Jaebeom no tuvo más opción que volver a la habitación y Después de un rato, JiaJia también entró, sosteniendo una bolsa de dulces sueltos vendidos por el supermercado.
Peló una paleta roja con sabor a fresa la chupó, y su delgada mejilla se extendió por la paleta
JiaJia arrojó con las manos los dulces sobre la mesa y recogió la bolsa de etiqueta sellada con el precio, con las manos. Jaebeom la miró extrañado, y Jia se sintió incómoda al ser mirada y explicó con una sonrisa avergonzada -También se puede usar como una bolsa de basura.
Tomo una paleta con el mismo sabor, y se la entrego, Jaebeom la abrió y se la comió, la partió de un bocado y sacó el pequeño palito de plástico.
-¡Eres tan violento!.- Jia arrugó su pequeña nariz, se sacó la paleta de la boca y se limpió los labios con el caramelo rosado húmedo, -¿Es delicioso no?
-si, el sabor es bueno, es intenso.
Jia se lamió la capa de azúcar de sus labios siguió comiendo y chupando, con la barbilla entre las manos. Usaba los labios y la lengua se movía en su interior, parecía tan flexible que uno no podía evitar pensar que esto era un hecho. Jaebeom solo pudo tragar en seco inevitablemente pensando en que parte podría usar su boca. Para ocultar su vergüenza, Jaebeom nerviosamente sacó una revista para leer.
JiaJia lo miró por un rato con sus piernas cruzadas, notando su actitud creando más dudas en su mente pero tal vez estaba imaginando demasiado porque estaba aburrida, salió y corrió de regreso a la cama y había puesto algo en sus piernas.
El olor era demasiado penetrante, Jaebeom no pudo evitar preguntar -¿Qué estás limpiando?
-¿Qué te importa que me limpio? Dijo Jia con mal tono
Jaebeom de repente se enojó, resoplo y se puso de pie abriendo la cortina de tela casi traslucida que los dividía, ahora mirando claramente la pintura blanca en sus piernas, mirando con ojos grandes. Jaebeom respiró hondo - ¿Qué arma bioquímica estás usando? El olor es terrible, ¿no lo sabes?
JiaJia Intento tapar sus piernas con sus brazos pero sabía que si lo hacía sería un desastre peor así que lo dejo, levanto su vista, sus ojos se suavizaron instantáneamente al momento que se toparon con los de él coreano, hizo una mirada de agravio e incluso hizo un puchero y susurró -Esta es una crema depilatoria... ¿De verdad huele tan mal?.
Jia no se había maquillado todavía, tiene una cara pequeña y pequeñas ojeras oscuras y azules debajo de sus ojos y circulares moretones sin sanar en su barbilla. Ella es hermosa sin maquillaje en los ojos ni lápiz labial, tiene una belleza frágil y enfermiza; su cabello largo está agarrado con una pinza, y algunos flequillos largos que no se pueden atar están dispersos al azar en su frente, y las puntas de su cabello la golpean labios delgados. Ambos continuaban mirándose hasta que sintió comezón, bajó los ojos y sopló suavemente en sus piernas.
Cuando ella actuó así, se esfumo su ira, Jaebeom no tenía más que decir, por lo que solo pudo volver a su lado irritado, golpeando la tabla de la cama.
JiaJia sonrió triunfalmente detrás de él.
Rápidamente fue a tomar una ducha nuevamente, salió fragante y se cambió a un vestido de tirantes con lentejuelas igual de fino que una hoja pero que era mejor que nada. El escote está bien abierto, pero la cascada de cabello que se balancea al frente oculta la planicie de su pecho, en la parte inferior es más corta que cualquier falda anterior que haya usado, por lo que usa una tanga y, al caminar se puede ver las nalgas gordas que no se pueden ocultar por completo con la falda.
Al verla Jaebeom la regañó en su corazón por presumir así su cuerpo, pero ella salía a venderlo, por lo que presumirlo es su logro profesional.
Se tambaleó en sus tacones altos y peinó su cabello rubio y largo frente al espejo, Jaebeom no recuerda haber visto ese color en una chica asiática pero ahora jamás se cansaría de apreciar el suyo tan deslumbrante. Después de peinarlo, se maquillo, los labios los pinto de rojo como de costumbre.
Ella no huele barato como otras chicas de peluquería, no usa perfume escandaloso y solo tiene una leve fragancia a jazmín en su cuerpo, como la crema que usaba su madre cuando era joven.
Antes de salir, Jia en la puerta se giro para hablar a Jaebeom -La puerta no estará cerrada hoy, no habrá nadie en la tienda esta noche, así que te quedas a cargo hoy.
-Están saliendo todas? Jaebeom la miro extrañado
Jia se sorprendió -¿La hermana Ali no te lo dijo?
Jaebeom se acercó pero notó que ella comenzó a evitar su mirada -¡Saldremos todas, cuida la casa!
Alguien abajo la llamó, sonaba como la voz de la mujer gorda: "¡JiaJia, baja! ¡Maldita niña apúrate, que ya viene el auto!"
Jia se puso su pequeño bolso y corrió a toda prisa, pateando sus tacones altos. Jaebeom la persiguió fuera del pasillo y le gritó a su espalda -¡No corras tan rápido!
Ella no tuvo tiempo de prestarle atención y desapareció por la esquina en un abrir y cerrar de ojos.
Jaebeom estaba tirado en el balcón. Cuando la camioneta Jinbei se detuvo con las mujeres, comprobó la hora, y ya eran más de las cuatro de la mañana; se despertó después de una siesta y descubrió que el lado de Jia todavía estaba vacío, así que simplemente se acostó en el balcón, aturdido.
Debería irse a la cama, la escuela comenzaba mañana a las nueve en punto, no podrá dormir por mucho tiempo.
Pero quería alabar a Jia una y otra vez, no lo entendía estaba tan atormentado, frotándose sobre el corazón y los pulmones.
Antes... Después de que todos se fueron, Jaebeom salió de la habitación y bajó las escaleras, quería ver qué secretos se escondían en esas puertas que siempre estaban cerradas.
Entro a una y toco el interruptor al lado de la puerta, y con un chasquido la bombilla expuesta ilumino la habitación y las polillas y los mosquitos están a su alrededor.
Todas las habitaciones tienen el mismo mobiliario, hay sillones y camas de masaje, y la parte donde debería haber un hueco en la parte superior de la cama se ha rellenado para convertirlo en una cama individual. Jaebeom entró al azar en una habitación con indiferencia y vio que había un trozo de papel plastificado colgado en la pared, que se podía quitar en cualquier momento, y ya estaba un poco descolorido. Unas líneas más arriba decía medio juego, completo, seguido de diferentes números, debería ser los precios.
habia un viejo gabinete en la esquina con un cajón que no estaba bien cerrad, Jaebeom lo abrió, se encontró que el cajón estaba lleno de condones, grandes y pequeños, de diferentes tamaños y lubricantes de varios colores. Una de las botellas no estaba bien tapada y estaba cubierta con un líquido viscoso.
Su rostro se puso rojo al instante, todo tomo sentido sabía lo que estaban haciendo todas en esta casa.
¿JiaJia también lo hará? ¿Tocarlo con las manos, comerlo con la boca o usar su bendita parte debajo de ella para aceptar esos sucios órganos masculinos?
había un sutil sentimiento en el de angustia, un poco nauseabundo y aún más que nada un triste sentir. Resulta que miles de hombres, siempre que vengan a la peluquería de Lihong con billetes, pueden comprar a JiaJia por una hora de la noche de primavera, llenar su pequeña boca color cereza y meter sus dedos ásperos y su pene en la primavera entre sus glúteos. Ella es tan mala como luce santa.
Ahora Jaebeom todavía está mareado pensando en eso. Cuando vio que se abría la puerta en la parte trasera de la camioneta Jinbei, y un grupo de mujeres salió riendo salvaje mente, toda la escena llena de brazos, muslos y pecho blancos, y Jaebeom pudo decir de un vistazo que la chica inconsciente en el medio que estaba siendo sostenido como un fideo por la mujer gorda era JiaJia inconsciente.
¿Cuánto bebió?
La hermana Ali empujó la puerta de persiana enrollable, solo medio metro de altura, así que y las mujeres entraron agachándose, golpeándose y empujándose unas a otras. La insonorización de la habitación no es buena, Jaebeom escuchó todo cuando iban subiendo las escaleras, discutiendo, cerrando la puerta, discutiendo continuamente y otros sonidos, Jia fue el último en ser metido en la habitación por la mujer gorda recostándola en la cama.
La habitación se inundó con un ligero olor alcohol, Jaebeom fue al baño a buscar su pequeña toalla, le limpio la boca y barbilla y expuso su pecho caliente cuando se mojó. Él sabe que ella ama la belleza y no puede frotar su rostro para quitarse el maquillaje de la cara, de lo contrario perderá los estribos.
JiaJia no perdió el conocimiento por completo, se recuperó después de que la colocaron en la cama y se despertó por completo cuando Jaebeom comenzó a limpiarla con la toalla.
Jia lo vio tan cerca que cerró los ojos y dijo con voz suave – Lim Jaebeom, ¿qué estás haciendo?
Jaebeom la miro por un segundo, tomó uno de sus brazos, y siguió limpiándola desde la axila hasta la espalda y no le respondió, pensando para sí mismo, ¿no sabes lo que estoy haciendo? Aunque no lo aprecies, no te enojes.
JiaJia siguió sus movimientos y se giró hacia un lado, las correas de los hombros del vestido se deslizaron hasta la mitad. El escote es demasiado grande, Jaebeom con solo una mirada logro ver cómo se escapa la belleza. Después de limpiar ese lado, ella tomo la iniciativa y se dio la vuelta levantando el brazo para que él limpiara la otra mitad, Cuando Jaebeom vio que rara vez era obediente, la ira desconocida en su corazón de repente disminuyó mucho.
No mucho después de que Jia se volviera obediente, agarró la mano de Jaebeom y lo miro-¿Cuántos años tienes?
-Acabo de cumplir 17 años.
Jia se echó a llorar mientras hablaba -Ah, eres tan joven, esta hermana ya tiene 23...
Ella no luce asi, Jaebeom incluso pensó que era un delito que ella una menor de edad estuviera metida en ese tipo de camino.
-... Jaebeom... Jaebeom, ¡mírame! Ella tiró de la cara de Jaebeom, su rostro estaba sonrojado y obviamente estaba borracha Jaebeom no quería discutir con ella borracha así que la dejo seguir.
Los ojos de los dos se encontraron y descubrió que una de las pestañas postizas de Jia se había caído en alguna parte y la otra también se había desprendido. Jaebeom extendió la mano y tiró de esta, JiaJia siseo de dolor y sus uñas casi pincharon la mejilla de Jaebeom -¡Qué estás haciendo! De esta manera los párpados se caerán! ... ¿Crees que soy vieja? No puedo envejecer, nadie me quiere si envejezco.- y volvió a llorar
Jaebeom le preocupo que todavía necesitara la mitad de las pestañas, así que sacó un papel y la puso sobre la mesa. Ella continúo hablándole rápidamente, pero el chino de Jaebeom siempre ha sido malo, por lo que apenas puede entender. Lo pensó y dijo- Mi hermana no es vieja en absoluto.
-¿En serio? Eso es bueno... su voz se alegró, Jia se sentó rápidamente y movió la cabeza hacia adelante, porque sentía su cuello ya no podía soportar su peso, la sujeto con las manos -Me duele la cabeza...
Jaebeom abrió el cajón y parecía que ella ha estado sufriendo dolores de cabeza todo el tiempo, porque rápidamente encontró una caja de ibuprofeno en el cajón pero solo quedaba una tableta sobrante, tomó su vaso vacío y bajó las escaleras para buscar agua.
La hermana Ali se encontraba sola en la cocina viendo la televisión, pelando naranjas con la mano, y cuando vio venir a Jaebeom, le ofreció mitad Jaebeom no se había lavado las manos así que simplemente abrió la boca lo comió directamente de su mano.
La hermana Ali se rio- eres como un perro.
Jaebeom se sentó frente a ella en la mesa y preguntó-¿Qué estás mirando?
-La Leyenda de la Serpiente Blanca, Zhao Yazhi es tan bonita.
-Prefiero el estilo de Wang Zuxian.
-Oh, mocoso, tienes que estudiar mucho, no solo pienses en conquistar chicas lindas todo el día, ¿sabes eso?-.La hermana Ali hizo un gesto para pellizcarlo
Jaebeom sonrió y lo evitó -No te preocupes, tengo una expectativa alta, solo hay una Wang Zuxian en el mundo y claramente no tengo oportunidad.
La hermana Ali, peló otra naranja y arrancó con cuidado los meridianos blancos en la parte superior -Muchos invitados han elogiado a Jia por ser como ella, ¿crees que se parece a ella?"
Vacilo en contestar no lo había pensado -¿ A Wang Zuxian?-.
-¿No lo parece?
Lo pensó un rato viendo un viejo póster de tamaño A4 estaba pegado en la pared y con un poco de polvo era Wang Zuxian personificando Xiaoqian vestida en blanco, con geandes ojos brillantes. Es realmente similar, después de mirar durante mucho tiempo, parece que JiaJia es realmente ese aire amable y justo. La hermana Ali vio a Jaebeom mirando el cartel aturdido y lo palmeó con una sonrisa -Tonto, no mires tanto. ¿Vas a buscar agua para JiaJia?
Jaebeom recuperó sus sentidos y luego recordó preguntarle a la hermana Ali -Dijo que tiene dolor de cabeza, ¿puedo darle ibuprofeno?
-¡Va a morir, no puedes comer eso después de beber!- Dijo la hermana Ali con horror -Consíguele un pañuelo caliente ponlo como compresa caliente, así era como yo servía a la primera dama.
Jaebeom se rio, y la hermana Ali también se rió cuando no pudo evitarlo. Todos sabían que el contexto de los dos era que todo el mundo era hipócrita, pero ella tenía la vida de la princesa y todos estaban ansiosos a servirla.
-¿Quieres que la hermana Ali te lleve a la escuela mañana?
Jaebeom agitó la mano en negación y la hermana Ali dijo -Entonces le pediré a la tía Wen que te prepare el desayuno y asegúrate de comerlo antes de ir.