Y por cada uno mis pecados, u...

By Vival_Go

1.1K 206 39

El epílogo esperado finalmente llegó, y con el, el sueño de toda la eternidad de Dokja, que Joonghyuk, el hom... More

¿Este es mi final feliz?
Pensamiento negro
El amor también es...
Idiota
Y por mis pecados.

Los sueños tienen final

154 30 5
By Vival_Go

-Espera, ¿estás llorando?-
Pude escuchar un golpe seco, y rapido comprendí que Sooyoung se cayó de su cama debido a la conmoción.
Y bueno, no es que pueda decir algo, el mostrar mis verdaderos sentimientos no es común en mí.

-¿Qué pasa?, ¿Dónde está ese protagonista bastardo?- pregunta mientras se escucha como comienza a caminar. Ella está claramente alterada.

Una parte de mí se siente feliz al saber que hay alguien que realmente me aprecia.

-Se terminó- digo, aguantando mis sollozos.

Hubo un silencio por un par de minutos, pero pronto ese silencio desapareció de la mano con muchos insultos
-¿Qué carajo significa eso?, no me digas que estás volviendo a intentar sacrificarte. Te juro que voy a golpearte si eso es lo que piensas. Voy a ir con tu bastardo y ambos te vamos a amarrar a tu cama. Soy muy capaz....

Dejé que ella siguiera despotricando más y más maldiciones mientras me quedaba pensando.
'Realmente soy una mala persona'

Dejando de lado el hecho de que prácticamente obligué a la persona que amo a quedarse a mi lado solo para tener una razón para quedarme en este mundo, yo dejé de lado a todas las demás personas que me han mostrado cariño.
No solo me distancié de mis amigos, sino también no le presté atención a mis hijos y tampoco a mis madres.

Aún así, aún pensando en las caras de esas personas, no pude encontrar cómo seguir luchando.

Claro, no es que en estas fechas tengan aún tendencias suicidas, como es que le llaman mis amigos, sino que, he vivido tanto tiempo en soledad que la interacción con tantas personas me resulta tan dolorosa.

Con Joonghyuk había encontrado la comodidad que siempre busqué.
No solo por el hecho de que lo amo, sino porque él, al igual que yo, había pasado tanto tiempo solo que también disfrutaba de la compañía silenciosa. El sabía apreciar la comodidad que tanto había buscado en aquel tiempo en donde estuve encerrado sin nada más que la compañía de la Cuarta Pared

   
Algo muy distinto a lo que es vivir con toda la compañia.

   

-¿Sigues ahí?- preguntó una Sooyoung mucho más relajada.

Respiré y con lentitud comencé a hablar.
Mi corazón estaba tan clngestionado que sentí que si no decía nada moriría asfixiado.

-Sabes, en toda mi vida lo único que siempre quise fue él. Estar a su lado, ser precioso para él. Poder siquiera respirar el mismo aire que él... Cuando me pidió ser su novio pensé que todo lo que viví valió la pena. Que todos esos jodidos años en los que no fui nada más que el saco del universo, que todo ese tiempo en el que estuve encerrado en ese tren, y más que nada, que mi separación e integración con el universo finalmente habían logrado algo bueno. Fui inmensamente feliz estos meses. Cómo no serlo después de enterarme que no nadamás empezó su camino infernal como regresor para conocerme, sino que además de eso, él también decidió viajar por el universo para recuperar los pedazos de mi alma... Todo para darme cuenta que solo lo estaba obligando a estar a mi lado, darme cuenta que todo no era mas que una farsa que me había inventado, tal cual como si aún estuviera soñando como en ese maldito tren, solo que en lugar de presenciar un mundo lleno de dolor, soñé con lo que siempre quise, él y yo... Realmente creí que me amaba, que sentía algo por mí, es que dime ¿quién retrocede miles de veces solo para saldar una deuda?-

Sentí como algo dentro de mi se liberaba, todo el dolor que había recibido durante todo el tiempo de mi existencia venía a mi mente, golpeando cada vez mi ya marchito corazón.

La conversación no tenía más pies ni cabeza. Solo era yo llorando, preguntando qué había hecho mal. Recriminandome por no ser suficiente. Por ser un idiota que realmente pensó que merecía amor.
Sooyoung se quedó escuchando. Pude notar como estaba llorando también.
Porque ambos lo sabiamos.

   
Yo solo vivo para él.

   

   

Regresé a su casa después de haber llorado durante un par de horas. Finalmente había decidido que hacer con mi vida. 

Lo mejor era mudarme. Digo, ya había sido suficiente descarado al estorbar y molestar a Joonghyuk por estos meses.

   

Si, debía irme de allí.

   

Al entrar vi que Joonghyuk estaba cocinando. Y, para evitar que el poco tiempo que me quedaba aquí fuera tan incomodo, hice lo mismo que antes de salir. Hacer como si nada hubiera pasado.

-Regresé Yoo Joonghyuk-ah-

Pero, al contrario de otros días en donde iría y lo abrazaría por la espalda, me dirigí a la habitación.

Al entrar a la habitación me dirigí primero al tocador. En él habían muchos recuadros que me había costado obtener.
Joonghyuk en todos tenía su cara de perra en reposo. Pero aún así se sentía mucho más feliz que antes cuando estabamos en los escenarios.

Comencé a empacar mi ropa. Realmente no era mucha. Un par de prendas de casa y de salir. Y, más importante, la bata blanca que hacía juego con la de Joonghyuk.

Mis manos temblaron cuando estaba agarrándola.
Esta bata era la primer prueba de camadería que existía. Esta prueba y nuestra historia era lo que más apreciaba.

   

En los días después del apocalipsis disfrutaba usarla y salir con Joonghyuk a pasear.
Creía que era genial poder tener algo en común con mi pareja considerando que él odia cualquier color que no sea negro.

   

   

Después de empacar toda mi ropa, me dirigí a la mesa de noche que estaba de mi lado de la cama, incerté la llave para abrir el cajón oculto y saqué un par de hojas que estaban dentro, las hojas se veían claramente gastadas por su uso y años. Esas notas lo tenían todo, se podía ver en ella los sueños e ilusiones de un niño quien finalmente había entendido porqué deseaba ver un final feliz para su protagonista. En esas hojas gastadas un Dokja adolescente había aceptado y anotado el hecho de que estaba enamorado de su protagonista. Que su protagonista ya no solo era un hermano mayor, un padre, un amigo. Que su amado protagonista había comenzado un nuevo papel. Su protagonista ahora era el amante que siempre deseó.

Después de llorar un rato, volví a meter las hojas dentro del cajón, apilandolas completamente rectas. Pero mientras mis dedos trazaban las hojas, sentí algo más.
Dirigí mi mirada hacia el objeto que también estaba en aquel cajón. Era un pequeño estuche de anillo. El anillo que pensaba darle a mi protagonista en nuestro aniversario.

Sentí como mi corazón se apretaba nuevamente, impidiendome por un momento respirar.

   

A mi mente venían los recuerdo de mí planificando la propuesta perfecta.
Él no podía darle menos a su amado protagonista y compañero.

Pero ahora, ¿qué vale? Ese anillo jamás estará en el dedo de Joonghyuk.

   

Mientras pensaba en la triste realidad, una voz gruesa sonó.

-Es hora de cenar- su voz se escuchaba tan monótona, como si hubiera olvidado lo que habia pasado en la tarde.

    
Si bien fui el primero en hacer eso, fue porque quería proteger la poca dignidad que me queda, pero él no tenía que cuidar.
¿Es que realmente no le importa lo que pasó?

La cena fue muy silenciosa, mucho más que cualquier otra noche.
Comí lentamente, queriendo que se alargara la mayor cantidad de tiempo posible.
Esta sería nuestra última cena, después de esta noche ya no existiría un nosotros.
Ya no comería otra vez lo que el preparara.
Ya no tendría a nadie con quien compartir mi tiempo

   

Después de esta noche volvería a ser solo Dokja

Alguien que nació para estar solo.

   

Pero por mucho que deseemos algo, no siempre se hará realidad.
La cena terminó mucho más pronto de lo que deseaba.

Recogí los platos y me dirigí a la cocina.
Deseaba desesperadamente alargar esta comodidad doméstica.
Sabia que nunca más tendría algo así.

    
¿Cómo la tendría si lo único que quería era a él?

   

Nos adentramos nuevamente a un silencio cómodo mientras lavabamos los trastos. Él lavaba mientras yo secaba, tal como muchas otras noches.

   

Cuando el trabajo se terminó me dirigí a la habitación.
Sabía que si no actuaba pronto, simplemente me quedaría para siempre.

   

Siempre fui un cobarde, y la idea de tener que dejar ir a mi protagonista me destruía. Pero debía hacerlo. 

¿Cómo puedo seguir dejando esta carga tan pesada en sus hombros?

   

¿Acaso no fue sufiente la carga de sus miles de regresiones?

   

Me di cuenta nuevamente que solo era un bastardo codicioso.

   

   

Agarré mis maletas y me dirigí a la puerta. Antes de finalmente salir de la habitación miré detenidamente todo dentro.

Los muebles dentro de la habitación los elegimos los dos un día que me dejaron salir del hospital para pasear. No tenía mucho tiempo de haber sido reintegrado y Seolhwa había dicho que era bueno para mí dar paseos para poder fortalecer mis músculos.

Joonghyuk había dicho que debíamos elegir los muebles para nuestra casa, que ahora que estabamos juntos no todo tenía que ser de acuerdo a sus gustos.

Miré el ropero y sentí como mi pecho se apretaba al notar que solo quedaba la ropa de Joonghyuk. El ropero no era más que un mar negro.

Mi mirada se dirigió a la cama y a mi mente vinieron los recuerdos de las noches en donde nos acostabamos, disfrutando de la comodidad del brazo del otro.
   

¿Quién diría que todo no fue más que una ilusión?

   

Cada paso después de salir de la habitación se sentía como un calvario.

Me sentí como un prisionero sentenciado a muerte que iba directo a cumplir mi castigo.

   

Mi pecho seguía doliendo, como si me advirtiera para no seguir con esto.

   

Seguramente era mi corazón diciéndome que no iba a soportar lo que vendría.

   

Estoy completamente seguro que es eso.

   

   

Y allí, sentado en el sofá estaba Joonghyuk. Noté que en sus manos tenía su espada, claramente la estaba puliendo, pero al contrario de otras veces cuando lo sostenía, ahora sus dedos estaban blancos, demostrando que agarraba con muchas más fuerza de lo necesario. 

Era extraño que él siguiera en la sala a esta hora, él normalmente estaría en la habitación, probablemente jugando un poco con su Nintendo antes de dormir, era como si no quisiera regresar a la habitación, como si tuviera miedo de lo que vendrá. 

Sabía que era así. Joonghyuk siempre limpiaba su espada para calmarse.

   

Tal vez a él también le esté afectando lo que pasó.

   

Una parte de mí estaba feliz al pensar eso.

   

   

   

Me quedé un momento apreciando esta vista.

No volvería a verla jamás.

Ya no abría un Joonghyuk tan cómodo sentado en mi presencia. Jamás volveríamos a lo que fuimos. Eso estaba muy claro.

   

Tal vez mi mirada fue muy fuerte ya que Joonghyuk me notó enseguida.

Pude ver una gran confusión y conmoción cuando notó mis maletas.

   

Él dejó caer su espada al suelo. Eso me demostró que si estaba alarmado.

-¿Qué estás haciendo?- pregunta Joonghyuk -¿Por qué tienes esas malestas?-

Miré como empezó a acercarse a mí, y con cada paso que él daba, yo retrocedía otro. Al ver esto, Joonghyuk se quedó de pie a dos metros de mí.

Lo miré directo a los ojos y con una mano en el corazón, comencé a hablar.

-Este sueño debe terminar Joonghyuk-ah- sonreí. 

Por la mirada que tenía Joonghyuk supe que mi sonrisa realmente no ocultaba mi dolor- Eres libre, ya no necesitas velar por mí o intentar pagar una deuda que nunca existió- 

   

El silencio volvió a invadir entre nosotros.

Era como si una nueva pared se apareciera y nos separara.

   

Recordé el pasado en donde la cuarta pared me alejaba de todos.

-Por supuesto no significa que no podemos volver a vernos- dije, tratando de evitar cualquier malentendido. Era imposible para mi continuar mi vida sin saber de él. -siempre puedes contar conmigo, somos compañeros en la vida y la muerte, ¿no?- Con aquellas palabras me dirigí a la puerta, no sin antes voltear mi rostro para volverle a sonreír.

   

Ignoré su cara llena de dolor y cerré la puerta.

   

Debía terminar este sueño que se había extendido por mucho tiempo.

   

   

Metí mis maletas en mi auto y me quedé apreciando aquella casa en donde se suponía que estaba mi final feliz.

Y sin duda lo fue. En el poco o mucho tiempo que duró fui feliz.

Me sentía amado y querido, más que nada apreciado.

Sentí que todo finalmente tenía sentido.

   

Pero no podía quedarme allí, ese oro era falso. Y sabía que con el tiempo eso me mataría.

   

Uno no puede vivir para siempre con aire contaminado. Yo era el que contaminaba el aire de Joonghyuk.

   

Mientras conducia me repetía que era lo mejor. 

El amor no es algo que se deba forzar. Sabía que si seguía forzando sus sentimientos, un día todo se marchitaría. Y ese día, el día en que todo lo que quedara fuera resentimiento, realmente moriría.

   

   

Mientras me alejaba de la casa pude notar como mis lágrimas volver a caer.

   

   

-Realmente fue un buen sueño- sollocé mientras continuaba manejando.


Continue Reading

You'll Also Like

250K 17.3K 89
Todas las personas se cansan. Junior lo sabía y aun así continuó lastimando a quien estaba seguro que era el amor de su vida.
142K 8.6K 32
𝐒┊𝐒 𝐂 𝐑 𝐄 𝐀 𝐌★ 𝐋 𝐀 𝐑 𝐀 no entendía el por que le temian tanto a su compañero de universidad 𝐓 𝐎 𝐌, el tenía actitudes raras pero no lo...
117K 13.5K 25
SLOWBURN :: Es difícil explicar cómo mierda había llegado aquí. Se supone que solo era un pequeño secreto, mi pequeño secreto; ese tipo de secretos q...
2.3M 235K 132
Dónde Jisung tiene personalidad y alma de niño, y Minho solo es un estudiante malhumorado. ❝ ━𝘔𝘪𝘯𝘩𝘰 𝘩𝘺𝘶𝘯𝘨, ¿𝘭𝘦 𝘨𝘶𝘴𝘵𝘢 𝘮𝘪𝘴 𝘰𝘳𝘦𝘫...