensaciones que él me causa, las que yo le causo, su cuerpo, su mirada, sus manos, su voz, su... Todo.
Cuando termino alzo la cabeza y él me ve fijamente.
-Paula, haz el favor de leer lo que escribiste- dice con un semblante serio, pero yo sé que tiene curiosidad.
Me aclaro la garganta y comienzo.
Sigo teniendo la sensación de tus manos sobre mi cuerpo, acariciándome con destreza, lo has hecho muchas veces, tus ojos son casi negros, me recorren de arriba a abajo, no me quejo de tu poca delicadeza, ni de tus movimientos tan brutos, me concentro en tus labios sobre mi cuello, o tus manos en mi cabello, la suavidad de mi caricia te estremece, gimes.
Quiero darte más, cuanto más te toco más te gusta, te gusta mi inocencia, mi edad, mi mentalidad.
Es tuyo, y lo será.
Tu voz tan masculina me pone los pelos de punta, un sólo beso tuyo me hace querer más.
Soy tuya, y lo seré.
Pero la próxima vez, prometo darte más.
Todas me ven con la boca abierta, Zayn se muerde el labio, tiene las manos en la entrepierna, le provoqué la sensación que quería, está excitado, me querrá en su departamento hoy, ahora.
-Muy bien- dice tratando de ocultar la excitación, suena un poco más ronco- Creo que fue suficiente.
-No, yo quiero leer el mío- dice Inés.
Se pone de pie y lo mira a los ojos, zorra.
-Amarrada, atada a él
Me hará suya, yo lo sé
Me tomará en sus fuertes brazos
Y lo abrazaré, sin soltarlo.
En la sábana todo parece mejor, su cuerpo ya no tiene tapujos,
Él ya no representa un papel, puede amarme, poseerme de cualquier forma, azotarme, acostarme...
Tócame, estoy aquí no soy invisible.
Ella le lanza miradas coquetas, está claro que se le insinúa como gata, Malik sigue con los labios fruncidos, debió suponer que se excitaría con esas palabras, y más por que le gustan las bocas jovenes.
El timbre suena y todas comienzan a salir, finjo que acomodo mis cosas y espero a ser la última.
Me acerco al escritorio y sonrío al verlo sufrir de esa forma, se está mordiendo la mano, y mueve la pierna raramente.
Cierro la puerta y vuelvo a acercarme.
-¿Excitado?-susurro en su oreja.
Él cierra los ojos y junta las manos.
-Vete de aquí, no es momento.
-¿No?- acaricio su pierna.
Se pone de pie rápidamente.
-Déjame, si ven así y contigo me van a correr, no me toques.
Cierra los ojos, desesperado.
-¿Cómo te ayudo?
Me ve mientras se aferra a la silla.
-No puedes, es muy peligroso.
-Puedo hacerlo en 5 minutos, sólo cierra la puerta con seguro.
Me mira arqueando una ceja.
-¿Estás loca? Nos van a descubrir, te lo aseguro.
-Yo sé que no, si no empiezas a solucionarlo te atraparán así- pongo el seguro a la puerta y me acerco de nuevo- Ven.
-Claro que no, sal de aquí.
Se sienta en el escritorio y agacha la cabeza.
-Rápido.
Desabrocho el pantalón, su erección está pidiéndome a gritos, la libero y rápidamente deslizo la mano, él sólo mantiene cerrados los ojos, en silencio.
Lo hago suavemente, me acerco más y respiro en su oído. Sé que eso lo excita muchísimo.
-Ya casi- dice con una voz casi irreconocible.
Me hinco y lo meto en mi boca, paso la lengua lentamente por su miembro, siento el líquido caliente llenándome y lo trago con dificultad.
Cuando me pongo de pie, está vestido como si nada hubiera pasado.
-Ten-dice teniéndome la mano- Una menta.
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Estoy sentada en el sillón de su sala, él reposa su cabeza en mis muslos.
Me trajo cuando acabaron las clases, lo he tratado como el quiere, lo he besado y estoy lista para lo que sigue.
Me levanto y él se estira en el sillón, me siento sobre Zayn y me inclino para besarlo, sus labios responden a los míos, sus manos suben a mi cintura, meneo la cadera en su pelvis, me acerco a su cuello, lo abarco y hago chupetones marcados, él me desabrocha el pantalón y lo saca apresuradamente.
Muerdo su oreja y Zayn gime, sigilosamente mete la mano por mi ropa interior y me acaricia, ahora soy yo la que gime, sus dedos se mueven con mucha experiencia, me hace sentir sucia. Es justo lo que mi madre me advirtió, que nunca dejara que un hombre me tocara y se sintiera macho por ello, que no le permitiera sentir placer usando mi cuerpo.
-Zayn- le digo un poco molesta- Zayn basta.
Su mano sigue moviéndose en mi feminidad, siento dos de sus dedos introducirse en mí.
-Zayn... Ya basta.
Se detiene.
-¿Qué pasa?- pregunta.
-Déjamelo a mí.
Saco su suéter y su playera blanca, me deshago de su pantalón y acaricio su torso desnudo, me ve con deseo, sólo le interesa introducir su pene en mí, se aprovecha de que soy joven y me toma cuando y como quiere.
Froto mi parte íntima sobre su miembro y siento una corriente de excitación recorriéndome. Las dos capas de ropa que nos limitan desaparecen y hago mi mayor esfuerzo para excitarlo.
Estando arriba, tengo todo el control. Lo veo ahí, tieso, esperando el momento de penetrarme, su cabello negro está revuelto en su cabeza, su cara es la mayor perfección que he conocido, esos ojos casi negros me comen completa, sus finos labios permanecen apretados, esperando el momento. Los músculos de su pecho y brazos están tensos por el esfuerzo. Y su pene, duro y grande, me espera impaciente.
Me froto sobre él, su pene recorre mi entrada por fuera, mi feminidad se adapta a su longitud.
Mis manos acarician su pecho, Zayn me ve con deseo, lo tengo a la espera y eso me excita más a mí que a él.
Cierro mi mano derecha alrededor de su miembro y me levanto un poco, lo acomodo en la entrada de mi vagina y me hundo lentamente. No estoy lo suficientemente lubricada y su pene abriéndose paso en mi interior me causa un dolor fuerte, no estaba lista. Me siento de nuevo en sus piernas, esta vez tengo veinte centímetros de carne dentro de mí.
Zayn lleva sus manos a mis pechos y los estruja sin compasión.
Salgo y me hundo de nuevo, pero sigue doliendo. Sus manos expertas empiezan a hacer efecto en mí y siento como me mojo.
Me levanto y esta vez, al hundirme, siento el placer adecuado, su pene entra y sale sin dificultad, resbala perfectamente.
-Así Paola, no te detengas- gime extasiado.
Hago movimientos circulares con la cadera, hago que la penetración sea lenta pero la salida rápida.
Su cara es lo que mejor me hace sentir, lo está disfrutando muchísimo.
Mira Madre, le doy placer a un hombre siete años mayor que yo, ni siquiera puede mantener los ojos abiertos, y lo mejor es que es mi profesor. Ahora debes pensar que estoy en casa haciendo tarea, pero estoy pecando en su departamento. ¿Asustada?
-Me encanta lo estrecha que eres...-dice con gusto- Y ni hablar de cómo aprietas...
Acaricio su abdomen bajo y lo oigo gemir más y más fuerte, mis paredes vaginales empiezan a contraerse, Zayn se corre con un gemido ronco y siento la descarga y su palpitante miembro, entonces yo termino sujetando sus brazos para no caer.
Su pecho sube y baja irregularmente.
-Zayn...
-¿Mmhhumm?-murmura todavía extasiado.
-¿Seguro que no tengo que preocuparme por nada? ¿La vasectomia funciona perfectamente?
-Sí, ya me hice los exámenes.
-Zayn... Quiero preguntarte algo.
-Lo que sea- dice con los ojos cerrados.
-¿Por qué te gusto?
Me mira lascivamente.
-Eres hermosa, joven, me encanta tu voz y tus manos, y eres hábil como ninguna.
Me inclino sobre su regazo y permito que me bese lenta y dulcemente, cuando nos separamos me decido a preguntarle.
-¿Por qué Julien también se mete a mis sueños?
Me mira con los ojos muy abiertos, frunce el ceño y pasa la lengua por sus labios.
-¿Te pidió que hicieras algo para él?
Niego con la cabeza.
-¿Te dijo algo sobre mí?
-Si, dijo que conoces a mi Padre.
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Perdón. Otra vez tardé mucho en actualizar pero había carecido de imaginación, voten y comenten y pronto subiré más