ANTES DE LEER
¿Dos actualizaciones en menos de una semana? ¿Acaso alguien le vendió su alma al diablo? JAJAJAJAJAJAJA
No se acostumbren, nos vemos en cinco meses...🤣💕
Disfruten la lectura...lean en un lugar solitario si pueden👀🔥
———
Narras tú
–¿En dónde se supone que estabas?– me giré para mirar a Hailee.
–Por si no lo sabes, tengo mucho trabajo que hacer– sonrió levemente –¿O quieres que no esté todo listo y el audio te falle en mitad del concierto? Porque eso va a pasar si me quieres tener cerca de ti todo el tiempo– se rió.
–Solo quería asegurarme de que no te hubieras escabullido con tu novia y estuvieran teniendo sexo por allí en vez de estar haciendo el trabajo que les corresponde– dijo mirándome a los ojos.
–¿Te preocupas así por todos tus trabajadores? ¿O solo con los que te rechazaron y no cayeron ante tus encantos?– se rió.
–No eres tan especial, _____– suspiré mientras la miraba.
–¿Puedo seguir haciendo mi trabajo?– dije molesta y asintió, así que seguí mi camino.
–Hey...– me giré para mirarla –Nada, no importa– dijo desviando su vista.
–Claro...– murmuré mientras me alejaba.
Cuando el concierto comenzó tuve que arreglar algunas cosas del sonido y luego quedó todo perfecto, así que fui a descansar un momento mientras los demás se encargaban de que los sistemas de audio siguieran funcionando bien.
Cuando el concierto terminó yo estaba comiendo algo y escuché bastante ruido acercándose, así que miré hacia la puerta y vi a Hailee entrando.
Se encontraba bastante sudada, aunque probablemente las gotas en su cuerpo eran de agua. Tenía su camiseta pegada a su cuerpo y dejó el micrófono en la mesa de la comida.
–¿No hay hamburguesas?– preguntó mirándome y yo había tomado la última.
–No– dije y vi algo de decepción en su rostro.
–Oh...– suspiré y le extendí la mía.
–No la he mordido aún– miró mi mano y sonrió, tomando la hamburguesa con entusiasmo.
–Muchas gracias– usualmente nuestro trato mejoraba luego de los conciertos, ya que yo ya no tenía el estrés de que el audio no fallara y ella tenía la euforia del show.
–El fallo a la mitad del show no fue mi culpa, había ido al baño– asintió.
–Lo supuse, eres muy buena como para cometer esos errores– sonreí.
–Me caes mucho mejor cuando no estás intentando llevarme a tu cama– se rió.
–Yo...acepté tu no y lo he respetado, ni siquiera te he insistido...pero...– levanté mis cejas.
–¿Pero?– suspiró.
–Nada, no es importante– mordió la hamburguesa –¿Hay algo para beber? Ya debemos irnos al hotel– asentí y le ofrecí algunas cosas de la nevera.
Pasé a ducharme antes de ir al bus que teníamos para la gira en EEUU, así que entré a este con algo de frío y vi a Hailee dentro.
–Van a ir a una fiesta hoy, me dijeron que te avisara cuando vinieras, ya que olvidaste tu celular y lo tenían ellos– me lo extendió y lo tomé.
–¿No vas a ir?– negó.
–Estoy algo cansada y pasado mañana tenemos otro concierto, quiero descansar– miré mi celular y tenía varias llamadas perdidas –¿Todo bien? Estuvo sonando bastante tiempo...tu novia debe estar buscándote– reí.
–Hailee...te creía más pendiente de mí– levantó sus cejas –Cada vez que nos encontramos me dices algo de mi novia...¿Cuándo fue la última vez que nos viste juntas?– pensó un momento y no dijo nada –¿No que estabas tan pendientes de tus trabajadores?– asintió.
–Yo...– la interrumpí.
–Renunció hace un mes...y terminamos hace casi dos, por si no lo sabías– su rostro se mantuvo serio.
–Perdón...estuve mencionándola cada vez que nos veíamos– asentí.
–Gracias por eso, sé que es por tu preocupación por tus trabajadores– rió levemente y saqué una soda de la nevera.
–¿Hace dos meses pude haber comenzado a coquetearte de nuevo y no me lo habías hecho saber?– preguntó en un tono de broma y reí.
–Preferí evitar que te aprovecharas de mis ganas de tener orgasmos no provocados por mis dedos o juguetes– se rió.
–Nunca me aprovecharía de eso– la miré.
–Y cabe añadir que tienes pene...¿Cuánto es lo máximo que duras? ¿Dos minutos? Prefiero ocupar mi tiempo en otra cosa– su sonrisa se borró de inmediato.
–¿Perdón?– dijo bastante ofendida y reí.
–¿Estoy mintiendo? Eso es lo que duras– negó –Claro que sí, tu cama está sobre la mía...de repente escucho cierto sonido húmedo y nunca ha durado más de minuto y medio– su rostro cambió a uno preocupado.
–¿Se escucha?– dijo sonrojándose.
–Bastante– reí para luego sentarme a su lado –Suena a que te mide cinco centímetros, el movimiento es bastante corto– dije para fastidiarla y me miró muy seria.
–Qué gracioso– asentí –Probablemente te llegue hasta el útero– reí.
–Claro, puedes decir lo que quieras– la miré –Porque nunca lo vamos a comprobar– suspiró y se levantó.
–Puedes verlo solamente, para que retires lo que acabas de decir– se paró frente a mí y no pude evitar mirar el bulto en su entrepierna.
–¿De verdad crees que puedes impresio...– bajó sus pantalones hasta sus rodillas y quedó solo su bóxer, el cual se marcaba demasiado en la entrepierna y lograba verse la forma de su miembro.
–¿No puedes pensar y mojarte a la vez?– dijo tomando su miembro por sobre el bóxer y relamí mis labios sin decir nada –¿Perdón? No te escuché– subí mi vista a sus ojos.
–Creo que esto no es necesario– asintió terminando de quitar sus pantalones para sentarse a mi lado y apreté un poco mis piernas.
–¿Tienes hambre?– la miré e inevitablemente mi vista se fue a su marcado miembro, ya que el bóxer era apretado.
–Yo...– suspiré –Creo que iré a caminar un poco– sonrió ampliamente.
–¿Tienes ganas de hacer cardio?– preguntó acomodándose para que su entrepierna se marcara más.
–Tal vez...– se levantó y nuevamente apreté mis piernas.
–¿No te apetece hacer sentadillas?– metió su mano dentro del bóxer –¿O tal vez practicar tu capacidad de aguantar la respiración?– tomé un respiro y sentí su otra mano en mi mejilla y bajó a mi mentón para hacer que la mirara.
–Hailee...– pasó su pulgar por mi labio.
–Tengo varios de estos– dijo metiendo la mano a un bolsillo en su camisa para mostrarme un preservativo –Si quieres te puedo demostrar ahora mismo que puedo ocupar más de uno y que no me demoro menos de dos minutos– lo abrió y recogió el lubricante que traía para luego pasarlo por mis labios.
No dije nada y se inclinó para dejar su boca frente a la mía. Sentí su respiración sobre mis labios y suspiré.
–Eres una...– dije intentando resistirme acarició mi cuello.
–¿Una qué?– susurró –Vamos, dilo...¿Soy una qué?– rozó nuestros labios y su mano fue bajando por mi cuello, llegando a mi pecho, vientre y finalmente quedando en el borde de mi pantalón –¿Olvidaste cómo hablar?– la miré a los ojos sin decir nada –Yo no voy a actuar primero...si quieres seguir, debes tomar tú la iniciativa– bajó su mano y la dejó sobre mi entrepierna, pero sin presionar.
–Hailee...– jadeé.
–¿Sí, _____?– dijo sonriente –¿Qué deseas hacer?– se alejó un poco para pararse bien, dejando su bulto a la altura de mi rostro –Tenemos muuucho tiempo...¿Qué quieres hacer? ¿Deseas ver una película...o anhelas que te deje agotada de tantos orgasmos, con las piernas acalambradas y tus agujeros algo adoloridos por lo duro que te puedo dar?– sentí la humedad aumentando en mi entrepierna y ella suspiró –Bueno...si no te decides, entonces iré al baño para masturbarme hasta acabar sobre...– la jalé del bóxer para atraerla hacia mí y mirarla hacia arriba.
–Estuve mucho tiempo aguantándome las ganas de dejar que hicieras lo que te plazca conmigo...¿Dónde queda mi orgullo si dejo que me cojas hasta que ya no pueda más?– sonrió.
–Te lo tragas junto con mi pene– reí y la atraje más hacia mí.
–No puedes correrte dentro de mí...tomo anticonceptivos aún, pero soy una persona responsable y no me meto a cualquiera entre las piernas...– asintió.
–Vas a terminar suplicándome que me corra una y otra vez dentro de ti...pero no te preocupes, respeto tu decisión...la cual muy probablemente cambie cuando te tenga en cuatro sobre este sofá y entre una y otra vez en ti– reí.
–Tuve novia dos años y no le pedí ni una sola vez que me hiciera suya hasta que me dejara en un estado bastante deplorable debido al placer...esta no será la primera vez, Hailee– asintió.
–Lo será...y después de esta me vas a suplicar que te haga mía cada vez que pueda, porque te va a encantar y te volverás adicta a mí y a mi semen, tanto que te o vas a querer tragar cada vez que me corra– me quejé.
–¿Por qué eres tan sexy?–se rió.
–¿Lo soy?– suspiré y bajé su bóxer en un hábil movimiento.
Me quedé mirando su miembro y analicé cada centímetro de este. Debía medir por lo menos unos veinte centímetros de largo, era un tanto más oscuro que el color de su piel y el glande era rosado.
Tenía el bello púbico recortado y bien cuidado, además de que una gota pre-seminal se encontraba en la punta. Bajé mi vista sus testículos y luego la devolví a su miembro. Noté algunas venas que resaltaban e instintivamente mi boca se hizo agua.
–Sabes que quieres hacerlo...no te resistas más– susurró y abrí mi boca para pasar mi lengua por aquella gota.
Junté mis labios sobre su glande y comencé a hacer pequeños círculos con mi lengua para comenzar a succionar levemente.
Llevó una de sus manos para acariciar mi nuca y comenzó a empujarme con cuidado para hacer que metiera más centímetros en mi boca.
–¿Puedes con toda? ¿O no tienes ese...talento?– sonreí.
–Sí lo tengo– dije relamiendo mis labios.
–¿Incluso con uno de un tamaño muy superior al promedio?– asentí –No lo creo...necesito ver para creer– sonreí y abrí mi boca para ella –Antes de seguir...– acarició mi mentón –Necesito confirmar que me das permiso para hacerte mía– asentí –¿Puedo hacer lo que he deseado hacerte desde que te vi por primera vez?– volví a asentir y me besó –¿Puedo?– repitió.
–Sí...lo deseo– sonrió ampliamente y guió su miembro a mi boca para comenzar a empujar de a poco.
Mi garganta empezó a hacer sonidos húmedos cada vez que salía y de pronto empujó con más fuerza.
–Voy a hacer que te atragantes con mi verga ¿Lo entiendes?– mis ojos se pusieron llorosos y abrí más mi boca para recibir sus centímetros.
La sentí bajando por mi garganta y puso sus manos en mi cabeza para presionarme contra ella.
Puse mis manos en sus muslos cuando sentí que perdía el aire, así que me soltó y comencé a toser a la vez que mi saliva se escurría por mi cuello.
Me dio solo unos pocos segundos y volvió a meterse en mi boca para moverse rápidamente.
Me dieron bastantes arcadas y me soltó para nuevamente darme unos segundos para poder retomar el aire.
–¿No que sabías?– me dio una leve bofetada y sonreí cuando me tomó de la nuca para comenzar a embestir mi boca –Ufff...mierda– gimió –Trágatela toda, vamos, tú puedes– la sentí entrando más y las arcadas aumentaron intensamente, así que me soltó para que tosiera, pero rápidamente volví a meterla para que siguiera.
Llegó el punto en que sus testículos chocaban contra mi mentón y mi saliva se encontraba en mi cuello y camiseta.
Me empujó un poco hacia atrás para luego darme una bofetada y tomarme del cuello para apretarlo algo fuerte.
–Me aguanté las ganas durante tanto tiempo...y tú ibas por ahí provocándome cada vez que podías– reí levemente, ya que lo que decía era cierto –La cantidad de veces que te pegabas contra mí, me chocabas y te encontraba sin camiseta o vistiéndote...dime la verdad ¿Lo hacías a propósito?– no respondí y me dio una bofetada para volver a introducirse en mi boca.
Cuando salió escupió en mi boca y volvió a meterse de inmediato, dándome otra bofetada mientras embestía mi boca.
–Mira qué hermosa te ves así...– me mantuvo con su miembro completamente dentro y mis ojos fueron cristalizándose –¿Cuántas veces fantaseaste con esto? Probablemente más que yo– me afirmé de sus muslos y sentí que el aire se me estaba acabando –Voy a correrme...¿La quieres en la boca?– me soltó y tosí un poco, para después limpiar la saliva en mi mentón –¿Te lo quieres tragar?– asentí.
–Sí...– sonrió.
–Pídemelo– dijo comenzando a masturbarse frente a mi rostro –Convénceme de que lo deseas...y te lo voy a dar– su miembro se encontraba bastante lubricado con mi saliva, por lo cual sonaba cada vez que su mano lo recorría.
–Por favor...llevo...llevo mucho tiempo queriéndolo...y tú también...ahora que me tienes, no desaproveches la oportunidad de hacerme completamente tuya– una sonrisa adornó su rostro.
–Abre la boca– lo hice y aumentó el ritmo de su mano para pocos segundos después tener un intenso orgasmo.
Un poco de su semen aterrizó en mi mejilla y mentón, pero la mayoría fue a parar a mi boca.
–Trágatelo– lo hice –Muy bien...así me gusta– me dio una bofetada –Levántate– lo hice y comenzó a besarme con cierto salvajismo.
Me puso sobre la mesa de café, botando todo lo que se encontraba sobre esta mientras iba quitándome la ropa de forma desesperada.
–Estoy tan caliente– me dio otra bofetada y tomé el preservativo que estaba en el piso para abrirlo y ponérselo.
Ella lo acomodó bien y después me miró a los ojos.
–Cógeme, por favor...lo necesito– asintió y abrió mis piernas. Movió mi braga hacia un lado y después se levantó para tomar unas tijeras.
Volvió conmigo y le hizo un pequeño corte para después jalarlas y romperlas. No le dije nada debido a la excitación y esta abrió mis piernas mientras relamía sus labios. Se inclinó para llevar su boca a mis pliegues y gemí al sentir el contacto de su húmeda y hábil lengua entre ellos.
La sentí pasando por entre mis labios y después subió hasta mi clítoris para hacer círculos alrededor de este y comenzar a succionar.
–¡Ah!– con uno de sus dedos comenzó a masajear mi entrada y lentamente lo introdujo para masajear mis paredes internas, buscando al parecer mi punto de placer.
Presionó su lengua con algo de fuerza y sentí mis piernas teniendo pequeños espasmos debido al placer que me estaba haciendo sentir, así que tomé su cabeza para presionarla y que no se moviera, lo cual entendió y solo comenzó a mover su dedo.
Di un pequeño salto al sentir un fuerte impulso placentero y se rió comenzando a presionar aquella zona, metiendo otro dedo en mi interior.
–¡Ah! ¡Hailee! ¡Mierda!– empezó a mover su lengua, sin quitar la presión, y pronto sentí mis piernas retorciéndose debido al placer que acabó en un intenso clímax.
Mientras mi cuerpo aún seguía vibrando, se acomodó y la sentí entrar en mí sin previo aviso, chocando su cuerpo contra el mío.
–¡Aaaah!– comenzó a embestirme sin nada de piedad y podía sentir como su miembro se iba abriendo paso en mi interior, haciéndola dueña de cada centímetro que estaba tocando cada vez que entraba y salía de mí.
–Gime mi nombre y di que me perteneces– me ordenó.
–¡Aaaah! ¡Haileee! ¡Aaaah!– me dio una bofetada y se inclinó hacia delante para embestir con más fuerza –¡Aaaah! ¡Soy tuya, mierda! ¡Aaaah! ¡Sí! ¡Sigue!– cerré mis ojos echando mi cabeza hacia atrás y su boca fue directo a uno de mis pechos para estimular mi pezón con su hábil lengua.
–Eso, muy bien, la estás aguantando como una perra, ¿Eso es lo que eres?– asentí –¿Y quién es tu dueña?– dijo entre jadeos.
–¡Tú! ¡Aaah! ¡Soy tu perra!– sentí su respiración algo más pesada y puse mi mano en su vientre para que se detuviera.
Quedó algo confundida pero no dudó en acceder a mi petición y la empujé levemente para que saliera de mí.
Sin dudarlo tomé el borde del preservativo para quitarlo y ella rió volviendo a introducirse en mí.
–¡Aaah! ¡Hailee!– se afirmó de mis muslos, dando embestidas bastante salvajes que hacían que todo mi cuerpo se moviera y que mis pechos rebotaran –¡Aaaaah!– comencé a sentir mi orgasmo nuevamente y ella no se detuvo en ningún momento.
–¿Quieres que me corra dentro de ti? ¿Deseas que te haga mía y que hasta lo más profundo de ti esté lleno de mi corrida?– asentí.
–¡Sí! ¡Aaaah!– me dio una bofetada.
–Eres una perra– volví a asentir mientras ella seguía embistiendo cada vez de forma más salvaje.
–¡Soy tu perra! ¡Aaah! ¡Córrete dentro de mí!– su cuerpo se estrelló unas cuantas veces más contra el mío y luego su vientre tuvo pequeños espasmos mientras acababa en mi interior.
Nuestras respiraciones eran bastante agitadas y salió lentamente de mí, sin dejar de mirar la zona, para luego ver como aquella blanca viscosidad abandonaba mi cuerpo y llevar sus dedos allí para comenzar a jugar.
–¿Eres mi perra?– preguntó y asentí –Entonces...ponte en cuatro– obedecí de inmediato y sentí cierto ardor en mi entrada debido a su ancho, pero estaba totalmente dispuesta a seguir.
–Ni lo pienses– dije a penas sentí su dedo acariciando mi entrada trasera.
–¿No te crees capaz de soportarlo?– la miré.
–Me duele un poco un lugar donde me he metido muchas cosas...si me meto eso que tienes entre las piernas por un lugar que nunca ha recibido nada, probablemente muera hoy– rió y me dio una nalgada.
–Hoy tal vez me digas que no...– tomó su miembro –Pero muy pronto...– alineó su miembro con mi trasero y presionó con cuidado –Vas a rogarme que lo haga– gemí ante lo placentero que fue aquello y bajó para volver a entrar en mí –Por ahora te seguiré haciendo mía hasta que no puedas más– comenzó a embestir nuevamente y su ritmo fue mucho más salvaje que el anterior.
Tomó mis manos para llevarlas a mi espalda y mi rostro quedó apoyado a la mesa mientras ella seguía moviéndose de una forma bastante violenta.
–¡Aaaah! ¡Sigue! ¡Ah! ¡Hailee!– mi trasero ya ardía un poco debido a las reiteradas nalgadas y me había hecho tener dos orgasmos más, así que me quedaban pocas energías.
–¿Qué pasa?– me nalgueó –¿Ya no puedes más?– jaló mi cabello para acercarme a ella –¿No quieres que me corra nuevamente dentro de ti?– susurró en mi oído y llevó una de sus manos a mi cuello y la otra a mis pliegues para masturbarme.
–Hailee...¡Aaah!– mi cuerpo comenzó a temblar nuevamente y ella dio unas cuantas embestidas más para luego enterrarse hasta el fondo.
Sus jadeos mientras se corría fueron bastante excitantes, pero el sueño me estaba ganando y realmente me sentía incapaz de seguir despierta por mucho tiempo más.
–Hai...Hailee...– murmuré y soltó mi cuello –Me voy...creo que me voy a desmayar– se rió.
–¿Tan poco aguantas, cariño?– sonreí –¿Quieres dormir?– asentí –Vas a dormir llena de mi semen, para que tengas muy claro que eres mía– reí levemente.
–No puedo más– besó mi cuello.
–Tuve ganas de hacerte mía durante tanto tiempo...primero tuviste un novio, luego una novia...y siempre estuviste coqueteándome y provocándome a pesar de que tenías pareja– apretó uno de mis pechos –¿Disfrutabas hacerme desearte?– asentí.
–Demasiado– se rió.
–Eres una...– sonreí –Me encantas– besó mi cuello nuevamente y dejé que me levantara para llevarme a mi cama.
__________________________________
¿Qué tal estuvo? 👀
Yo sé que así les gustan, bien intensos y sucios JAJAJAJAJAJA
———
•El siguiente OS es de HERMIONE GRANGER
•¡Luego sigue el de JADE WEST 👀, que ganó con más de 90.100 votos!
———
¿De quién quieren que sea el que sigue? 👀 Esta vez, debido a la abundante pasividad en este y el de Jade, estas votaciones serán para las activas 👀🔥
-Kara Danvers (__G!p)
-Natalie Portman (__G!p) (Romance adolescente, en los tiempos de Star Wars)
-Scarlett Johansson (__G!p) (Romántico, drama y smut)
-Lauren Jauregui (__G!p y drama) (Lauren embarazada)
-Lena Luthor (Sin G!p) ( _____ celosa de la amistad que tiene Lena con Kara)