Lie a little better Lucy Hale. Canción
Todo estaba oscuro tanto como estar en una caja fuerte donde no llega ni el mas mísero rayo de sol.
Pero no estaba en una caja fuerte y tampoco en algún cuarto obscuro. No, era algo peor.
Estaba atada en una silla, y con una funda de almohada en la cabeza que apenas me dejaba respirar.
¿Una funda de almohada? Pensándolo bien la situación era algo graciosa. Jaja funda de almohada.
―No te rías esto no es gracioso―dijo una voz grave y afónica. Que yo conocía muy bien. Y eso no quiere decir que sea una buena señal
―Pues no me importa. Si yo río o no. Es mi problem―adije lo mas dura que puede. Contando que estaba con la cabeza en una funda de almohada y que no podía hablar con claridad.
―Ha veo que no has cambiado tu actitud en nada. Mac
―Ya me conoces. Ahora habla porque estoy aquí.
―Te vas a hacer la ingenua. Tu sabes bien porque estas aquí.
―No, no lo se. Yo ya deje esa vida hace tiempo.
―Nadie deja esta vida Mac. Por eso estas aquí... A por cierto también tenemos a tu noviecito.
―¡¿QUE?!―grite―Porque tiene a Aiden con ustedes ¿Donde esta? ¿Que le hicieron?
―Ya basta de preguntas tu y tu noviecito están aquí. Por tu culpa.
―Pero yo que hice.
―¡Que hiciste! ¡Que hiciste! No me jod**. Ahora te vas hacer la desentendida. Mac o debería decir Amberetta.
Oh no
―¿Que? ¿Cual Amberetta? ¿De qué estás hablando?
―Vamos muñeca tu sabes muy bien de lo que estamos hablando. Pero sabes que. Me entere de alguien de que no lo sabe.
―No se que hablas.
―Ya lo verás nena―dijo en un susurro―¡Julio trae al chico!
De pronto sentí que alguien se acercaba. Intente patearlo pero de seguro lo que hacia era patético, ya que no podía ver nada y lanzaba patadas al aire.
― ¡ALEJATE DE MI!―gritaba mientras seguía pateando al aire.
―Tranquila fiera. No te haré mucho daño o al menos por ahora―dijo una voz que conocía pero no era la misma con la que estaba hablando hace un rato. Sino era una mucho más joven.
La luz invadió mis ojos y no puede ver nada. Pero cuando recupere la visibilidad puede ver un par de ojos celestes.
―Logan...
―Hola Mac. O mejor dicho Amber. No es cierto muñeca.
―N-no se de que hablas Logan. Y no se que haces aquí tampoco.
―Pues veras lindura. Yo no soy Logan Harrison. Soy Logan Griffin.
―¿Griffin? Espera...¡Griffin! Pero si Griffin es el apellido de...
―Si querida Amber Logan es mi hijo―dijo Mark Griffin el mafioso mas grande de Inglaterra y mi ex jefe. Mientras apoyaba su brazo en el hombro de su hijo...
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―Mmmm―trataba de hablar. Los idiotas de Mark y su hijo me taparon la boca con cinta adhesiva.
―Así esta mejor pequeña Mac. Ahora ya no podrás reclamarnos nada, ni pedir ayuda.
De pronto oí unos golpes en la puerta.
―Jefe puedo pasar.
―Si serás idiota Julio, no hay nadie mas en este edificio que nosotros. Porque rayos pides permiso para entrar.
Oí la puerta abrirse y gire mi vista hacia allí.
―L-lo siento jefe―dijo Julio mientas entraba por la puerta. Luego se detuvo y empezó a meter una ¿silla?
―Apresúrate Julio no tenemos todo el día.
Julio hizo mas fuerza y lograr meter la silla, pero el problema estaba en que alguien estaba atado en esa silla. Pero no alguien cualquiera sino Aiden...
―Deja de moverte sabandija repugnante―le ordenaba Julio.
Al ver a Aiden entrar por la puerta mi corazón se acelero muchísimo. Y el temor invadió todo el cuerpo. Trate de zafare inútilmente de la silla donde estaba atada. Gran error.
―Quédate queda quita p**a― me ordeno Mark. Pero no le hice caso.
―Mmmm ―decía. O intentaba―¡Mmm! ¡Mmmm!
Y de pronto vi como Aiden quedaba en frente mío atado en la misma posición que yo. Pero él si podía hablar.
―Que... Que pasa... ¡Mac! ¡Qué haces aquí!
―Mmm. Mmm. ¡Mmm!―intentaba hablar pero sentí una tremenda cachetada en la cara.
―PERO QUE. No te atrevas a tocarle otra vez hijo de p**a o...― decía Aiden mientras trataba de zafarse de la silla inútilmente.
―Te dije que no te movieras lindura ―me dijo Mark con una sonrisa coqueta que causaba náuseas. Pero en vez de vomitar yo le lance una mirada asesina.
― Bueno ahora si para lo que venimos― decía Mark aunque yo no lo escuchaba, solo veía a Aiden que me veía con preocupación.
"Mi amor"― pensaba―" tu no deberías estar aquí, todo esto es mi culpa. Fui una idiota. Como puede alguna vez hacerte daño. Como puede haberme involucrado con esto. Lo siento, lo siento, no sabes como lo siento"― decía en mi cabeza y sin darme cuenta las lagrimas empezaron a salir.
―¿Que ahora la princesita esta llorando? Pues que pena. Si no sabes princesita aquí no se llora. Así que recibirás el castigo.
Oh no. El castigo... Aiden no debes ver esto.
No me forcé solo asentí. ¿Por qué? porque yo se que es el castigo ya me lo habían hecho antes, así me entrenaron.
Me zafaron la soga de las manos y luego llevaron mis manos al frente para amarrarlas juntas con la soga.
― Julio pásame el látigo― suspire. Mire que Aiden me miraba horrorizado. Sonreí inútilmente para tranquilizarlo. Inútilmente porque sabia que él no podía verme sonreír, ya que la cinta adhesiva no me dejaba mover la boca.
Julio le paso el látigo a Mark.
―Bien Mac, tu ya sabes que les hacemos a los reclutas cuando no cumplen las reglas ¿verdad?- asentí con la cabeza―pues, ahora tus has incumplido la orden que te di de quedarte quieta y no hablar― volví a asentir.
Vi como Mark se alzaba las mangas de la camisa. Mark en todos estos años no ha cambiando en nada. Tiene los ojos celestes y cabello castaño igual a los de Logan aunque el cabello con canas blancas por la edad. Pero si el parecido es sorpréndete la verdad no se como no me di cuenta antes. A leguas podías ver los trabajados de sus músculos que ahora estaban tensos ya que toda su fuerza se iba a dirigir a mi.
Y el primer latigazo llego a mis manos, gruñí/gemí de dolor, y lo mismo con el segundo y tercero. Oí como Aiden gritaba que me soltaran, que pararan, y los insultaba.
Cuarto, quinto y sexto. Esto dejaría marca de seguro.
Antes claro que me habían castigado pero no tan fuerte como ahora. La verdad solo fueron dos veces y recibí tres latigazos porque las faltas no fueron tan graves y de inmediato fui a curarme, así que no quedo marca en mis manos. Pero ahora fueron 6 de una sola vez y con gran intensidad.
Mire mis manos la carne se había abierto, las tenía cubiertas de sangre, y las heridas eran profundas. Esto claro que dejaría marca.
―Bien ahora―dijo Mark mientras le entregaba el látigo a Julio― le explicaremos todo al noviecito de Mac, ya que por su cara no debe de estar entendiendo nada.
Mire a Aiden estaba en shock. Sonreí con dulzura. Si definitivamente el no sabía lo que pasaba.
― Papá tengo una idea mejor. Y si dejas que Amber le explique. Así oirá de sus propios labios la verdad, y vera quien es su novia en realidad―estúpido Logan. Pero en parte era lo mejor. Así podría explicarle yo misma lo que hice y porque.
― Hijo no creo que sea una gran idea. Ella es muy peligrosa suelta y lo sabes.
―Si papa pero solo destápale la boca. Vamos papá confía en mi
Mark suspiro― Esta bien. Confiare en ti.
Pero antes de zafarme la boca también me amarraron los pies con la soga y otra vez llevaron mis manos a mi espalda para amarrarlas a la silla.
Logan se acercó― Muy bien Mac es hora de hablar―Logan arranco la cinta de mi boca. Solté un gritito de dolor/frustración
―Púdrete―le deje.
― Con gusto nena.
Mire a Aiden estaba espantado, furioso, a dolorido y muchos otros sentimientos se veían en sus ojos.
―Hola mi amor ― le dije casi susurrado para ver como reaccionaba.
― Mac que esta pasando. Porque esos idiotas de hicieron eso. Porque estamos aquí.
Suspire― Ok Aiden te lo contare todo si. Pero debes prométeme que aunque lo que te diga sea lo peor que puedas escuchar en el mundo. Nunca olvidaras que te amo.
―Lo prometo mi amor― me dijo con su sonrisa tranquilizadora. Yo sonreí.
―Ya tortolitos dejen de hablar cursilerías. Si venimos aquí es porque queremos saber la verdad. Y aunque ya la sabemos queremos oír la versión de Amber ―Mire a Mark que me veía con ojos juguetones. Idiota, él, Julio y su hijo.
― Mac quien es ese señor, y porque te dijo Amber al igual que Logan.
Suspire― Mira Aiden, yo no soy Mac Langley. Yo soy Maria Amberetta Langley Carter. Pero la mayoría me decía Amber.
Mire su reacción estaba en shock.
― Hace muchos años exactamente 8 yo estaba en la biblioteca estudiando con un niño. Ese niño era el primer chico que me gustaba, y aunque sabía que era imposible que el se fijara en mi, yo me ilusione como idiota. Ese día hace 8 años el niño me dio mi primer beso. Yo era joven y muy sensible ya que por el aspecto que tenía en esa época me parecía imposible que alguien se fijara en mi. Pero la ilusión me envolvió tanto que yo creí que con ese beso mi vida cambiaría. Y bueno si lo hizo pero no en la forma en que esperaba.
Mire a Aiden, estaba perplejo. Como recordando algo pero no sabia que.
― Ese mismo día en el receso fui a buscar al niño. Pero lo encontré besándose con otra niña, y lo peor es que esa niña era mi peor enemiga. Ese día me prometí vengarme de ese niño. Me dije a mi misma que volvería, que lo enamoraría y que luego le rompería el corazón como él hizo conmigo- tome aire.
― Yo me fui a Inglaterra luego de eso. Decidí cambiar mi nombre inventando uno nuevo con todas las siglas de mi nombre, excepto la L. Así nació Mac, una chica dura, fría y calculadora pero también la mayor traficante de drogas en Inglaterra― vi como la mandíbula de Aiden caía hasta el piso.
― Ella al principio no pensaba en traficar drogas. Solo quería aprender a luchar, a controlar los sentimientos, a jugar con las personas. Y ahí apareció Julio― mire hacia donde estaba Julio sonriendo con autosuficiencia― Él me mostró la vida de los narcos, yo al principio dude, no estaba segura si seria una buena idea. Pero bueno acabe aceptando entrar en esa vida gracias a que según yo, me ayudaría con la venganza― suspire.
― Bueno aprendí todas las técnicas de lucha, control de sentimientos, y jugos con las personas de los narcos. Y me convertí en la mejor traficante de droga de Inglaterra. Claro que luego me di cuenta que lo que hacia estaba mal, no llegue a matar a nadie gracias a Dios, pero si sabia que con lo que yo vendía a las demás personas les estaba causando daño. Pero no salí de ese mundo porque me enamore― vi como Aiden se tensaba, ya sabia que no era de el de quien estaba hablando. Ya que en esa época aun no estaba con ÉL.
― Me enamore de Julio y ese fue mi más grave error―Ni siquiera vi a Julio no me importaba su reacción― No salí de este mundo ya que quería impresionarlo. Quería demostrarle que yo estaba en el narcotráfico por el. Fui idiota. Luego con el pasar del tiempo me di cuenta que esta vida era muy peligrosa, que en cualquier momento me podían matar, que en cualquier momento llegaría la policía y nos meterían a la cárcel. Así que me acerque donde Mark y renuncie.
―Pero lo que Mac olvido es que en esta vida o negocio como algunos le dicen. No se renuncia―Me interrumpió Mark―Y por eso estamos aquí. Yo me negué a su renuncia pero ella es tan terca que me dijo que no importa ella se iría de esta vida. Cuando intento escapar de mi oficina ordene a Julio que lo impidiera, el me obedeció y para hacerlo apuñaló a Mac en el hombro izquierdo. Sino lo sabes ella tiene una cicatriz allí.
Aiden abrió muchos los ojos y me observo― Así que eso era ―yo asentí con la cabeza. Y continúe relatando.
―Pero yo escape igualmente. Nunca le dije mi apellido a Mark así que pensé que no me encontrarían. Pues pase un año mas en Inglaterra luego de eso, le rogué a Julio que no le diera mi apellido a Mark, ya que si lo hacia lograrían encontrarme. Por lo visto Julio no cumplió con su promesa―Mire a Julio y el solo se encogió de hombros.
― Perdone a Julio por apuñalarme pero me di cuenta que ese amor que le tenía era tóxico así que me aleje, lo máximo posible ya que aunque quisiera haber nunca vuelto a verlo. Era imposible porque el era el mejor amigo de Angelo y Angelo nunca supo de mi relación con esta vida. Así que no podía dejarlo solo porque si. El no iba a entenderlo.
―Luego mis padres dijeron que debíamos volver a España y yo acepte sin problemas ya que estaba lista para hacer mi venganza y también poder alejarme de Julio, pero lamentablemente también de Angelo y esta vez si podría hacerlo con una razón. Llegue a España me inscribí en la universidad del niño que me rompió el corazón. Pero no contaba que con que el destino me traicionaría- sonreí recordando.
―Empece a seguir mis reglas unas locas qué hice para enamorar a las personas y poder controlar el amor a tu gusto. Mi reglamento se llama "El arte de enamorar" y con el, mi venganza se cumpliría. Las seguí una por una y la primera semana algo extraño paso. El chico esta ebrio y me dijo que me necesitaba, que no podía seguir su vida sin mi, que le gustaba. No me lo dijo con esas palabras pero ahora me doy cuenta que eso es lo que quizo decir. Y yo en ese momento no sentía nada, ya había sufrido mucho antes, y no estaba dispuesta que sufrir mas, así que le dije al chico que no sentía nada. Pero ahora me doy cuenta que era mentira yo si sentí algo, solo que me negaba a aceptarlo―Mire a Aiden y se veía desconcertado, como tratando de comprender todo lo que le había dicho.
―Pero el chico era terco, tal vez demasiado y siguió acercándose a mi con la escuza de "solo somos amigos" y yo le seguí el juego porque sentía que no había completado mi venganza por completo, además de que quería que el destino me llevara esta vez. Poco a loco el chico me fue enamorando sin que yo me diera cuenta. Bueno al principio si lo note por eso me quise alejar, lo ignore pero salió mal, el resultado fue quedar encerrada con el chico al que evitaba por una hora en detención. Así que rompí una de mis reglas para no enamorarse que es " si quieres enamorar y no enamorarte aléjate de la persona que te está atrayendo inmediatamente" pero yo no lo hice. Seguí como amiga del chico tratando de no caer en sus juegos de conquista. Pero también empece a descubrir su lado amable, cariñoso, romántico, sincero. Y no puede evitarlo me enamore. Si ese chico al que odiaba con toda mi alma termino robándose mi corazón dos veces. Entonces entendí ese chico no era un simple enamoramiento mas. Recordé las palabras de la abuela " Amber cuando encuentres el amor verdadero será el mejor momento de tu vida, pero también puede ser el mas doloroso. Porque no va importar lo que te haya hecho esa persona siempre va a volver a estar en tu vida, y no importa lo tanto que lo odies en ese momento, el acabara robándote el corazón siempre. Esa persona en la que el destino eligió para ti, y por la que valdría la pena morir" Y ese niño que me destrozo el corazón a los 12 años es esa persona.
― Y yo soy ese niño― respondió Aiden.
N/A:
Bueno aquí esta el un capítulo raro. Ok, no se lo esperaban o si.
¡Mac era una narcotraficante!
Si de de ahí viene la cicatriz del hombro jaja. Varias personas me preguntaron que era y bueno ahí esta la respuesta. Fue culpa de Julio.
Ya se que deben estar un pocos confundidos. La verdad yo también lo estoy no se como hice para ordenar todas las ideas locas que pasaban por mi cabeza. Y wuala aquí esta el capítulo más raro (creo) que he hecho.
Y si, ya mismo llegamos al final, creo que faltan 5 capítulos contando con el epílogo. Pueden ser mas o pueden ser menos, eso yo no lo controlo.
Sin mas que decir... Espero que les esté gustando esta loca historia, ya que cuando la comencé iba hacer solo un tipo de venganza contra Aiden y listo. Pero después de escribir el primer capítulo, me di cuenta que era algo bobo vengarse tanto y cambiar completamente solo por algo que te hicieron cuando eras pequeña. Pero bueno, una cosa llevo a la otra, y terminamos con un pasado obscuro, un amor que fue creciendo con los años, una vida en las drogas, y ya mismo un final.
Ahora si... Sin mas que decir esto fue todo y perdón por la larguísima nota de autor.
Los quiero mucho.
Y hasta la próxima.
Att: sol21 ;)