Capitulo 31
Lauren Pov.
- ¿Me estas hablando enserio? - pregunte sin poder creer lo que me decía.
Camila me llevo a una heladería que estaba cerca y ahora estábamos hablando sobre el hecho de que Brad era su novio. Si, se me ha olvidado por completo cuando se me declaro y porque prácticamente me olvide al ver sus ojos tan llenos de esperanza.
- Demonios, Brad nunca fue mi novio... - dijo frunciendo el ceño dejando de comer su helado observando mis labios por un momento - ¿Porque te hace tanta gracia?
- Tienes aquí algo... - dije riendo entre dientes cogiendo la servilleta limpiando sus labios y quedándome un momento observando lo apetecible que se veían.
- Lauren, cuando te dije que estaba interesada en ti lo decía enserio, además ese beso no fue nada. Porque me pillo de sorpresa y bueno, tu solamente te fuiste antes de que pudiera explicar algo... - dijo mordiendo su labio inferior y ahora sospechaba que eso lo hacia cada vez que estaba nerviosa
- Camila para. Si, quizás al principio estaba algo molesta, pero me has aclarado todo. ¿Así que... podemos pasar un buen rato, por favor? – dije acariciando su mano encontrándome con esa mirada que me dejaba sin respiración
- Esta bien, solo que cuando vea a Brad...juro que le matare por decirte eso... - murmuro para ella misma entre dientes
Era adorable cuando estaba molesta.
- Aunque no entiendo porque me dijo eso a mi, supongo que quería creer su propia mentira – concluí haciendo una mueca
- La verdad, quizás hable demasiado de ti con el...quiero decir, estas en mi mente todo el jodido tiempo. De alguna manera tendré que sacar lo que siento – explico mordiendo su labio apartando la mirada avergonzada.
Alce su barbilla observando el perfecto rubor en sus mejillas, esta chica me volvía loca.
- Hey Camila, tu también estas en mi mente como si fueras un virus – explique riendo entre dientes sacándole una sonrisa divertida
- Vaya, es lo mas bonito que me hayan podido decir en toda mi vida – dijo irónica alzando una ceja
- Soy una romántica y pronto lo descubrirás.
Lauren rápidamente cayo perdidamente enamorada de Camila. Tras solo unas dos semanas de citas y salidas con Normani y Dinah. Que ya lo habían hecho oficial, poco después.
Ellas iban a un ritmo mas lento.
Mordí mi labio inferior cuando Camila se quedo sobre mi en la cama, mordiendo mi cuello. Jodidas piernas, ahora mismo estaría sobre ella y en un segundo quedaría totalmente desnuda para mi.
Se separa con la respiración agitada observándome sin despegar sus ojos de los míos y su mirada era tan especial. Como si de alguna manera pudiera rellenar ese vació que sentía a veces recordando a mis padres y a mi abuela.
Flashback.
Tras una cena conociéndose mas a fondo descubrieron, que no eran tan diferentes como creían ellas.
Camila era una chica sencilla, trabajaba en una panadería que quedaba un poco lejos de los apartamentos de Lauren.
Se sorprendió al descubrir que su sueño era básicamente conducir el autobús de cualquier colegio, solamente quería hacerlo. Ya que su padre en su momento fue conductor de autobús. Pero en este caso, el permanecía en las calles recogiendo a gente desconocida. Poco mas explico sobre sus padres, salvo eso.
En lo que lleva a sus gustos, le encantaba leer libros y a Lauren también le gustaba.
Tenían casi el mismo gusto musical, con lo cual les daba a una buena conversación sobre la música y eso llevo a la sorpresa de que Camila, en sus ratos libres, le gustaba tocar la guitarra. Pero que cantar no tanto. Aun así, escribía canciones que nunca cantaba. Eso le dejo con la curiosidad de descubrir su voz y saber como seria.
Camila descubrió que a Lauren le gustaba mucho ir de negro, aunque eso se veía claramente a la vista. Admitió también que de adolescente tenia una obsesión con un juego que se llamaba "Club Penguin". Aunque fuera una chica, digamos popular, tenia obsesiones algo peculiares.
Una de ellas era coleccionar monedas.
Otra era coleccionar beanies, que aun guardaba a día de hoy en su armario. Sin embargo, aun le faltaba uno de arcoiris.
Hablaron de tantos cosas y rieron como si fueran amigas de toda la vida. Pero en este caso, eran mas que amigas y las miradas decían toda la verdad que guardaban dentro.
Si, se estaban enamorando la una de la otra.
Esa noche terminaron observando el lago del cual ella siempre iba para dar de comer a los patos. Y solamente observaron este hasta que Camila miro de reojo a la ojiverde.
- ¿De verdad das de comer a los patos? - pregunto con una sonrisa
- No te rías. No soy ninguna vieja – dijo esperando su risa pero solo escucho el caer de una piedra en el agua revotando esta dos veces
- Sabes... esto me encantaba hacerlo. De pequeña con mi padre – explico con una sonrisa nostálgica
- Enseñame hacerlo, por favor – pedí haciendo un puchero y ella solo rodó los ojos sonriendo, quedándose detrás de mi silla mientras cogía mi mano dejando la piedra
- Solo lanza de lado y piensa en que lo lograras. Es lo que me decía mi padre – explico besando brevemente mi mejilla logrando que me sonrojara un poco o demasiado
- Esta bien, espero que sirva – dije bromeando sacándole una pequeña risa de su parte
Solo revoto una vez. Lauren no era muy buena lanzando.
- No soy nada buena, lo siento – se disculpo haciendo mueca
- No importa, si la piedra piensa que no eres buena, yo pienso que eres increíble – dijo consiguiendo una sonrisa de la ojiverde.
Esa noche subieron al autobús, ya que Camila no tenia coche. Era algo irónico que estuvieran allí, sobretodo cuando recordó su sueño mientras estaba en coma.
La miro un momento mientras ella estaba de pie observando el paisaje. Ojala pudiera congelar este momento para siempre y ahora mas que nunca deseaba con todas sus fuerzas que esa vida que soñó, se hiciera realidad. Pero solamente la parte donde ellas dos estaban juntas.
- ¿Que pasa? - pregunte frunciendo el ceño al darse cuenta de la mirada fija que tenia sobre ella
- Nada, solo que eres hermosa... - dijo sonriendo a medias consiguiendo así que se sonrojara bastante.
Fin de Flashback.
- Camila para – dijo riendo notando otra vez los besos sobre su cara
Consiguió lo que quería. Simplemente escuchar su risa.
- ¿Sabes que canción adoro con todo mi corazón? - pregunto sonriendo
- Nose. Dime Camila
- Tu risa. Podría escucharla toda mi vida – dijo acariciando su mejilla notando mi leve sonrojo
- Cursi...me gusta lo de toda mi vida – admiti tímidamente mordiendo mi labio inferior, teniendo pensamientos de una vida con ella
- Tengo la sensación de que seguramente se hará realidad – comento besando mi mejilla antes de rodar fuera de la cama al notar que Normani y Dinah estaban en la puerta como unas cotillas observandonos
- Norminah enserio, fuera de mi habitación y tu Camila vuelve ahora mismo – ordene observando como ella detenía su paso y cerraba la puerta antes de volver a la cama
Al otro lado se escucho la voz de Dinah gritar "SUMISA".
Rodé los ojos ignorando el comentario.
- Lauren...
- Camila...
- ¿Porque no me besas como ayer por la noche? - dijo haciendo un puchero adorable. Ella podía conseguir todo conmigo si hacia eso
Ayer en la tercera cita nos dimos nuestro primer beso.
Flashback
- Ahora solo mira, Lauren y veras la maravilla de mi balcón – dijo guiñándome un ojo antes de volver su vista al frente.
Hice lo mismo observando la magnifica puesta de sol y aunque era algo realmente tan simple para algunas personas, para mi, era lo mas precioso que había visto. Miento, ya que en realidad Camila es lo mas precioso que he visto y que siempre veré.
- Es realmente precioso, ahora entiendo el encanto que tiene tu balcón – comente alzando una ceja descubriendo una pequeña sonrisa de su parte
- El sol se va y la luna aparece. Es como un amor imposible – comento acercándose a mi y se quedo apoyada en mi regazo.
Comenze a sentir unos nervios por la cercanía que teníamos y a la vez unas ganas de comerle la boca, hasta dejarla sin labios.
- Escuche esa historia...
- Yo también.
Antes de que pudiera añadir alguna cosa ya tenia sus labios sobre los míos marcando el que seria el primer beso de muchos o al menos eso esperaba. En este instante, deseé que el tiempo se detuviera para siempre.
Al separarse de mi con la misma respiración agitada que yo, nos quedamos mirándonos fijamente y sin decir nada, aunque tampoco hacia falta.
Fue un beso dulce y lento, sin ninguna prisa. Solo sintiendo los labios de la una y la otra acoplarse de manera perfecta.
Como si de un puzzle se tratara. Encontraron lo que siempre habían buscado.
Fin de Flashback.
- ¿Quieres que te bese? - pregunte feliz de saber que ella también lo deseaba tanto como yo
- Ugh Laur, hazlo de una vez – dijo suspirando mordiendo su labio.
Camila se acerco lentamente a los labios de Lauren deseando poder parar el tiempo cuando estos se unieron. Consiguiendo un suspiro por parte de las dos chicas.
Lauren no pudo evitar tocar la mejilla de la latina en busca de saber si esto era realidad, porque era mucho mejor que en sus sueños y jamas habría soñado algo tan perfecto como los labios de su chica. Aunque oficialmente aun no lo era.
Me separe con la respiración agitada deseando que ella estuviera siempre entre mis brazos. Todo pasaba tan rápido cuando estaba a mi lado que... tenia miedo.
Miedo de perderla y aun no era mía por completo.
- Lern Jergi, tengo hambre, vamos a comer algo. Seguramente estas dos pidieron una pizza – comento para después besar mi mejilla
- Solo un minuto mas estando así, por favor – dije apoyando mi frente contra la de ella
- ¿Estas bien? - pregunto Camila notando la mirada extraña que tenia la ojiverde en ella
- Si, estoy bien
Nunca confíes en un estoy bien, siempre suele dar alguna que otra sorpresa.
Y justamente esa noche Camila se fue a su apartamento recordando que mañana tenia que levantarse temprano para atender a sus clientes y es que "las barras no se venden solas" dijo con una sonrisa y despidiéndose de Lauren con un beso largo que le sabio a poco.
Quería sentir sus labios toda la vida.
Después de esto el día paso normal como de costumbre. Tanto dando de comer a los patos, como observando de reojo a Dinah yéndose a trabajar y así despidiéndose de su novia.
- Tengo que decirte algo, Laur – dijo con una sonrisa subiendo las cejas perversamente.
No me asuste, sabia lo pervertida que podía ser Mani.
. Claramente no quiero ningún trió, ¿vale? - aclare fijando la mirada en el libro que estaba leyendo hace un momento, antes de que me interrumpiera con sus tonterías
- Demonios, a veces eres tan mal pensada - suspiro dejándose caer en el sofá junto a mi
- Lo dice la que gime por la noche
- ¿Que?
- Olvidalo, dime ¿que querías decirme?
Ignore la mirada de querer matarme que tenia en estos momentos y ya estaba acostumbrada a las miradas en general.
- Nose como Camila te aguanta. En fin, quería decirte que tienes mas o menos tres horas para ponerte guapa – comento sonriendo Normani
. ¿Porque demonios tengo que hacer eso? - pregunte confusa recibiendo una mirada de "enserio no lo sabes"
- Eres inteligente, por dios. Camila te espera en su apartamento, está preparando vuestra cita – dijo al fin aclarando mis dudas, vaya tampoco era tan complicado de adivinar
- Callate y ayudame vale – le ordene pegando su brazo e riendo
- Como quieras Jauregui...
Así fue como Camila le preparo la cena mas importante para las dos chicas.