La Casa en la Colina Maldita

Capitulo 14: La maldición despierta

Después de haber desecho el oscuro ritual en la habitación prohibida de la casa en la colina maldita y liberado a las almas atormentadas que la habían acechado, Emily esperaba que la maldición que envolvía la casa se hubiera disipado por completo. Había enfrentado horrores inimaginables y batallado contra fuerzas oscuras, pero creía que todo había terminado.

Sin embargo, la calma que siguió a su victoria fue efímera. Las sombras en la casa no se disiparon por completo, y las voces en la oscuridad aun susurraban en su mente. Había una sensación inquietante de que la maldición no había sido completamente derrotada, que algo aun acechaba en las profundidades de la mansión.

Una noche, mientras Emily intentaba dormir en su habitación, escucho un ruido inusual proveniente del pasillo. Se levantó y se acercó a la puerta, abriéndola con cautela. Lo que vio la llenó de horror.

Las sombras se movían en el pasillo, retorciéndose y formando figuras espectrales que avanzaban hacia ella. Las voces en la oscuridad se hicieron más audibles, susurros incomprensibles que llenaban el aire de una inquietante melodía.

Las sombras la rodearon, cerrándose sobre ella como un abrazo oscuro. Emily lucho por mantener la calma, pero la maldición de la casa en la colina maldita parecía haber despertado con una fuerza renovada.

A medida que las sombras avanzaban, Emily sintió que estaba siendo arrastrada hacia el centro de la maldición, hacia un lugar donde la realidad se retorcía y se mezclaba con la pesadilla. Las voces en la oscuridad le susurraban secretos olvidados y revelaban verdades perturbadoras.

Emily sabía que debía encontrar una manera de poner fin a la maldición de una vez por todas, pero la tarea parecía insuperable. Estaba atrapada en una pesadilla interminable, en un lugar donde el tiempo y la realidad se desdibujaban.

La maldición de la casa en la colina maldita había despertado con una venganza, y Emily se encontraba en medio de una lucha desesperada por su propia cordura y su supervivencia. La maldición aun tenia secretos que revelar y horrores que desatar, y Emily debía enfrentarlos si tenía alguna esperanza de encontrar la redención y la paz.